La autonomía que reclama una élite violenta y reaccionaria no representa la reivindicación social progresista de los cruceños. Se ha convertido en una triste excusa para la defensa y mantenimiento de la estructura de poder prevaleciente en Santa Cruz, para la construcción de un centralismo departamental, el mantenimiento de los privilegios de las elites decadentes y la re feudalizacion de la sociedad cruceña.
Los resultados del Referéndum Revocatorio del pasado 10 de agosto, generaron un efecto político inesperado por el bloque de oposición al conseguir el binomio Morales - García Linera el respaldo de 67,8% de apoyo nacional al proceso de cambio en curso.
Los nuevos escenarios de gobernabilidad implicaron el imperativo de compatibilizar los textos de la nueva Constitución y los Estatutos, implicando necesariamente y como condición sine qua non, la renuncia a las posiciones maximalistas de ambos.
Dicha situación provocó una crisis estratégica en la oposición y el consiguiente repliegue de la derecha moderada para dar paso a la conducción del ala más radicalizada y extrema del bloque cívico regional.
Objetivos Inmediatos, Mediatos y Meta Mayor
El objetivo inmediato de la oposición radicalizada fue buscar la victimización y conversión en héroe del bloque cívico regional al provocar al Gobierno a responder a la convulsión social usando el recurso de la violencia legal y legítima del Estado (Policía y Fuerzas Armadas).
El objetivo mediato es la desestabilización, la pérdida de legitimidad, credibilidad y progresiva fractura institucional del Gobierno (y Estado) Nacional. Esta fractura se procura realizar al crear una matriz de opinión pública sobre la existencia de una dictadura de tinte indiana fundamentalista que reprime al proyecto político de la oposición (que busca la implementación y profundización de la autonomía y la devolución del IDH) y vulnera el orden constitucional y democrático.Hoy la autonomía (expresada por medio de la conducción política de esta élite violenta y reaccionaria) no representa la reivindicación social progresista de los cruceños. Se ha convertido en una triste excusa para la defensa y mantenimiento de la estructura de poder prevaleciente en Santa Cruz, para la construcción de un centralismo departamental, el mantenimiento de los privilegios de las elites decadentes y la re feudalizacion de la sociedad cruceña.
Dique de Contención al Cambio
Por medio de los dispositivos discursivos de la autonomía y lucha por el IDH están construyendo un dique de contención a los contenidos y significados de un proceso de cambio, que no solo interpela y atañe a la sociedad occidental o a los 'collas', sino a la estructura misma de las relaciones sociales bolivianas, sustentadas (en muchos casos) en el racismo, la discriminación, la intolerancia y la mezquindad.
La fenomenología del cambio tiene contenidos emancipatorios basados en la expansión y generalización transversal de libertades, derechos y garantías para la conformación de una sociedad civil (en contraposición a una sociedad estamentaria).
El acceso a estos recursos civiles no puede ser privativo a la adscripción (o no) a un bloque de poder (u otro), ya que son recursos civiles inherentes al Ser Humano por el hecho de ser humano.
Una nueva sociedad emergente lucha por (re) organizarse sin los atavismos de las relaciones autoritarias y excluyentes, a través de repertorios de acción colectiva que no privilegien respuestas violentas de entropía social, pudiendo optar (como opción política presente permanentemente) por la violencia y la lucha armada como mecanismo de cambio social.
El autoritarismo y la exclusión son transversales a todas las clases sociales, sectores, grupos, etnias, comunidades y regiones que no comulgan con la concepción de la elite dirigencial de la clase dominante. Este es el flagelo que debemos combatir.
Para detener el cambio, buscan perpetuar los golpes 'suaves' a la democracia, que plantean entre sus fines políticos la desestabilización del Gobierno nacional y de manera simultánea (y no excluyente), la consolidación de una estatalidad paralela por medio de la conformación de un sistema político (paralelo) con sus respectivos aparatos institucionales.
A esta finalidad obedecen las tomas de diversas instituciones del Estado Nacional en Santa Cruz (y en la media luna): SII y GRACO para consolidar su aparato impositivo y de recaudación departamental, el INRA para manejar el mayor recurso de poder en el oriente que es la tierra y administrar los procesos de saneamiento según sus intereses, ENTEL para apropiarse de la logística comunicacional del departamento, que representa un recurso político indispensable en la actualidad, adueñarse de la matriz hidrocarburífera y el nodo energético para el control y administración de dichos recursos naturales estratégicos..
Estos son los verdaderos intereses en juego en la actual disputa política, no es un tema de cambas versus collas, oriente versus occidente, ni exclusivamente lucha de clases.
Rol de la Policía y las Fuerzas Armadas
La Policía y las Fuerzas Armadas históricamente han sido factores de poder en Bolivia. En el contexto histórico actual, se convierten en centinelas de la democracia al resguardar la integridad e institucionalidad del Estado boliviano.
El resguardo de la democracia se perpetua actualmente en el delicado vórtice de generar equilibrio y estabilidad socio política por medio del uso legal y legítimo de la violencia en la medida justa para precautelar el orden interno, la seguridad, la integridad y soberanía nacional y no excederse en el monopolio de la fuerza física del Estado, provocando la ansiada excusa suficiente para la victimización y conversión en héroe del bloque cívico regional, que persigue incitar el desborde societal en contra del Estado.
En aras de la preservación de la soberanía nacional es que las Fuerzas Armadas han actuado (en el contexto de la escalada violenta del conflicto desde el martes) contra natura, no ejerciendo el monopolio de la fuerza física y no cediendo a la conspiración golpista de provocar más violencia e incitar la rebelión masiva, como planteaba la estrategia radicalizada de la derecha antidemocrática.Los ciudadanos cruceños / bolivianos que no se encuentran afiliados al bloque de poder cívico regional, que disienten con la matriz de pensamiento único y la dominación ideológica y cultural, demandan al Estado la protección y defensa de su integridad humana y sus bienes, al encontrarnos a merced de la violencia material y simbólica de las elites dominantes.
Dialogo, Reconciliación y Pacificación
No puede existir un verdadero proceso de pacificación si continúa la perpetuación de las relaciones de dominación. No se puede hablar de libertad, democracia y justicia si continúan (y se ahondan) las relaciones entre opresores y oprimidos.
La paz es un patrimonio de todos, pero especialmente de los humildes y pobres, que ponen la sangre, el sudor y las lágrimas en la confrontación violenta. La condición para la paz es el desmantelamiento del bloque cívico regional de Santa Cruz, que implica el cierre definitivo del Comité Cívico Pro Santa Cruz y su brazo paramilitar violento de la Unión Juvenil Cruceñista, como las máximas instancias fascistas, golpistas, violentas y reaccionarias.
Para la viabilidad a futuro de la sociedad cruceña, identifiquemos y expulsemos de entre nosotros a quienes se arrogan soberbia y erróneamente la autoridad moral de nuestros designios sociales. Impugnemos el supuesto derecho de representación a estos apologetas del desastre e invitemos a estas personas a que se retiren de la arena pública y amplíen el campo político hacia instituciones de intermediación política de esencia democrática. No se pueden democratizar aquellas instituciones que en su esencia, fundamento, rol, conducta e imaginario nunca han sido democráticos y nunca lo serán.
El espacio de intermediación entre la sociedad civil y el Estado dejado por el Comité Cívico, deberá ser llenado por una mesa de coordinación interinstitucional ad hoc, conformada por todas las instituciones significativas en el nuevo mapa político cruceño.
Dicha mesa de trabajo ad hoc tendrá como objetivo consensuar una agenda pluralista, integradora y respetuosa de la diversidad socio política, sectorial y étnica de la región, para garantizar las condiciones de la reconciliación al interior de nuestra sociedad, basándose como premisa fundamental en el otorgamiento de concesiones mutuas para ganar todos (dar primero para recibir después).
El objetivo que buscamos es cortar el monopolio de la voz única desde el bloque cívico regional, para visibilizar los matices que posee la sociedad cruceña y construir espacios de interlocución que puedan encontrar respuestas a nuestras problemáticas.
Esto no implica alcanzarle al oficialismo gubernamental en bandeja de plata la conducción política de nuestro destino como sociedad, sino resignifica los contenidos de la lucha cruceña para adueñarnos todos (los visibles e invisibles de la estructura societal cruceña) de nuestro proceso de cambio y conducirlo en alianza, complementariedad y reciprocidad con el del Estado plurinacional en construcción.
Los resultados del Referéndum Revocatorio del pasado 10 de agosto, generaron un efecto político inesperado por el bloque de oposición al conseguir el binomio Morales - García Linera el respaldo de 67,8% de apoyo nacional al proceso de cambio en curso.
Los nuevos escenarios de gobernabilidad implicaron el imperativo de compatibilizar los textos de la nueva Constitución y los Estatutos, implicando necesariamente y como condición sine qua non, la renuncia a las posiciones maximalistas de ambos.
Dicha situación provocó una crisis estratégica en la oposición y el consiguiente repliegue de la derecha moderada para dar paso a la conducción del ala más radicalizada y extrema del bloque cívico regional.
Objetivos Inmediatos, Mediatos y Meta Mayor
El objetivo inmediato de la oposición radicalizada fue buscar la victimización y conversión en héroe del bloque cívico regional al provocar al Gobierno a responder a la convulsión social usando el recurso de la violencia legal y legítima del Estado (Policía y Fuerzas Armadas).
El objetivo mediato es la desestabilización, la pérdida de legitimidad, credibilidad y progresiva fractura institucional del Gobierno (y Estado) Nacional. Esta fractura se procura realizar al crear una matriz de opinión pública sobre la existencia de una dictadura de tinte indiana fundamentalista que reprime al proyecto político de la oposición (que busca la implementación y profundización de la autonomía y la devolución del IDH) y vulnera el orden constitucional y democrático.Hoy la autonomía (expresada por medio de la conducción política de esta élite violenta y reaccionaria) no representa la reivindicación social progresista de los cruceños. Se ha convertido en una triste excusa para la defensa y mantenimiento de la estructura de poder prevaleciente en Santa Cruz, para la construcción de un centralismo departamental, el mantenimiento de los privilegios de las elites decadentes y la re feudalizacion de la sociedad cruceña.
Dique de Contención al Cambio
Por medio de los dispositivos discursivos de la autonomía y lucha por el IDH están construyendo un dique de contención a los contenidos y significados de un proceso de cambio, que no solo interpela y atañe a la sociedad occidental o a los 'collas', sino a la estructura misma de las relaciones sociales bolivianas, sustentadas (en muchos casos) en el racismo, la discriminación, la intolerancia y la mezquindad.
La fenomenología del cambio tiene contenidos emancipatorios basados en la expansión y generalización transversal de libertades, derechos y garantías para la conformación de una sociedad civil (en contraposición a una sociedad estamentaria).
El acceso a estos recursos civiles no puede ser privativo a la adscripción (o no) a un bloque de poder (u otro), ya que son recursos civiles inherentes al Ser Humano por el hecho de ser humano.
Una nueva sociedad emergente lucha por (re) organizarse sin los atavismos de las relaciones autoritarias y excluyentes, a través de repertorios de acción colectiva que no privilegien respuestas violentas de entropía social, pudiendo optar (como opción política presente permanentemente) por la violencia y la lucha armada como mecanismo de cambio social.
El autoritarismo y la exclusión son transversales a todas las clases sociales, sectores, grupos, etnias, comunidades y regiones que no comulgan con la concepción de la elite dirigencial de la clase dominante. Este es el flagelo que debemos combatir.
Para detener el cambio, buscan perpetuar los golpes 'suaves' a la democracia, que plantean entre sus fines políticos la desestabilización del Gobierno nacional y de manera simultánea (y no excluyente), la consolidación de una estatalidad paralela por medio de la conformación de un sistema político (paralelo) con sus respectivos aparatos institucionales.
A esta finalidad obedecen las tomas de diversas instituciones del Estado Nacional en Santa Cruz (y en la media luna): SII y GRACO para consolidar su aparato impositivo y de recaudación departamental, el INRA para manejar el mayor recurso de poder en el oriente que es la tierra y administrar los procesos de saneamiento según sus intereses, ENTEL para apropiarse de la logística comunicacional del departamento, que representa un recurso político indispensable en la actualidad, adueñarse de la matriz hidrocarburífera y el nodo energético para el control y administración de dichos recursos naturales estratégicos..
Estos son los verdaderos intereses en juego en la actual disputa política, no es un tema de cambas versus collas, oriente versus occidente, ni exclusivamente lucha de clases.
Rol de la Policía y las Fuerzas Armadas
La Policía y las Fuerzas Armadas históricamente han sido factores de poder en Bolivia. En el contexto histórico actual, se convierten en centinelas de la democracia al resguardar la integridad e institucionalidad del Estado boliviano.
El resguardo de la democracia se perpetua actualmente en el delicado vórtice de generar equilibrio y estabilidad socio política por medio del uso legal y legítimo de la violencia en la medida justa para precautelar el orden interno, la seguridad, la integridad y soberanía nacional y no excederse en el monopolio de la fuerza física del Estado, provocando la ansiada excusa suficiente para la victimización y conversión en héroe del bloque cívico regional, que persigue incitar el desborde societal en contra del Estado.
En aras de la preservación de la soberanía nacional es que las Fuerzas Armadas han actuado (en el contexto de la escalada violenta del conflicto desde el martes) contra natura, no ejerciendo el monopolio de la fuerza física y no cediendo a la conspiración golpista de provocar más violencia e incitar la rebelión masiva, como planteaba la estrategia radicalizada de la derecha antidemocrática.Los ciudadanos cruceños / bolivianos que no se encuentran afiliados al bloque de poder cívico regional, que disienten con la matriz de pensamiento único y la dominación ideológica y cultural, demandan al Estado la protección y defensa de su integridad humana y sus bienes, al encontrarnos a merced de la violencia material y simbólica de las elites dominantes.
Dialogo, Reconciliación y Pacificación
No puede existir un verdadero proceso de pacificación si continúa la perpetuación de las relaciones de dominación. No se puede hablar de libertad, democracia y justicia si continúan (y se ahondan) las relaciones entre opresores y oprimidos.
La paz es un patrimonio de todos, pero especialmente de los humildes y pobres, que ponen la sangre, el sudor y las lágrimas en la confrontación violenta. La condición para la paz es el desmantelamiento del bloque cívico regional de Santa Cruz, que implica el cierre definitivo del Comité Cívico Pro Santa Cruz y su brazo paramilitar violento de la Unión Juvenil Cruceñista, como las máximas instancias fascistas, golpistas, violentas y reaccionarias.
Para la viabilidad a futuro de la sociedad cruceña, identifiquemos y expulsemos de entre nosotros a quienes se arrogan soberbia y erróneamente la autoridad moral de nuestros designios sociales. Impugnemos el supuesto derecho de representación a estos apologetas del desastre e invitemos a estas personas a que se retiren de la arena pública y amplíen el campo político hacia instituciones de intermediación política de esencia democrática. No se pueden democratizar aquellas instituciones que en su esencia, fundamento, rol, conducta e imaginario nunca han sido democráticos y nunca lo serán.
El espacio de intermediación entre la sociedad civil y el Estado dejado por el Comité Cívico, deberá ser llenado por una mesa de coordinación interinstitucional ad hoc, conformada por todas las instituciones significativas en el nuevo mapa político cruceño.
Dicha mesa de trabajo ad hoc tendrá como objetivo consensuar una agenda pluralista, integradora y respetuosa de la diversidad socio política, sectorial y étnica de la región, para garantizar las condiciones de la reconciliación al interior de nuestra sociedad, basándose como premisa fundamental en el otorgamiento de concesiones mutuas para ganar todos (dar primero para recibir después).
El objetivo que buscamos es cortar el monopolio de la voz única desde el bloque cívico regional, para visibilizar los matices que posee la sociedad cruceña y construir espacios de interlocución que puedan encontrar respuestas a nuestras problemáticas.
Esto no implica alcanzarle al oficialismo gubernamental en bandeja de plata la conducción política de nuestro destino como sociedad, sino resignifica los contenidos de la lucha cruceña para adueñarnos todos (los visibles e invisibles de la estructura societal cruceña) de nuestro proceso de cambio y conducirlo en alianza, complementariedad y reciprocidad con el del Estado plurinacional en construcción.
OPINION
EL EJEMPLO DE EVO
Página 12 de Argentina www.pagina12.com.ar)
Siglos de historia ahogados en la más profunda de las mentiras y del desprecio por la vida encuentran, actualmente en la vida política de la República de Bolivia, el aire que emana la reivindicación de los dueños auténticos y postergados de este continente.
Hace no más de dos años y medio Evo Morales asumía la presidencia de ese país: uno de los más castigados, con inmensos bolsones de injusticia en esta parte del Hemisferio Sur y tal vez con la mayor brecha existente entre quienes tienen y quienes ni siquiera son tenidos en consideración.
Asumió como auténtico representante de los habitantes originarios de estas tierras en nombre de los indígenas, los pobres, los desposeídos, los marginados, los desclasados. Seguramente, en las metrópolis centrales, se apostaba a ver cuánto duraría en el poder.
Simple, sencillo y sin olvidar su origen, comenzó con la ardua tarea de fundar una nación y comenzó haciéndolo para todos, no solamente para los de su misma condición social o cultural. Pero sabemos que una patria para todos es una tarea difícil, no exenta de intereses contrapuestos que intentarán, por los medios más ruines y viles, impedir que la justicia social llegue al conjunto de los ciudadanos.
Evo Morales es, como dicen los muchachos de hoy, lo más. Más sabio que inteligente embretó a la derecha de su país –la que no quiere dejar sus privilegios, sustentados en la explotación y en la marginación de las mayorías– subiéndole la apuesta del último referéndum y poniendo su cargo a la decisión popular de sacarlo o de ratificarlo en el poder. Ganó con cerca del 70 por ciento de los votos. Aun así, la derecha conspira y trata de impedir los cambios necesarios para que los sectores desposeídos de la historia sean parte de ella.
Para Evo Morales parece que no hay posibilidad de vuelta al pasado. Va hacia adelante y sin medias tintas, concreto y sin escudarse en el “no se puede”. Es lo más auténtico en el plano político que hay en la actualidad.
Sabe que él es el garante para que cientos de miles de bolivianos encuentren la dignidad de una vida que merece ser vivida.
Los presidentes de América del Sur se reúnen en Santiago de Chile, donde hace treinta y cinco años asesinaban a un gran estadista: Salvador Allende, por rara coincidencia histórica, y siendo hombres de distintas extracciones sociales y culturales, uno tuvo y el otro sostiene los mismos principios: no mentir, hacer realidad lo prometido, no robar, comprometerse.
Está muy bien que los presidentes apoyen a Evo Morales y a su proceso revolucionario, que no lo dejen aislado, ponerse de su lado y de la mayoría del pueblo de Bolivia, sostener la democracia a toda costa –aun con los costos que haya que pagar–. Sería mucho mejor que en esa decisión de acompañarlo también se lo imite en sus valores. Sería una manera más de ahondar ese respaldo.
Opinión
GOLPISMO EN BOLIVIA CONTRA LOS PUEBLOS DE AMÉRICA LATINA
Los Andes de Perú (www.losandes.com.pe)
Conmemorando el 11 de setiembre, el brutal golpe de Pinochet contra Allende, la derecha boliviana ha lanzado una campaña violenta en Bolivia para tratar de tumbarse al gobierno de Evo Morales. El gobierno que ha recuperado el gas y el petróleo para Bolivia, que le entrega a las empresas concesionarias el 18% de la producción y se queda con el 82% de la riqueza generada para el beneficio del pueblo de Bolivia. El gobierno que ha nacionalizado la minería e iniciado una reforma agraria pretende ser tumbado por los caciques de las provincias más ricas de Bolivia; terratenientes y grandes comerciantes, que quieren impedir el proyecto de cambio social que lidera Evo Morales en Bolivia. La nacionalización de los recursos naturales y regresar al viejo patrón de conducta donde los indios están sometidos a los caciques y gamonales de turno. La violencia ha cobrado más de treinta muertos y ha obligado al gobierno a que disponga la intervención militar de las provincias donde estos gamonales han conducido los alzamientos con juventudes fascistas. Como lo hicieron con Allende quien recuperó el cobre para Chile, quieren ahora repetir el plato en Bolivia. Y es tarea de todos los pueblos, incluyendo el peruano, enfrentar esta maniobra golpista, frenarla y defender el derecho de los pueblos a recuperar su riqueza, a redistribuir las utilidades que se generan y a vivir en mejores condiciones.
En Bolivia, acaba de haber un referéndum revocatorio del presidente de la República y de los prefectos regionales Y Evo Morales ha recibido el apoyo de 68 de cada 100 bolivianos que han votado. Nadie ha acusado de fraude, y sin embargo, han desatado la violencia. Para colmo, en medio de esta situación, los candidatos del Partido Republicano al gobierno de Estados Unidos, en las próximas elecciones, han declarado que estarán dispuestos a intervenir en cualquier lugar del mundo, donde los intereses norteamericanos se vean afectados. Es decir, podrían declararle la guerra a Rusia, podrían invadir Irán y ocasionar una nueva crisis del precio del petróleo, o intervenir donde les provoque en América Latina.
Es hora de que los pueblos de América Latina nos unamos para impedir este intervencionismo y este abuso sobre nuestra soberanía y sobre nuestros derechos de vivir con independencia, con libertad y con beneficio de nuestras riquezas y de lo que generamos con nuestro trabajo. Es hora de decir basta ya al intervencionismo, a la provocación y a la agresión a los gobiernos progresistas como el de Bolivia, están desarrollando un cambio a favor de sus pueblos. La solidaridad con Bolivia es la solidaridad con la libertad y justicia en América Latina. Hasta pronto, amigos.
En entrevista al periodista e internacionalista Fernando Cvitanic
PODER, DINERO Y RACISMO, CLAVES DEL CONFLICTO BOLIVIANO
La sociedad boliviana vive una profunda división que enfrenta a dos claros bandos: los blancos terratenientes del oriente y los indígenas del altiplano. Hoy en día, el país vive un violento conflicto que hizo erupción con el proyecto de nueva Constitución que impulsa Evo Morales.
Terra Magazine de Argentina (www.ar.terra.com)
Los gobiernos departamentales de la llanura oriental critican que los beneficios producidos por los hidrocarburos se centralicen en La Paz, mientras el gobierno de Evo Morales reivindica los derechos de los indígenas a través de un discurso izquierdista.
Este enfrentamiento va acompañado de una histórica rivalidad con tintes racistas entre oriente y occidente.
En entrevista con Terra Magazine, el periodista e internacionalista Fernando Cvitanic explica a grandes rasgos las características del conflicto boliviano, sus actores enfrentados y pronostica el resultado de los actuales esfuerzos por hallar una solución.
Terra Magazine: ¿Quiénes son los bandos enfrentados?
Fernando Cvitanic: Los bandos enfrentados son el gobierno central de La Paz, en manos de Evo Morales, y los grupos disidentes y las tribus de los departamentos del este boliviano que luchan por regalías económicas.
TM: ¿Cuál es la manzana de la discordia?
FC: Las regiones del llano son ricas en gas y en petróleo, las mayores reservas de gas están ahí. Estos departamentos dicen que La Paz concentra la riqueza. Además del conflicto económico, también hay un conflicto racial, entre los blancos del llano y los indígenas del altiplano.
TM: ¿Por qué quieren autonomía estas provincias?
FC: En Bolivia hay un grave problema cultural y económico. Bolivia tiene un alto componente indígena y es la primera vez que tienen un presidente indígena, esto ha generado no solo un problema económico sino, también, racial. En oriente, Evo es visto como el indio, no como el presidente.
TM: ¿Desde cuándo se viene gestando este conflicto?
FC: El conflicto racial de Bolivia existe desde hace mucho tiempo, desde que los hacendados terratenientes acumulan las tierras ricas en Bolivia, pero se ha visto acentuado por la llegada de Evo Morales al poder y por la constitución de Morales que ratifica el centralismo económico y político en La Paz. Los terratenientes del este boliviano se oponen a esta concentración de poder político porque va en detrimento de su poder económico.
TM: ¿De qué se trata el referendo y cuál es su punto álgido?
FC: El punto álgido es la constitución de Bolivia, la de Evo Morales, es altamente centralista y atenta contra el ingreso económico del oriente boliviano. Con esta situación se sienten agredidos, piensan que para la creación de esta constitución no fueron consultados y tiene un vicio en el origen.
Pero el asunto pasa por un componente ético y racial. La Constitución le está dando la legalidad al centralismo de La Paz, siendo que la riqueza no está en La Paz, está en el llano, lo cual va en contra de los intereses de la región. El discurso de Evo Morales es reivindicatorio y la concentración de tierras en Bolivia es asombrosa en el Oriente. Evo Morales habla de cambiar esa distribución de las tierras y choca con los intereses económicos de oriente, a ellos les interesa hacer caer a Morales, podría pensarse que es un intento de hacer caer al Gobierno, de crear una presión política tan grande que Evo se vea obligado a renunciar. Los gobiernos anteriores a Morales eran mucho más afines a la distribución de poder de la oligarquía blanca.
Para los del llano, la elección de Morales fue un cambio total en el status quo de la Bolivia anterior.
TM: ¿Cómo afecta este conflicto al continente?
FC: No es un secreto para nadie las intenciones de Venezuela de polarizar un conflicto en el continente, similar al de la guerra fría pero en Sudamérica. El presidente Chávez quiere asumir un papel protagónico amenazando con intervenir si hay un intento golpista en Bolivia.
Esto lo hace para intentar tapar los problemas internos en Venezuela: la inflación, la inestabilidad política, el bajón en el índice de popularidad de Chávez y, sobre todo, el miedo a un referendo a su gestión que se va a realizar en noviembre.
Chávez intenta involucrarse en problemas internacionales como el de Daniel Ortega, en Nicaragua, y Evo Morales, en Bolivia, para apaciguar los problemas internos y bajar un poco la tensión. Esto viene a respaldar un poco los intereses políticos del presidente venezolano que, a toda costa, quiere formar una izquierda sudamericana, una izquierda que no existe. La izquierda de Bachelet no coincide en nada con la de Chávez, porque la mandataria chilena le apuesta al libre comercio y a la inversión extranjera, es una izquierda que ha llevado a Chile al grado de desarrollo que tiene actualmente.
Por otro lado, creo que Chile debió dejar la solución del caso de Bolivia a la OEA y no tomarlo la presidenta Bachelet. No creo que los países suramericanos estén en la capacidad de ayudar a solucionar el problema de Evo Morales.
De la cumbre de Unasur no saldrá una solución rápida, porque no solo hay intereses de Morales, sino otros muy antiguos de la sociedad boliviana. No soy optimista en los resultados de la cumbre. La solución está dentro de los mismos bolivianos, pero la sociedad está muy polarizada, por tanto, no hay una solución cercana. Yo no le auguro un buen futuro al gobierno de Evo Morales.
TM: ¿Qué va a pasar al interior de Bolivia?, ¿Se logrará una solución mediante el diálogo?
FC: Puede existir diálogo entre las partes pero no sé los que pueda pasar. Ambos sectores defienden proyectos antagónicos de sociedad, es muy difícil que el empresariado boliviano se ponga de acuerdo con el proyecto de Nación que quiero Evo Morales. Mientras no se distribuya las tierras es imposible que los indígenas y que los empresarios queden conformes.
EDITORIAL
NO TE OLVIDES DE LA QUERIDA BOLIVIA
La República de Uruguay (www.larepublica.com.uy)
La situación de Bolivia es cambiante, pero siempre dentro de una línea de peligro de su institucionalidad.
Por momentos avanza la posibilidad de diálogo con algunos sectores de la oposición, pero en el entramado de la sociedad la derecha racista desata criminalmente su violencia contra la izquierda, pero también contra todo aquel que sea de origen indígena y sea exponente de los sectores más humildes.
Estados Unidos, que no descansa, está detrás de todos los operativos desestabilizadores apoyando con recursos a las bandas fascistas. Pero como si eso fuera poco ahora coloca dentro de una lista negra a Bolivia, junto a Venezuela y Birmania, por haber fallado en los últimos doce meses en cumplir sus obligaciones de lucha contra el narcotráfico.
Esta actitud de la Casa Blanca llevó a una inmediata respuesta de Evo Morales, quien manifestó que Estados Unidos "no tiene moral ni ética" para sancionar a Bolivia, a la vez que reclamó de la potencia del norte que "imponga una ley de consumidores de droga, de cocaína".
Esta nueva agresión contra Bolivia está mostrando que Estados Unidos no colabora con la distensión en ese país, sino que es factor fundamental del agravamiento de la crisis política.
Ayer en la mañana, Evo Morales estableció un pacto para defender a Bolivia con la Central Obrera de Bolivia y otras organizaciones sociales, para defender en las calles la democracia y las libertades de ese país. Fructifique el diálogo o no, incluso si se avanzara sustancialmente en la construcción de un camino de paz, los uruguayos no tenemos que distraernos porque en Bolivia se juega el destino de la paz regional.
Hay que saber que Cuba, producto de los huracanes, está en la mayor crisis climatológica de su historia, que el corte de gas de Bolivia va a perjudicar a Brasil, Argentina y Chile, para comprender que la prioridad en América del Sur es la estabilidad institucional y la consolidación y avance de la democracia.
De la misma manera que durante la dictadura que soportó Uruguay en las décadas del 70 y 80, el futuro de nuestros pueblos reclaman unidad y convergencia de pueblos, partidos y gobiernos para frenar el fascismo y por eso se vuelve imprescindible estar atentos sobre lo que pueda estar pasando en Bolivia, la tierra de Evo Morales.
Uruguay necesita crear un gran comité por la defensa de la institucionalidad de Bolivia, donde pueda congregar a las más amplias capas democráticas de nuestro país, porque la democracia de toda América del Sur se juega, en estas horas, en el corazón boliviano.
Opinión
GUAYAQUIL Y BOLIVIA
Diario Hoy de Ecuador (www.hoy.com.ec)
Reunidos de urgencia en Santiago de Chile la tarde del lunes, los presidentes sudamericanos expresaron "su más pleno y decidido respaldo al Gobierno constitucional del presidente de Evo Morales", y advirtieron "enérgicamente" que "no reconocerán cualquier situación que intente un golpe civil y la ruptura del orden institucional y que comprometa la unidad territorial de Bolivia". Y aunque es verdad que la mayoría de los analistas internacionales creen que la reunión cumbre de la Unasur no parió más que ratón (porque lo que produjo fue un documento plenamente predecible, en el que pide la instalación de una mesa de diálogo, entre los indígenas centralistas y los autonomistas de la Media Luna), yo más bien creo que hay que mirar con atención lo ocurrido en Santiago, y lo que sigue ocurriendo en Bolivia, porque parece ser el espejo de lo que puede pasar con nosotros mismos, los próximos días y meses.
Es cierto que el control diplomático de la situación lo tomó el presidente del Brasil, Lula da Silva. Pero no es menos cierto que lo hizo solo después que, desde Caracas, Hugo Chávez amenazara con enviar tropas para sostener a Evo, solo poco antes de ubicar también a Guayaquil como objetivo de sus advertencias. El libreto es el mismo. Y parece fundamental entenderlo. Los presidentes sudamericanos, por ejemplo, rechazaron la ruptura del orden institucional, sin reconocer que ese orden institucional ya había sido roto. La Bolivia de Evo Morales parece más una dictadura electa que una democracia representativa con pesos y contrapesos y controles sobre el poder central. Algo similar a lo que ocurre en el Ecuador, donde no vivimos actualmente un régimen constitucional. No existe un Congreso. Las máximas autoridades de control han sido elegidas sin seguir los procedimientos establecidos por la Constitución que se supone "en vigencia". Es tal la ruptura del orden, que la ahora ex ministra de Finanzas, Wilma Salgado, ha tenido que enviar, para su conocimiento, la Pro forma presupuestaria a una tal mesa directiva de una Asamblea Constituyente que terminó ya sus funciones, y que solamente podría reinstalarse en el caso de que el proyecto constitucional sea aprobado en el referendo. Según la Constitución "en vigencia", la Pro forma debía ser enviado al Congreso, pero este ha sido disuelto. Ni Ecuador ni Bolivia viven actualmente ese orden institucional que los presidentes sudamericanos atropelladamente aprobaron respaldar la pasada tarde del lunes en Santiago.
Y la verdad es, como lo recoge el punto siete de la declaración de Santiago, que luego no habrá diálogo que se pueda sustentar sin "el pleno respeto al estado de derecho y al orden legal vigente". Lo que implica, por ejemplo, no hacer trampa en las elecciones usando todo el poder del Estado en la campaña electoral, e impidiéndola a los demás. Después es muy fácil hacerse los ciegos.
Opinión
CRISIS BOLIVIANA
Ante una prolongada crisis institucional, económica y social que llevó al país andino al borde de la quiebra general, evo morales asumió la presidencia de bolivia en el 2006, con ambiciosos planes de refundir el estado boliviano.
El Caribe de República Dominicana (www.elcaribecdn.com)
Los acontecimientos que desde hace un mes se vienen suscitando en Bolivia son de profunda preocupación para la comunidad internacional.
La historia de vicisitudes y calamidades continúa en Bolivia. Esta es la nación sudamericana que más territorios ha perdido en la historia del continente, siendo más de la mitad de su área original anexada por sus 5 vecinos.
Ahora se presenta una ruptura a lo interno, que conllevaría desmembrar la nación en parcelas autónomas, cuando las principales prefecturas han decidido escindirse, lo que dejaría a La Paz con la hegemonía política, pero prácticamente sin capacidad económica.
La situación se fue agravando de forma tal que hubo bloqueos, toma de instalaciones petroleras, choques entre civiles, decenas de heridos y más de 30 muertos. El presidente Evo Morales denunció un golpe de estado y a la vez declaró “persona non grata” al embajador de Estados Unidos.
Ante una prolongada crisis institucional, económica y social que llevó al país andino al borde de la quiebra general Evo Morales asumió la Presidencia de Bolivia en el 2006, con ambiciosos planes de refundir el Estado boliviano.
Esta postura de Morales ha ido causando roces internos en los diversos sectores empresariales de la nación, hasta el punto de que todas las prefecturas de alzaran en busca de separación del gobierno boliviano. Como una forma de reducir las tensiones, hace unos días los autonomistas, representados por el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el gobierno de Evo Morales firmaron un acuerdo de pacificación del país e iniciaron una negociación para un pacto nacional".
El documento establece la suspensión de los bloqueos de autonomistas y oficialistas, la devolución al gobierno de instituciones públicas y petroleras que fueron tomadas por grupos cívicos y la suspensión por un mes de la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado.
Por su parte, los 9 mandatarios que conforman la recién creada Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) se reunieron en Chile, y dieron su respaldo a la democracia boliviana, a lo cual se unió el presidente Leonel Fernández mediante un comunicado.
Nos queda la esperanza de que el pueblo boliviano pueda resolver la polarización y la convulsión política y social que desde hace tiempo le aqueja y que pueda solucionar sus problemas internos por la vía democrática y constitucional.
Opinión
EL RECULE DE EVO
La amenaza de guerra seguirá latente mientras Evo no ceda de verdad
El Universal de Venezuela (www.eluniversal.com)
La semana pasada vimos a un Evo Morales envalentonado, negado a dialogar con la oposición de su país y solicitando, al grito de "sin miedo al imperio", la retirada inmediata del embajador estadounidense de territorio boliviano por supuestamente promover las protestas opositoras. Poco le duró la intempestiva furia.
Morales ahora aclara que el despido sin evidencias concretas del diplomático para nada significa un rompimiento de relaciones diplomáticas y comerciales con EEUU. A su vez, aunque estableció el estado de sitio en Pando, la provincia más aguerrida, se ha visto en la necesidad de dialogar nuevamente con los prefectos opositores y dice estar dispuesto a la restitución del impuesto del gas a las regiones.
Evo no sólo retrocedió a causa de la fuerte voluntad opositora de llevar el enfrentamiento hasta las últimas consecuencias y por la inmediata reacción de EEUU a la expulsión de su representante en La Paz, aclarando que constituía un "grave error" que traería efectos serios en las relaciones bilaterales. En su retroceso también tuvo gran peso el contundente rechazo del alto mando militar a la intromisión de Hugo Chávez en el conflicto boliviano, al éste ofrecer envío de tropas en caso de un golpe de Estado. Esta respuesta evidencia las difíciles relaciones entre la jefatura castrense con Morales quien, de hecho, ha preferido mantenerse callado y no contradecir la posición de los militares.
La precaria situación política de Bolivia y de Evo se mantendrá hasta que se dé una revisión de fondo del contenido de la nueva constitución con la cual se pretende imponer en esa nación el socialismo totalitario del siglo XXI. Los llamados de paz y los esfuerzos de otros países, en particular de Brasil cuya economía depende de las importaciones de gas de Bolivia, tan sólo lograrán frenar por un tiempo la espiral de violencia en el país. Pero la amenaza de una guerra civil, con lo que esto implica para la seguridad de toda la región, seguirá latente mientras que Evo no ceda de verdad en cuanto a la reforma constitucional y respete realmente las autonomías regionales.
Opinión
ENTRE EVO Y GERARDO
ABC de España (www.abc.es)
El cuestionado presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, es noticia porque acaba de acaba de dar otra muestra de su peculiar modo y manera de llevar las riendas de la patronal. Es tanto el disgusto que su gestión provoca entre los empresarios que buena parte de ellos hace tiempo que añoran al sempiterno presidente que fue José María Cuevas. Lo que, por cierto, ya son ganas de añorar. La última de Díaz Ferrán es su propósito, desvelado por ABC, de destituir al secretario general de toda la vida, Juan Jiménez Aguilar, me temo que por no haberse plegado a sus caprichos y tejemanejes.
Pero no era de las complicadas intrigas que se cuecen en los fogones de la patronal sino de una decisión de la empresa Air Comet, también presidida por el llamado «patrón de patrones», que nos ha afectado directamente a los integrantes de la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo que en número de cincuenta y tres hemos viajado a Bolivia y Paraguay para recorrer diversas misiones jesuíticas y celebrar, en Asunción, el Congreso Internacional de dicha federación.
Air Comet, cierto es que al igual que han hecho otras compañías aéreas, ha decidido suspender sus vuelos con Bolivia. Uno de esos vuelos era, precisamente, el que en la madrugada de ayer martes, operando para Aerosur que es la compañía de bandera boliviana, debía devolvernos a Madrid. El resultado de esa suspensión ha sido la forzada ampliación de las vacaciones en cuarenta y ocho horas, quedando a la espera de que en la madrugada de mañana jueves, estando algo más calmada la caótica situación en la que se encuentra Bolivia, y una vez reabierto el aeropuerto de Viru Viru de la santacruceña capital boliviana, la compañía Aerosur encuentre avión y tenga posibilidades de efectuar el vuelo que no quiso hacer Air Comet.
En nuestro caso, los periodistas y acompañantes, más allá de las molestias y trastornos ocasionados por el desbarajuste que provoca en cada una de las respectivas agendas de trabajo el aplazamiento de un vuelo, podemos considerarnos unos privilegiados puesto que no nos hemos encontrado en la desagradable situación sufrida por tantos otros viajeros, que quedan literalmente tirados en aeropuertos al ver suspendido sus vuelos, sino que, advertidos a tiempo, estamos alojados en un hotel aguardando noticias de la hora del regreso.
El caso es que entre el empresario Gerardo Díaz Ferrán, cuya compañía ha decidido dejarnos tirados, y el presidente boliviano Evo Morales, cuyos paisanos autonomistas y su propia incapacidad como gobernante, han provocado el bloqueo de un país ya de por sí bastante bloqueado, aquí estamos esperando. En mi caso, además, me he quedado sin la posibilidad de hablarles a los nuevos alumnos de la Universidad Cardenal Herrera-CEU, de los retos a los que van a enfrentarse desde el primer día en que se pondrán a estudiar periodismo.
Una máxima del periodismo, siempre incumplida, es aquella que señala que los periodistas no somos noticias. En nuestro caso, forzada y forzosamente, nos hemos encontrado con que si lo somos, al vernos obligados a una prórroga vacacional que ojalá no se alargue más allá del tiempo extra en el que ya estamos. Pero no nos quejemos porque lo nuestro es «pacata minuta» comparado con la que les espera a los bolivianos, metidos como están en una espiral segregacionista y disgregadora para la que Evo Morales no parece disponer de capacidad ni ideas con las que hacerle frente. Los apoyos de sus colegas presidenciales del cono sur no van a servirle de mucho. Cuando «quod natura non dat» ya se sabe en qué queda la cosa. Pobre Bolivia.
Análisis
LA VIOLENCIA EN BOLIVIA FORTALECIÓ EL PROYECTO DEL MAS
Terra Magazine de Argentina (www.ar.terra.com)
La aceptación implícita del proyecto de nueva Constitución Política del Estado del Movimiento Al Socialismo (MAS) es una de las consecuencias, favorable para el gobierno de Evo Morales, de la reciente ola de violencia que se desató en el país y que ingresó en una tregua luego de la firma de un preacuerdo entre las partes enfrentadas.
Los analistas Carlos Cordero y Carlos Alarcón, por separado, coinciden en que el inicio del diálogo tiene como base el reconocimiento a la propuesta de nueva carta magna entregada por la Asamblea Constituyente, en diciembre de 2007, en medio de denuncias de irregularidades en el procedimiento de aprobación.
Para Cordero, politólogo e investigador, "el resultado de toda esta crisis es que el gobierno ha salido beneficiado", porque los grupos más radicales al proyecto constitucional han terminado por aceptarlo. El tema de fondo, dice, es que el proyecto político del MAS era la reforma del Estado "y eso se hace a través de un nuevo texto constitucional".
Con el preacuerdo entre el gobierno y los prefectos (máximas autoridades departamentales) opositores, suscrito la noche del 16 de septiembre, "el país que se oponía ha terminado por aceptar que hay un nuevo proyecto y es el del MAS, no de otro". Esa aceptación ha significado también el convencimiento de que sólo se harán ajustes al texto, aunque éstos pueden ser importantes.
Por su parte, Alarcón, especialista en Derecho Público, Constitucional, Administrativo y Penal, recuerda que ante la insistencia sostenida de los prefectos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija de llevar a punto cero el proyecto, el consejo fue desistan de "posiciones maximalistas que no eran adecuadas" y que, por el contrario, accedan a realizar ajustes al texto constitucional y a los estatutos autonómicos que se aprobaron en sus regiones.
Finalmente eso ocurrió, enfatiza Alarcón. "Con el preacuerdo los prefectos han reconocido el proyecto de Constitución Política del Estado (CPE) del MAS", aunque también el presidente de la República, Evo Morales, ha manifestado, en varias oportunidades, su intención de compatibilizar "su proyecto con los estatutos. Falta saber qué entiende por compatibilizar".
Las bases del diálogo
La jornada del 16 fue incierta y se tornó tensa con la detención del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, por parte de efectivos militares para confinarlo por desacato al estado de sitio decretado por el gobierno en el departamento, luego de los graves enfrentamientos en la localidad de Porvenir entre autonomistas y campesinos que causaron la muerte de 15 personas, casi todos afines al MAS, según informes gubernamentales. Alarcón y Cordero consideran que esa fue una medida política, más que un acto de justicia.
Casi simultáneamente, el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el vicepresidente de la República, Álvaro García Linera, terminaban de redactar un documento base para iniciar el diálogo, luego de cuatro días de intensas negociaciones. Un día antes los presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) le dieron su respaldo al mandatario boliviano.
Entrada la noche, Cossío, que se trasladó de La Paz a Tarija, anunció que los prefectos aceptaban el preacuerdo que, entre sus puntos fundamentales, menciona el reconocimiento del gobierno al derecho que tienen los departamentos a percibir el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Esta demanda fue la punta de lanza de la resistencia regional, ya que el gobierno destinó una parte al pago de la Renta Dignidad, bono que sustituyó al Bonosol. No obstante, el preacuerdo también destaca que debe garantizarse este beneficio para las personas mayores de 60 años.
Los otros dos puntos tienen que ver con la transformación del Estado, a través de la nueva CPE, autonomías departamentales y estatutos autonómicos, y los asuntos institucionales como las designaciones congresales de los cargos vacantes y la revisión del Padrón Electoral, el Programa de Carnetización y el Registro Civil que fueron observados por una serie de irregularidades que se produjeron durante el referéndum revocatorio de 10 de agosto.
Estos temas se discutirán en tres mesas de trabajo y en una mesa central se aprobarán los acuerdos. El diálogo estará acompañado por facilitadores y garantes, entre los cuales figuran Unasur, que ya designó a su representante ¿el ex embajador de Chile en Argentina, Juan Gabriel Valdés¿; las iglesias católica, evangélica y metodista, y organismos internacionales, entre ellos la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos (OEA) y Naciones Unidas.
El diálogo tiene como objetivo lograr "el restablecimiento de la paz social en el marco del estado de derecho", lo que implica la desocupación de las oficinas públicas e instalaciones petroleras tomadas por grupos de cívicos opositores y el levantamiento de todos los bloqueos de caminos que se prolongaron prácticamente por un mes en diferentes puntos del país.
Lo anterior supuso también que el gobierno postergue por un mes la convocatoria a referéndum constitucional, previsto para el 7 de diciembre, y que se comprometa a suspender su campaña mediática de difusión del proyecto de la nueva carta magna y de desprestigio en contra de "autoridades y actores cívicos y sociales. La promulgación del decreto supremo Nº 29691 del 28 de agosto, que llamaba a la consulta, fue lo que desató la violencia.
Otro punto importante del documento es la decisión de esclarecer los hechos ocurridos en Pando a través de "organismo nacionales e internacionales imparciales y una comisión congresal que se desplazará de inmediato al lugar de los hechos". El gobierno se comprometió también a "no impulsar acciones judiciales que tengan connotación política contra dirigentes cívicos, sociales y autoridades de los departamentos movilizados".
Crear las condiciones
Los dos analistas consultados por Terra Magazine coinciden también en que la calidad de las reuniones y de los avances, y la actitud de las partes enfrentadas pueden derivar en un verdadero pacto nacional que vaya más allá de la satisfacción de intereses personales y regionales, sino que considere a la sociedad en su conjunto.
Entonces, dicen, se deben crear las condiciones para un diálogo auténtico, sincero y transparente. Sin embargo, las amenazas entre las partes no contribuyen a generar ese ambiente. Para Alarcón las reacciones de los sectores afines al oficialismo y a la oposición no son espontáneas, por lo cual bastaría una orden del Presidente o de los prefectos para que los grupos dejen de crear presión.
Lo más probable es que el diálogo sea lento y difícil, porque se trata de encontrar un punto de equilibrio entre dos visiones de país totalmente contrapuestas, indica Cordero. Todo dependerá de cuánto estén dispuestas a ceder las partes, sobre todo porque gran parte del acuerdo se construirá sobre la base del texto constitucional del MAS.
"El punto de equilibrio va a ser aceptar en un 80 o 70 por ciento el proyecto de Constitución del MAS, la visión de país del MAS, y el 20 por ciento va a ser una incorporación de la "media luna" a ese proyecto constitucional. En la aceptación de ese proyecto están implícitos todos los otros temas: IDH, nombramientos, investigaciones para esclarecer los hechos de Pando", explica el analista.
Por su parte, Alarcón considera que al preacuerdo le faltó un tema clave, y es que el gobierno y las prefecturas debían garantizar que "las instituciones de naturaleza política respondan al conjunto de la sociedad y no a los sectores enfrentados" La justicia y las cortes electorales, por ejemplo, "se han visto contaminadas con la lucha facciosa y sectorial", y es fundamental el respeto institucional, porque de lo contrario "no tendremos un verdadero estado de derecho en Bolivia".
ANALISIS
PRESIDENTE DE BOLIVIA SALE FORTALECIDO DE LA CRISIS
Agencia Reuters (www.lta.reuters.com)
El primer presidente indígena de Bolivia, el izquierdista Evo Morales, manejó con habilidad una violenta crisis política de la cual salió fortalecido para abrir conversaciones con los gobernadores opositores que se resisten sus reformas socialistas.
Al menos 17 personas murieron la semana pasada en una ola de violencia política durante la cual opositores a Morales irrumpieron en edificios del Gobierno, sabotearon vitales gasoductos de exportación y se enfrentaron con partidarios del presidente en cuatro regiones controladas por la derecha.
El mandatario decretó el estado de sitio en el remoto departamento amazónico de Pando y mandó detener al gobernador opositor de esa región, acusándolo de haber ordenado una masacre de campesinos el pasado jueves.
Los soldados movilizados por Morales para proteger instalaciones estatales y ejecutar el estado de excepción mostraron moderación y evitaron enfrentamientos.
Mientras, los presidentes de América del Sur dieron un fuerte respaldo a Morales en una cumbre de emergencia esta semana en Santiago, al tiempo que condenaron cualquier intento de golpe o rebeliones separatistas, lo que pareció dejar poco margen de movimiento a la oposición, que terminó perdiendo a uno de sus actores, el gobernador pandino, y aceptando el diálogo.
"En Sudamérica, hay un apoyo unánime y muy fuerte hacia el Gobierno. Otros países de la región, de izquierda, derecha o centro, no creen que la oposición tenga una demanda legítima," dijo Mark Weisbrot, director de la sede en Washington del Centro para la Investigación Económica y Política.
La imagen de Morales contrasta con la de sus detractores, los prefectos (gobernadores) opositores que aparecieron identificados con las protestas violentas y las matanzas.
Un editorial de El Deber, uno de los principales periódicos de oposición en el rico distrito oriental de Santa Cruz, dijo que Morales fue "innegablemente fortalecido" por los presidentes de Sudamérica que lo respaldaron, mientras que la oposición debe replantearse su estrategia de protesta.
Los gobernadores exigen una mayor autonomía del Gobierno central y más control sobre los ingresos estatales provenientes de un impuesto al petróleo, al tiempo que rechazan la nueva Constitución de línea indigenista-socialista que Morales quiere someter a referendo en el 2009.
En un principio de acuerdo alcanzado el martes, Morales y los gobernadores opositores decidieron discutir ambos temas en las conversaciones.
NI GANADORES NI PERDEDORES
Morales, quien arrasó en un referendo de mandatos hace poco más de un mes, parece decidido a aprovechar su fortaleza electoral para acelerar sus reformas.
Pidió el miércoles a la oposición que el diálogo produzca un pacto antes del plazo establecido de 30 días y planteó al Congreso que apruebe la próxima semana la convocatoria a un referendo en enero del 2009, para aprobar la nueva carta magna.
Sin embargo, el analista Franklin Pareja dijo que Morales sólo se fortalecerá si hace un acuerdo con la oposición.
"No hay ganadores ni perdedores, todos perdemos" después de la última semana de muertes, afirmó Pareja.
Morales, quien inició su carrera política como dirigente de los sindicatos cocaleros, a los cuales todavía lidera, asumió el poder a principios de 2006 y juró cambiar la Constitución para dar más poder a la mayoría indígena de Bolivia, así como para aumentar el control estatal sobre los recursos naturales.
Sus rivales políticos rechazan el proyecto de nueva carta magna, en particular la prohibición de los latifundios y el reparto masivo de tierras entre los pobres.
El Mundo, otro periódico de Santa Cruz, criticó al líder cívico de las últimas protestas, Branko Marinkovic, por subestimar la capacidad de Morales para "conquistar" las regiones orientales, controladas tradicionalmente por la derecha.
El presidente tiene la mayor parte de su apoyo entre los pobres del altiplano occidental de Bolivia, mientras que la oposición es más fuerte en las regiones orientales, donde están ubicados los ricos yacimientos de gas natural, tierras agrícolas fértiles y viven adinerados descendientes de europeos.
Morales es amigo del ex líder de Cuba Fidel Castro y tiene el apoyo del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, por lo que muchos temen que su objetivo sea instaurar un régimen comunista.
Los criterios de partida del Gobierno y la oposición no han cambiado luego de tres semanas de violencia, por lo que algunos analistas advierten que las nacientes negociaciones podrían romperse o quedar en un punto muerto.
Ninguna de las partes "ha resuelto los problemas de fondo. Están tomando un descanso hasta recuperar fuerzas," dijo Kathryn Ledebur, jefe de la Red Andina de Información con sede en Bolivia.
Opinión
EVO MORALES SIN DERECHO A QUEJA
El Nuevo Herald de Estados Unidos (www.elnuevoherald.com)
La violenta confrontación que sufre Bolivia por la defensa de las autonomías es el resultado de la irresponsabilidad de Evo Morales, presidente totalitario con envoltura democrática, a quien los europeos ven como un simpático y extravagante producto cultural tercermundista, pues les afecta poco o nada.
La ''madre del cordero'' en esta penosa situación es su temeraria aventura personal. Encandilado primero, y envalentonado después con el apoyo del gobierno de Venezuela, no le basta con atropellar derechos y despojar, sistemáticamente, los recursos de los departamentos de la ''media luna'' camba, sino que introdujo la variable geopolítica de amenaza de una invasión militar extranjera en su propio país. Ahora queda claro que el pacto de su gobierno con el venezolano no perseguía defender a Bolivia de posibles agresiones externas. Su objetivo era defender al presidente de sus opositores al interior del país. Por eso es Hugo Chávez quien amenaza, con su acostumbrado lenguaje de ''barra brava'' y sin el menor pudor, con meter a sus tropas, a sangre y fuego, en territorio boliviano, si sale Morales.
Aunque no deseamos ninguna interrupción democrática en Bolivia, sino el respeto a las minorías, ¿qué pasaría si los militares bolivianos tomaran el poder con un golpe de Estado, en caso de incursionar tropas venezolanas en Bolivia? Bajo tal escenario, ¿lucharían contra las fuerzas armadas bolivianas? ¿Esto no configuraría una guerra entre naciones? ¿No comprende Evo Morales que, incluso si sus sospechas fuesen correctas, conduciría a un baño de sangre a su país?
¿Se siente Morales, el ''predicador'' de la unidad nacional, compatriota de los millones de bolivianos que serían afectados con una incursión militar venezolana si, como consta en los estatutos autonómicos, los departamentos que defienden la autonomía no piden la secesión, sino sólo reclamar la descentralización de poderes y rentas? ¿Qué unidad patriótica pide cuando abre las puertas al invasor extranjero para exterminar a los que nacieron en suelo boliviano?
La temeraria aventura de Evo Morales no se agota dentro de sus fronteras. Su alianza con el chavismo pone en riesgo la estabilidad geopolítica sudamericana. Su recurrente actitud de inmiscuirse en la política interna de los países vecinos, como Perú, conspira contra la integración regional y las más elementales relaciones diplomáticas. Postura ideológica que entorpece a la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y bloquea, en la práctica, cualquier acuerdo comercial con la Unión Europea (UE) a países como Perú y Colombia, que apuestan por modelos aperturistas y de economía de mercado.
Morales descalifica a sus opositores de antidemocráticos y de antipatriotas, sólo porque expresan en las calles el profundo descontento con su régimen. Curiosa actitud de quien alcanzó el poder, precisamente, con similares prácticas. Cuando desestabilizaba a los gobiernos de Gonzalo Sánchez de Lozada primero, y de Carlos Meza después, hasta llevar a su país a la completa ingobernabilidad. El tiempo en que sus únicas plataformas de lucha eran la defensa de una etnia y la del cultivo de la coca.
Evo Morales no tiene derecho a queja, pues parece hacerle juego al popular refrán ''la vaca no suele acordarse de cuando fue ternera''. Aunque más importante sería hoy que el presidente de Bolivia recordase que sólo hay una clase de bolivianos y que se debe al país, antes que a una ideología o a una lealtad fruto de su sumisión con el verdadero titiritero del tinglado en que ha convertido a su gobierno.
Opinión
UNASUR, EN EL CAMINO CORRECTO
La Nación de Chile (www.lanacion.cl)
Estoy entre quienes creen que Chile es un país de ciclos cortos en materia política. Sin embargo, nunca esperé que lo fuera tanto. La derecha está retomando su vocación agresiva, clasista y aislacionista en términos internacionales, enfocando en la dirección opuesta a la diplomacia. Ha retornado a la senda de la conspiración. No era suficiente la estrategia del desalojo. Ahora teje historias de complots subversivos y pretende socavar nuestras relaciones con mandatarios extranjeros. Desprestigia a Chile. Hace negocios privados mientras habla temas de Estado. Socava la credibilidad y la capacidad de las nacientes instituciones internacionales cuando Chile construye puentes en Sudamérica, como una acción histórica que espera evitar las confrontaciones entre los pueblos. Parece olvidar que la diplomacia nació precisamente para evitar los conflictos bélicos y generar la cooperación. Las acciones confrontacionales generadas desde el país sede de un encuentro internacional no sólo impiden el desarrollo al cual aspiramos, sino que nos ponen en una situación patética y vergonzosa.
La irresponsabilidad política de la derecha es de antología. Pero es una oportunidad para quienes, representando sectores democráticos, hacen de la desestabilización su ejercicio predilecto para ganar notoriedad no olviden que unirse a la oposición política hoy día es auspiciar a la derecha y retroceder más allá de exclusiones ideológicas y partidarias. Unasur es una demostración magistral de las posibilidades que tenemos de dar una señal para la unidad latinoamericana, siempre y cuando nuestra oposición actúe con madurez y no se deje llevar por pasiones belicistas, que llevaron al continente al borde de guerras y a la destrucción de su democracia. Unasur, como proyecto de institución internacional al servicio de la paz, el desarrollo y la equidad social, es un símbolo potente de lo que hemos logrado en estos años. Es un orgullo que podamos estar debatiendo en Chile el destino del continente sobre la base de la protección de la democracia. Contrariamente, vemos cómo sectores de la oposición, en acciones concertadas e inclasificables, abordan los esfuerzos mancomunados por la convivencia como una señal puramente ideológica, sin ninguna lectura seria. Desde un candidato presidencial a parlamentarios elegidos se escuchan voces disonantes de las intenciones de elegir la paz en un continente que ha sudado sangre en su historia por conseguirla como se puede lograr hoy.
Los conflictos de los países hermanos son responsabilidad de la comunidad internacional. Qué distinta habría sido la historia de nuestro continente si Unasur y sus actuales dirigentes, por muy distantes que parezcan en términos políticos, hubieren intervenido en Chile, Argentina, Bolivia, Paraguay, Perú, entre otros países, como estamos ahora siendo testigos históricos de un cambio sustancial de nuestra política internacional. Sólo este encuentro justifica y obliga a que todos nuestros países hagan los esfuerzos necesarios para posibilitar que Unasur se convierta en un actor relevante de nuestro desarrollo.
Y lo estamos viendo en Chile. Este es el camino hacia el desarrollo. No el exacerbado ideologismo ni el antagonismo absoluto de las ideas, ni menos hacerse cargo del eslogan que uno u otro líder quiera instalar en un foro internacional. Eso no importa. Lo que importa es que esas frasecitas quedarán en la retina como un recuerdo anecdótico y hasta simpático, siendo las conclusiones y la voluntad política común la señal para que aquellos que van en la vía equivocada retomen el camino al que todos aspiramos.
Opinión
PREACUERDO: ¿FIN DEL CONFLICTO BOLIVIANO?
Los Andes de Perú (www.losandes.com.pe)
El gobierno de Evo Morales y representantes de la oposición firmaron un preacuerdo de pacificación que podrá sentar las bases de un "gran pacto nacional".
El jueves empezarán las negociaciones de fondo en Cochabamba y se analizarán los detalles más delicados, en presencia de mediadores internacionales.
Con la detención de prefecto de Pando se temió que la negociación fracasara. Sin embargo, con la firma del preacuerdo se espera pacificar al país y dar fin a la ola de conflictos acontecidos en los últimos días en Bolivia. Firman preacuerdo
Según el documento se suspenderán los bloqueos de autonomistas y oficialistas, las instituciones que fueron tomadas por grupos cívicos serán devueltas al gobierno y la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado será suspendida por un mes.
Los autonomistas de Bolivia, representados por el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el gobierno de Evo Morales firmaron este martes un preacuerdo para pacificar al país y para iniciar una negociación hacia un "gran pacto nacional".
La suscripción del documento estuvo a punto de fracasar por la detención del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández.
Sin embargo, luego de una jornada de tensiones, Cossío firmó en presencia del prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, y de representantes de la Iglesia Católica.
El documento establece la pacificación de Bolivia a través de la suspensión de los bloqueos de autonomistas y oficialistas, la devolución al gobierno de instituciones públicas y petroleras que fueron tomadas por grupos cívicos y la suspensión por un mes de la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado.
Según las bases de este preacuerdo, la negociación de fondo se iniciará el jueves en la ciudad de Cochabamba, en presencia de mediadores de Unasur, de la OEA, de la Unión Europea, de Naciones Unidas y de la Iglesia Católica de Bolivia.
Cossío se adhiere
En la mañana de este martes todo estaba listo para la firma del acuerdo.
Incluso, Cossío ya estaba en el Palacio de Gobierno para celebrar el acto, pero supo que el prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, había sido detenido y abandonó la reunión.
Desde La Paz, el vicepresidente, Álvaro García Linera, llamó a los prefectos a suscribir el documento y dijo que Cossío estaba al tanto desde el viernes de que se arrestaría al prefecto de Pando.
Por la noche, el prefecto de Santa Cruz, en un mensaje al país, dijo que las instituciones de su departamento, donde reside la mayor oposición a Morales, habían decidido levantar las medidas de presión y firmar el pre-acuerdo.
Unos minutos después se produjo la suscripción del acuerdo por parte del prefecto Cossío.
Pautas del acuerdo
El preacuerdo da algunas pautas en los temas de fondo. Por ejemplo, el gobierno reconoce las autonomías departamentales y restituye a las regiones los ingresos petroleros que sobraban del pago de una renta a los ancianos. El prefecto Cossío pidió que el presidente Morales suscriba el documento y que no sean sólo sus viceministros los que avalen la pacificación del país.
Cossío declaró que este preacuerdo "debe ser el inicio de un proceso de pacificación plena del país. Una oportunidad para abrir el camino hacia un gran acuerdo nacional".
De esta forma, se pone fin a los conflictos iniciados hace 22 días. Durante ese tiempo hubo bloqueos, toma de instalaciones petroleras, choques entre civiles, heridos y muertos.
Opinión
PREOCUPA LA VIOLENCIA DESENCADENADA EN BOLIVIA Y MÉXICO
El Periódico de Guatemala (www.elperiodico.com.gt)
Por supuesto, es necesario señalar desde un principio que la violencia en estos países es de distinto origen y obedece a causas muy diferentes. En el caso de Bolivia, la crisis es primordialmente política y se debe en gran medida a la intransigencia del Gobierno de Evo Morales, que desde que llegó al poder se ha propuesto impulsar a cualquier costo la “refundación del Estado boliviano” e imponer medidas de corte populista sin mayor respeto a los procedimientos legales para hacer las reformas del caso.
Se convocó a una asamblea constituyente y, a marchas forzadas, se redactó una nueva constitución política sin que se permitiera por parte del oficialismo mayoritario un debate abierto y profundo sobre los cambios radicales propuestos en el campo político, económico y social. Más bien se restringió el ámbito de la oposición y, sin ningún recato, ignorando los más elementales procedimientos democráticos, se aprobó el nuevo texto constitucional, en una sesión de la asamblea celebrada en el interior de un cuartel militar de la ciudad de Sucre, sin la presencia de los diputados de oposición y sin que se estableciera si existía el quórum requerido.
Casi al mismo tiempo, en las regiones de Santa Cruz, Pando, Tarija y Beni, gobernadas por la oposición, se convocó a consultas populares con el objeto de que se aprobaran sendos estatutos autonómicos que, de hecho, reforman la dependencia del Gobierno central y les otorgan a estas provincias el derecho de una administración autónoma y el manejo incluso de los recursos provenientes de los impuestos ahí recaudados. Los referendos autonómicos se celebraron pacíficamente, en orden y con alta afluencia de votantes que le dieron una victoria abrumadora a la oposición política al Gobierno de Evo Morales. Como la tensión política aumentó en alto grado, la Iglesia católica llamó al diálogo y lo mismo hizo la OEA, que envió una misión especial, pero no se logró ningún acuerdo. Desafortunadamente, se produjeron choques violentos en Pando hace algunos días, que dejaron decenas de muertos y heridos y más de 100 desaparecidos. ¿Quién propició esta situación? Difícil de poder determinar. El Gobierno central impuso el estado de sitio en esta región, desplazó a fuerzas del Ejército para restablecer el orden y apresó al prefecto de Pando, Leopoldo Fernández. El diálogo que se venía realizando en La Paz se estancó, y las perspectivas de una solución negociada parecen, a estas alturas, remotas. El Gobierno, entretanto, recibió el apoyo de los países de América del Sur reunidos en Santiago de Chile, donde nueve presidentes y tres cancilleres firmaron lo que se denominó la Declaración de la Moneda, donde reafirman su compromiso de preservar la integridad territorial de Bolivia ante cualquier intento de secesión. El presidente Evo Morales continúa denunciando un intento de golpe de estado civil y declaró non grato al embajador estadounidense, al que señaló de estar detrás del movimiento para derrocarlo.Evidentemente, la situación es muy compleja y será difícil resolverla mientras persistan las posiciones intransigentes, pero las circunstancias obligan al diálogo y a la negociación con la ayuda de los países de Unasur y de la OEA. En cuanto a la violencia que golpea a nuestro vecino México, viene, sin ninguna duda, del crimen organizado y de los cárteles de la droga que han elevado los niveles de violencia en forma inusitada. La crueldad con que actúan es escalofriante: sirve de ejemplo el hallazgo de 24 cuerpos torturados y mutilados, y los asesinatos de indefensos ciudadanos en Morelia, Michoacán, durante las celebraciones del Grito de la Independencia que dejaron siete muertos y decenas de heridos. A diferencia de Bolivia, en México sí existe voluntad política de hacer frente a los problemas, por complejos que sean. Así lo demuestra la respuesta del Gobierno de Felipe Calderón, de los partidos de oposición y de los sectores representativos de la sociedad mexicana, que hacen causa común para derrotar a ese implacable enemigo encubierto que creció quizá demasiado en las últimas décadas, sin que las autoridades se percataran de los alcances del problema. Pero, de esta dolorosa experiencia, hay un aspecto positivo: México entiende el problema de la violencia y está unido y de pie para combatirla con firmeza, dentro del contexto del régimen de legalidad.
BOLIVIA: CHÁVEZ COMETE EL MISMO ERROR QUE EL CHE
La crisis boliviana puede derivar en una tregua, pero no en una solución definitiva, como sucedió con el referéndum revocatorio que Evo ganó ampliamente a nivel nacional, aunque triunfaron los cuatro prefectos que gobiernan los departamentos del oriente de país.
Urgente 24 de Argentina (www24urgente.com.ar)
La crisis boliviana puede derivar en una tregua, pero no en una solución definitiva. Así lo mostró el resultado del referéndum revocatorio, que Evo Morales ganó ampliamente con dos tercios de los votos a nivel nacional, pero triunfaron los cuatro prefectos que gobiernan los departamentos del oriente de país, que reclaman la autonomía (Santa Cruz de la Sierra, Tarija, Pando y Beni). La distribución de la renta energética del país fue el detonante de la ocupación de oficinas del estado nacional por parte de las milicias autonomistas en Pando y Santa Cruz de la Sierra, produciéndose enfrentamientos con decenas de muertos y cientos de heridos y desaparecidos, cuyo número preciso todavía se desconoce. El Presidente ha llamado al diálogo a los prefectos autonomistas, pero simultáneamente la justicia está requiriendo al de Pando, acusándolo de genocidio por los hechos de violencia que han tenido lugar en dicho departamento. Si bien el Ejército ha protegido plantas petroleras y gasíferas, varias empresas han sufrido daños y países como Brasil, Argentina y Chile -que depende del suministro de gas a través de Argentina- que se abastecen de gas boliviano, pueden verse afectados por esa crisis.
El dato nuevo es la actitud políticamente neutral que están adoptando las fuerzas armadas bolivianas. Hasta hace pocos días, los mandos militares expresaron públicamente que respaldarían al Presidente contra cualquier intento de afectar la territorialidad del país, lo que fue interpretado como un mensaje contra el autonomismo. Pero una vez comenzada la violencia, plantearon que no matarían ciudadanos bolivianos. Al anunciar el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que respaldaría a Morales incluso enviando tropas, los mandos militares bolivianos hicieron público que no aceptarían la actuación dentro del país de tropas extranjeras. Chávez respondió intimando a los militares bolivianos a que abandonen su prescindencia y a que actúen contra los autonomistas, amenazando en caso contrario con intervenir. La respuesta militar boliviana fue aun más dura y el 14 de septiembre, el ministro de Defensa de Evo Morales (San Miguel) se vio obligado a declarar públicamente que no se aceptaría la entrada en el país de tropas extranjeras, contradiciendo a Chávez, quien insistió en que no se iba a quedar cruzado de brazos mientras se desplazaba a Evo. El Presidente venezolano está cometiendo el mismo error que el Che Guevara cuarenta años atrás: subestimar el nacionalismo boliviano. El gobierno de Evo respondió denunciando que en los hechos de violencia que tuvieron lugar en Pando, actuaron mercenarios de origen brasileño y peruano, diciendo que se han replegado a territorio del Brasil, buscando así manipular el nacionalismo a su favor. La crisis boliviana ha tenido efectos regionales, en momentos en que la presencia militar rusa en la región suma otro elemento de tensión. Venezuela, siguiendo la decisión de Bolivia, expulsó al embajador de los EEUU y Honduras -que recientemente se sumó al ALBA- congeló el placet pedido por Washington para su nuevo representante diplomático. Ecuador -que acaba de firmar un acuerdo de cooperación energética con Irán como Evo lo firmó la semana anterior en Teherán con alcances militares- también ha criticado a EEUU por la crisis boliviana, como también lo ha hecho Paraguay, mientras que Raúl Castro desde Cuba ha respaldado al gobierno boliviano, pero con mucho más mesura que Chávez. La reunión de los presidentes de Unasur en Santiago de Chile fue una reacción importante frente a la crisis, pero mostrando limitada capacidad de acción frente al problema concreto. Se evitó mencionar a EEUU como reclamaba Chávez, pero no se tendió un puente con los prefectos autonomistas, sin cuyo acuerdo no se resolverá la crisis. Mientras tanto se realizan en Venezuela los ejercicios aéreos sobre el Caribe entre la Fuerza Aérea venezolana y dos bombarderos rusos de largo alcance con capacidad para llevar misiles nucleares, en respuesta a la política de EEUU de instalar el escudo antimisiles en Europa Central y apoyar el ingreso de Georgia y Ucrania a la OTAN, confirmándose los ejercicios navales ruso-venezolanos para la primera quincena de noviembre. Cabe recordar que Nicaragua ha sido el primer país del mundo en reconocer la independencia de Abjasia y Osetia del Sur. Por su parte, Bolivia anunció que si EEUU le retira los helicópteros suministrados en el marco del programa antidroga, los obtendría de Rusia. La combinación de la regionalización de la crisis boliviana y la presencia militar rusa en la región, crean para Washington una crisis sin precedentes en América Latina desde la caída del muro, la que también pone a prueba la efectividad del liderazgo brasileño en América del Sur.
Mientras tanto, Evo Morales está perdiendo el monopolio del indigenismo dentro de Bolivia. El quinto Departamento en manos de la oposición es Chuquisaca, cuya prefecta, Sabina Cuellar, es una indígena que sólo sabe leer y escribir y tiene una firme oposición a Evo, coincidiendo con los autonomistas. Mientras el Presidente pertenece a la etnia aymará, Cuellar es de la quichua, enfrentada desde antes de la llegada de los españoles. Evo Morales ha dado a las etnias indígenas categoría constitucional de naciones y las tercera es la guaraní, de menor importancia, pero predominante en las regiones fronterizas con Paraguay. Si el conflicto se profundiza, el enfrentamiento entre etnias indígenas puede ser un factor desfavorable para Evo Morales. La inacción de las fuerzas armadas ha llevado a los partidarios del presidente a organizar milicias, a través de las células más combativas del MAS, el movimiento político que lo llevó al poder.
Pero el nacionalismo ha reaparecido, como en otros momentos de la historia del país, como un factor gravitante y desde esta perspectiva Chávez parece estar cometiendo el mismo error que el Che Guevara cuatro décadas atrás, cuando fue percibido por los mismos indígenas bolivianos como el líder de una incursión extranjera en el país.
HAY DISTINTAS POSTURAS DE CARA AL DIALOGO
GRIETA AUTONOMISTA
Mientras los movimientos sociales amenazan con retomar edificios públicos por la fuerza si no prospera la negociación en Cochabamba, la prefecta de Chuquisaca se excluye del diálogo.
Página 12 de Argentina www.pagina12.com.ar)
Las organizaciones campesinas de Santa Cruz calculaban marchar hacia esta ciudad para exigir al Comité Pro Santa Cruz y a la prefectura la devolución de 26 edificios del Estado. Los campesinos afirmaron que esperarán los resultados de la reunión de hoy para arrancar la caminata o para esfumarla. Pero los vecinos de Plan 3000, el barrio-fortaleza del gobierno nacional, dieron un ultimátum de 48 horas al prefecto Rubén Costas “para que renuncie. Si no, el viernes estaríamos marchando a la ciudad”, sostuvo Jaime Choque, presidente del Comité Cívico Popular barrial. El prefecto de Tarija, Mario Cossío, dijo que ayer no pudieron viajar a Cochabamba para empezar el diálogo con el presidente Evo Morales porque no consiguieron vuelos. Aún faltaba discutir algunos detalles a los opositores, que avanzan en la negociación pese a diferencias internas, sobre todo en cuanto a la detención del prefecto de Pando, socio de la Media Luna, acusado de genocidio. El ejército pudo retomar ayer el control de El Porvenir y Filadelfia, municipios donde transcurrió la masacre de al menos 18 personas. Aún hay cien campesinos desaparecidos, pero los militares no encuentran cuerpos.
El prefecto de Beni, Ernesto Suárez, aceptó de inmediato la invitación de Morales. Pero faltó compañía: “Yo no quisiera dar una señal de que no queremos ir, veremos cómo llegar a Cochabamba. No es fácil, porque quisiéramos que lleguen todos y particularmente queremos que estén presentes los testigos”. La mediación de instituciones es una preocupación constante del Consejo Nacional Democrático (Conalde) para sentarse a charlar con Morales. Hoy, en el hotel Portales de Cochabamba, habrá representantes de la Iglesia Católica, de la Unión de Naciones de Sudamérica (Unasur), de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Quien ya dijo que no estará es la prefecta de Chuquisaca, la quechua Savina Cuéllar, porque este primer documento no incluye el reclamo de Sucre como “capital plena” de Bolivia. La ciudad que la eligió como prefecta fue capital plena hasta 1899, cuando una guerra civil llevó los poderes Ejecutivo y Legislativo a La Paz. En Sucre sólo permaneció el Judicial. Este reclamo provocó el exilio de la Asamblea Constituyente, en 2007, porque el nuevo texto tampoco recogía la exigencia sucrense.
El martes a la noche, Cossío y el prefecto cruceño, Rubén Costas, firmaron el documento consensuado con el gobierno ante el cardenal Julio Terrazas. Morales dijo que este religioso es inválido como mediador, ya que el 4 de mayo votó en el referéndum autonómico de Santa Cruz, considerado ilegal por el gobierno. Para el aymara, fue un “show mediático” para mostrarlo como renuente al pacto. Y reiteró su desconfianza hacia Terrazas, quien juzgó a las firmas del Conalde: “Una victoria del pueblo que busca paz y verdad con cambios en el corazón”.
El postulado del cardenal no concordaba con las declaraciones del Comité Cívico de Riberalta, en Beni, que había dado 24 horas para dejar esa ciudad a las organizaciones no gubernamentales que trabajan con indígenas y campesinos de la región: el Centro de Investigación y Promoción del Campesinado (Cipca) Norte, el Instituto para el Hombre, Agricultura y Ecología (Iphae) y el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis) Riberalta. Los cívicos las acusan de haber armado a campesinos que estuvieron en la masacre.
“Es mentira. En nuestra convocatoria para la asamblea pedimos a los compañeros que trajeran lo de siempre: plato, cuchara y un caneco (taza enlosada). Era lo único que teníamos cuando nos agarraron”, contó a PáginaI12 Cristian Domínguez, secretario de Recursos Naturales de la Federación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (FSUTC-B), sobreviviente de la masacre.
Según Domínguez, mil campesinas y campesinos iban a Cobija para coordinar acciones ante el crecimiento de la violencia en Pando ejercida por grupos afiliados al prefecto. “Hasta la Policía Nacional contribuyó en la matanza. Nos tuvieron detenidos una hora en la ruta mientras los hombres de Leopoldo nos hacían un cerco. Nos disparaban de todos lados. Nos seguían por el monte hasta otros pueblos. A los heridos los cargaban en ambulancias donde los torturaban”, recordó. Su testimonio coincide con el de varios campesinos que fueron al hospital de Cobija para atenderse y se escaparon con heridas nuevas.
Domínguez, indígena chácobo, expresó su desconfianza en la Justicia. “Los otros acusados, Miguel Becerra (ex alcalde de Cobija) y Abraham Cuéllar (senador de Unidad Nacional), no tienen nada que ver. No deciden por nosotros. Las dirigencias de las organizaciones campesinas de Pando programamos esa asamblea, por eso creemos que la Justicia ya nos va a tirar orden de captura”, evaluó.
Con la firma del acuerdo, los cívicos levantaron los bloqueos de Tarija. Quedan los cortes de ruta campesino en Tiquipaya, a 45 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz, en San Julián, Cuatro Cañadas y Yapacaní, que afectan el tránsito hacia Cochabamba. “Nosotros ahorita estamos esperando ver el convenio. Y tenemos que reunirnos para tomar una decisión conjunta con los compañeros de Tiquipaya”, dijo Félix Martínez, presidente cívico de San Julián. Aclaró que, si marchan a la ciudad, no van a ser violentos como los autonomistas. En Plan 3000, un barrio empobrecido de 250 mil habitantes definió recuperar los edificios públicos.
LULA JUSTIFICA LA EXPULSIÓN DEL EMBAJADOR ESTADOUNIDENSE EN BOLIVIA SI HUBO INJERENCIA EN LOS ASUNTOS DEL PAÍS
El Economista de España (www.ecodiario.eleconomista.es)
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, dijo ayer que ayudará a Bolivia a desmantelar los grupos armados en la región de Pando, en la frontera brasileña, y que si el embajador de Estados Unidos en La Paz, Philip Goldberg, se inmiscuyó en asuntos internos, su par, Evo Morales, hizo bien en expulsarlo.
LA PAZ, 18 (EUROPA PRESS)
El mandatario brasileño manifestó en una entrevista que consideraba que había habido un incidente diplomático. "Si es verdad que el embajador de Estados Unidos se reunía con la oposición, él (Morales) está en lo correcto en expulsarlo (...), tampoco es de hoy la famosa interferencia de las embajadas estadounidenses en varios momentos de la historia del continente americano", asestó Lula según informaron medios bolivianos.
El presidente brasileño recordó que una vez tuvo que pedirle a su canciller, Celso Amorim, que le comunicara a una embajadora de Estados Unidos en Brasilia el malestar del Gobierno brasileño con las críticas que hizo una diplomática norteamericana a raíz de unas declaraciones dadas por él.
"La embajadora estadounidense, en un periódico brasileño, respondió a una crítica que yo le había hecho Bush. Le pedí a Amorim que la llamara para decirle que era inadmisible que ella diera opiniones sobre una entrevista del presidente de la República", dijo.
Lula agregó que, intentó intervenir en algunas ocasiones en defensa de Morales en sus conversaciones con Bush antes de que tuviese lugar los últimos incidentes en el país vecino. "Conversé varias veces con Bush, incluso sobre la petición de Morales para que Estados Unidos apruebe rápidamente los aranceles especiales para determinados productos bolivianos, pero como ocurrió esa expulsión, creo que las cosas pueden quedar paralizadas", afirmó.
LULA ORDENÓ REFORZAR LA FRONTERA CON BOLIVIA
Busca evitar el tráfico ilegal de armas
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, solicitó ayer que se reforzara la frontera de Brasil con Bolivia para evitar el posible tráfico de personas y armas hacia el conflictivo país andino.
Lula informó que ordenó a sus ministros de Justicia, Tarso Genro, y de Defensa, Nelson Jobim, que contactaran a sus pares bolivianos para desplegar acciones conjuntas en la frontera, con el fin de evitar el contrabando que podría alimentar la violenta crisis que vivió Bolivia, agitada por opositores de la región oriental.
"Brasil necesita hacer un esfuerzo muy grande porque tenemos más de 3000 kilómetros de frontera con Bolivia y queremos que esté en paz, porque en paz [Bolivia] va a crecer; en guerra, no , declaró Lula en una entrevista con el canal estatal TV Brasil.
Lula también reveló que había tomado la decisión luego de que su par boliviano, Evo Morales, denunció la presencia de pistoleros brasileños y peruanos contratados por la oposición para atacar a los oficialistas en el departamento de Pando, donde hace una semana murieron por lo menos 15 campesinos oficialistas en una emboscada.
Además, Lula indicó que Morales le solicitó apoyo logístico para desestructurar a grupos armados de Pando. "Evo me preguntó si Brasil podría venderles algunos camiones a ellos, para transportar a las fuerzas armadas", contó el mandatario brasileño.
Además, Lula expresó su apoyo a la decisión de Morales de expulsar al embajador norteamericano, Philip Goldberg, siempre y cuando haya tenido algún tipo de injerencia en la reciente crisis. "Si es verdad que el embajador de Estados Unidos se reunía con la oposición de Evo Morales, Evo hizo lo correcto en echarlo. El papel del embajador no es hacer política dentro del país", afirmó Lula. "Es famosa la injerencia de las embajadas estadounidenses en varios momentos de la historia del continente americano."
TREGUA GANADERA EN UNA BOLIVIA POLARIZADA
ABC de España (www.abc.es)
El comienzo mañana de Expocruz, la feria ganadera que mueve más de 18 millones de euros en el departamento más rico de Bolivia, habría sido determinante para la firma ayer de un acuerdo entre el Gobierno de La Paz y los prefectos de las regiones opositoras al presidente Evo Morales. Así, hoy mismo se implantarán en Cochabamba tres mesas de trabajo en busca de la paz en el país, después de casi un mes de conflictos y al menos 17 muertos en el departamento de Pando.
El vicepresidente Álvaro García Linera anunció que en el diálogo con los gobernadores de Santa Cruz, Beni, Tarija y Chuquisaca se abordarán la devolución a las regiones del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), el papel de las autonomías en la futura Constitución y el mecanismo para la elección de las autoridades vacantes. El proceso contará con mediadores internacionales, para lo cual han sido invitadas la Iglesia Católica, Unasur, UE, OEA y ONU.
«Vencedores y vencidos»
Pese a que estaba cantada desde el pasado viernes, cuando el Ejecutivo decretó el estado de sitio en Pando, la detención de su prefecto, Leopoldo Fernández, estuvo a punto de dinamitar el diálogo. La entidad ya dispone de un nuevo mandatario, Orlando Ceballos, designado ayer por el propio Morales. García Linera aclaró que la detención y proceso por genocidio del caudillo pandeño queda al margen de las reivindicaciones regionales, «y no permitiremos que sea parte de la negociación», dijo.
Como primera medida, las partes acordaron el levantamiento de todos los bloqueos y la devolución de las instituciones públicas que fueron asaltadas. El Gobierno, por su parte, suspenderá por un mes la convocatoria del referéndum sobre el texto constitucional. En todo caso, la situación es muy delicada y la paz se antoja fugaz y débil.
Lejos de fomentar la reconciliación, el Ejecutivo -en boca de su ministro de Gobierno, Alfredo Rada- habla de vencedores y vencidos. Supuestos seguidores encapuchados del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) reiteran sus amenazas a la «oligarquía» paceña. Y los acosados medios de comunicación -en especial, las televisiones, que son juez y parte- reflejan un estado de cosas que se asemeja cada día más a la polarización irresoluble que vive la Venezuela de Hugo Chávez. Con el agravante de que a las disputas económicas, políticas y sociales se suman aquí acusadas diferencias territoriales y raciales.
BAJA LA TENSIÓN ENTRE EL GOBIERNO DE LA PAZ Y LAS REGIONES REBELDES
BOLIVIA CONJURA EL PELIGRO DE GUERRA CIVIL
El Periódico de España (www.elperiodico.com)
Al borde del abismo, después de 22 días de bloqueos, toma de instituciones y un número de muertos aún sin determinar, el Gobierno y la oposición bolivianas resolvieron ayer hacer mutuas concesiones para, de esta manera, tender un delgado puente que les permita llegar al gran acuerdo nacional. El presidente, Evo Morales, convocó a los representantes de las regiones autonomistas para negociar de inmediato. "Quiero verlos esta tarde (a los prefectos) para iniciar diálogo". Más allá de la prisa de Morales, el comienzo de las negociaciones está convocado para hoy en Cochabamba.
El pacto llegó en la madrugada de ayer cuando todo parecía derrumbarse. La mañana del martes fue detenido el gobernador de la amazónica Pando, Leopoldo Fernández, a quien el Gobierno responsabiliza de estar detrás de una emboscada contra campesinos en la que 15 de ellos perdieron la vida y otros 106 están desaparecidos. "El diálogo agoniza", dijo el prefecto de Tarija, Mario Cossio. Santa Cruz, la región más beligerante, también reclamó la libertad de Fernández. Pero su solidaridad solo fue retórica y todos los protagonistas de la crisis, con excepción de el de Pando, terminaron firmando el documento de consenso.PRESIÓN DE UNASUR
La tregua no habría sido alcanzada sin la presión ejercida por la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur) que, bajo el liderazgo brasileño, terminó por evitar lo peor. La Unasur y la UE participarán activamente como mediadores entre partes que, hasta hace pocas horas, solo aceptaban la rendición incondicional del adversario.
Pero además de la presión externa otro factor ha obligado al Gobierno y los autonomistas a actuar con la dosis de pragmatismo que les estaba faltando: la sociedad está cansada de una disputa que ya tiene graves costos económicos.
El acuerdo, que fue ayer celebrado por los empresarios, la Iglesia Católica y la comunidad diplomática, incluye demandas tanto de la oposición conservadora como las hechas por el Movimiento al Socialismo (MAS, en el poder). La Paz restituirá los excedentes en concepto de regalías petroleras reclamados por las prefecturas. Las regiones, por su parte, aceptaron que con ese dinero se siga pagando un bono a los jubilados. La novedad es que ahora serán las regiones la que lo financiarán de hecho.
El MAS admitió que se profundice el régimen autonómico y está dispuesto a discutir aspectos de la Constitución que la oposición califica de indigenista y totalitaria. La nueva Carta Magna debía ser sometida a una consulta popular el 7 de diciembre, pero ha sido aplazada.
DESBLOQUEOLos prefectos se comprometieron a desbloquear las carreteras cortadas y devolver las oficinas estatales que habían sido tomadas y saqueadas. En adelante, las partes discutirán si algunos de esos organismos pasarán a las regiones. Marco Aurelio García, el principal asesor en cuestiones internacionales del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, desempeñó un sigiloso pero efectivo papel en este proceso de acercamiento. García suele decir que el Gobierno y las regiones bolivianas se comportan como si estuvieran en el umbral de una revolución cuando, en realidad, el país solo vive tiempos de reformas. Aunque cueste creerlo.
EXPECTATIVA EN EL PALACIO QUEMADO DESPUES DEL PREACUERDO FIRMADO POR LOS PREFECTOS DE LA OPOSICION
ARRANCA LA NEGOCIACIÓN CON LOS PREFECTOS
Los principales puntos a discutir son la redistribución de la renta hidrocarburífera, la compatibilización de la nueva Constitución con los estatutos autonómicos, llenar las vacantes en el Congreso y la depuración del padrón electoral.
Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)
Al enterarse de la apertura al diálogo por parte de los prefectos opositores, con palabras secas y gesto duro, el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, festejó sin euforia: “Ha fracasado el golpe cívico-prefectural”. En el transcurso del día de ayer, ésa fue la sensación que imperó en el Palacio Quemado. Una fría satisfacción que ya dejaba paso a las largas y tensas negociaciones que a partir de hoy por la mañana deberán encarar en la ciudad de Cochabamba los enviados del gobierno boliviano y los representantes de las prefecturas díscolas agrupadas en el Consejo Nacional Democrático (Conalde).
Tras cuatro arduas jornadas de negociaciones en las que todo indicaba que la opción por el diálogo volvía a fracasar, los prefectos opositores aceptaron suscribir el martes por la noche el “Gran Acuerdo Nacional” acordado por el vicepresidente Alvaro García Linera y el prefecto de Tarija, Mario Cossío. Allí se estipulan acuerdos mínimos sobre los que discutir el destino del excedente del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) con el que el gobierno financia la Renta Dignidad para los ancianos, la compatibilización de la Nueva Constitución Política del Estado (NCPE) con los estatutos autonómicos y un pacto institucional que defina las designaciones congresales de los cargos vacantes y el padrón electoral. En términos políticos, el gobierno cedió, garantizando siempre el pago de la Renta Dignidad, en lo que respecta al IDH y aceptó suspender por un mes el debate en el Congreso por la convocatoria a referéndum de la NCPE.
Por su parte, los cívicos aceptaron la restitución inmediata al Ejecutivo de las oficinas públicas e instalaciones petroleras invadidas, a la vez que garantizaron el desbloqueo de todas las rutas ocupadas. Y, si bien no figura formalmente en el texto del acuerdo, en los hechos los prefectos aceptaron soltarle la mano al detenido Leopoldo Fernández, otrora “cacique de Pando”.
En el día de ayer, varias fueron las hipótesis de por qué, finalmente, los prefectos aceptaron sentarse a una mesa de diálogo. Sin embargo, en todas hubo coincidencia en que la gota que rebasó el vaso fue la “masacre de Pando” en la que cerca de 30 campesinos fueron asesinados. “Cambian la estrategia porque necesitan sobrevivir”, interpretó Javier Macías, funcionario del Ministerio de Gobierno. “A diferencia de la prepotencia que ostentaron antes, esta vez sintieron los golpes del desgaste. Su propia violencia se está volviendo contra ellos mismos. Ya han dado muestras de que su opción no es por el diálogo. Lo que están haciendo ahora es un repliegue oportunista para recuperar fuerzas”, agregó el coordinador nacional de la representación presidencial para la Asamblea Constituyente, Juan Carlos Pinto.
Otro de los factores que se evaluaban era la incapacidad de los cívicos de controlar a sus propias bases en un marco de violencia que ellos mismos se encargaron de fogonear. Según fuentes consultadas por este diario, en el Palacio Quemado creen que, por tomar un caso, la Unión Juvenil Cruceñista está dispuesta a ir mucho más allá de lo que el presidente del Comité Pro Santa Cruz, Branko Marinkovic, o el mismo prefecto, Rubén Costas, pueden soportar en términos políticos y económicos. Un ejemplo de coyuntura sobre la cuestión económica es la inauguración del viernes próximo de Exposur, la emblemática feria que es fundamental para la burguesía cruceña. Para esa fecha, los cruceños precisan llegar relativamente airosos.
En una clara muestra de la apuesta que Morales suele hacer a su olfato político, a media mañana había declarado que convocaba para ayer a media tarde a todos los prefectos para iniciar el diálogo a puertas cerradas y a tiempo completo. Sin embargo, por problemas logísticos, los prefectos del Conalde fueron llegando paulatinamente a Cochabamaba en el transcurso de la noche. Así, divididos en tres comisiones, las arduas negociaciones comenzarán hoy a las 8 de la mañana de la Argentina.
El gran tema de debate girará en torno de la compatibilización de la NCPE y los estatutos autonómicos. De fondo, aquí la discusión es por el control de los recursos naturales (puntualmente los hidrocarburos) y la tierra. “En los temas fundamentales estamos más cerca de la ruptura que de acuerdos”, reconoció Pinto. Morales, en la misma línea que venía sosteniendo, se refirió ayer respecto de este dilema: “No estamos contra las autonomías, pero las que queremos son unas que sean legales y constitucionales para los pueblos, no para las oligarquías”.
Y, según pudo averiguar PáginaI12, a último momento se colaron en la agenda otros debates, un tanto más estructurales. Cossío le habría planteado a García Linera su disconformidad con la definición del “Estado Plurinacional” que la NCPE hace de Bolivia, bajo influencia de los movimientos sociales e indígenas. Sin embargo, tanto en este punto como en lo que respecta a la responsabilidad intelectual de Fernández en “la masacre de Pando”, que el Ejecutivo ha catalogado como genocidio, el gobierno seguiría intransigente.
EVO MORALES Y LA OPOSICIÓN NEGOCIAN PARA PONER FIN AL CONFLICTO BOLIVIANO
El País de España (www.elpais.com)
El acuerdo suscrito entre el Gobierno y los gobernadores rebeldes del Oriente de Bolivia ha abierto el camino a la pacificación tras semanas de violentos enfrentamientos que llevaron al país al borde de la guerra civil. El presidente, Evo Morales, que el lunes recibió un fuerte espaldarazo de Brasil y el resto de los países suramericanos a cambio de que apostara por la vía del diálogo con sus rivales, comenzó ayer mismo la ronda de negociaciones.
"Quiero verlos [a los gobernadores] esta tarde [por ayer] para iniciar el diálogo. No hablemos de 30 días, sino del tiempo que haga falta y a puerta cerrada", declaró el presidente en una rueda de prensa. Las conversaciones se llevarán a cabo en Cochabamba y, aparte del Gobierno y los gobernadores de Tarija y Santa Cruz (se espera que también acudan los de Beni y Chuquisaca), asistirán como mediadores las iglesias católica, metodista y evangélica, y observadores internaciones de Suramérica y Europa.
El acuerdo de diálogo estuvo a punto de fracasar el martes a raíz de la detención del gobernador de Pando, Leopoldo Fernández, acusado de genocidio por la muerte de 30 personas y la desaparición de un centenar en un enfrentamiento entre seguidores de Morales y rebeldes cerca de Cobija, la capital de Pando. Sin embargo, el resto de gobernadores decidieron seguir adelante con el diálogo no sin antes exigir un juicio justo para Fernández.
Zanjado este punto, el Gobierno puso sobre la mesa los puntos sobre los que está dispuesto a negociar : las autonomías, los ingresos por impuestos petroleros y la devolución a las autoridades estatales de las oficinas ocupadas por los opositores en varias regiones.
Puntos del acuerdo
Sobre las autonomías, el Gobierno garantiza su respeto a la autonomía de Pando, Beni, Tarija y Santa Cruz, regiones que han impulsado al margen del Gobierno central y del Congreso un proceso de autogobierno con la aprobación este año de sus respectivos estatutos de autonomía. El Ejecutivo también hace concesiones en cuanto a su nueva Constitución y acepta suspender al menos un mes la aprobación de la ley para convocar el referendo necesario para ratificarla. En cuanto a las rentas petroleras, el Gobierno reconoce el derecho de los departamentos a percibir el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Precisamente, el recorte de las rentas petroleras a las regiones para pagar una ayuda directa a los jubilados fue el detonante de la reciente crisis.
Por la parte autonomista, los opositores acceden a levantar las medidas de presión contra el Gobierno. Accedieron a "salir de las oficinas públicas e instalaciones petroleras ocupadas a raíz del conflicto" y a la suspensión de los cortes de carreteras que han mantenido paralizado a medio país.
Por otra parte, las Fuerzas Armadas de Bolivia pidieron ayer al Gobierno que exprese por vía diplomática su malestar a Venezuela por las declaraciones del presidente venezolano, Hugo Chávez, sobre una eventual intervención militar en caso de que Morales fuera derrocado.
LENTO PROCESO HACIA LA PAZ EN BOLIVIA
Noticias 123 de Chile (www.noticias.123.cl)
Mientras las negociaciones entre Gobierno y oposición siguen un curso incierto, las Fuerzas Armadas manifestaron su indignación por lo que catalogaron como declaraciones intervencionistas de Hugo Chávez. Anoche, sorpresivamente la oposición accedió a firmar un preacuerdo con el Gobierno, que establecía el inicio del diálogo para mañana jueves en Cochabamba. Sin embargo, el presidente, Evo Morales, se adelantó y llamó a los prefectos para esta tarde.
Al poco rato, grupos autónomos pro Gobierno amenazaban a los prefectos en un tono nada conciliador:
"Le damos plazo de 48 horas, que corre de las 00:00 horas de este miércoles, a la prefectura, al comité cívico y a la unión juvenil cruceñista para la inmediata devolución de las instituciones públicas, que son de los bolivianos y para los bolivianos".
Finalmente no hubo reunión y las conversaciones partirán mañana, tal como se había acordado inicialmente. Pero esa no fue la única descoordinación: el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Luis Trigo, pidió a la Cancillería un reclamo formal contra Hugo Chávez por declaraciones intervencionistas que consideran ofensivas hacia el Ejército.
"Me estarían dando luz verde para apoyar cualquier movimiento armado en Bolivia. No tendría yo ningún problema". Pero el canciller Choquehuanca dijo que no tener conocimiento de esa solicitud.
Bajo este ambiente se espera el inicio del diálogo en Cochabamba. El Gobierno boliviano anunció la presencia del embajador de Chile en Argentina, Luis Maira, como veedor de Unasur; José Miguel Insulza, por la OEA, y otros veedores como la Iglesia Católica.
ESPAÑA EXPRESA SU APOYO A MORALES
Diario Critico de España (www.diariocritico.com)
El Gobierno de España manifestó este jueves su "respaldo" al Ejecutivo boliviano de Evo Morales ante la crisis interna que atraviesa el país en las últimas semanas y rechazó "la utilización de la violencia con fines políticos". A través de un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, España salió en defensa del "gobierno constitucional de Bolivia" e hizo un llamamiento "para que las instituciones democráticas del país sean respetadas".
Asimismo, se congratuló "por el acuerdo alcanzado entre el Gobierno boliviano y los Prefectos de los Departamentos de la Media Luna, sobre las bases del diálogo que deberán iniciar ambas partes".
El Gobierno de Zapatero confió en que dicho diálogo "se lleve a cabo de una manera constructiva por ambas partes y pueda desembocar en un gran acuerdo nacional".
En este sentido, Exteriores se ofreció al Ejecutivo de Evo Morales "para colaborar, si el Gobierno y los Prefectos lo juzgan útil, en el buen resultado final del diálogo que está a punto de emprenderse en Cochabamba".
RECOMIENDAN ENVIAR MÁS PERSONAL DIPLOMÁTICO A BOLIVIA PARA AYUDAR A COMPATRIOTAS
Se necesita enviar mayor personal diplomático a diversas zonas de Bolivia donde no existan oficinas de la Cancilleria, con el fin de ayudar a los peruanos que lo requieran debido a la situación crítica que atraviesa dicha nación, afirmó el congresista y ex canciller Luis Gonzales Posada.
24 Horas Libres de Perú (www.24horaslibre.com)
“Hay que estar en alerta máxima a través de nuestras embajadas, y en las zonas donde no haya cónsules peruanos que se designe de inmediato personal diplomático que concurra a esas zonas a prestar atención a nuestros compatriotas.” En tal sentido, estimó que son cerca de 100 mil los peruanos que viven en ese país andino.
Gonzales Posada mencionó que no en todas las regiones de esa nación existe representación diplomática, por lo que recomendó a la Cancillería que envíe mayor personal, sobre todo en los lugares donde se ha registrado una ola de violencia.
El ex presidente del Congreso lamentó que Bolivia pase por una situación de convulsión, pero mencionó que se debe salvaguardar la integridad de los peruanos que radican en esa nación.
Recordó que algunos países como Estados Unidos envían aviones con el propósito de proteger a sus ciudadanos y retirarlos de suelo boliviano.
Por otro lado, mencionó que es necesario que el mandatario boliviano, Evo Morales, brindé detalles sobre la presunta participación de peruanos en los hechos de violencia en el departamento boliviano de Pando.
Gonzales Posada dijo que este tipo de afirmaciones han sido un “agravio” para el país, más aún cuando no se han presentado las pruebas que avalen estas acusaciones.
“Nosotros exigimos las explicaciones correspondientes, las excusas de parte del presidente de Bolivia porque fueron usadas tanto por el presidente como el ministro del Interior. No podemos quedarnos de brazos cruzados con ofensas de ese calibre.”
Agregó que no sería la primera vez que el mandatario boliviano se refiere al Perú de una manera irrespetuosa.
BOLIVIANO LLEGA A LA SERENA RECORRIENDO 2500 KM POR LA PAZ
La travesía terminará en Santiago con un mensaje de unidad para ambos paises.
La Tercera de Chile (www.tercera.cl)
Más de 3 mil kilómetros es la meta que pretende realizar caminando el deportista boliviano Raúl Carvallo de 57 años, quien partió el pasado 8 de julio desde La Paz, con el claro objetivo personal de llevar un mensaje de unidad entre ambos países.
Avanza entre 60 a 70 kilómetros con tan sólo una mochila de 14 kilos y las banderas de Chile y Bolivia junto con el apoyo de Carabineros que transporta su equipaje de tenencia a tenencia en el trazado de la ruta nacional.
Este miércoles el trotamundo llegó a la Intendencia regional de La Serena, lugar donde fue recibido por el Seremi de Gobierno Francisco Villalón, a quien comentó de su idea y de la unión bioceánica entre Bolivia y Chile. "Es un deseo de integración para unir los países de Sudamérica. He decidido hacer esta caminata con un mensaje de paz y hermandad que une La Paz y Santiago. Los chilenos y sus autoridades me han otorgado todo el apoyo , además de mi país", aseveró.
Carvallo habló además sobre el conflicto de su país, puntualizando que es lamentable, porque existen dos polos en conflicto. Agregó que la intervención de la Presidenta Michelle Bachelet ayudará a que exista la preciada calma que pregona con esta caminata.
La idea, según señaló el deportista boliviano, es poder conversar con la Presidenta Bachelet cuando llegue a Santiago en unos 20 días más, gracias al apoyo del Consulado Boliviano que sigue cada uno de sus pasos en nuestro país. La travesía se financia con un 50 % de recursos aportados por el gobierno de Bolivia y el resto por sus familiares que poseen un restaurant.
El Seremi de Gobierno Francisco Villalón destacó el esfuerzo del caminante, porque realiza un trabajo significativo al transmitir un mensaje de unidad, y puntualizando que ante su llegada a la zona el gobierno regional dispuso de alojamiento y alimentación, tal y como también ha sucedido en el norte grande.
Hasta este miércoles, Raúl Carvallo lleva un recorrido de dos meses y 10 jornadas de travesía, que continuarán hasta llegar a su meta, Santiago.
INSULZA RESPONDE A LA DERECHA
La Nación de Chile (www.lanacion.cl)
Bombardeado desde la derecha, por su supuesta inacción ante la crisis política en Bolivia, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, respondió a los cuestionamientos de la oposición a su rol en este conflicto, aseverando que es “completamente falso” que la entidad que dirige haya sido marginada de la búsqueda de una salida pacífica al impasse que afecta a la administración del Presidente Evo Morales.
“Creo que tiene que ver con desconocimiento sobre el proceder de la OEA. Yo asistí sólo como invitado a la cumbre Unasur, no había ningún integrante de otro organismo y no se habla de que están excluidos”, subrayó Insulza, que argumentó que además es evidente que Unasur, cuya presidencia pro témpore corresponde a Chile, tendrá injerencia en los asuntos que afecten al continente.
“La Unasur nació hace poco, por lo tanto, habrá que acostumbrarse a que temas sudamericanos que se traten en la OEA se traten en la Unasur”, dijo Insulza a Radio Duna.
En el PS la embestida contra su presidenciable fue calificada de “maquiavélica” por el timonel, Camilo Escalona, que aseveró que “los ataques de la derecha a Insulza tienen que ver más bien con un propósito de política interna”. “En este caso la OEA tuvo una débil capacidad de acción, por las profundas diferencias que hay en los estados que la constituyen. No olvidemos que EEUU es un Estado miembro ( ) La OEA no iba a hacer lo que era capaz de hacer la Unasur y eso la derecha lo sabe, por eso es que es muy maquiavélico su ataque a Insulza”, dijo.
Opinión
UNASUR: MEMORABLE CUMBRE
La Jornada de México (www.jornada.unam.mx)
La cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) sobre la grave situación en Bolivia ha sido un nuevo y rotundo grito de independencia y unidad de América Latina. Por primera vez un grupo significativo de sus presidentes condena y adopta decisiones prácticas contra una conjura golpista orquestada por el imperio del norte. Este hecho y cada idea en la Declaración de la Moneda, aunque no se mencione por su nombre, señalan con el dedo acusador a Estados Unidos: la simbólica alusión a Salvador Allende y el categórico compromiso con el respeto a la soberanía, la no injerencia en los asuntos internos, la integridad e inviolabilidad territorial, la democracia y los derechos humanos.
Eso es lo sustantivo de la cumbre, que de modo unánime dio su apoyo irrestricto al presidente Evo Morales, condenó a los grupos desestabilizadores y sus acciones vandálicas, la masacre de campesinos en Pando que “no debe” quedar impune, exigió poner fin a esas acciones y la devolución de las instalaciones gubernamentales ocupadas como condición al inicio de un diálogo “conducido por el legítimo gobierno de Bolivia” y advirtió que no aceptará el golpe “civil” atentatorio contra la integridad territorial de Bolivia. Es trascendente el nombramiento de comisiones para investigar la masacre, acompañar el diálogo de La Paz con la oposición y brindarle el apoyo logístico que requiera. Unasur, en suma, enfrentó airosamente su primer gran desafío y ello refleja la emergencia en nuestra América de un nuevo tipo de gobiernos celosos de la soberanía nacional y con sensibilidad social, obviamente impulsados por las decisivas luchas populares que han llevado a la cabeza de ellos a buena parte de los reunidos en Santiago de Chile.
La cumbre ha sido un resonante triunfo político de Evo Morales y un reconocimiento a su talla de estadista, así como al talento político con que él y los movimientos sociales bolivianos han conducido la difícil brega por una democracia de las mayorías; y una derrota política dentro y fuera de Bolivia de los prefectos separatistas y su titiritero. Constituye también una clara advertencia a éste y a las oligarquías de la región de que no podrán seguir actuando impunemente con el matonismo que acostumbraban en otros tiempos. Deja sentado un precedente importante para la defensa indeclinable de la democracia en América Latina, que aquellos sólo respetan cuando se reduce a sus aspectos formales y no toca sus intereses ni con el pétalo de una rosa. Por ello es valiosa frente a las acciones ferozmente desestabilizadoras en Venezuela, donde se ha llegado al intento de magnicidio, y a los sucesos semejantes evidenciados, con distintos grados de intensidad, en Paraguay, Argentina, Ecuador, Honduras y Nicaragua. En fin de cuentas, todos ellos convergentes a la contraofensiva que desde el ataque a la soberanía territorial de Ecuador intenta montar Estados Unidos para aplastar los gobiernos y fuerzas populares latinoamericanas que han puesto en solfa su hegemonía política y control tradicionales sobre nuestros recursos naturales.
Bolivia, Venezuela, Cuba y Ecuador son los objetivos principales a golpear pero debe considerarse que la Cuarta Flota y otros instrumentos de intervención militar como el Plan Colombia responden a designios imperiales yanquis de reconfiguración geopolítica mucho más amplios. No es casual la oposición al restablecimiento de esa fuerza de asalto en los círculos gobernantes de Brasil, potencia económica emergente de peso mundial poseedora de estratégicas reservas de agua, biodiversidad y energéticas, así como de Argentina, colosal productora de alimentos; ambos dueños de vías fluviales y geografía de enorme importancia económica y militar.
El espaldarazo a Evo en la reunión de Santiago cobra mayor importancia cuando es evidente que la batalla por Bolivia entra en su fase más crítica, pues Washington y su jauría mediática, con CNN y El País a la cabeza, persisten en su aliento a la subversión fascista. Bolivia necesita más solidaridad que nunca.
CUMBRE UNASUR: PALABRAS DE BUENA CRIANZA
"La reunión de UNASUR "no se avanzó demasiado salvo en lo relativo a palabras de buena crianza respecto de la democracia, el valor de los gobernantes legítimamente elegidos, el respeto a los derechos humanos, etc. Todas ellas loables y aplaudibles, pero que sin embargo en nada concreto ayudan a frenar la crisis que vive Bolivia".
Diario Exterior de España (www.eldiarioexterior.com)
Por más de cinco horas estuvieron reunidos en el Palacio de La Moneda, en Santiago de Chile, los presidentes sudamericanos más el canciller de Perú, quienes fueron convocados a una reunión extraordinaria por el presidenta en ejercicio, Michelle Bachelet. Estrictamente es una forma de decir, pues el verdadero convocante fue Hugo Chávez quien adelantándose a la mandataria chilena lo propuso el viernes pasado.
Tras conocer la declaración emitida por los presidentes, quedan muchas dudas y ninguna respuesta, pues más allá del hermetismo de la reunión y la falta de comunicación con la prensa, es evidente que no se avanzó demasiado salvo en lo relativo a palabras de buena crianza respecto de la democracia, el valor de los gobernantes legítimamente elegidos, el respeto a los derechos humanos, etc. Todas ellas loables y aplaudibles, pero que sin embargo en nada concreto ayudan a frenar la crisis que vive Bolivia.
Llamados a constituir una mesa de diálogo entre la oposición y el gobierno boliviano, con la presencia de personal de UNASUR y colaboradores de la OEA, en nada resuelven el conflicto, ¿por qué? Pues tal como señaló el columnista de La Tercera, José Rodríguez Elizondo, la reunión no estaba focalizada en la solidaridad respecto de los problemas internos de Bolivia, o ¿acaso alguno de los jefes (y jefas) de Estado apoyarían a la oposición al MAS?, sino que el foco de atención estuvo en su problema externo, es decir: Hugo Chávez, quien en víspera de las elecciones regionales venezolanas buscar utilizar cualquier instancia para revertir su baja de popularidad en Venezuela.
Queda la duda de cuál fue el papel de Brasil en esta reunión ¿jugó como contrapeso a Venezuela?
Por otro lado, ¿dónde esta la OEA?, que como acertadamente señaló el canciller peruano, es el organismo llamado a ser el foco por tener la institucionalidad, los instrumentos legales (mandato de carta democrática) y la experiencia necesaria.
La constitución de una comisión, que quizás fue idea de la gobernante chilena, esperemos que rinda algún fruto, pero lo claro es que Bolivia no tiene posibilidades de resolver su problema de manera soberana e independiente. Chávez es un factor fundamental y Morales no hará nada que "su padre" no le indique. Una especie de reedición de lado oscuro de la fuerza.
Estados Unidos seguramente siguió con atención la reunión en La Moneda, claro que no debiera ser mucha ya que éste no es un tema que le quite el sueño a la nación del norte, que en medio del conflicto en Georgia y medio oriente, América Latina suena como un murmullo dentro de las preocupaciones de su política exterior. No obstante, debiera ser capaz de dar señales claras frente a los insultos del mandatario venezolano y no permitir que gratuitamente el dictador caribeño se haga de las suyas en la región. No hay que olvidar que Estados Unidos ha diversificado su matriz energética, y su dependencia del petróleo venezolano puede ser reemplazada, quizás en parte por la propia Colombia, en tanto que para Venezuela no es fácil reemplazar el mercado norteamericano y no tiene capacidad de almacenar el petróleo no vendido. ¿Rusia vendrá a salvar a Chávez como en el pasado lo hizo con Castro y el azúcar cubana?
Chávez hasta el término de la conferencia, aun no se robaba la atención de las cámaras, salvo por su desafortunado tributo a Allende, que los presidentes secundaron en la declaración.
En el entretanto, si bien se llama a la unidad de Bolivia, nada se dice del atropello a los derechos democráticos de la oposición. Lo más difícil está por venir, ¿civiles contra civiles?, ¿militares contra civiles?, o ¿militares contra militares?, es el fantasma de la fragilidad democrática latinoamericana.
CÓNSUL DE BOLIVIA:"TESTIGOS CONFIRMARON PRESENCIA DE SICARIOS PERUANOS"
Radio Uno de Tacna, Peru (www.radiouno.com.pe)
El Cónsul de Bolivia en Tacna, Sandra Choque Ramírez, confirmó las versiones que hablan de la presencia de sicarios peruanos en los recientes conflictos ocurridos en el país altiplánico.
"Hay personas que estuvieron cerca de los hechos y que han confirmado la presencia de sicarios peruanos y brasileros, los mismos que huyeron después de cometer los crímenes", comentó Choque Ramírez.
Sin embargo a pesar de estas versiones, el diplomático boliviano indicó que se están realizando las investigaciones para determinar la veracidad de las versiones vertidas por los testigos.
El Cónsul Boliviano, recalcó que de ser realidad la presencia de sicarios peruanos en la zona de Pando, este hecho no debería afectar bajo ningún concepto las relaciones bilaterales entre Perú y Bolivia, pues se trata de un hecho aislado en el que la nación y el gobierno peruano no se ven envueltos.
Por el contrario, el representante de Bolivia en Tacna, agradeció las muestras de apoyo dadas por el Perú y en especial por la región tacneña.
"Han habido muchas muestras de afecto por parte de todos los peruanos, y se que aquí en Tacna harán mañana una marcha los etnocaceristas y es algo que en verdad apreciamos mucho como bolivianos", finalizó Sandro Choque
Opinión
DESENFRENO REACCIONARIO: LA MASACRE PARAMILITAR EN BOLIVIA
Nacla de Estados Unidos (www.nacla.org/node)
La expulsión del embajador de EE.UU., Phillip Goldberg, el 10 de septiembre, por el presidente boliviano Evo Morales por presunta conspiración para realizar un golpe de Estado provocó la última crisis diplomática en las Américas. Pero el efecto diplomático ha eclipsado la dinámica interna que condujo a la masacre de unos 30 campesinos y a posiblemente otros 40 desaparecidos en El Porvenir, Pando, cerca de la frontera noreste de Bolivia con Brasil. La matanza coincidió con el 35 aniversario del violento derrocamiento del presidente socialista Salvador Allende en Chile.
La masacre en El Provenir fue la peor en Bolivia desde que el gobierno del presidente derechista Gonzalo Sánchez de Lozada, cuando se realizó la matanza de más de 70 manifestantes desarmados en octubre de 2003. Esta vez, sin embargo, la violencia no fue orquestada por el gobierno central, sino por funcionarios regionales: prefectos departamentales asociados con comités cívicos.
Organizada administrativamente de manera similar a Francia, Bolivia está dividida en nueve departamentos, cada cual dirigido por un prefecto, mientras los comités cívicos están compuestos por un puñado de elites no elegidas, locales, comerciales y terratenientes que presiden sobre una de las distribuciones de tierras y riquezas más desiguales del mundo. Estas autoridades del sector público y privado, por su parte, están aliadas con pandillas juveniles paramilitares cripto-fascistas armadas de bates de béisbol, garrotes, cadenas, pistolas, y en el caso de la masacre de El Porvenir, de vehículos oficiales. Estos grupos han hecho que las tierras bajas del este de Bolivia sean ingobernables para el gobierno de Morales.
Podría ser útil que los lectores estadounidenses consideraran que las tierras bajas orientales de Bolivia se parecen en algo a Dixie [el sur de EE.UU.] En los años cincuenta y sesenta, trabajando con gobernadores y alcaldes de Estados y localidades, grupos paramilitares supremacistas blancos aterrorizaron a los afro-estadounidenses. La campaña de terror tenía el propósito de preservar un status quo que beneficiaba a una ínfima clase de acaudalados terratenientes blancos, contra los cuales el gobierno federal – bajo Eisenhower y Kennedy – vacilaba antes de actuar.
Imaginad, sin embargo, que los afro-estadounidenses hubieran constituido una abrumadora mayoría de la población de EE.UU., que Kennedy hubiera sido negro, y que hubiera llegado al poder como resultado de insurrecciones seriales de afro-estadounidenses. Imaginad que, como reacción, los supremacistas blancos no sólo hubieran masacrado a los negros, sino bloqueado carreteras, hecho volar oleoductos, y quemado y saqueado oficinas e instalaciones del gobierno federal.
Los límites de la analogía dentro del sur de Jim Crow son importantes, pero otra analogía – de un siglo antes, los años cincuenta y sesenta del Siglo XIX – los trasciende. El movimiento secesionista del sur trataba de preservar la república de la esclavitud y extenderla a por el oeste hacia el Pacífico. El movimiento movilizó una masa de seguidores y articuló un desafío armado contra el gobierno federal. Analogías semejantes ayudan a representar la virulencia de lo que un comentaristas ha calificado de “revuelta de los ricos,” así como el alcance del desafío planteado por una minoría blanca acaudalada a un gobierno respaldado por una mayoría de trabajadores y campesinos de ascendencia india, un gobierno sin precedente histórico.
El apoyo masivo para el gobierno central fue ratificado recién el 10 de agosto en el referendo revocatorio en el que Morales aumentó su parte general en los votos a un 67% - de un 54% cuando fue elegido presidente a fines de 2005. Morales mejoró su posición en sus baluartes – las ciudades y el campo de las tierras altas y valles del oeste, así como en las regiones cocaleras en los Yungas y el Chapare. Pero aún más importante es que hizo progresos en el corazón de las áreas opositoras en Beni, Pando, y Tarija, donde ganó un 20% adicional en comparación con 2005. En Pando, casi la mitad de la población votó a favor de Morales. Ningún presidente boliviano ha tenido alguna vez un apoyo tan amplio en toda la nación.
Inmediatamente después de la victoria, Morales habló de diálogo y reconciliación con la oposición. Pero los prefectos opositores, dirigidos por Rubén Costas de Santa Cruz, y empoderados por sus sustanciales mejoras en el mismo voto revocatorio, anunciaron su intención de implementar los “estatutos” aprobados en “referendos de autonomía” en mayo y junio de 2008. Los “referendos de autonomía” fueron ejercicios de facto de votación, carecientes de toda validez legal en Bolivia, no fueron reconocidos por ningún gobierno extranjero, y no fueron supervisados por observadores internacionales. Pero los prefectos opositores pretendieron tener un mandato para instalar su propia policía, servicios de cobro de impuestos, y legislatura departamental. La implementación de este mandato sólo podía tener lugar mediante el uso de la fuerza.
Luego vino el 11 de septiembre. Escuadrones de la muerte armados de pistolas ametralladoras masacraron a partidarios desarmados de Morales que iban en camino a una manifestación de masas en El Porvenir. La reunión había sido convocada para discutir posibles reacciones a ataques cada vez más violentos contra partidarios del gobierno. El gobierno central fue lento e indeciso en su reacción cuando finalmente terminó por actuar. No pudo salvaguardar la propiedad y las vidas de sus partidarios o defender sus propias oficinas y funcionarios, ni siquiera pudo suministrar ayuda humanitaria a los supervivientes, muchos de los cuales, temiendo por sus vidas, se ocultaron en las montañas. En una entrevista televisada, la delegada presidencial en Pando, Nancy Texeira, preguntó con una voz titubeante sofocada por el dolor y la tristeza: “¿Por qué no hace algo el gobierno en La Paz? Hemos sido abandonados.”
Durante los últimos años, Morales ha desarrollado buenas relaciones con la policía y las fuerzas armadas, pero generalmente no se ha mostrado dispuesto o capaz de utilizarlas desde que comenzó la crisis en agosto. Destacamentos armados de la oposición han apabullado a la policía y a los militares en las tierras bajas, hasta ahora impunemente. Por lo tanto, las fuerzas de seguridad bolivianas han sido humilladas según su código institucional común. Y sin embargo, mientras la oposición incrementa la apuesta de violencia e ilegalidad, el gobierno central se muestra cada vez más renuente a monopolizar el uso legítimo de la fuerza, y la oposición se hace cada vez más atrevida en la persecución de partidarios de Morales.
Ésta, por lo menos, ha sido la dinámica en Pando. Prefectos opositores en Beni, Santa Cruz, y Tarija han desistido en cierta medida en sus ataques, y han aceptado aparentemente el “diálogo” con el gobierno de Morales, pero el daño ha sido hecho. Morales declaró la ley marcial en Pando y ordenó el arresto del prefecto departamental, Leopoldo Fernández, el 12 de septiembre. Muchos partidarios de Morales se preguntarán por qué mantiene el diálogo con los prefectos opositores en Beni, Santa Cruz, y Tarija, cuando estos – y sus partidarios – podrían ser legítimamente juzgados por sus crímenes.
La reunión de emergencia de la Unión Suramericana (UNASUR) convocada por la presidenta Michelle Bachelet en Chile el 15 de septiembre es una señal de tiempos cambiantes en el hemisferio occidental. Dictadores militares como Augusto Pinochet de Chile, Hugo Banzer de Bolivia, y sus vástagos bastardos como Leopoldo Fernández – quien comenzó a fines de los años setenta como paramilitar bajo sucesivas dictaduras – pertenecen al pasado.
La nueva diplomacia regional ejercida a través de la Organización de Estados Americanos (OEA), el Grupo de Río, y ahora UNASUR ha enfrentado exitosamente crisis diplomáticas provocadas por el gobierno de EE.UU. y sus aliados locales de la derecha. Aunque la expulsión por Hugo Chávez del embajador de EE.UU. en Venezuela ocupó los titulares en EE.UU., la crisis boliviana se vio de modo muy diferente en los medios regionales. Bolivia vende la mayor parte de su gas natural a Brasil y Argentina, y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y la presidenta argentina Cristina Fernández denunciaron el movimiento separatista en términos extraordinariamente enérgicos. El resultado de la reunión de UNASUR demostró además que Morales cuenta con un robusto apoyo de gobiernos vecinos y de las principales organizaciones inter-estatales a las que pertenecen.
En vista del repudio regional a movimientos secesionistas en Bolivia y del abrumador apoyo a Morales en el interior, las fuerzas opositoras tienen pocas probabilidades de derrocar a Morales y de instalar un gobierno derechista. Además, tienen que enfrentar la formidable y creciente resistencia dentro de sus propios departamentos, no sólo en el campo sino también en las ciudades: la parte norteña de Beni es controlada por grupos indígenas que respaldan al gobierno de Morales, por ejemplo, mientras partidarios campesinos de Morales libraron batallas campales contra la oposición en Tarija (la capital del departamento del mismo nombre)
El desenfreno reaccionario en las tierras bajas es el resultado de una minoría desesperada, acorralada, que ha recibido considerable espacio de maniobra por parte de un gobierno central débil, vacilante, que sin embargo goza de masivo apoyo popular. Ya que no puede recuperar el gobierno central y está aislada internacionalmente, la última arma de la oposición es arrebatar la ilegitimidad al gobierno de Morales, haciendo que el país no sea gobernable.
La oposición ha demostrado la incapacidad del gobierno central de imponer el Estado de derecho contra el terror público-privado contra sus partidarios – un triunfo espectacular para cualquier movimiento derechista. Desde el referendo revocatorio de agosto, el marco de ilegalidad trazado por la oposición ha sido inconfundible. Aunque nadie anticipó la escala de la masacre de El Porvenir era casi seguro que alguna tendría lugar.
¿Y si el gobierno boliviano hubiera intentado de impedir esta tragedia enviando al ejército y a la policía anti-disturbios antes de que alguno de sus partidarios fuera muerto, en lugar de reaccionar débilmente y con vacilación después de los hechos? ¿Se pondrá el gobierno a la altura de las circunstancias en el futuro, o habrá aún más masacres?
Si el gobierno de Morales no logra garantizar las vidas y la propiedad de sus partidarios, algunos de ellos pueden ser llevados a tomar la justicia en sus propias manos, en cuyo caso el cliché mediático de la inminente “guerra civil,” hasta ahora sólo una figura retórica, podría convertirse en realidad. No importa lo que suceda en el futuro, ahora hay una masacre más que conmemorar el 11 de septiembre, y el dilema planteado por el trágico ejemplo de Allende sigue siendo tan sobrecogedor como siempre.
DENUNCIAN EL ACCIONAR DE PARAMILITARES AFINES AL OFICIALISMO EN BOLIVIA
Refugiados bolivianos en Brasil denuncian el accionar de "guerrilleros" afines al gobierno. Los Ponchos Rojos son la milicia Aymara de Evo Morales.
Urgente 24 de Argentina (www.urgente24.com)
El estallido de nuevos conflictos en la prefectura boliviana de Pando, que dejó 18 muertos y más de 100 desaparecidos, generó la huída de centenares de bolivianos opositores a Evo Morales hacia Brasil. La militarizada prefectura opositora ha visto a su prefecto ser encarcelado junto a sus principales referentes y soporta el accionar de bandas armadas afines al gobierno que van por fuera de la ley.
Así como se han denunciado acciones pseudo paramilitares de la opositora Unión Juvenil Cruceña en diferentes prefecturas de Bolivia, también existe un ejército no convencional manejado por Morales: los Ponchos Rojos.
En la ciudad brasilera de Brasilea, limítrofe con Pando, hay, según el diario cruceño El Deber, 400 refugiados bolivianos que denuncian el accionar de grupos armados que actúan por fuera de los mandos militares. Entre los refugiados hay empleados de la prefectura y cívicos opuestos al régimen indigenista de Morales.
Edgar Balcázar, un ex empleado de la Prefectura de Cobija (la capital de Pando), exhibió a agencias de noticias los hematomas y marcas de la golpiza a la dice haber sido sometido poco después de la muerte de campesinos en la ciudad vecina de Porvenir, el pasado jueves.
"Querían matarme. No eran campesinos, eran guerrilleros, estaban armados y comenzaron a dispararnos. Pero no me mataron y pasé a Brasilea, donde me atendieron en un hospital y donde estoy hospedado en casa de unos amigos", dijo Balcázar a la AFP.
Paruma Escobar, también ex empleado de la Prefectura de Cobija, dijo que "hay muchas personas que cruzaron a Brasil, tanto a la ciudad de Brasilea como a municipios vecinos, y que aún están con mucho miedo. Incluso sabemos que hay gente escondida en los montes próximos a Brasilea".
Incluso los periodistas están bajo amenaza constante. Cabe recordar que durante la semana pasada se diferentes medios (La Razón, de La Paz y ATB entre otros) denunciaron que el gobierno nacional no les permitía llegar a Cobija para dar cobertura a los enfrentamientos en Pando.
Son pocos los periodistas que se atreven a dormir en Cobija. La prensa extranjera está alojada en un solo hotel, mientras que otros periodistas bolivianos se quedaron en Brasilea.
A varios les han disparado durante la jornada del martes. Carlos Lazcano, de la Red Unitel, trató de entrevistar a la delegada presidencial, Nancy Texeira, a unos 300 metros del aeropuerto cuando de pronto le dispararon desde la terminal aérea.
“Una bala le pasó a centímetros al camarógrafo. ‘Fílmeme, pariente’, le gritaba al camarógrafo, por si caíamos ahí. Después vinieron los militares, nos insultaron y nos dijeron que no se podía filmar”, relató Lazcano. Algo similar vivió Alexandre Lima, periodista de O Alto Acre, un periódico brasileño que obtuvo las imágenes de Leopoldo Fernández tomado prisionero.
Los Ponchos Rojos
La revolución indigenista que delineó Evo Morales para sus cinco años de gobierno en Bolivia tiene en los Ponchos Rojos (guerreros aymaras que tienen su centro de operaciones en Achacachi, pueblo ubicado en las riberas del lago Titicaca, unos 90 kilómetros al norte de La Paz) a sus celosos defensores.
Unos ponchos andinos de color rojo, tejidos a mano por las mujeres de Achacachi y comunidades aledañas, son su principal indumentaria.
El vestuario de esos guerreros aymaras se completa con "lluchu's" (gorro de lana con terminación cónica que cubre las orejas), chalina de color tierra, sombrero negro de piel de oveja de ala ancha para protegerse del sol y un pantalón de bayeta (tejido de lana de oveja) y abarcas (sandalias de llantas de motorizados) para los pies.
El arma más utilizada en más de cuatro siglos ha sido la "q'urawa" (una honda con piel de oveja) para lanzar piedras a velocidad y alta precisión.
Las piedras de pequeñas dimensiones, además de coca y alcohol, son llevadas en "ch'uspas" o bolsas de 20x20 centímetros que se cuelgan del hombro. "Muchos usan hondas con piel de zorro para tener más precisión en sus lanzamientos", apuntó Jorge Huasco.
Sin embargo, a pesar de esta imagen inocente y más bien tradicional, en diferentes oportunidades y desfiles se los ha visto portar fusiles y armas de fuego.
Es que los Ponchos Rojos son, en su mayoría, ex soldados del ejército boliviano que conocen de estrategia y tácticas militares. La preparación de algunos grupos se realiza en la planicie de K'ala Chaca ("puente de piedra" en aymara) y en el cerro Letanías de Viacha.
También son obligados a leer libros escritos por Fausto Reynaga, los que reivindican a los indígenas bolivianos y los instan a la toma del gobierno y del poder.
"Los fusiles Máuser fueron regalados a nuestros abuelos y padres por el presidente Víctor Paz Estenssoro para defender la Revolución Nacional de 1952", recordó Francisco Ramos de la subcentral de Warisata.
Agregó que los Ponchos Rojos son una herencia de sus antepasados, porque "defendieron la unidad y gobernabilidad de nuestros ayllus y comunidades".
Esteban Mamani, otro amauta (autoridad originaria) de Warisata, explicó que también existen ponchos de color negro, nogal, huayruru (rojo y negro) que son usados por autoridades originarias como Mallkus, Jilacatas y secretarios generales de los cantones vecinales.
Arengas desde el gobierno
La reaparición de los Ponchos Rojos se produjo a mediados de enero en un desfile con motivo de celebrar los 181 años de fundación de la provincia paceña Omasuyos.
"Ponchos Rojos para defender la patria. Si antes han descuartizado al territorio nacional, han descuartizado a Túpac Katari; ahora ningún caballero va a poder nuevamente descuartizar a Bolivia", arengó el presidente Evo Morales, acompañado de su vicepresidente, Alvaro García Linera, y del comandante general de las Fuerzas Armadas, el general Freddy Bersatti. En la marcha de Achacachi sobresalieron tres de ellos portando fusiles Máuser
El vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera, tuvo vínculos en el anterior decenio con los Ponchos Rojos y con el Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), que fue involucrado en atentados terroristas por lo que fue encarcelado junto a su hermano y al dirigente campesino, Felipe Quispe, llamado "Mallku" por sus seguidores.
García Linera a fines del año pasado pidió a los Ponchos Rojos sacar el fusil que tenían escondido bajo el poncho aymara. "Ese fusil debe ser usado para defender la unidad de Bolivia". Sus palabras sonaron como la explosión de una bomba en el oriente de Bolivia, donde se impulsa un proyecto autonómico que ganó en las urnas en cuatro de los cinco departamentos del país sudamericano.
El alcalde de Achacachi, Eugenio Rojas, negó rotundamente que los Ponchos Rojos sean un grupo paramilitar o guerrillero. "Los Ponchos Rojos no son un grupo de disfrazados, son la identidad de la nación aymara", precisó.
Recientes apariciones
La más reciente participación de fracciones de los Ponchos Rojos se remonta a octubre del 2003 en la llamada Guerra del Gas, que tuvo a El Alto, vecina ciudad a La Paz, como epicentro de una protesta social que forzó la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada a sus cinco años de mandato constitucional.
"La Guerra del Gas comenzó el sábado 22 de setiembre del 2003 con la muerte de cuatro personas en Warisata. Un grupo de los Ponchos Rojos, lanzando piedras (porque no había armas), hizo huir al ministro (de Defensa) Carlos Sánchez Berzaín en un helicóptero militar. Luego fuimos hasta El Alto para participar en las barricadas y marchas para pedir la renuncia de Goni", relató Lino Villca.
Pero la presencia de los Ponchos Rojos no sólo se dio en las movilizaciones campesinas sino que logró proyectarse hasta el actual gobierno de Evo Morales, el primer indígena que accede por voto directo a la presidencia de Bolivia.
"Nosotros tenemos participación en el equipo de ministros de Evo Morales. Ahora está David Choquehuanca que es ministro de Relaciones Exteriores. Antes estaba nuestro hermano Félix Patzi como ministro de Educación", precisó Juan Carlos Condori, secretario ejecutivo de la federación de campesinos de la provincia Omasuyos de La Paz.
Dijo que los Ponchos Rojos están dispuestos a devolver los fusiles Máuser a cambio de ganado o tierras. "Hay varias formas de devolver. Nadie puede dar nada gratis en este mundo. En esto se basa la reciprocidad: yo te doy algo y tú también, a cambio. Vamos a practicar el ayni comunitario, el trueque, en este tema de las armas".
Las autoridades de Achacachi, Warisata y otras comunidades del altiplano de La Paz han reiterado en los últimos días que son gente de paz.
"Sólo luchamos cuando hay injusticia o sometimiento. Hoy reaparecimos porque queremos que el gobierno de nuestro hermano Evo Morales no sea atacado por los ricos y la oligarquía boliviana que no quiere esta revolución democrática", agregó el alcalde Eugenio Rojas.
RECLAMAN LA INJERENCIA DE CHÁVEZ EN SURAMÉRICA
Desde Bolivia, Ecuador y Paraguay protestan por declaraciones
El Universal de México (www.eluniversal.com)
Las Fuerzas Armadas de Bolivia, un alcalde de Ecuador y un líder opositor de Paraguay reclamaron por separado la injerencia del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la política interna de sus países.
Las Fuerzas Armadas de Bolivia manifestaron su "indignación" por las reiteradas y "desafortunadas" críticas de Chávez, y pidieron a la Cancillería boliviana transmitir por vía diplomática la queja militar, informó la prensa local, aseguró AFP.
El general Luis Trigo, comandante de las Fuerzas Armadas, cursó una nota al canciller David Choquehuanca fijando la posición de reclamo de los militares bolivianos, molestos por las declaraciones del mandatario que "mellan profundamente nuestra dignidad e integridad".
"Solicito muy respetuosamente a su digna autoridad hacer las representaciones pertinentes en el ámbito diplomático para expresar la indignación de las FFAA ante tan desafortunadas declaraciones", afirmó el general Trigo en su misiva.
"El presidente de Venezuela está haciendo reiteradas declaraciones en contra de este comando de las FFAA, atentando contra la unión y cohesión monolítica de la institución y poniendo en duda el rol constitucional que cumplimos... como baluartes de la democracia", dice la carta de Trigo, agregó Efe.
Chávez afirmó hace una semana que "si a Evo lo derrocaran, lo mataran, sepan los golpistas de Bolivia que me estarían dando luz verde para apoyar cualquier movimiento armado en Bolivia". Tras el reclamo militar boliviano por esas declaraciones, Chávez afirmó que Trigo y otros generales de Bolivia "tienen una especie de huelga de brazos caídos" para acatar las decisiones de Morales.
Trigo afirmó que la reacción de su institución fue de "rechazo enérgico y categórico contra la injerencia extranjera de cualquier tipo y venga de donde venga, en temas que son únicamente competencia de bolivianos". Respuesta guayaquileña
El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, pidió ayer públicamente a Chávez "que se meta en sus asuntos internos, de Venezuela", y lo acusó de injerencia luego que el mandatario venezolano dijera que los dirigentes guayaquileños buscan repetir el "separatismo" boliviano. "¿Qué se ha creído este señor? Que se meta en sus asuntos internos, de Venezuela", dijo el líder más visible de la oposición que defiende un modelo autonómico para su ciudad, la más populosa de Ecuador, agregó AP.
"Rechazo como alcalde de esta ciudad, como ecuatoriano y como hombre de derecho, la injerencia de Chávez en asuntos ecuatorianos y especialmente guayaquileños", aseguró Nebot.
Sobre el apoyo que el mandatario venezolano expresó al proyecto de nueva Constitución que es auspiciado por el gobierno del presidente Rafael Correa, Nebot consideró que "basta que Chávez esté con el 'Sí' para que los ecuatorianos tengamos una razón más para estar con el 'No'".
Objeción paraguaya
En Asunción, el ex jefe militar y político opositor Lino Oviedo pidió a Chávez que no trate de interferir en asuntos internos de Paraguay. "Lo que diga el presidente Chávez no tiene validez, nos tiene acostumbrados a declaraciones que ofenden a gobernantes... de América", aseguró. Chávez acusó el martes a Oviedo de conspirar contra el gobierno de Fernando Lugo. "Lino Oviedo está conspirando para dar un golpe en Paraguay, se está equivocando de pelo a pelo", dijo. En Paraguay "somos soberanos", enfatizó Oviedo.
Hugo Chávez había cuestionado la actuación de las FF.AA. bolivianas en la reciente crisis
EL ALTO MANDO PIDE AL GOBIERNO QUE TRANSMITA LA "INDIGNACIÓN" MILITAR POR INJERENCIA DE VENEZUELA
El comandante en jefe, general Luis Trigo, dijo que los desafortunados juicios del Mandatario "bolivariano" ponen en duda el rol constitucional del estamento castrense.
El Mercurio de Chile (www.diario.elmercurio.com)
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia, general Luis Trigo, solicitó ayer al canciller David Choquehuanca que transmita al Presidente venezolano, Hugo Chávez, "la indignación" castrense ante las "desafortunadas" declaraciones emitidas por el gobernante "bolivariano" contra las FF.AA. que "mellan profundamente nuestra dignidad e integridad".
Según informó el diario paceño La Prensa en su edición online, en la carta el general Trigo rechaza las reiteradas declaraciones del Jefe de Estado de Venezuela en contra de las Fuerzas Armadas porque estarían "atentando contra la unión y cohesión monolítica de la institución y poniendo en duda el rol constitucional que cumplimos desde la creación de la República, como baluartes de la democracia y la institucionalidad".
En medio de la crisis política y social que afecta al vecino país, Chávez amenazó el pasado jueves 11 con intervenir y "realizar movilizaciones de cualquier tipo" en Bolivia si se intentaba derrocar a Evo Morales, lo cual motivó el primer y enérgico rechazo de los militares contra la injerencia extranjera de cualquier tipo y "venga de donde venga".
Posteriormente, Chávez cuestionó en cinco oportunidades el accionar de las Fuerzas Armadas bolivianas y las acusó de no acompañar la gestión del Mandatario socialista Evo Morales.
Los dichos de Chávez causaron extrañeza debido a las buenas relaciones entre los militares y Morales, que los ha hecho partícipes de decisiones políticas -incluyendo las referentes a la polémica Constitución-, e inyectando el 2% de los recursos generados por el impuesto directo a los hidrocarburos a las FF.AA. Además, Morales se aseguró la lealtad del alto mando militar al pasar por encima de tres generaciones que les correspondía ascender para nombrar a los actuales generales.
Al decir de analistas independientes bolivianos y diversos sectores políticos, la carta del alto mando es una clara muestra que los militares buscan distanciarse de la figura de Chávez, pese a que Venezuela ha aportado más de US$ 30 millones para reforzar a las FF.AA. bolivianas.
Para el politólogo paceño Ludwig Valverde, el general Trigo ha manifestado una posición coherente y diplomática, y acorde con la función constitucional de las Fuerzas Armadas, que es defender al país de amenazas e intervenciones extranjeras.
"No haber dicho nada respecto a la alusión directa del Presidente Chávez al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas habría puesto a éstas en una incómoda y débil situación interna. Porque definitivamente habría sido no asumir la posición que corresponde a los militares en la institucionalidad, más aún en un tiempo de crisis", indica Valverde vía telefónica a este periódico.
Jorge "Tuto" Quiroga, ex Presidente de Bolivia y actual dirigente del opositor Poder Democrático Social (Podemos), enfatiza que la intrusión de Chávez en las Fuerzas Armadas bolivianas es sólo un eslabón de una cadena más amplia, con la cual busca controlar tanto política como económicamente a Bolivia, a fin de convertirla definitivamente en un satélite de su bloque "bolivariano".
En este contexto, Quiroga denuncia el caso de cheques girados por la embajada venezolana en La Paz que se reparten secretamente en guarniciones militares y los atentados cometidos por efectivos militares bolivianos, entrenados en Venezuela, contra canales de televisión independientes, con vehículos, explosivos y armas provistos por la legación venezolana.
"Más vale tarde que nunca, que alguien del alto mando militar haya representado la protesta de las Fuerzas Armadas como institución, porque en estos años de gobierno de Morales han sido sistemáticamente pisoteadas por Chávez", dice Quiroga a "El Mercurio".
Pese a ser asambleísta del Movimiento Al Socialismo (MAS), Roberto Aguilar también apoyó el pronunciamiento del alto mando. "Me parece correcto, porque si bien pudo haber habido buena intención de parte del Presidente Chávez, sus dichos contra el general Trigo fueron inadecuados. No corresponde que tenga un debate ni llame a la reflexión a un general boliviano", sostiene Aguilar.
"Yo sé que ese general (Trigo) y otros generales tienen allá una especie de huelga de brazos caídos, que han permitido a los fascistas masacrar al pueblo de Bolivia".
HUGO CHÁVEZ
"Quisiera haber visto desde un comienzo una actitud más firme en contra de Chávez".JORGE QUIROGA
> General "por el cambio"
Desde que asumió el cargo como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas bolivianas, en enero pasado, el general Luis Trigo Antelo ha dicho que "está con el cambio", nombre genérico que se da a las reformas políticas propuestas por Evo. Asimismo, ha declarado su irrestricto apego a la institucionalidad vigente.El general Trigo es cruceño y nació en Camiri, el 13 de agosto de 1953. Durante 2007 ocupó el cargo de comandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB).
En noviembre de ese año fue denunciado por presunto tráfico de influencias y nepotismo porque su hijo, Ricardo Trigo Cuéllar, trabajaba desde agosto de 2007 como piloto en Transportes Aéreos Bolivianos (TAB). Trigo negó las acusaciones.
> Hoy comienza diálogo en Cochabamba
El gobierno de Bolivia y sus opositores iniciarán hoy jueves en Cochabamba el proceso de diálogo para pacificar el país, ya que "problemas logísticos" impidieron comenzarlo ayer, como propuso Evo Morales.
Según un preacuerdo firmado el martes por el prefecto opositor de Tarija, Mario Cossío -en representación de sus colegas de Beni, Santa Cruz, Pando y Chuquisaca- y autoridades del Ejecutivo, se analizará una fórmula para buscar un pacto fiscal que solucione el pedido de las regiones en torno al impuesto petrolero que les quitó el gobierno para pagar una renta de vejez; se debatirán las autonomías regionales, punto crítico de la confrontación, y se buscará un medio para designar cargos acéfalos en el Poder Judicial.La apertura del diálogo se produce cuando el departamento norteño de Pando llega a su quinto día en estado de sitio y con su prefecto (gobernador), Leopoldo Fernández, detenido por las fuerzas militares luego de que el gobierno lo acusara de instigar una masacre que dejó al menos 16 muertos.
Fernández compareció anoche en La Paz para una diligencia judicial, en su primera aparición tras ser apresado. Allí afirmó que fue "engañado" en el momento de la detención y apoyó el diálogo nacional.
Candidato republicano habla sobre América Latina
JOHN MCCAIN AFIRMA QUE CHÁVEZ "PRIVA A LA GENTE DE SUS DERECHOS DEMOCRÁTICOS"
El postulante a la Casa Blanca comparó al líder venezolano con Evo Morales y concluyó que son "lo mismo".
El Mercurio de Chile (www.emol.com)
"Chávez esta moviéndose hacia una autocracia en Venezuela y está privando a la gente de sus derechos democráticos", aseguró ayer el candidato presidencial republicano, John McCain.
El postulante a la Casa Blanca prometió que hará "todo lo que esté en mi poder para respaldar la democracia y la libertad y los derechos humanos en Venezuela", en una entrevista a la cadena Unión Radio, del grupo español Prisa y que integran varias emisoras latinoamericanas.
McCain dijo que, a diferencia de su rival demócrata Barack Obama, él no se reuniría a conversar con Hugo Chávez. Y agregó que "Venezuela es un buen argumento para que logremos nuestra independencia energética".También señaló que "nuestra búsqueda de la democracia y los derechos humanos (a través de Latinoamericana) implica que deberíamos poner más atención a la región", al referirse a la situación de crisis en Bolivia.
Para el aspirante republicano, "es bastante similar la situación de Hugo Chávez y la de Evo Morales" pues, en su concepto, "ellos son muy parecidos, diría que son lo mismo".
Consultado sobre la comunidad hispana en Estados Unidos y las políticas de inmigración que tiene previsto aplicar si gana las elecciones de noviembre, McCain afirmó que "tenemos que asegurar nuestras fronteras, de manera humanitaria, comprensiva y compasiva".
Insistió en la necesidad de una reforma migratoria, para la cual aseguró que tendría el respaldo bipartidista. Ese apoyo "lo hemos tenido en el pasado. Yo trabajé con el senador Ted Kennedy y otros demócratas para poder ensamblar una coalición y fallamos porque no pudimos convencer a mucha gente que las fronteras estarían seguras", manifestó.
"Por gente como el senador Obama, que siempre hizo lo que decían los sindicatos en orden a eliminar el programa de trabajadores temporales, nosotros debemos tener un programa de trabajadores temporales", dijo. En otro ámbito, respaldó el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre su país y Colombia, y consideró que esos acuerdos comerciales son "buenos para la economía y la democracia".
Sobre Cuba, McCain criticó a Raúl Castro y afirmó que su objetivo será lograr elecciones libres en la isla, liberar a los prisioneros políticos y ayudar a las organizaciones humanitarias.
ENCUESTASGALLUP y Reuters/Zogby dieron ayer dos puntos de ventaja (47 a 45%) a Barack Obama por sobre McCain."No me sentaré nunca a hablar con Hugo Chávez, como ha dicho Obama que lo haría, sin ningún tipo de precondiciones".
LULA, UN NUEVO LIDERAZGO LATINOAMERICANO
El mandatario brasileño activa su presencia preocupado por la inestabilidad en el país que lo aprovisiona de gas.
El Universal de México (www.eluniversal.com.mx)
Luiz Inacio Lula da Silva gobierna con alta popularidad un país que no para de crecer y de exportar. Sus capitales se expanden por Sudamérica como un reguero de pólvora y, gracias a los últimos descubrimientos, va camino a convertirse en un país petrolero con libre acceso a la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP).
Pero lo que Lula no había ejecutado aún es el liderazgo regional de Brasil en el terreno político y diplomático. Ese aspecto de la nueva realidad brasileña debutó el pasado lunes en Santiago de Chile en la primera reunión de peso del Unasur, el flamante bloque que agrupa a los países sudamericanos.
La reunión, convocada de urgencia por la presidenta pro témpore, Michelle Bachelet, se extendió por más de cinco horas en las que el presidente brasileño utilizó todas las artes (incluso las sindicales) en materia de negociación para asegurar la carta de navegación del diálogo y la pacificación en Bolivia, que arrancó ayer. Ni bien la presidenta chilena efectuó la convocatoria, Lula se mostró esquivo y dubitativo. “No sé para qué vamos a reunirnos si las partes, mi amigo Evo y la oposición, no están dispuestas a acatar lo que allí se decida. Ahora si ellos lo piden y si se ratifica de todas las maneras la reunión, allí estaré”.
Y Lula estuvo. Y lo que fue más importante, se hizo notar. Se le venía reclamando desde numerosos sectores y países una mayor presencia y liderazgo en la región. Y en Santiago hizo su debut en ese rubro, acorde a la realidad brasileña, para muchos analistas una potencia regional en construcción. Aquella advertencia sirvió para atraer a Evo a su terreno y comprometerlo a respetar el acuerdo y para que la oposición le pidiera (a él y al Unasur) la intervención. Durante la reunión, según un diplomático participante en la misma, “contrarrestó los embates de (Hugo) Chávez con maestría. Incluso sus reiterados pedidos para que se incluya en el texto la crítica a Estados Unidos”. Algo que Lula ya había anticipado: “Ninguna crítica a Washington ni tampoco intervención extranjera en Bolivia”. Dos cuestiones que funcionaron como advertencias solapadas a Chávez, mientras a Estados Unidos pareció decirles: “Los problemas de la región se pueden arreglar en la región…”.
Brasil se hartó de ver jaqueada su provisión de gas boliviano y que el país con el que comparte 3 mil 100 kilómetros de frontera común, sea una fuente de desestabilización regional. Por eso Lula se movió en consecuencia, harto de los dislates diplomáticos de Chávez que suele campear por la región como jugando con un encendedor sobre el polvorín y de ciertos desplantes de La Paz.
EL EJEMPLO DE EVO
Página 12 de Argentina www.pagina12.com.ar)
Siglos de historia ahogados en la más profunda de las mentiras y del desprecio por la vida encuentran, actualmente en la vida política de la República de Bolivia, el aire que emana la reivindicación de los dueños auténticos y postergados de este continente.
Hace no más de dos años y medio Evo Morales asumía la presidencia de ese país: uno de los más castigados, con inmensos bolsones de injusticia en esta parte del Hemisferio Sur y tal vez con la mayor brecha existente entre quienes tienen y quienes ni siquiera son tenidos en consideración.
Asumió como auténtico representante de los habitantes originarios de estas tierras en nombre de los indígenas, los pobres, los desposeídos, los marginados, los desclasados. Seguramente, en las metrópolis centrales, se apostaba a ver cuánto duraría en el poder.
Simple, sencillo y sin olvidar su origen, comenzó con la ardua tarea de fundar una nación y comenzó haciéndolo para todos, no solamente para los de su misma condición social o cultural. Pero sabemos que una patria para todos es una tarea difícil, no exenta de intereses contrapuestos que intentarán, por los medios más ruines y viles, impedir que la justicia social llegue al conjunto de los ciudadanos.
Evo Morales es, como dicen los muchachos de hoy, lo más. Más sabio que inteligente embretó a la derecha de su país –la que no quiere dejar sus privilegios, sustentados en la explotación y en la marginación de las mayorías– subiéndole la apuesta del último referéndum y poniendo su cargo a la decisión popular de sacarlo o de ratificarlo en el poder. Ganó con cerca del 70 por ciento de los votos. Aun así, la derecha conspira y trata de impedir los cambios necesarios para que los sectores desposeídos de la historia sean parte de ella.
Para Evo Morales parece que no hay posibilidad de vuelta al pasado. Va hacia adelante y sin medias tintas, concreto y sin escudarse en el “no se puede”. Es lo más auténtico en el plano político que hay en la actualidad.
Sabe que él es el garante para que cientos de miles de bolivianos encuentren la dignidad de una vida que merece ser vivida.
Los presidentes de América del Sur se reúnen en Santiago de Chile, donde hace treinta y cinco años asesinaban a un gran estadista: Salvador Allende, por rara coincidencia histórica, y siendo hombres de distintas extracciones sociales y culturales, uno tuvo y el otro sostiene los mismos principios: no mentir, hacer realidad lo prometido, no robar, comprometerse.
Está muy bien que los presidentes apoyen a Evo Morales y a su proceso revolucionario, que no lo dejen aislado, ponerse de su lado y de la mayoría del pueblo de Bolivia, sostener la democracia a toda costa –aun con los costos que haya que pagar–. Sería mucho mejor que en esa decisión de acompañarlo también se lo imite en sus valores. Sería una manera más de ahondar ese respaldo.
Opinión
GOLPISMO EN BOLIVIA CONTRA LOS PUEBLOS DE AMÉRICA LATINA
Los Andes de Perú (www.losandes.com.pe)
Conmemorando el 11 de setiembre, el brutal golpe de Pinochet contra Allende, la derecha boliviana ha lanzado una campaña violenta en Bolivia para tratar de tumbarse al gobierno de Evo Morales. El gobierno que ha recuperado el gas y el petróleo para Bolivia, que le entrega a las empresas concesionarias el 18% de la producción y se queda con el 82% de la riqueza generada para el beneficio del pueblo de Bolivia. El gobierno que ha nacionalizado la minería e iniciado una reforma agraria pretende ser tumbado por los caciques de las provincias más ricas de Bolivia; terratenientes y grandes comerciantes, que quieren impedir el proyecto de cambio social que lidera Evo Morales en Bolivia. La nacionalización de los recursos naturales y regresar al viejo patrón de conducta donde los indios están sometidos a los caciques y gamonales de turno. La violencia ha cobrado más de treinta muertos y ha obligado al gobierno a que disponga la intervención militar de las provincias donde estos gamonales han conducido los alzamientos con juventudes fascistas. Como lo hicieron con Allende quien recuperó el cobre para Chile, quieren ahora repetir el plato en Bolivia. Y es tarea de todos los pueblos, incluyendo el peruano, enfrentar esta maniobra golpista, frenarla y defender el derecho de los pueblos a recuperar su riqueza, a redistribuir las utilidades que se generan y a vivir en mejores condiciones.
En Bolivia, acaba de haber un referéndum revocatorio del presidente de la República y de los prefectos regionales Y Evo Morales ha recibido el apoyo de 68 de cada 100 bolivianos que han votado. Nadie ha acusado de fraude, y sin embargo, han desatado la violencia. Para colmo, en medio de esta situación, los candidatos del Partido Republicano al gobierno de Estados Unidos, en las próximas elecciones, han declarado que estarán dispuestos a intervenir en cualquier lugar del mundo, donde los intereses norteamericanos se vean afectados. Es decir, podrían declararle la guerra a Rusia, podrían invadir Irán y ocasionar una nueva crisis del precio del petróleo, o intervenir donde les provoque en América Latina.
Es hora de que los pueblos de América Latina nos unamos para impedir este intervencionismo y este abuso sobre nuestra soberanía y sobre nuestros derechos de vivir con independencia, con libertad y con beneficio de nuestras riquezas y de lo que generamos con nuestro trabajo. Es hora de decir basta ya al intervencionismo, a la provocación y a la agresión a los gobiernos progresistas como el de Bolivia, están desarrollando un cambio a favor de sus pueblos. La solidaridad con Bolivia es la solidaridad con la libertad y justicia en América Latina. Hasta pronto, amigos.
En entrevista al periodista e internacionalista Fernando Cvitanic
PODER, DINERO Y RACISMO, CLAVES DEL CONFLICTO BOLIVIANO
La sociedad boliviana vive una profunda división que enfrenta a dos claros bandos: los blancos terratenientes del oriente y los indígenas del altiplano. Hoy en día, el país vive un violento conflicto que hizo erupción con el proyecto de nueva Constitución que impulsa Evo Morales.
Terra Magazine de Argentina (www.ar.terra.com)
Los gobiernos departamentales de la llanura oriental critican que los beneficios producidos por los hidrocarburos se centralicen en La Paz, mientras el gobierno de Evo Morales reivindica los derechos de los indígenas a través de un discurso izquierdista.
Este enfrentamiento va acompañado de una histórica rivalidad con tintes racistas entre oriente y occidente.
En entrevista con Terra Magazine, el periodista e internacionalista Fernando Cvitanic explica a grandes rasgos las características del conflicto boliviano, sus actores enfrentados y pronostica el resultado de los actuales esfuerzos por hallar una solución.
Terra Magazine: ¿Quiénes son los bandos enfrentados?
Fernando Cvitanic: Los bandos enfrentados son el gobierno central de La Paz, en manos de Evo Morales, y los grupos disidentes y las tribus de los departamentos del este boliviano que luchan por regalías económicas.
TM: ¿Cuál es la manzana de la discordia?
FC: Las regiones del llano son ricas en gas y en petróleo, las mayores reservas de gas están ahí. Estos departamentos dicen que La Paz concentra la riqueza. Además del conflicto económico, también hay un conflicto racial, entre los blancos del llano y los indígenas del altiplano.
TM: ¿Por qué quieren autonomía estas provincias?
FC: En Bolivia hay un grave problema cultural y económico. Bolivia tiene un alto componente indígena y es la primera vez que tienen un presidente indígena, esto ha generado no solo un problema económico sino, también, racial. En oriente, Evo es visto como el indio, no como el presidente.
TM: ¿Desde cuándo se viene gestando este conflicto?
FC: El conflicto racial de Bolivia existe desde hace mucho tiempo, desde que los hacendados terratenientes acumulan las tierras ricas en Bolivia, pero se ha visto acentuado por la llegada de Evo Morales al poder y por la constitución de Morales que ratifica el centralismo económico y político en La Paz. Los terratenientes del este boliviano se oponen a esta concentración de poder político porque va en detrimento de su poder económico.
TM: ¿De qué se trata el referendo y cuál es su punto álgido?
FC: El punto álgido es la constitución de Bolivia, la de Evo Morales, es altamente centralista y atenta contra el ingreso económico del oriente boliviano. Con esta situación se sienten agredidos, piensan que para la creación de esta constitución no fueron consultados y tiene un vicio en el origen.
Pero el asunto pasa por un componente ético y racial. La Constitución le está dando la legalidad al centralismo de La Paz, siendo que la riqueza no está en La Paz, está en el llano, lo cual va en contra de los intereses de la región. El discurso de Evo Morales es reivindicatorio y la concentración de tierras en Bolivia es asombrosa en el Oriente. Evo Morales habla de cambiar esa distribución de las tierras y choca con los intereses económicos de oriente, a ellos les interesa hacer caer a Morales, podría pensarse que es un intento de hacer caer al Gobierno, de crear una presión política tan grande que Evo se vea obligado a renunciar. Los gobiernos anteriores a Morales eran mucho más afines a la distribución de poder de la oligarquía blanca.
Para los del llano, la elección de Morales fue un cambio total en el status quo de la Bolivia anterior.
TM: ¿Cómo afecta este conflicto al continente?
FC: No es un secreto para nadie las intenciones de Venezuela de polarizar un conflicto en el continente, similar al de la guerra fría pero en Sudamérica. El presidente Chávez quiere asumir un papel protagónico amenazando con intervenir si hay un intento golpista en Bolivia.
Esto lo hace para intentar tapar los problemas internos en Venezuela: la inflación, la inestabilidad política, el bajón en el índice de popularidad de Chávez y, sobre todo, el miedo a un referendo a su gestión que se va a realizar en noviembre.
Chávez intenta involucrarse en problemas internacionales como el de Daniel Ortega, en Nicaragua, y Evo Morales, en Bolivia, para apaciguar los problemas internos y bajar un poco la tensión. Esto viene a respaldar un poco los intereses políticos del presidente venezolano que, a toda costa, quiere formar una izquierda sudamericana, una izquierda que no existe. La izquierda de Bachelet no coincide en nada con la de Chávez, porque la mandataria chilena le apuesta al libre comercio y a la inversión extranjera, es una izquierda que ha llevado a Chile al grado de desarrollo que tiene actualmente.
Por otro lado, creo que Chile debió dejar la solución del caso de Bolivia a la OEA y no tomarlo la presidenta Bachelet. No creo que los países suramericanos estén en la capacidad de ayudar a solucionar el problema de Evo Morales.
De la cumbre de Unasur no saldrá una solución rápida, porque no solo hay intereses de Morales, sino otros muy antiguos de la sociedad boliviana. No soy optimista en los resultados de la cumbre. La solución está dentro de los mismos bolivianos, pero la sociedad está muy polarizada, por tanto, no hay una solución cercana. Yo no le auguro un buen futuro al gobierno de Evo Morales.
TM: ¿Qué va a pasar al interior de Bolivia?, ¿Se logrará una solución mediante el diálogo?
FC: Puede existir diálogo entre las partes pero no sé los que pueda pasar. Ambos sectores defienden proyectos antagónicos de sociedad, es muy difícil que el empresariado boliviano se ponga de acuerdo con el proyecto de Nación que quiero Evo Morales. Mientras no se distribuya las tierras es imposible que los indígenas y que los empresarios queden conformes.
EDITORIAL
NO TE OLVIDES DE LA QUERIDA BOLIVIA
La República de Uruguay (www.larepublica.com.uy)
La situación de Bolivia es cambiante, pero siempre dentro de una línea de peligro de su institucionalidad.
Por momentos avanza la posibilidad de diálogo con algunos sectores de la oposición, pero en el entramado de la sociedad la derecha racista desata criminalmente su violencia contra la izquierda, pero también contra todo aquel que sea de origen indígena y sea exponente de los sectores más humildes.
Estados Unidos, que no descansa, está detrás de todos los operativos desestabilizadores apoyando con recursos a las bandas fascistas. Pero como si eso fuera poco ahora coloca dentro de una lista negra a Bolivia, junto a Venezuela y Birmania, por haber fallado en los últimos doce meses en cumplir sus obligaciones de lucha contra el narcotráfico.
Esta actitud de la Casa Blanca llevó a una inmediata respuesta de Evo Morales, quien manifestó que Estados Unidos "no tiene moral ni ética" para sancionar a Bolivia, a la vez que reclamó de la potencia del norte que "imponga una ley de consumidores de droga, de cocaína".
Esta nueva agresión contra Bolivia está mostrando que Estados Unidos no colabora con la distensión en ese país, sino que es factor fundamental del agravamiento de la crisis política.
Ayer en la mañana, Evo Morales estableció un pacto para defender a Bolivia con la Central Obrera de Bolivia y otras organizaciones sociales, para defender en las calles la democracia y las libertades de ese país. Fructifique el diálogo o no, incluso si se avanzara sustancialmente en la construcción de un camino de paz, los uruguayos no tenemos que distraernos porque en Bolivia se juega el destino de la paz regional.
Hay que saber que Cuba, producto de los huracanes, está en la mayor crisis climatológica de su historia, que el corte de gas de Bolivia va a perjudicar a Brasil, Argentina y Chile, para comprender que la prioridad en América del Sur es la estabilidad institucional y la consolidación y avance de la democracia.
De la misma manera que durante la dictadura que soportó Uruguay en las décadas del 70 y 80, el futuro de nuestros pueblos reclaman unidad y convergencia de pueblos, partidos y gobiernos para frenar el fascismo y por eso se vuelve imprescindible estar atentos sobre lo que pueda estar pasando en Bolivia, la tierra de Evo Morales.
Uruguay necesita crear un gran comité por la defensa de la institucionalidad de Bolivia, donde pueda congregar a las más amplias capas democráticas de nuestro país, porque la democracia de toda América del Sur se juega, en estas horas, en el corazón boliviano.
Opinión
GUAYAQUIL Y BOLIVIA
Diario Hoy de Ecuador (www.hoy.com.ec)
Reunidos de urgencia en Santiago de Chile la tarde del lunes, los presidentes sudamericanos expresaron "su más pleno y decidido respaldo al Gobierno constitucional del presidente de Evo Morales", y advirtieron "enérgicamente" que "no reconocerán cualquier situación que intente un golpe civil y la ruptura del orden institucional y que comprometa la unidad territorial de Bolivia". Y aunque es verdad que la mayoría de los analistas internacionales creen que la reunión cumbre de la Unasur no parió más que ratón (porque lo que produjo fue un documento plenamente predecible, en el que pide la instalación de una mesa de diálogo, entre los indígenas centralistas y los autonomistas de la Media Luna), yo más bien creo que hay que mirar con atención lo ocurrido en Santiago, y lo que sigue ocurriendo en Bolivia, porque parece ser el espejo de lo que puede pasar con nosotros mismos, los próximos días y meses.
Es cierto que el control diplomático de la situación lo tomó el presidente del Brasil, Lula da Silva. Pero no es menos cierto que lo hizo solo después que, desde Caracas, Hugo Chávez amenazara con enviar tropas para sostener a Evo, solo poco antes de ubicar también a Guayaquil como objetivo de sus advertencias. El libreto es el mismo. Y parece fundamental entenderlo. Los presidentes sudamericanos, por ejemplo, rechazaron la ruptura del orden institucional, sin reconocer que ese orden institucional ya había sido roto. La Bolivia de Evo Morales parece más una dictadura electa que una democracia representativa con pesos y contrapesos y controles sobre el poder central. Algo similar a lo que ocurre en el Ecuador, donde no vivimos actualmente un régimen constitucional. No existe un Congreso. Las máximas autoridades de control han sido elegidas sin seguir los procedimientos establecidos por la Constitución que se supone "en vigencia". Es tal la ruptura del orden, que la ahora ex ministra de Finanzas, Wilma Salgado, ha tenido que enviar, para su conocimiento, la Pro forma presupuestaria a una tal mesa directiva de una Asamblea Constituyente que terminó ya sus funciones, y que solamente podría reinstalarse en el caso de que el proyecto constitucional sea aprobado en el referendo. Según la Constitución "en vigencia", la Pro forma debía ser enviado al Congreso, pero este ha sido disuelto. Ni Ecuador ni Bolivia viven actualmente ese orden institucional que los presidentes sudamericanos atropelladamente aprobaron respaldar la pasada tarde del lunes en Santiago.
Y la verdad es, como lo recoge el punto siete de la declaración de Santiago, que luego no habrá diálogo que se pueda sustentar sin "el pleno respeto al estado de derecho y al orden legal vigente". Lo que implica, por ejemplo, no hacer trampa en las elecciones usando todo el poder del Estado en la campaña electoral, e impidiéndola a los demás. Después es muy fácil hacerse los ciegos.
Opinión
CRISIS BOLIVIANA
Ante una prolongada crisis institucional, económica y social que llevó al país andino al borde de la quiebra general, evo morales asumió la presidencia de bolivia en el 2006, con ambiciosos planes de refundir el estado boliviano.
El Caribe de República Dominicana (www.elcaribecdn.com)
Los acontecimientos que desde hace un mes se vienen suscitando en Bolivia son de profunda preocupación para la comunidad internacional.
La historia de vicisitudes y calamidades continúa en Bolivia. Esta es la nación sudamericana que más territorios ha perdido en la historia del continente, siendo más de la mitad de su área original anexada por sus 5 vecinos.
Ahora se presenta una ruptura a lo interno, que conllevaría desmembrar la nación en parcelas autónomas, cuando las principales prefecturas han decidido escindirse, lo que dejaría a La Paz con la hegemonía política, pero prácticamente sin capacidad económica.
La situación se fue agravando de forma tal que hubo bloqueos, toma de instalaciones petroleras, choques entre civiles, decenas de heridos y más de 30 muertos. El presidente Evo Morales denunció un golpe de estado y a la vez declaró “persona non grata” al embajador de Estados Unidos.
Ante una prolongada crisis institucional, económica y social que llevó al país andino al borde de la quiebra general Evo Morales asumió la Presidencia de Bolivia en el 2006, con ambiciosos planes de refundir el Estado boliviano.
Esta postura de Morales ha ido causando roces internos en los diversos sectores empresariales de la nación, hasta el punto de que todas las prefecturas de alzaran en busca de separación del gobierno boliviano. Como una forma de reducir las tensiones, hace unos días los autonomistas, representados por el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el gobierno de Evo Morales firmaron un acuerdo de pacificación del país e iniciaron una negociación para un pacto nacional".
El documento establece la suspensión de los bloqueos de autonomistas y oficialistas, la devolución al gobierno de instituciones públicas y petroleras que fueron tomadas por grupos cívicos y la suspensión por un mes de la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado.
Por su parte, los 9 mandatarios que conforman la recién creada Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) se reunieron en Chile, y dieron su respaldo a la democracia boliviana, a lo cual se unió el presidente Leonel Fernández mediante un comunicado.
Nos queda la esperanza de que el pueblo boliviano pueda resolver la polarización y la convulsión política y social que desde hace tiempo le aqueja y que pueda solucionar sus problemas internos por la vía democrática y constitucional.
Opinión
EL RECULE DE EVO
La amenaza de guerra seguirá latente mientras Evo no ceda de verdad
El Universal de Venezuela (www.eluniversal.com)
La semana pasada vimos a un Evo Morales envalentonado, negado a dialogar con la oposición de su país y solicitando, al grito de "sin miedo al imperio", la retirada inmediata del embajador estadounidense de territorio boliviano por supuestamente promover las protestas opositoras. Poco le duró la intempestiva furia.
Morales ahora aclara que el despido sin evidencias concretas del diplomático para nada significa un rompimiento de relaciones diplomáticas y comerciales con EEUU. A su vez, aunque estableció el estado de sitio en Pando, la provincia más aguerrida, se ha visto en la necesidad de dialogar nuevamente con los prefectos opositores y dice estar dispuesto a la restitución del impuesto del gas a las regiones.
Evo no sólo retrocedió a causa de la fuerte voluntad opositora de llevar el enfrentamiento hasta las últimas consecuencias y por la inmediata reacción de EEUU a la expulsión de su representante en La Paz, aclarando que constituía un "grave error" que traería efectos serios en las relaciones bilaterales. En su retroceso también tuvo gran peso el contundente rechazo del alto mando militar a la intromisión de Hugo Chávez en el conflicto boliviano, al éste ofrecer envío de tropas en caso de un golpe de Estado. Esta respuesta evidencia las difíciles relaciones entre la jefatura castrense con Morales quien, de hecho, ha preferido mantenerse callado y no contradecir la posición de los militares.
La precaria situación política de Bolivia y de Evo se mantendrá hasta que se dé una revisión de fondo del contenido de la nueva constitución con la cual se pretende imponer en esa nación el socialismo totalitario del siglo XXI. Los llamados de paz y los esfuerzos de otros países, en particular de Brasil cuya economía depende de las importaciones de gas de Bolivia, tan sólo lograrán frenar por un tiempo la espiral de violencia en el país. Pero la amenaza de una guerra civil, con lo que esto implica para la seguridad de toda la región, seguirá latente mientras que Evo no ceda de verdad en cuanto a la reforma constitucional y respete realmente las autonomías regionales.
Opinión
ENTRE EVO Y GERARDO
ABC de España (www.abc.es)
El cuestionado presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, es noticia porque acaba de acaba de dar otra muestra de su peculiar modo y manera de llevar las riendas de la patronal. Es tanto el disgusto que su gestión provoca entre los empresarios que buena parte de ellos hace tiempo que añoran al sempiterno presidente que fue José María Cuevas. Lo que, por cierto, ya son ganas de añorar. La última de Díaz Ferrán es su propósito, desvelado por ABC, de destituir al secretario general de toda la vida, Juan Jiménez Aguilar, me temo que por no haberse plegado a sus caprichos y tejemanejes.
Pero no era de las complicadas intrigas que se cuecen en los fogones de la patronal sino de una decisión de la empresa Air Comet, también presidida por el llamado «patrón de patrones», que nos ha afectado directamente a los integrantes de la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo que en número de cincuenta y tres hemos viajado a Bolivia y Paraguay para recorrer diversas misiones jesuíticas y celebrar, en Asunción, el Congreso Internacional de dicha federación.
Air Comet, cierto es que al igual que han hecho otras compañías aéreas, ha decidido suspender sus vuelos con Bolivia. Uno de esos vuelos era, precisamente, el que en la madrugada de ayer martes, operando para Aerosur que es la compañía de bandera boliviana, debía devolvernos a Madrid. El resultado de esa suspensión ha sido la forzada ampliación de las vacaciones en cuarenta y ocho horas, quedando a la espera de que en la madrugada de mañana jueves, estando algo más calmada la caótica situación en la que se encuentra Bolivia, y una vez reabierto el aeropuerto de Viru Viru de la santacruceña capital boliviana, la compañía Aerosur encuentre avión y tenga posibilidades de efectuar el vuelo que no quiso hacer Air Comet.
En nuestro caso, los periodistas y acompañantes, más allá de las molestias y trastornos ocasionados por el desbarajuste que provoca en cada una de las respectivas agendas de trabajo el aplazamiento de un vuelo, podemos considerarnos unos privilegiados puesto que no nos hemos encontrado en la desagradable situación sufrida por tantos otros viajeros, que quedan literalmente tirados en aeropuertos al ver suspendido sus vuelos, sino que, advertidos a tiempo, estamos alojados en un hotel aguardando noticias de la hora del regreso.
El caso es que entre el empresario Gerardo Díaz Ferrán, cuya compañía ha decidido dejarnos tirados, y el presidente boliviano Evo Morales, cuyos paisanos autonomistas y su propia incapacidad como gobernante, han provocado el bloqueo de un país ya de por sí bastante bloqueado, aquí estamos esperando. En mi caso, además, me he quedado sin la posibilidad de hablarles a los nuevos alumnos de la Universidad Cardenal Herrera-CEU, de los retos a los que van a enfrentarse desde el primer día en que se pondrán a estudiar periodismo.
Una máxima del periodismo, siempre incumplida, es aquella que señala que los periodistas no somos noticias. En nuestro caso, forzada y forzosamente, nos hemos encontrado con que si lo somos, al vernos obligados a una prórroga vacacional que ojalá no se alargue más allá del tiempo extra en el que ya estamos. Pero no nos quejemos porque lo nuestro es «pacata minuta» comparado con la que les espera a los bolivianos, metidos como están en una espiral segregacionista y disgregadora para la que Evo Morales no parece disponer de capacidad ni ideas con las que hacerle frente. Los apoyos de sus colegas presidenciales del cono sur no van a servirle de mucho. Cuando «quod natura non dat» ya se sabe en qué queda la cosa. Pobre Bolivia.
Análisis
LA VIOLENCIA EN BOLIVIA FORTALECIÓ EL PROYECTO DEL MAS
Terra Magazine de Argentina (www.ar.terra.com)
La aceptación implícita del proyecto de nueva Constitución Política del Estado del Movimiento Al Socialismo (MAS) es una de las consecuencias, favorable para el gobierno de Evo Morales, de la reciente ola de violencia que se desató en el país y que ingresó en una tregua luego de la firma de un preacuerdo entre las partes enfrentadas.
Los analistas Carlos Cordero y Carlos Alarcón, por separado, coinciden en que el inicio del diálogo tiene como base el reconocimiento a la propuesta de nueva carta magna entregada por la Asamblea Constituyente, en diciembre de 2007, en medio de denuncias de irregularidades en el procedimiento de aprobación.
Para Cordero, politólogo e investigador, "el resultado de toda esta crisis es que el gobierno ha salido beneficiado", porque los grupos más radicales al proyecto constitucional han terminado por aceptarlo. El tema de fondo, dice, es que el proyecto político del MAS era la reforma del Estado "y eso se hace a través de un nuevo texto constitucional".
Con el preacuerdo entre el gobierno y los prefectos (máximas autoridades departamentales) opositores, suscrito la noche del 16 de septiembre, "el país que se oponía ha terminado por aceptar que hay un nuevo proyecto y es el del MAS, no de otro". Esa aceptación ha significado también el convencimiento de que sólo se harán ajustes al texto, aunque éstos pueden ser importantes.
Por su parte, Alarcón, especialista en Derecho Público, Constitucional, Administrativo y Penal, recuerda que ante la insistencia sostenida de los prefectos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija de llevar a punto cero el proyecto, el consejo fue desistan de "posiciones maximalistas que no eran adecuadas" y que, por el contrario, accedan a realizar ajustes al texto constitucional y a los estatutos autonómicos que se aprobaron en sus regiones.
Finalmente eso ocurrió, enfatiza Alarcón. "Con el preacuerdo los prefectos han reconocido el proyecto de Constitución Política del Estado (CPE) del MAS", aunque también el presidente de la República, Evo Morales, ha manifestado, en varias oportunidades, su intención de compatibilizar "su proyecto con los estatutos. Falta saber qué entiende por compatibilizar".
Las bases del diálogo
La jornada del 16 fue incierta y se tornó tensa con la detención del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, por parte de efectivos militares para confinarlo por desacato al estado de sitio decretado por el gobierno en el departamento, luego de los graves enfrentamientos en la localidad de Porvenir entre autonomistas y campesinos que causaron la muerte de 15 personas, casi todos afines al MAS, según informes gubernamentales. Alarcón y Cordero consideran que esa fue una medida política, más que un acto de justicia.
Casi simultáneamente, el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el vicepresidente de la República, Álvaro García Linera, terminaban de redactar un documento base para iniciar el diálogo, luego de cuatro días de intensas negociaciones. Un día antes los presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) le dieron su respaldo al mandatario boliviano.
Entrada la noche, Cossío, que se trasladó de La Paz a Tarija, anunció que los prefectos aceptaban el preacuerdo que, entre sus puntos fundamentales, menciona el reconocimiento del gobierno al derecho que tienen los departamentos a percibir el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Esta demanda fue la punta de lanza de la resistencia regional, ya que el gobierno destinó una parte al pago de la Renta Dignidad, bono que sustituyó al Bonosol. No obstante, el preacuerdo también destaca que debe garantizarse este beneficio para las personas mayores de 60 años.
Los otros dos puntos tienen que ver con la transformación del Estado, a través de la nueva CPE, autonomías departamentales y estatutos autonómicos, y los asuntos institucionales como las designaciones congresales de los cargos vacantes y la revisión del Padrón Electoral, el Programa de Carnetización y el Registro Civil que fueron observados por una serie de irregularidades que se produjeron durante el referéndum revocatorio de 10 de agosto.
Estos temas se discutirán en tres mesas de trabajo y en una mesa central se aprobarán los acuerdos. El diálogo estará acompañado por facilitadores y garantes, entre los cuales figuran Unasur, que ya designó a su representante ¿el ex embajador de Chile en Argentina, Juan Gabriel Valdés¿; las iglesias católica, evangélica y metodista, y organismos internacionales, entre ellos la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos (OEA) y Naciones Unidas.
El diálogo tiene como objetivo lograr "el restablecimiento de la paz social en el marco del estado de derecho", lo que implica la desocupación de las oficinas públicas e instalaciones petroleras tomadas por grupos de cívicos opositores y el levantamiento de todos los bloqueos de caminos que se prolongaron prácticamente por un mes en diferentes puntos del país.
Lo anterior supuso también que el gobierno postergue por un mes la convocatoria a referéndum constitucional, previsto para el 7 de diciembre, y que se comprometa a suspender su campaña mediática de difusión del proyecto de la nueva carta magna y de desprestigio en contra de "autoridades y actores cívicos y sociales. La promulgación del decreto supremo Nº 29691 del 28 de agosto, que llamaba a la consulta, fue lo que desató la violencia.
Otro punto importante del documento es la decisión de esclarecer los hechos ocurridos en Pando a través de "organismo nacionales e internacionales imparciales y una comisión congresal que se desplazará de inmediato al lugar de los hechos". El gobierno se comprometió también a "no impulsar acciones judiciales que tengan connotación política contra dirigentes cívicos, sociales y autoridades de los departamentos movilizados".
Crear las condiciones
Los dos analistas consultados por Terra Magazine coinciden también en que la calidad de las reuniones y de los avances, y la actitud de las partes enfrentadas pueden derivar en un verdadero pacto nacional que vaya más allá de la satisfacción de intereses personales y regionales, sino que considere a la sociedad en su conjunto.
Entonces, dicen, se deben crear las condiciones para un diálogo auténtico, sincero y transparente. Sin embargo, las amenazas entre las partes no contribuyen a generar ese ambiente. Para Alarcón las reacciones de los sectores afines al oficialismo y a la oposición no son espontáneas, por lo cual bastaría una orden del Presidente o de los prefectos para que los grupos dejen de crear presión.
Lo más probable es que el diálogo sea lento y difícil, porque se trata de encontrar un punto de equilibrio entre dos visiones de país totalmente contrapuestas, indica Cordero. Todo dependerá de cuánto estén dispuestas a ceder las partes, sobre todo porque gran parte del acuerdo se construirá sobre la base del texto constitucional del MAS.
"El punto de equilibrio va a ser aceptar en un 80 o 70 por ciento el proyecto de Constitución del MAS, la visión de país del MAS, y el 20 por ciento va a ser una incorporación de la "media luna" a ese proyecto constitucional. En la aceptación de ese proyecto están implícitos todos los otros temas: IDH, nombramientos, investigaciones para esclarecer los hechos de Pando", explica el analista.
Por su parte, Alarcón considera que al preacuerdo le faltó un tema clave, y es que el gobierno y las prefecturas debían garantizar que "las instituciones de naturaleza política respondan al conjunto de la sociedad y no a los sectores enfrentados" La justicia y las cortes electorales, por ejemplo, "se han visto contaminadas con la lucha facciosa y sectorial", y es fundamental el respeto institucional, porque de lo contrario "no tendremos un verdadero estado de derecho en Bolivia".
ANALISIS
PRESIDENTE DE BOLIVIA SALE FORTALECIDO DE LA CRISIS
Agencia Reuters (www.lta.reuters.com)
El primer presidente indígena de Bolivia, el izquierdista Evo Morales, manejó con habilidad una violenta crisis política de la cual salió fortalecido para abrir conversaciones con los gobernadores opositores que se resisten sus reformas socialistas.
Al menos 17 personas murieron la semana pasada en una ola de violencia política durante la cual opositores a Morales irrumpieron en edificios del Gobierno, sabotearon vitales gasoductos de exportación y se enfrentaron con partidarios del presidente en cuatro regiones controladas por la derecha.
El mandatario decretó el estado de sitio en el remoto departamento amazónico de Pando y mandó detener al gobernador opositor de esa región, acusándolo de haber ordenado una masacre de campesinos el pasado jueves.
Los soldados movilizados por Morales para proteger instalaciones estatales y ejecutar el estado de excepción mostraron moderación y evitaron enfrentamientos.
Mientras, los presidentes de América del Sur dieron un fuerte respaldo a Morales en una cumbre de emergencia esta semana en Santiago, al tiempo que condenaron cualquier intento de golpe o rebeliones separatistas, lo que pareció dejar poco margen de movimiento a la oposición, que terminó perdiendo a uno de sus actores, el gobernador pandino, y aceptando el diálogo.
"En Sudamérica, hay un apoyo unánime y muy fuerte hacia el Gobierno. Otros países de la región, de izquierda, derecha o centro, no creen que la oposición tenga una demanda legítima," dijo Mark Weisbrot, director de la sede en Washington del Centro para la Investigación Económica y Política.
La imagen de Morales contrasta con la de sus detractores, los prefectos (gobernadores) opositores que aparecieron identificados con las protestas violentas y las matanzas.
Un editorial de El Deber, uno de los principales periódicos de oposición en el rico distrito oriental de Santa Cruz, dijo que Morales fue "innegablemente fortalecido" por los presidentes de Sudamérica que lo respaldaron, mientras que la oposición debe replantearse su estrategia de protesta.
Los gobernadores exigen una mayor autonomía del Gobierno central y más control sobre los ingresos estatales provenientes de un impuesto al petróleo, al tiempo que rechazan la nueva Constitución de línea indigenista-socialista que Morales quiere someter a referendo en el 2009.
En un principio de acuerdo alcanzado el martes, Morales y los gobernadores opositores decidieron discutir ambos temas en las conversaciones.
NI GANADORES NI PERDEDORES
Morales, quien arrasó en un referendo de mandatos hace poco más de un mes, parece decidido a aprovechar su fortaleza electoral para acelerar sus reformas.
Pidió el miércoles a la oposición que el diálogo produzca un pacto antes del plazo establecido de 30 días y planteó al Congreso que apruebe la próxima semana la convocatoria a un referendo en enero del 2009, para aprobar la nueva carta magna.
Sin embargo, el analista Franklin Pareja dijo que Morales sólo se fortalecerá si hace un acuerdo con la oposición.
"No hay ganadores ni perdedores, todos perdemos" después de la última semana de muertes, afirmó Pareja.
Morales, quien inició su carrera política como dirigente de los sindicatos cocaleros, a los cuales todavía lidera, asumió el poder a principios de 2006 y juró cambiar la Constitución para dar más poder a la mayoría indígena de Bolivia, así como para aumentar el control estatal sobre los recursos naturales.
Sus rivales políticos rechazan el proyecto de nueva carta magna, en particular la prohibición de los latifundios y el reparto masivo de tierras entre los pobres.
El Mundo, otro periódico de Santa Cruz, criticó al líder cívico de las últimas protestas, Branko Marinkovic, por subestimar la capacidad de Morales para "conquistar" las regiones orientales, controladas tradicionalmente por la derecha.
El presidente tiene la mayor parte de su apoyo entre los pobres del altiplano occidental de Bolivia, mientras que la oposición es más fuerte en las regiones orientales, donde están ubicados los ricos yacimientos de gas natural, tierras agrícolas fértiles y viven adinerados descendientes de europeos.
Morales es amigo del ex líder de Cuba Fidel Castro y tiene el apoyo del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, por lo que muchos temen que su objetivo sea instaurar un régimen comunista.
Los criterios de partida del Gobierno y la oposición no han cambiado luego de tres semanas de violencia, por lo que algunos analistas advierten que las nacientes negociaciones podrían romperse o quedar en un punto muerto.
Ninguna de las partes "ha resuelto los problemas de fondo. Están tomando un descanso hasta recuperar fuerzas," dijo Kathryn Ledebur, jefe de la Red Andina de Información con sede en Bolivia.
Opinión
EVO MORALES SIN DERECHO A QUEJA
El Nuevo Herald de Estados Unidos (www.elnuevoherald.com)
La violenta confrontación que sufre Bolivia por la defensa de las autonomías es el resultado de la irresponsabilidad de Evo Morales, presidente totalitario con envoltura democrática, a quien los europeos ven como un simpático y extravagante producto cultural tercermundista, pues les afecta poco o nada.
La ''madre del cordero'' en esta penosa situación es su temeraria aventura personal. Encandilado primero, y envalentonado después con el apoyo del gobierno de Venezuela, no le basta con atropellar derechos y despojar, sistemáticamente, los recursos de los departamentos de la ''media luna'' camba, sino que introdujo la variable geopolítica de amenaza de una invasión militar extranjera en su propio país. Ahora queda claro que el pacto de su gobierno con el venezolano no perseguía defender a Bolivia de posibles agresiones externas. Su objetivo era defender al presidente de sus opositores al interior del país. Por eso es Hugo Chávez quien amenaza, con su acostumbrado lenguaje de ''barra brava'' y sin el menor pudor, con meter a sus tropas, a sangre y fuego, en territorio boliviano, si sale Morales.
Aunque no deseamos ninguna interrupción democrática en Bolivia, sino el respeto a las minorías, ¿qué pasaría si los militares bolivianos tomaran el poder con un golpe de Estado, en caso de incursionar tropas venezolanas en Bolivia? Bajo tal escenario, ¿lucharían contra las fuerzas armadas bolivianas? ¿Esto no configuraría una guerra entre naciones? ¿No comprende Evo Morales que, incluso si sus sospechas fuesen correctas, conduciría a un baño de sangre a su país?
¿Se siente Morales, el ''predicador'' de la unidad nacional, compatriota de los millones de bolivianos que serían afectados con una incursión militar venezolana si, como consta en los estatutos autonómicos, los departamentos que defienden la autonomía no piden la secesión, sino sólo reclamar la descentralización de poderes y rentas? ¿Qué unidad patriótica pide cuando abre las puertas al invasor extranjero para exterminar a los que nacieron en suelo boliviano?
La temeraria aventura de Evo Morales no se agota dentro de sus fronteras. Su alianza con el chavismo pone en riesgo la estabilidad geopolítica sudamericana. Su recurrente actitud de inmiscuirse en la política interna de los países vecinos, como Perú, conspira contra la integración regional y las más elementales relaciones diplomáticas. Postura ideológica que entorpece a la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y bloquea, en la práctica, cualquier acuerdo comercial con la Unión Europea (UE) a países como Perú y Colombia, que apuestan por modelos aperturistas y de economía de mercado.
Morales descalifica a sus opositores de antidemocráticos y de antipatriotas, sólo porque expresan en las calles el profundo descontento con su régimen. Curiosa actitud de quien alcanzó el poder, precisamente, con similares prácticas. Cuando desestabilizaba a los gobiernos de Gonzalo Sánchez de Lozada primero, y de Carlos Meza después, hasta llevar a su país a la completa ingobernabilidad. El tiempo en que sus únicas plataformas de lucha eran la defensa de una etnia y la del cultivo de la coca.
Evo Morales no tiene derecho a queja, pues parece hacerle juego al popular refrán ''la vaca no suele acordarse de cuando fue ternera''. Aunque más importante sería hoy que el presidente de Bolivia recordase que sólo hay una clase de bolivianos y que se debe al país, antes que a una ideología o a una lealtad fruto de su sumisión con el verdadero titiritero del tinglado en que ha convertido a su gobierno.
Opinión
UNASUR, EN EL CAMINO CORRECTO
La Nación de Chile (www.lanacion.cl)
Estoy entre quienes creen que Chile es un país de ciclos cortos en materia política. Sin embargo, nunca esperé que lo fuera tanto. La derecha está retomando su vocación agresiva, clasista y aislacionista en términos internacionales, enfocando en la dirección opuesta a la diplomacia. Ha retornado a la senda de la conspiración. No era suficiente la estrategia del desalojo. Ahora teje historias de complots subversivos y pretende socavar nuestras relaciones con mandatarios extranjeros. Desprestigia a Chile. Hace negocios privados mientras habla temas de Estado. Socava la credibilidad y la capacidad de las nacientes instituciones internacionales cuando Chile construye puentes en Sudamérica, como una acción histórica que espera evitar las confrontaciones entre los pueblos. Parece olvidar que la diplomacia nació precisamente para evitar los conflictos bélicos y generar la cooperación. Las acciones confrontacionales generadas desde el país sede de un encuentro internacional no sólo impiden el desarrollo al cual aspiramos, sino que nos ponen en una situación patética y vergonzosa.
La irresponsabilidad política de la derecha es de antología. Pero es una oportunidad para quienes, representando sectores democráticos, hacen de la desestabilización su ejercicio predilecto para ganar notoriedad no olviden que unirse a la oposición política hoy día es auspiciar a la derecha y retroceder más allá de exclusiones ideológicas y partidarias. Unasur es una demostración magistral de las posibilidades que tenemos de dar una señal para la unidad latinoamericana, siempre y cuando nuestra oposición actúe con madurez y no se deje llevar por pasiones belicistas, que llevaron al continente al borde de guerras y a la destrucción de su democracia. Unasur, como proyecto de institución internacional al servicio de la paz, el desarrollo y la equidad social, es un símbolo potente de lo que hemos logrado en estos años. Es un orgullo que podamos estar debatiendo en Chile el destino del continente sobre la base de la protección de la democracia. Contrariamente, vemos cómo sectores de la oposición, en acciones concertadas e inclasificables, abordan los esfuerzos mancomunados por la convivencia como una señal puramente ideológica, sin ninguna lectura seria. Desde un candidato presidencial a parlamentarios elegidos se escuchan voces disonantes de las intenciones de elegir la paz en un continente que ha sudado sangre en su historia por conseguirla como se puede lograr hoy.
Los conflictos de los países hermanos son responsabilidad de la comunidad internacional. Qué distinta habría sido la historia de nuestro continente si Unasur y sus actuales dirigentes, por muy distantes que parezcan en términos políticos, hubieren intervenido en Chile, Argentina, Bolivia, Paraguay, Perú, entre otros países, como estamos ahora siendo testigos históricos de un cambio sustancial de nuestra política internacional. Sólo este encuentro justifica y obliga a que todos nuestros países hagan los esfuerzos necesarios para posibilitar que Unasur se convierta en un actor relevante de nuestro desarrollo.
Y lo estamos viendo en Chile. Este es el camino hacia el desarrollo. No el exacerbado ideologismo ni el antagonismo absoluto de las ideas, ni menos hacerse cargo del eslogan que uno u otro líder quiera instalar en un foro internacional. Eso no importa. Lo que importa es que esas frasecitas quedarán en la retina como un recuerdo anecdótico y hasta simpático, siendo las conclusiones y la voluntad política común la señal para que aquellos que van en la vía equivocada retomen el camino al que todos aspiramos.
Opinión
PREACUERDO: ¿FIN DEL CONFLICTO BOLIVIANO?
Los Andes de Perú (www.losandes.com.pe)
El gobierno de Evo Morales y representantes de la oposición firmaron un preacuerdo de pacificación que podrá sentar las bases de un "gran pacto nacional".
El jueves empezarán las negociaciones de fondo en Cochabamba y se analizarán los detalles más delicados, en presencia de mediadores internacionales.
Con la detención de prefecto de Pando se temió que la negociación fracasara. Sin embargo, con la firma del preacuerdo se espera pacificar al país y dar fin a la ola de conflictos acontecidos en los últimos días en Bolivia. Firman preacuerdo
Según el documento se suspenderán los bloqueos de autonomistas y oficialistas, las instituciones que fueron tomadas por grupos cívicos serán devueltas al gobierno y la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado será suspendida por un mes.
Los autonomistas de Bolivia, representados por el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el gobierno de Evo Morales firmaron este martes un preacuerdo para pacificar al país y para iniciar una negociación hacia un "gran pacto nacional".
La suscripción del documento estuvo a punto de fracasar por la detención del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández.
Sin embargo, luego de una jornada de tensiones, Cossío firmó en presencia del prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas, y de representantes de la Iglesia Católica.
El documento establece la pacificación de Bolivia a través de la suspensión de los bloqueos de autonomistas y oficialistas, la devolución al gobierno de instituciones públicas y petroleras que fueron tomadas por grupos cívicos y la suspensión por un mes de la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado.
Según las bases de este preacuerdo, la negociación de fondo se iniciará el jueves en la ciudad de Cochabamba, en presencia de mediadores de Unasur, de la OEA, de la Unión Europea, de Naciones Unidas y de la Iglesia Católica de Bolivia.
Cossío se adhiere
En la mañana de este martes todo estaba listo para la firma del acuerdo.
Incluso, Cossío ya estaba en el Palacio de Gobierno para celebrar el acto, pero supo que el prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, había sido detenido y abandonó la reunión.
Desde La Paz, el vicepresidente, Álvaro García Linera, llamó a los prefectos a suscribir el documento y dijo que Cossío estaba al tanto desde el viernes de que se arrestaría al prefecto de Pando.
Por la noche, el prefecto de Santa Cruz, en un mensaje al país, dijo que las instituciones de su departamento, donde reside la mayor oposición a Morales, habían decidido levantar las medidas de presión y firmar el pre-acuerdo.
Unos minutos después se produjo la suscripción del acuerdo por parte del prefecto Cossío.
Pautas del acuerdo
El preacuerdo da algunas pautas en los temas de fondo. Por ejemplo, el gobierno reconoce las autonomías departamentales y restituye a las regiones los ingresos petroleros que sobraban del pago de una renta a los ancianos. El prefecto Cossío pidió que el presidente Morales suscriba el documento y que no sean sólo sus viceministros los que avalen la pacificación del país.
Cossío declaró que este preacuerdo "debe ser el inicio de un proceso de pacificación plena del país. Una oportunidad para abrir el camino hacia un gran acuerdo nacional".
De esta forma, se pone fin a los conflictos iniciados hace 22 días. Durante ese tiempo hubo bloqueos, toma de instalaciones petroleras, choques entre civiles, heridos y muertos.
Opinión
PREOCUPA LA VIOLENCIA DESENCADENADA EN BOLIVIA Y MÉXICO
El Periódico de Guatemala (www.elperiodico.com.gt)
Por supuesto, es necesario señalar desde un principio que la violencia en estos países es de distinto origen y obedece a causas muy diferentes. En el caso de Bolivia, la crisis es primordialmente política y se debe en gran medida a la intransigencia del Gobierno de Evo Morales, que desde que llegó al poder se ha propuesto impulsar a cualquier costo la “refundación del Estado boliviano” e imponer medidas de corte populista sin mayor respeto a los procedimientos legales para hacer las reformas del caso.
Se convocó a una asamblea constituyente y, a marchas forzadas, se redactó una nueva constitución política sin que se permitiera por parte del oficialismo mayoritario un debate abierto y profundo sobre los cambios radicales propuestos en el campo político, económico y social. Más bien se restringió el ámbito de la oposición y, sin ningún recato, ignorando los más elementales procedimientos democráticos, se aprobó el nuevo texto constitucional, en una sesión de la asamblea celebrada en el interior de un cuartel militar de la ciudad de Sucre, sin la presencia de los diputados de oposición y sin que se estableciera si existía el quórum requerido.
Casi al mismo tiempo, en las regiones de Santa Cruz, Pando, Tarija y Beni, gobernadas por la oposición, se convocó a consultas populares con el objeto de que se aprobaran sendos estatutos autonómicos que, de hecho, reforman la dependencia del Gobierno central y les otorgan a estas provincias el derecho de una administración autónoma y el manejo incluso de los recursos provenientes de los impuestos ahí recaudados. Los referendos autonómicos se celebraron pacíficamente, en orden y con alta afluencia de votantes que le dieron una victoria abrumadora a la oposición política al Gobierno de Evo Morales. Como la tensión política aumentó en alto grado, la Iglesia católica llamó al diálogo y lo mismo hizo la OEA, que envió una misión especial, pero no se logró ningún acuerdo. Desafortunadamente, se produjeron choques violentos en Pando hace algunos días, que dejaron decenas de muertos y heridos y más de 100 desaparecidos. ¿Quién propició esta situación? Difícil de poder determinar. El Gobierno central impuso el estado de sitio en esta región, desplazó a fuerzas del Ejército para restablecer el orden y apresó al prefecto de Pando, Leopoldo Fernández. El diálogo que se venía realizando en La Paz se estancó, y las perspectivas de una solución negociada parecen, a estas alturas, remotas. El Gobierno, entretanto, recibió el apoyo de los países de América del Sur reunidos en Santiago de Chile, donde nueve presidentes y tres cancilleres firmaron lo que se denominó la Declaración de la Moneda, donde reafirman su compromiso de preservar la integridad territorial de Bolivia ante cualquier intento de secesión. El presidente Evo Morales continúa denunciando un intento de golpe de estado civil y declaró non grato al embajador estadounidense, al que señaló de estar detrás del movimiento para derrocarlo.Evidentemente, la situación es muy compleja y será difícil resolverla mientras persistan las posiciones intransigentes, pero las circunstancias obligan al diálogo y a la negociación con la ayuda de los países de Unasur y de la OEA. En cuanto a la violencia que golpea a nuestro vecino México, viene, sin ninguna duda, del crimen organizado y de los cárteles de la droga que han elevado los niveles de violencia en forma inusitada. La crueldad con que actúan es escalofriante: sirve de ejemplo el hallazgo de 24 cuerpos torturados y mutilados, y los asesinatos de indefensos ciudadanos en Morelia, Michoacán, durante las celebraciones del Grito de la Independencia que dejaron siete muertos y decenas de heridos. A diferencia de Bolivia, en México sí existe voluntad política de hacer frente a los problemas, por complejos que sean. Así lo demuestra la respuesta del Gobierno de Felipe Calderón, de los partidos de oposición y de los sectores representativos de la sociedad mexicana, que hacen causa común para derrotar a ese implacable enemigo encubierto que creció quizá demasiado en las últimas décadas, sin que las autoridades se percataran de los alcances del problema. Pero, de esta dolorosa experiencia, hay un aspecto positivo: México entiende el problema de la violencia y está unido y de pie para combatirla con firmeza, dentro del contexto del régimen de legalidad.
BOLIVIA: CHÁVEZ COMETE EL MISMO ERROR QUE EL CHE
La crisis boliviana puede derivar en una tregua, pero no en una solución definitiva, como sucedió con el referéndum revocatorio que Evo ganó ampliamente a nivel nacional, aunque triunfaron los cuatro prefectos que gobiernan los departamentos del oriente de país.
Urgente 24 de Argentina (www24urgente.com.ar)
La crisis boliviana puede derivar en una tregua, pero no en una solución definitiva. Así lo mostró el resultado del referéndum revocatorio, que Evo Morales ganó ampliamente con dos tercios de los votos a nivel nacional, pero triunfaron los cuatro prefectos que gobiernan los departamentos del oriente de país, que reclaman la autonomía (Santa Cruz de la Sierra, Tarija, Pando y Beni). La distribución de la renta energética del país fue el detonante de la ocupación de oficinas del estado nacional por parte de las milicias autonomistas en Pando y Santa Cruz de la Sierra, produciéndose enfrentamientos con decenas de muertos y cientos de heridos y desaparecidos, cuyo número preciso todavía se desconoce. El Presidente ha llamado al diálogo a los prefectos autonomistas, pero simultáneamente la justicia está requiriendo al de Pando, acusándolo de genocidio por los hechos de violencia que han tenido lugar en dicho departamento. Si bien el Ejército ha protegido plantas petroleras y gasíferas, varias empresas han sufrido daños y países como Brasil, Argentina y Chile -que depende del suministro de gas a través de Argentina- que se abastecen de gas boliviano, pueden verse afectados por esa crisis.
El dato nuevo es la actitud políticamente neutral que están adoptando las fuerzas armadas bolivianas. Hasta hace pocos días, los mandos militares expresaron públicamente que respaldarían al Presidente contra cualquier intento de afectar la territorialidad del país, lo que fue interpretado como un mensaje contra el autonomismo. Pero una vez comenzada la violencia, plantearon que no matarían ciudadanos bolivianos. Al anunciar el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que respaldaría a Morales incluso enviando tropas, los mandos militares bolivianos hicieron público que no aceptarían la actuación dentro del país de tropas extranjeras. Chávez respondió intimando a los militares bolivianos a que abandonen su prescindencia y a que actúen contra los autonomistas, amenazando en caso contrario con intervenir. La respuesta militar boliviana fue aun más dura y el 14 de septiembre, el ministro de Defensa de Evo Morales (San Miguel) se vio obligado a declarar públicamente que no se aceptaría la entrada en el país de tropas extranjeras, contradiciendo a Chávez, quien insistió en que no se iba a quedar cruzado de brazos mientras se desplazaba a Evo. El Presidente venezolano está cometiendo el mismo error que el Che Guevara cuarenta años atrás: subestimar el nacionalismo boliviano. El gobierno de Evo respondió denunciando que en los hechos de violencia que tuvieron lugar en Pando, actuaron mercenarios de origen brasileño y peruano, diciendo que se han replegado a territorio del Brasil, buscando así manipular el nacionalismo a su favor. La crisis boliviana ha tenido efectos regionales, en momentos en que la presencia militar rusa en la región suma otro elemento de tensión. Venezuela, siguiendo la decisión de Bolivia, expulsó al embajador de los EEUU y Honduras -que recientemente se sumó al ALBA- congeló el placet pedido por Washington para su nuevo representante diplomático. Ecuador -que acaba de firmar un acuerdo de cooperación energética con Irán como Evo lo firmó la semana anterior en Teherán con alcances militares- también ha criticado a EEUU por la crisis boliviana, como también lo ha hecho Paraguay, mientras que Raúl Castro desde Cuba ha respaldado al gobierno boliviano, pero con mucho más mesura que Chávez. La reunión de los presidentes de Unasur en Santiago de Chile fue una reacción importante frente a la crisis, pero mostrando limitada capacidad de acción frente al problema concreto. Se evitó mencionar a EEUU como reclamaba Chávez, pero no se tendió un puente con los prefectos autonomistas, sin cuyo acuerdo no se resolverá la crisis. Mientras tanto se realizan en Venezuela los ejercicios aéreos sobre el Caribe entre la Fuerza Aérea venezolana y dos bombarderos rusos de largo alcance con capacidad para llevar misiles nucleares, en respuesta a la política de EEUU de instalar el escudo antimisiles en Europa Central y apoyar el ingreso de Georgia y Ucrania a la OTAN, confirmándose los ejercicios navales ruso-venezolanos para la primera quincena de noviembre. Cabe recordar que Nicaragua ha sido el primer país del mundo en reconocer la independencia de Abjasia y Osetia del Sur. Por su parte, Bolivia anunció que si EEUU le retira los helicópteros suministrados en el marco del programa antidroga, los obtendría de Rusia. La combinación de la regionalización de la crisis boliviana y la presencia militar rusa en la región, crean para Washington una crisis sin precedentes en América Latina desde la caída del muro, la que también pone a prueba la efectividad del liderazgo brasileño en América del Sur.
Mientras tanto, Evo Morales está perdiendo el monopolio del indigenismo dentro de Bolivia. El quinto Departamento en manos de la oposición es Chuquisaca, cuya prefecta, Sabina Cuellar, es una indígena que sólo sabe leer y escribir y tiene una firme oposición a Evo, coincidiendo con los autonomistas. Mientras el Presidente pertenece a la etnia aymará, Cuellar es de la quichua, enfrentada desde antes de la llegada de los españoles. Evo Morales ha dado a las etnias indígenas categoría constitucional de naciones y las tercera es la guaraní, de menor importancia, pero predominante en las regiones fronterizas con Paraguay. Si el conflicto se profundiza, el enfrentamiento entre etnias indígenas puede ser un factor desfavorable para Evo Morales. La inacción de las fuerzas armadas ha llevado a los partidarios del presidente a organizar milicias, a través de las células más combativas del MAS, el movimiento político que lo llevó al poder.
Pero el nacionalismo ha reaparecido, como en otros momentos de la historia del país, como un factor gravitante y desde esta perspectiva Chávez parece estar cometiendo el mismo error que el Che Guevara cuatro décadas atrás, cuando fue percibido por los mismos indígenas bolivianos como el líder de una incursión extranjera en el país.
HAY DISTINTAS POSTURAS DE CARA AL DIALOGO
GRIETA AUTONOMISTA
Mientras los movimientos sociales amenazan con retomar edificios públicos por la fuerza si no prospera la negociación en Cochabamba, la prefecta de Chuquisaca se excluye del diálogo.
Página 12 de Argentina www.pagina12.com.ar)
Las organizaciones campesinas de Santa Cruz calculaban marchar hacia esta ciudad para exigir al Comité Pro Santa Cruz y a la prefectura la devolución de 26 edificios del Estado. Los campesinos afirmaron que esperarán los resultados de la reunión de hoy para arrancar la caminata o para esfumarla. Pero los vecinos de Plan 3000, el barrio-fortaleza del gobierno nacional, dieron un ultimátum de 48 horas al prefecto Rubén Costas “para que renuncie. Si no, el viernes estaríamos marchando a la ciudad”, sostuvo Jaime Choque, presidente del Comité Cívico Popular barrial. El prefecto de Tarija, Mario Cossío, dijo que ayer no pudieron viajar a Cochabamba para empezar el diálogo con el presidente Evo Morales porque no consiguieron vuelos. Aún faltaba discutir algunos detalles a los opositores, que avanzan en la negociación pese a diferencias internas, sobre todo en cuanto a la detención del prefecto de Pando, socio de la Media Luna, acusado de genocidio. El ejército pudo retomar ayer el control de El Porvenir y Filadelfia, municipios donde transcurrió la masacre de al menos 18 personas. Aún hay cien campesinos desaparecidos, pero los militares no encuentran cuerpos.
El prefecto de Beni, Ernesto Suárez, aceptó de inmediato la invitación de Morales. Pero faltó compañía: “Yo no quisiera dar una señal de que no queremos ir, veremos cómo llegar a Cochabamba. No es fácil, porque quisiéramos que lleguen todos y particularmente queremos que estén presentes los testigos”. La mediación de instituciones es una preocupación constante del Consejo Nacional Democrático (Conalde) para sentarse a charlar con Morales. Hoy, en el hotel Portales de Cochabamba, habrá representantes de la Iglesia Católica, de la Unión de Naciones de Sudamérica (Unasur), de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Quien ya dijo que no estará es la prefecta de Chuquisaca, la quechua Savina Cuéllar, porque este primer documento no incluye el reclamo de Sucre como “capital plena” de Bolivia. La ciudad que la eligió como prefecta fue capital plena hasta 1899, cuando una guerra civil llevó los poderes Ejecutivo y Legislativo a La Paz. En Sucre sólo permaneció el Judicial. Este reclamo provocó el exilio de la Asamblea Constituyente, en 2007, porque el nuevo texto tampoco recogía la exigencia sucrense.
El martes a la noche, Cossío y el prefecto cruceño, Rubén Costas, firmaron el documento consensuado con el gobierno ante el cardenal Julio Terrazas. Morales dijo que este religioso es inválido como mediador, ya que el 4 de mayo votó en el referéndum autonómico de Santa Cruz, considerado ilegal por el gobierno. Para el aymara, fue un “show mediático” para mostrarlo como renuente al pacto. Y reiteró su desconfianza hacia Terrazas, quien juzgó a las firmas del Conalde: “Una victoria del pueblo que busca paz y verdad con cambios en el corazón”.
El postulado del cardenal no concordaba con las declaraciones del Comité Cívico de Riberalta, en Beni, que había dado 24 horas para dejar esa ciudad a las organizaciones no gubernamentales que trabajan con indígenas y campesinos de la región: el Centro de Investigación y Promoción del Campesinado (Cipca) Norte, el Instituto para el Hombre, Agricultura y Ecología (Iphae) y el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis) Riberalta. Los cívicos las acusan de haber armado a campesinos que estuvieron en la masacre.
“Es mentira. En nuestra convocatoria para la asamblea pedimos a los compañeros que trajeran lo de siempre: plato, cuchara y un caneco (taza enlosada). Era lo único que teníamos cuando nos agarraron”, contó a PáginaI12 Cristian Domínguez, secretario de Recursos Naturales de la Federación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (FSUTC-B), sobreviviente de la masacre.
Según Domínguez, mil campesinas y campesinos iban a Cobija para coordinar acciones ante el crecimiento de la violencia en Pando ejercida por grupos afiliados al prefecto. “Hasta la Policía Nacional contribuyó en la matanza. Nos tuvieron detenidos una hora en la ruta mientras los hombres de Leopoldo nos hacían un cerco. Nos disparaban de todos lados. Nos seguían por el monte hasta otros pueblos. A los heridos los cargaban en ambulancias donde los torturaban”, recordó. Su testimonio coincide con el de varios campesinos que fueron al hospital de Cobija para atenderse y se escaparon con heridas nuevas.
Domínguez, indígena chácobo, expresó su desconfianza en la Justicia. “Los otros acusados, Miguel Becerra (ex alcalde de Cobija) y Abraham Cuéllar (senador de Unidad Nacional), no tienen nada que ver. No deciden por nosotros. Las dirigencias de las organizaciones campesinas de Pando programamos esa asamblea, por eso creemos que la Justicia ya nos va a tirar orden de captura”, evaluó.
Con la firma del acuerdo, los cívicos levantaron los bloqueos de Tarija. Quedan los cortes de ruta campesino en Tiquipaya, a 45 kilómetros de la ciudad de Santa Cruz, en San Julián, Cuatro Cañadas y Yapacaní, que afectan el tránsito hacia Cochabamba. “Nosotros ahorita estamos esperando ver el convenio. Y tenemos que reunirnos para tomar una decisión conjunta con los compañeros de Tiquipaya”, dijo Félix Martínez, presidente cívico de San Julián. Aclaró que, si marchan a la ciudad, no van a ser violentos como los autonomistas. En Plan 3000, un barrio empobrecido de 250 mil habitantes definió recuperar los edificios públicos.
LULA JUSTIFICA LA EXPULSIÓN DEL EMBAJADOR ESTADOUNIDENSE EN BOLIVIA SI HUBO INJERENCIA EN LOS ASUNTOS DEL PAÍS
El Economista de España (www.ecodiario.eleconomista.es)
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, dijo ayer que ayudará a Bolivia a desmantelar los grupos armados en la región de Pando, en la frontera brasileña, y que si el embajador de Estados Unidos en La Paz, Philip Goldberg, se inmiscuyó en asuntos internos, su par, Evo Morales, hizo bien en expulsarlo.
LA PAZ, 18 (EUROPA PRESS)
El mandatario brasileño manifestó en una entrevista que consideraba que había habido un incidente diplomático. "Si es verdad que el embajador de Estados Unidos se reunía con la oposición, él (Morales) está en lo correcto en expulsarlo (...), tampoco es de hoy la famosa interferencia de las embajadas estadounidenses en varios momentos de la historia del continente americano", asestó Lula según informaron medios bolivianos.
El presidente brasileño recordó que una vez tuvo que pedirle a su canciller, Celso Amorim, que le comunicara a una embajadora de Estados Unidos en Brasilia el malestar del Gobierno brasileño con las críticas que hizo una diplomática norteamericana a raíz de unas declaraciones dadas por él.
"La embajadora estadounidense, en un periódico brasileño, respondió a una crítica que yo le había hecho Bush. Le pedí a Amorim que la llamara para decirle que era inadmisible que ella diera opiniones sobre una entrevista del presidente de la República", dijo.
Lula agregó que, intentó intervenir en algunas ocasiones en defensa de Morales en sus conversaciones con Bush antes de que tuviese lugar los últimos incidentes en el país vecino. "Conversé varias veces con Bush, incluso sobre la petición de Morales para que Estados Unidos apruebe rápidamente los aranceles especiales para determinados productos bolivianos, pero como ocurrió esa expulsión, creo que las cosas pueden quedar paralizadas", afirmó.
LULA ORDENÓ REFORZAR LA FRONTERA CON BOLIVIA
Busca evitar el tráfico ilegal de armas
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, solicitó ayer que se reforzara la frontera de Brasil con Bolivia para evitar el posible tráfico de personas y armas hacia el conflictivo país andino.
Lula informó que ordenó a sus ministros de Justicia, Tarso Genro, y de Defensa, Nelson Jobim, que contactaran a sus pares bolivianos para desplegar acciones conjuntas en la frontera, con el fin de evitar el contrabando que podría alimentar la violenta crisis que vivió Bolivia, agitada por opositores de la región oriental.
"Brasil necesita hacer un esfuerzo muy grande porque tenemos más de 3000 kilómetros de frontera con Bolivia y queremos que esté en paz, porque en paz [Bolivia] va a crecer; en guerra, no , declaró Lula en una entrevista con el canal estatal TV Brasil.
Lula también reveló que había tomado la decisión luego de que su par boliviano, Evo Morales, denunció la presencia de pistoleros brasileños y peruanos contratados por la oposición para atacar a los oficialistas en el departamento de Pando, donde hace una semana murieron por lo menos 15 campesinos oficialistas en una emboscada.
Además, Lula indicó que Morales le solicitó apoyo logístico para desestructurar a grupos armados de Pando. "Evo me preguntó si Brasil podría venderles algunos camiones a ellos, para transportar a las fuerzas armadas", contó el mandatario brasileño.
Además, Lula expresó su apoyo a la decisión de Morales de expulsar al embajador norteamericano, Philip Goldberg, siempre y cuando haya tenido algún tipo de injerencia en la reciente crisis. "Si es verdad que el embajador de Estados Unidos se reunía con la oposición de Evo Morales, Evo hizo lo correcto en echarlo. El papel del embajador no es hacer política dentro del país", afirmó Lula. "Es famosa la injerencia de las embajadas estadounidenses en varios momentos de la historia del continente americano."
TREGUA GANADERA EN UNA BOLIVIA POLARIZADA
ABC de España (www.abc.es)
El comienzo mañana de Expocruz, la feria ganadera que mueve más de 18 millones de euros en el departamento más rico de Bolivia, habría sido determinante para la firma ayer de un acuerdo entre el Gobierno de La Paz y los prefectos de las regiones opositoras al presidente Evo Morales. Así, hoy mismo se implantarán en Cochabamba tres mesas de trabajo en busca de la paz en el país, después de casi un mes de conflictos y al menos 17 muertos en el departamento de Pando.
El vicepresidente Álvaro García Linera anunció que en el diálogo con los gobernadores de Santa Cruz, Beni, Tarija y Chuquisaca se abordarán la devolución a las regiones del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), el papel de las autonomías en la futura Constitución y el mecanismo para la elección de las autoridades vacantes. El proceso contará con mediadores internacionales, para lo cual han sido invitadas la Iglesia Católica, Unasur, UE, OEA y ONU.
«Vencedores y vencidos»
Pese a que estaba cantada desde el pasado viernes, cuando el Ejecutivo decretó el estado de sitio en Pando, la detención de su prefecto, Leopoldo Fernández, estuvo a punto de dinamitar el diálogo. La entidad ya dispone de un nuevo mandatario, Orlando Ceballos, designado ayer por el propio Morales. García Linera aclaró que la detención y proceso por genocidio del caudillo pandeño queda al margen de las reivindicaciones regionales, «y no permitiremos que sea parte de la negociación», dijo.
Como primera medida, las partes acordaron el levantamiento de todos los bloqueos y la devolución de las instituciones públicas que fueron asaltadas. El Gobierno, por su parte, suspenderá por un mes la convocatoria del referéndum sobre el texto constitucional. En todo caso, la situación es muy delicada y la paz se antoja fugaz y débil.
Lejos de fomentar la reconciliación, el Ejecutivo -en boca de su ministro de Gobierno, Alfredo Rada- habla de vencedores y vencidos. Supuestos seguidores encapuchados del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) reiteran sus amenazas a la «oligarquía» paceña. Y los acosados medios de comunicación -en especial, las televisiones, que son juez y parte- reflejan un estado de cosas que se asemeja cada día más a la polarización irresoluble que vive la Venezuela de Hugo Chávez. Con el agravante de que a las disputas económicas, políticas y sociales se suman aquí acusadas diferencias territoriales y raciales.
BAJA LA TENSIÓN ENTRE EL GOBIERNO DE LA PAZ Y LAS REGIONES REBELDES
BOLIVIA CONJURA EL PELIGRO DE GUERRA CIVIL
El Periódico de España (www.elperiodico.com)
Al borde del abismo, después de 22 días de bloqueos, toma de instituciones y un número de muertos aún sin determinar, el Gobierno y la oposición bolivianas resolvieron ayer hacer mutuas concesiones para, de esta manera, tender un delgado puente que les permita llegar al gran acuerdo nacional. El presidente, Evo Morales, convocó a los representantes de las regiones autonomistas para negociar de inmediato. "Quiero verlos esta tarde (a los prefectos) para iniciar diálogo". Más allá de la prisa de Morales, el comienzo de las negociaciones está convocado para hoy en Cochabamba.
El pacto llegó en la madrugada de ayer cuando todo parecía derrumbarse. La mañana del martes fue detenido el gobernador de la amazónica Pando, Leopoldo Fernández, a quien el Gobierno responsabiliza de estar detrás de una emboscada contra campesinos en la que 15 de ellos perdieron la vida y otros 106 están desaparecidos. "El diálogo agoniza", dijo el prefecto de Tarija, Mario Cossio. Santa Cruz, la región más beligerante, también reclamó la libertad de Fernández. Pero su solidaridad solo fue retórica y todos los protagonistas de la crisis, con excepción de el de Pando, terminaron firmando el documento de consenso.PRESIÓN DE UNASUR
La tregua no habría sido alcanzada sin la presión ejercida por la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur) que, bajo el liderazgo brasileño, terminó por evitar lo peor. La Unasur y la UE participarán activamente como mediadores entre partes que, hasta hace pocas horas, solo aceptaban la rendición incondicional del adversario.
Pero además de la presión externa otro factor ha obligado al Gobierno y los autonomistas a actuar con la dosis de pragmatismo que les estaba faltando: la sociedad está cansada de una disputa que ya tiene graves costos económicos.
El acuerdo, que fue ayer celebrado por los empresarios, la Iglesia Católica y la comunidad diplomática, incluye demandas tanto de la oposición conservadora como las hechas por el Movimiento al Socialismo (MAS, en el poder). La Paz restituirá los excedentes en concepto de regalías petroleras reclamados por las prefecturas. Las regiones, por su parte, aceptaron que con ese dinero se siga pagando un bono a los jubilados. La novedad es que ahora serán las regiones la que lo financiarán de hecho.
El MAS admitió que se profundice el régimen autonómico y está dispuesto a discutir aspectos de la Constitución que la oposición califica de indigenista y totalitaria. La nueva Carta Magna debía ser sometida a una consulta popular el 7 de diciembre, pero ha sido aplazada.
DESBLOQUEOLos prefectos se comprometieron a desbloquear las carreteras cortadas y devolver las oficinas estatales que habían sido tomadas y saqueadas. En adelante, las partes discutirán si algunos de esos organismos pasarán a las regiones. Marco Aurelio García, el principal asesor en cuestiones internacionales del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, desempeñó un sigiloso pero efectivo papel en este proceso de acercamiento. García suele decir que el Gobierno y las regiones bolivianas se comportan como si estuvieran en el umbral de una revolución cuando, en realidad, el país solo vive tiempos de reformas. Aunque cueste creerlo.
EXPECTATIVA EN EL PALACIO QUEMADO DESPUES DEL PREACUERDO FIRMADO POR LOS PREFECTOS DE LA OPOSICION
ARRANCA LA NEGOCIACIÓN CON LOS PREFECTOS
Los principales puntos a discutir son la redistribución de la renta hidrocarburífera, la compatibilización de la nueva Constitución con los estatutos autonómicos, llenar las vacantes en el Congreso y la depuración del padrón electoral.
Página 12 de Argentina (www.pagina12.com.ar)
Al enterarse de la apertura al diálogo por parte de los prefectos opositores, con palabras secas y gesto duro, el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, festejó sin euforia: “Ha fracasado el golpe cívico-prefectural”. En el transcurso del día de ayer, ésa fue la sensación que imperó en el Palacio Quemado. Una fría satisfacción que ya dejaba paso a las largas y tensas negociaciones que a partir de hoy por la mañana deberán encarar en la ciudad de Cochabamba los enviados del gobierno boliviano y los representantes de las prefecturas díscolas agrupadas en el Consejo Nacional Democrático (Conalde).
Tras cuatro arduas jornadas de negociaciones en las que todo indicaba que la opción por el diálogo volvía a fracasar, los prefectos opositores aceptaron suscribir el martes por la noche el “Gran Acuerdo Nacional” acordado por el vicepresidente Alvaro García Linera y el prefecto de Tarija, Mario Cossío. Allí se estipulan acuerdos mínimos sobre los que discutir el destino del excedente del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) con el que el gobierno financia la Renta Dignidad para los ancianos, la compatibilización de la Nueva Constitución Política del Estado (NCPE) con los estatutos autonómicos y un pacto institucional que defina las designaciones congresales de los cargos vacantes y el padrón electoral. En términos políticos, el gobierno cedió, garantizando siempre el pago de la Renta Dignidad, en lo que respecta al IDH y aceptó suspender por un mes el debate en el Congreso por la convocatoria a referéndum de la NCPE.
Por su parte, los cívicos aceptaron la restitución inmediata al Ejecutivo de las oficinas públicas e instalaciones petroleras invadidas, a la vez que garantizaron el desbloqueo de todas las rutas ocupadas. Y, si bien no figura formalmente en el texto del acuerdo, en los hechos los prefectos aceptaron soltarle la mano al detenido Leopoldo Fernández, otrora “cacique de Pando”.
En el día de ayer, varias fueron las hipótesis de por qué, finalmente, los prefectos aceptaron sentarse a una mesa de diálogo. Sin embargo, en todas hubo coincidencia en que la gota que rebasó el vaso fue la “masacre de Pando” en la que cerca de 30 campesinos fueron asesinados. “Cambian la estrategia porque necesitan sobrevivir”, interpretó Javier Macías, funcionario del Ministerio de Gobierno. “A diferencia de la prepotencia que ostentaron antes, esta vez sintieron los golpes del desgaste. Su propia violencia se está volviendo contra ellos mismos. Ya han dado muestras de que su opción no es por el diálogo. Lo que están haciendo ahora es un repliegue oportunista para recuperar fuerzas”, agregó el coordinador nacional de la representación presidencial para la Asamblea Constituyente, Juan Carlos Pinto.
Otro de los factores que se evaluaban era la incapacidad de los cívicos de controlar a sus propias bases en un marco de violencia que ellos mismos se encargaron de fogonear. Según fuentes consultadas por este diario, en el Palacio Quemado creen que, por tomar un caso, la Unión Juvenil Cruceñista está dispuesta a ir mucho más allá de lo que el presidente del Comité Pro Santa Cruz, Branko Marinkovic, o el mismo prefecto, Rubén Costas, pueden soportar en términos políticos y económicos. Un ejemplo de coyuntura sobre la cuestión económica es la inauguración del viernes próximo de Exposur, la emblemática feria que es fundamental para la burguesía cruceña. Para esa fecha, los cruceños precisan llegar relativamente airosos.
En una clara muestra de la apuesta que Morales suele hacer a su olfato político, a media mañana había declarado que convocaba para ayer a media tarde a todos los prefectos para iniciar el diálogo a puertas cerradas y a tiempo completo. Sin embargo, por problemas logísticos, los prefectos del Conalde fueron llegando paulatinamente a Cochabamaba en el transcurso de la noche. Así, divididos en tres comisiones, las arduas negociaciones comenzarán hoy a las 8 de la mañana de la Argentina.
El gran tema de debate girará en torno de la compatibilización de la NCPE y los estatutos autonómicos. De fondo, aquí la discusión es por el control de los recursos naturales (puntualmente los hidrocarburos) y la tierra. “En los temas fundamentales estamos más cerca de la ruptura que de acuerdos”, reconoció Pinto. Morales, en la misma línea que venía sosteniendo, se refirió ayer respecto de este dilema: “No estamos contra las autonomías, pero las que queremos son unas que sean legales y constitucionales para los pueblos, no para las oligarquías”.
Y, según pudo averiguar PáginaI12, a último momento se colaron en la agenda otros debates, un tanto más estructurales. Cossío le habría planteado a García Linera su disconformidad con la definición del “Estado Plurinacional” que la NCPE hace de Bolivia, bajo influencia de los movimientos sociales e indígenas. Sin embargo, tanto en este punto como en lo que respecta a la responsabilidad intelectual de Fernández en “la masacre de Pando”, que el Ejecutivo ha catalogado como genocidio, el gobierno seguiría intransigente.
EVO MORALES Y LA OPOSICIÓN NEGOCIAN PARA PONER FIN AL CONFLICTO BOLIVIANO
El País de España (www.elpais.com)
El acuerdo suscrito entre el Gobierno y los gobernadores rebeldes del Oriente de Bolivia ha abierto el camino a la pacificación tras semanas de violentos enfrentamientos que llevaron al país al borde de la guerra civil. El presidente, Evo Morales, que el lunes recibió un fuerte espaldarazo de Brasil y el resto de los países suramericanos a cambio de que apostara por la vía del diálogo con sus rivales, comenzó ayer mismo la ronda de negociaciones.
"Quiero verlos [a los gobernadores] esta tarde [por ayer] para iniciar el diálogo. No hablemos de 30 días, sino del tiempo que haga falta y a puerta cerrada", declaró el presidente en una rueda de prensa. Las conversaciones se llevarán a cabo en Cochabamba y, aparte del Gobierno y los gobernadores de Tarija y Santa Cruz (se espera que también acudan los de Beni y Chuquisaca), asistirán como mediadores las iglesias católica, metodista y evangélica, y observadores internaciones de Suramérica y Europa.
El acuerdo de diálogo estuvo a punto de fracasar el martes a raíz de la detención del gobernador de Pando, Leopoldo Fernández, acusado de genocidio por la muerte de 30 personas y la desaparición de un centenar en un enfrentamiento entre seguidores de Morales y rebeldes cerca de Cobija, la capital de Pando. Sin embargo, el resto de gobernadores decidieron seguir adelante con el diálogo no sin antes exigir un juicio justo para Fernández.
Zanjado este punto, el Gobierno puso sobre la mesa los puntos sobre los que está dispuesto a negociar : las autonomías, los ingresos por impuestos petroleros y la devolución a las autoridades estatales de las oficinas ocupadas por los opositores en varias regiones.
Puntos del acuerdo
Sobre las autonomías, el Gobierno garantiza su respeto a la autonomía de Pando, Beni, Tarija y Santa Cruz, regiones que han impulsado al margen del Gobierno central y del Congreso un proceso de autogobierno con la aprobación este año de sus respectivos estatutos de autonomía. El Ejecutivo también hace concesiones en cuanto a su nueva Constitución y acepta suspender al menos un mes la aprobación de la ley para convocar el referendo necesario para ratificarla. En cuanto a las rentas petroleras, el Gobierno reconoce el derecho de los departamentos a percibir el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Precisamente, el recorte de las rentas petroleras a las regiones para pagar una ayuda directa a los jubilados fue el detonante de la reciente crisis.
Por la parte autonomista, los opositores acceden a levantar las medidas de presión contra el Gobierno. Accedieron a "salir de las oficinas públicas e instalaciones petroleras ocupadas a raíz del conflicto" y a la suspensión de los cortes de carreteras que han mantenido paralizado a medio país.
Por otra parte, las Fuerzas Armadas de Bolivia pidieron ayer al Gobierno que exprese por vía diplomática su malestar a Venezuela por las declaraciones del presidente venezolano, Hugo Chávez, sobre una eventual intervención militar en caso de que Morales fuera derrocado.
LENTO PROCESO HACIA LA PAZ EN BOLIVIA
Noticias 123 de Chile (www.noticias.123.cl)
Mientras las negociaciones entre Gobierno y oposición siguen un curso incierto, las Fuerzas Armadas manifestaron su indignación por lo que catalogaron como declaraciones intervencionistas de Hugo Chávez. Anoche, sorpresivamente la oposición accedió a firmar un preacuerdo con el Gobierno, que establecía el inicio del diálogo para mañana jueves en Cochabamba. Sin embargo, el presidente, Evo Morales, se adelantó y llamó a los prefectos para esta tarde.
Al poco rato, grupos autónomos pro Gobierno amenazaban a los prefectos en un tono nada conciliador:
"Le damos plazo de 48 horas, que corre de las 00:00 horas de este miércoles, a la prefectura, al comité cívico y a la unión juvenil cruceñista para la inmediata devolución de las instituciones públicas, que son de los bolivianos y para los bolivianos".
Finalmente no hubo reunión y las conversaciones partirán mañana, tal como se había acordado inicialmente. Pero esa no fue la única descoordinación: el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Luis Trigo, pidió a la Cancillería un reclamo formal contra Hugo Chávez por declaraciones intervencionistas que consideran ofensivas hacia el Ejército.
"Me estarían dando luz verde para apoyar cualquier movimiento armado en Bolivia. No tendría yo ningún problema". Pero el canciller Choquehuanca dijo que no tener conocimiento de esa solicitud.
Bajo este ambiente se espera el inicio del diálogo en Cochabamba. El Gobierno boliviano anunció la presencia del embajador de Chile en Argentina, Luis Maira, como veedor de Unasur; José Miguel Insulza, por la OEA, y otros veedores como la Iglesia Católica.
ESPAÑA EXPRESA SU APOYO A MORALES
Diario Critico de España (www.diariocritico.com)
El Gobierno de España manifestó este jueves su "respaldo" al Ejecutivo boliviano de Evo Morales ante la crisis interna que atraviesa el país en las últimas semanas y rechazó "la utilización de la violencia con fines políticos". A través de un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, España salió en defensa del "gobierno constitucional de Bolivia" e hizo un llamamiento "para que las instituciones democráticas del país sean respetadas".
Asimismo, se congratuló "por el acuerdo alcanzado entre el Gobierno boliviano y los Prefectos de los Departamentos de la Media Luna, sobre las bases del diálogo que deberán iniciar ambas partes".
El Gobierno de Zapatero confió en que dicho diálogo "se lleve a cabo de una manera constructiva por ambas partes y pueda desembocar en un gran acuerdo nacional".
En este sentido, Exteriores se ofreció al Ejecutivo de Evo Morales "para colaborar, si el Gobierno y los Prefectos lo juzgan útil, en el buen resultado final del diálogo que está a punto de emprenderse en Cochabamba".
RECOMIENDAN ENVIAR MÁS PERSONAL DIPLOMÁTICO A BOLIVIA PARA AYUDAR A COMPATRIOTAS
Se necesita enviar mayor personal diplomático a diversas zonas de Bolivia donde no existan oficinas de la Cancilleria, con el fin de ayudar a los peruanos que lo requieran debido a la situación crítica que atraviesa dicha nación, afirmó el congresista y ex canciller Luis Gonzales Posada.
24 Horas Libres de Perú (www.24horaslibre.com)
“Hay que estar en alerta máxima a través de nuestras embajadas, y en las zonas donde no haya cónsules peruanos que se designe de inmediato personal diplomático que concurra a esas zonas a prestar atención a nuestros compatriotas.” En tal sentido, estimó que son cerca de 100 mil los peruanos que viven en ese país andino.
Gonzales Posada mencionó que no en todas las regiones de esa nación existe representación diplomática, por lo que recomendó a la Cancillería que envíe mayor personal, sobre todo en los lugares donde se ha registrado una ola de violencia.
El ex presidente del Congreso lamentó que Bolivia pase por una situación de convulsión, pero mencionó que se debe salvaguardar la integridad de los peruanos que radican en esa nación.
Recordó que algunos países como Estados Unidos envían aviones con el propósito de proteger a sus ciudadanos y retirarlos de suelo boliviano.
Por otro lado, mencionó que es necesario que el mandatario boliviano, Evo Morales, brindé detalles sobre la presunta participación de peruanos en los hechos de violencia en el departamento boliviano de Pando.
Gonzales Posada dijo que este tipo de afirmaciones han sido un “agravio” para el país, más aún cuando no se han presentado las pruebas que avalen estas acusaciones.
“Nosotros exigimos las explicaciones correspondientes, las excusas de parte del presidente de Bolivia porque fueron usadas tanto por el presidente como el ministro del Interior. No podemos quedarnos de brazos cruzados con ofensas de ese calibre.”
Agregó que no sería la primera vez que el mandatario boliviano se refiere al Perú de una manera irrespetuosa.
BOLIVIANO LLEGA A LA SERENA RECORRIENDO 2500 KM POR LA PAZ
La travesía terminará en Santiago con un mensaje de unidad para ambos paises.
La Tercera de Chile (www.tercera.cl)
Más de 3 mil kilómetros es la meta que pretende realizar caminando el deportista boliviano Raúl Carvallo de 57 años, quien partió el pasado 8 de julio desde La Paz, con el claro objetivo personal de llevar un mensaje de unidad entre ambos países.
Avanza entre 60 a 70 kilómetros con tan sólo una mochila de 14 kilos y las banderas de Chile y Bolivia junto con el apoyo de Carabineros que transporta su equipaje de tenencia a tenencia en el trazado de la ruta nacional.
Este miércoles el trotamundo llegó a la Intendencia regional de La Serena, lugar donde fue recibido por el Seremi de Gobierno Francisco Villalón, a quien comentó de su idea y de la unión bioceánica entre Bolivia y Chile. "Es un deseo de integración para unir los países de Sudamérica. He decidido hacer esta caminata con un mensaje de paz y hermandad que une La Paz y Santiago. Los chilenos y sus autoridades me han otorgado todo el apoyo , además de mi país", aseveró.
Carvallo habló además sobre el conflicto de su país, puntualizando que es lamentable, porque existen dos polos en conflicto. Agregó que la intervención de la Presidenta Michelle Bachelet ayudará a que exista la preciada calma que pregona con esta caminata.
La idea, según señaló el deportista boliviano, es poder conversar con la Presidenta Bachelet cuando llegue a Santiago en unos 20 días más, gracias al apoyo del Consulado Boliviano que sigue cada uno de sus pasos en nuestro país. La travesía se financia con un 50 % de recursos aportados por el gobierno de Bolivia y el resto por sus familiares que poseen un restaurant.
El Seremi de Gobierno Francisco Villalón destacó el esfuerzo del caminante, porque realiza un trabajo significativo al transmitir un mensaje de unidad, y puntualizando que ante su llegada a la zona el gobierno regional dispuso de alojamiento y alimentación, tal y como también ha sucedido en el norte grande.
Hasta este miércoles, Raúl Carvallo lleva un recorrido de dos meses y 10 jornadas de travesía, que continuarán hasta llegar a su meta, Santiago.
INSULZA RESPONDE A LA DERECHA
La Nación de Chile (www.lanacion.cl)
Bombardeado desde la derecha, por su supuesta inacción ante la crisis política en Bolivia, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, respondió a los cuestionamientos de la oposición a su rol en este conflicto, aseverando que es “completamente falso” que la entidad que dirige haya sido marginada de la búsqueda de una salida pacífica al impasse que afecta a la administración del Presidente Evo Morales.
“Creo que tiene que ver con desconocimiento sobre el proceder de la OEA. Yo asistí sólo como invitado a la cumbre Unasur, no había ningún integrante de otro organismo y no se habla de que están excluidos”, subrayó Insulza, que argumentó que además es evidente que Unasur, cuya presidencia pro témpore corresponde a Chile, tendrá injerencia en los asuntos que afecten al continente.
“La Unasur nació hace poco, por lo tanto, habrá que acostumbrarse a que temas sudamericanos que se traten en la OEA se traten en la Unasur”, dijo Insulza a Radio Duna.
En el PS la embestida contra su presidenciable fue calificada de “maquiavélica” por el timonel, Camilo Escalona, que aseveró que “los ataques de la derecha a Insulza tienen que ver más bien con un propósito de política interna”. “En este caso la OEA tuvo una débil capacidad de acción, por las profundas diferencias que hay en los estados que la constituyen. No olvidemos que EEUU es un Estado miembro ( ) La OEA no iba a hacer lo que era capaz de hacer la Unasur y eso la derecha lo sabe, por eso es que es muy maquiavélico su ataque a Insulza”, dijo.
Opinión
UNASUR: MEMORABLE CUMBRE
La Jornada de México (www.jornada.unam.mx)
La cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) sobre la grave situación en Bolivia ha sido un nuevo y rotundo grito de independencia y unidad de América Latina. Por primera vez un grupo significativo de sus presidentes condena y adopta decisiones prácticas contra una conjura golpista orquestada por el imperio del norte. Este hecho y cada idea en la Declaración de la Moneda, aunque no se mencione por su nombre, señalan con el dedo acusador a Estados Unidos: la simbólica alusión a Salvador Allende y el categórico compromiso con el respeto a la soberanía, la no injerencia en los asuntos internos, la integridad e inviolabilidad territorial, la democracia y los derechos humanos.
Eso es lo sustantivo de la cumbre, que de modo unánime dio su apoyo irrestricto al presidente Evo Morales, condenó a los grupos desestabilizadores y sus acciones vandálicas, la masacre de campesinos en Pando que “no debe” quedar impune, exigió poner fin a esas acciones y la devolución de las instalaciones gubernamentales ocupadas como condición al inicio de un diálogo “conducido por el legítimo gobierno de Bolivia” y advirtió que no aceptará el golpe “civil” atentatorio contra la integridad territorial de Bolivia. Es trascendente el nombramiento de comisiones para investigar la masacre, acompañar el diálogo de La Paz con la oposición y brindarle el apoyo logístico que requiera. Unasur, en suma, enfrentó airosamente su primer gran desafío y ello refleja la emergencia en nuestra América de un nuevo tipo de gobiernos celosos de la soberanía nacional y con sensibilidad social, obviamente impulsados por las decisivas luchas populares que han llevado a la cabeza de ellos a buena parte de los reunidos en Santiago de Chile.
La cumbre ha sido un resonante triunfo político de Evo Morales y un reconocimiento a su talla de estadista, así como al talento político con que él y los movimientos sociales bolivianos han conducido la difícil brega por una democracia de las mayorías; y una derrota política dentro y fuera de Bolivia de los prefectos separatistas y su titiritero. Constituye también una clara advertencia a éste y a las oligarquías de la región de que no podrán seguir actuando impunemente con el matonismo que acostumbraban en otros tiempos. Deja sentado un precedente importante para la defensa indeclinable de la democracia en América Latina, que aquellos sólo respetan cuando se reduce a sus aspectos formales y no toca sus intereses ni con el pétalo de una rosa. Por ello es valiosa frente a las acciones ferozmente desestabilizadoras en Venezuela, donde se ha llegado al intento de magnicidio, y a los sucesos semejantes evidenciados, con distintos grados de intensidad, en Paraguay, Argentina, Ecuador, Honduras y Nicaragua. En fin de cuentas, todos ellos convergentes a la contraofensiva que desde el ataque a la soberanía territorial de Ecuador intenta montar Estados Unidos para aplastar los gobiernos y fuerzas populares latinoamericanas que han puesto en solfa su hegemonía política y control tradicionales sobre nuestros recursos naturales.
Bolivia, Venezuela, Cuba y Ecuador son los objetivos principales a golpear pero debe considerarse que la Cuarta Flota y otros instrumentos de intervención militar como el Plan Colombia responden a designios imperiales yanquis de reconfiguración geopolítica mucho más amplios. No es casual la oposición al restablecimiento de esa fuerza de asalto en los círculos gobernantes de Brasil, potencia económica emergente de peso mundial poseedora de estratégicas reservas de agua, biodiversidad y energéticas, así como de Argentina, colosal productora de alimentos; ambos dueños de vías fluviales y geografía de enorme importancia económica y militar.
El espaldarazo a Evo en la reunión de Santiago cobra mayor importancia cuando es evidente que la batalla por Bolivia entra en su fase más crítica, pues Washington y su jauría mediática, con CNN y El País a la cabeza, persisten en su aliento a la subversión fascista. Bolivia necesita más solidaridad que nunca.
CUMBRE UNASUR: PALABRAS DE BUENA CRIANZA
"La reunión de UNASUR "no se avanzó demasiado salvo en lo relativo a palabras de buena crianza respecto de la democracia, el valor de los gobernantes legítimamente elegidos, el respeto a los derechos humanos, etc. Todas ellas loables y aplaudibles, pero que sin embargo en nada concreto ayudan a frenar la crisis que vive Bolivia".
Diario Exterior de España (www.eldiarioexterior.com)
Por más de cinco horas estuvieron reunidos en el Palacio de La Moneda, en Santiago de Chile, los presidentes sudamericanos más el canciller de Perú, quienes fueron convocados a una reunión extraordinaria por el presidenta en ejercicio, Michelle Bachelet. Estrictamente es una forma de decir, pues el verdadero convocante fue Hugo Chávez quien adelantándose a la mandataria chilena lo propuso el viernes pasado.
Tras conocer la declaración emitida por los presidentes, quedan muchas dudas y ninguna respuesta, pues más allá del hermetismo de la reunión y la falta de comunicación con la prensa, es evidente que no se avanzó demasiado salvo en lo relativo a palabras de buena crianza respecto de la democracia, el valor de los gobernantes legítimamente elegidos, el respeto a los derechos humanos, etc. Todas ellas loables y aplaudibles, pero que sin embargo en nada concreto ayudan a frenar la crisis que vive Bolivia.
Llamados a constituir una mesa de diálogo entre la oposición y el gobierno boliviano, con la presencia de personal de UNASUR y colaboradores de la OEA, en nada resuelven el conflicto, ¿por qué? Pues tal como señaló el columnista de La Tercera, José Rodríguez Elizondo, la reunión no estaba focalizada en la solidaridad respecto de los problemas internos de Bolivia, o ¿acaso alguno de los jefes (y jefas) de Estado apoyarían a la oposición al MAS?, sino que el foco de atención estuvo en su problema externo, es decir: Hugo Chávez, quien en víspera de las elecciones regionales venezolanas buscar utilizar cualquier instancia para revertir su baja de popularidad en Venezuela.
Queda la duda de cuál fue el papel de Brasil en esta reunión ¿jugó como contrapeso a Venezuela?
Por otro lado, ¿dónde esta la OEA?, que como acertadamente señaló el canciller peruano, es el organismo llamado a ser el foco por tener la institucionalidad, los instrumentos legales (mandato de carta democrática) y la experiencia necesaria.
La constitución de una comisión, que quizás fue idea de la gobernante chilena, esperemos que rinda algún fruto, pero lo claro es que Bolivia no tiene posibilidades de resolver su problema de manera soberana e independiente. Chávez es un factor fundamental y Morales no hará nada que "su padre" no le indique. Una especie de reedición de lado oscuro de la fuerza.
Estados Unidos seguramente siguió con atención la reunión en La Moneda, claro que no debiera ser mucha ya que éste no es un tema que le quite el sueño a la nación del norte, que en medio del conflicto en Georgia y medio oriente, América Latina suena como un murmullo dentro de las preocupaciones de su política exterior. No obstante, debiera ser capaz de dar señales claras frente a los insultos del mandatario venezolano y no permitir que gratuitamente el dictador caribeño se haga de las suyas en la región. No hay que olvidar que Estados Unidos ha diversificado su matriz energética, y su dependencia del petróleo venezolano puede ser reemplazada, quizás en parte por la propia Colombia, en tanto que para Venezuela no es fácil reemplazar el mercado norteamericano y no tiene capacidad de almacenar el petróleo no vendido. ¿Rusia vendrá a salvar a Chávez como en el pasado lo hizo con Castro y el azúcar cubana?
Chávez hasta el término de la conferencia, aun no se robaba la atención de las cámaras, salvo por su desafortunado tributo a Allende, que los presidentes secundaron en la declaración.
En el entretanto, si bien se llama a la unidad de Bolivia, nada se dice del atropello a los derechos democráticos de la oposición. Lo más difícil está por venir, ¿civiles contra civiles?, ¿militares contra civiles?, o ¿militares contra militares?, es el fantasma de la fragilidad democrática latinoamericana.
CÓNSUL DE BOLIVIA:"TESTIGOS CONFIRMARON PRESENCIA DE SICARIOS PERUANOS"
Radio Uno de Tacna, Peru (www.radiouno.com.pe)
El Cónsul de Bolivia en Tacna, Sandra Choque Ramírez, confirmó las versiones que hablan de la presencia de sicarios peruanos en los recientes conflictos ocurridos en el país altiplánico.
"Hay personas que estuvieron cerca de los hechos y que han confirmado la presencia de sicarios peruanos y brasileros, los mismos que huyeron después de cometer los crímenes", comentó Choque Ramírez.
Sin embargo a pesar de estas versiones, el diplomático boliviano indicó que se están realizando las investigaciones para determinar la veracidad de las versiones vertidas por los testigos.
El Cónsul Boliviano, recalcó que de ser realidad la presencia de sicarios peruanos en la zona de Pando, este hecho no debería afectar bajo ningún concepto las relaciones bilaterales entre Perú y Bolivia, pues se trata de un hecho aislado en el que la nación y el gobierno peruano no se ven envueltos.
Por el contrario, el representante de Bolivia en Tacna, agradeció las muestras de apoyo dadas por el Perú y en especial por la región tacneña.
"Han habido muchas muestras de afecto por parte de todos los peruanos, y se que aquí en Tacna harán mañana una marcha los etnocaceristas y es algo que en verdad apreciamos mucho como bolivianos", finalizó Sandro Choque
Opinión
DESENFRENO REACCIONARIO: LA MASACRE PARAMILITAR EN BOLIVIA
Nacla de Estados Unidos (www.nacla.org/node)
La expulsión del embajador de EE.UU., Phillip Goldberg, el 10 de septiembre, por el presidente boliviano Evo Morales por presunta conspiración para realizar un golpe de Estado provocó la última crisis diplomática en las Américas. Pero el efecto diplomático ha eclipsado la dinámica interna que condujo a la masacre de unos 30 campesinos y a posiblemente otros 40 desaparecidos en El Porvenir, Pando, cerca de la frontera noreste de Bolivia con Brasil. La matanza coincidió con el 35 aniversario del violento derrocamiento del presidente socialista Salvador Allende en Chile.
La masacre en El Provenir fue la peor en Bolivia desde que el gobierno del presidente derechista Gonzalo Sánchez de Lozada, cuando se realizó la matanza de más de 70 manifestantes desarmados en octubre de 2003. Esta vez, sin embargo, la violencia no fue orquestada por el gobierno central, sino por funcionarios regionales: prefectos departamentales asociados con comités cívicos.
Organizada administrativamente de manera similar a Francia, Bolivia está dividida en nueve departamentos, cada cual dirigido por un prefecto, mientras los comités cívicos están compuestos por un puñado de elites no elegidas, locales, comerciales y terratenientes que presiden sobre una de las distribuciones de tierras y riquezas más desiguales del mundo. Estas autoridades del sector público y privado, por su parte, están aliadas con pandillas juveniles paramilitares cripto-fascistas armadas de bates de béisbol, garrotes, cadenas, pistolas, y en el caso de la masacre de El Porvenir, de vehículos oficiales. Estos grupos han hecho que las tierras bajas del este de Bolivia sean ingobernables para el gobierno de Morales.
Podría ser útil que los lectores estadounidenses consideraran que las tierras bajas orientales de Bolivia se parecen en algo a Dixie [el sur de EE.UU.] En los años cincuenta y sesenta, trabajando con gobernadores y alcaldes de Estados y localidades, grupos paramilitares supremacistas blancos aterrorizaron a los afro-estadounidenses. La campaña de terror tenía el propósito de preservar un status quo que beneficiaba a una ínfima clase de acaudalados terratenientes blancos, contra los cuales el gobierno federal – bajo Eisenhower y Kennedy – vacilaba antes de actuar.
Imaginad, sin embargo, que los afro-estadounidenses hubieran constituido una abrumadora mayoría de la población de EE.UU., que Kennedy hubiera sido negro, y que hubiera llegado al poder como resultado de insurrecciones seriales de afro-estadounidenses. Imaginad que, como reacción, los supremacistas blancos no sólo hubieran masacrado a los negros, sino bloqueado carreteras, hecho volar oleoductos, y quemado y saqueado oficinas e instalaciones del gobierno federal.
Los límites de la analogía dentro del sur de Jim Crow son importantes, pero otra analogía – de un siglo antes, los años cincuenta y sesenta del Siglo XIX – los trasciende. El movimiento secesionista del sur trataba de preservar la república de la esclavitud y extenderla a por el oeste hacia el Pacífico. El movimiento movilizó una masa de seguidores y articuló un desafío armado contra el gobierno federal. Analogías semejantes ayudan a representar la virulencia de lo que un comentaristas ha calificado de “revuelta de los ricos,” así como el alcance del desafío planteado por una minoría blanca acaudalada a un gobierno respaldado por una mayoría de trabajadores y campesinos de ascendencia india, un gobierno sin precedente histórico.
El apoyo masivo para el gobierno central fue ratificado recién el 10 de agosto en el referendo revocatorio en el que Morales aumentó su parte general en los votos a un 67% - de un 54% cuando fue elegido presidente a fines de 2005. Morales mejoró su posición en sus baluartes – las ciudades y el campo de las tierras altas y valles del oeste, así como en las regiones cocaleras en los Yungas y el Chapare. Pero aún más importante es que hizo progresos en el corazón de las áreas opositoras en Beni, Pando, y Tarija, donde ganó un 20% adicional en comparación con 2005. En Pando, casi la mitad de la población votó a favor de Morales. Ningún presidente boliviano ha tenido alguna vez un apoyo tan amplio en toda la nación.
Inmediatamente después de la victoria, Morales habló de diálogo y reconciliación con la oposición. Pero los prefectos opositores, dirigidos por Rubén Costas de Santa Cruz, y empoderados por sus sustanciales mejoras en el mismo voto revocatorio, anunciaron su intención de implementar los “estatutos” aprobados en “referendos de autonomía” en mayo y junio de 2008. Los “referendos de autonomía” fueron ejercicios de facto de votación, carecientes de toda validez legal en Bolivia, no fueron reconocidos por ningún gobierno extranjero, y no fueron supervisados por observadores internacionales. Pero los prefectos opositores pretendieron tener un mandato para instalar su propia policía, servicios de cobro de impuestos, y legislatura departamental. La implementación de este mandato sólo podía tener lugar mediante el uso de la fuerza.
Luego vino el 11 de septiembre. Escuadrones de la muerte armados de pistolas ametralladoras masacraron a partidarios desarmados de Morales que iban en camino a una manifestación de masas en El Porvenir. La reunión había sido convocada para discutir posibles reacciones a ataques cada vez más violentos contra partidarios del gobierno. El gobierno central fue lento e indeciso en su reacción cuando finalmente terminó por actuar. No pudo salvaguardar la propiedad y las vidas de sus partidarios o defender sus propias oficinas y funcionarios, ni siquiera pudo suministrar ayuda humanitaria a los supervivientes, muchos de los cuales, temiendo por sus vidas, se ocultaron en las montañas. En una entrevista televisada, la delegada presidencial en Pando, Nancy Texeira, preguntó con una voz titubeante sofocada por el dolor y la tristeza: “¿Por qué no hace algo el gobierno en La Paz? Hemos sido abandonados.”
Durante los últimos años, Morales ha desarrollado buenas relaciones con la policía y las fuerzas armadas, pero generalmente no se ha mostrado dispuesto o capaz de utilizarlas desde que comenzó la crisis en agosto. Destacamentos armados de la oposición han apabullado a la policía y a los militares en las tierras bajas, hasta ahora impunemente. Por lo tanto, las fuerzas de seguridad bolivianas han sido humilladas según su código institucional común. Y sin embargo, mientras la oposición incrementa la apuesta de violencia e ilegalidad, el gobierno central se muestra cada vez más renuente a monopolizar el uso legítimo de la fuerza, y la oposición se hace cada vez más atrevida en la persecución de partidarios de Morales.
Ésta, por lo menos, ha sido la dinámica en Pando. Prefectos opositores en Beni, Santa Cruz, y Tarija han desistido en cierta medida en sus ataques, y han aceptado aparentemente el “diálogo” con el gobierno de Morales, pero el daño ha sido hecho. Morales declaró la ley marcial en Pando y ordenó el arresto del prefecto departamental, Leopoldo Fernández, el 12 de septiembre. Muchos partidarios de Morales se preguntarán por qué mantiene el diálogo con los prefectos opositores en Beni, Santa Cruz, y Tarija, cuando estos – y sus partidarios – podrían ser legítimamente juzgados por sus crímenes.
La reunión de emergencia de la Unión Suramericana (UNASUR) convocada por la presidenta Michelle Bachelet en Chile el 15 de septiembre es una señal de tiempos cambiantes en el hemisferio occidental. Dictadores militares como Augusto Pinochet de Chile, Hugo Banzer de Bolivia, y sus vástagos bastardos como Leopoldo Fernández – quien comenzó a fines de los años setenta como paramilitar bajo sucesivas dictaduras – pertenecen al pasado.
La nueva diplomacia regional ejercida a través de la Organización de Estados Americanos (OEA), el Grupo de Río, y ahora UNASUR ha enfrentado exitosamente crisis diplomáticas provocadas por el gobierno de EE.UU. y sus aliados locales de la derecha. Aunque la expulsión por Hugo Chávez del embajador de EE.UU. en Venezuela ocupó los titulares en EE.UU., la crisis boliviana se vio de modo muy diferente en los medios regionales. Bolivia vende la mayor parte de su gas natural a Brasil y Argentina, y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y la presidenta argentina Cristina Fernández denunciaron el movimiento separatista en términos extraordinariamente enérgicos. El resultado de la reunión de UNASUR demostró además que Morales cuenta con un robusto apoyo de gobiernos vecinos y de las principales organizaciones inter-estatales a las que pertenecen.
En vista del repudio regional a movimientos secesionistas en Bolivia y del abrumador apoyo a Morales en el interior, las fuerzas opositoras tienen pocas probabilidades de derrocar a Morales y de instalar un gobierno derechista. Además, tienen que enfrentar la formidable y creciente resistencia dentro de sus propios departamentos, no sólo en el campo sino también en las ciudades: la parte norteña de Beni es controlada por grupos indígenas que respaldan al gobierno de Morales, por ejemplo, mientras partidarios campesinos de Morales libraron batallas campales contra la oposición en Tarija (la capital del departamento del mismo nombre)
El desenfreno reaccionario en las tierras bajas es el resultado de una minoría desesperada, acorralada, que ha recibido considerable espacio de maniobra por parte de un gobierno central débil, vacilante, que sin embargo goza de masivo apoyo popular. Ya que no puede recuperar el gobierno central y está aislada internacionalmente, la última arma de la oposición es arrebatar la ilegitimidad al gobierno de Morales, haciendo que el país no sea gobernable.
La oposición ha demostrado la incapacidad del gobierno central de imponer el Estado de derecho contra el terror público-privado contra sus partidarios – un triunfo espectacular para cualquier movimiento derechista. Desde el referendo revocatorio de agosto, el marco de ilegalidad trazado por la oposición ha sido inconfundible. Aunque nadie anticipó la escala de la masacre de El Porvenir era casi seguro que alguna tendría lugar.
¿Y si el gobierno boliviano hubiera intentado de impedir esta tragedia enviando al ejército y a la policía anti-disturbios antes de que alguno de sus partidarios fuera muerto, en lugar de reaccionar débilmente y con vacilación después de los hechos? ¿Se pondrá el gobierno a la altura de las circunstancias en el futuro, o habrá aún más masacres?
Si el gobierno de Morales no logra garantizar las vidas y la propiedad de sus partidarios, algunos de ellos pueden ser llevados a tomar la justicia en sus propias manos, en cuyo caso el cliché mediático de la inminente “guerra civil,” hasta ahora sólo una figura retórica, podría convertirse en realidad. No importa lo que suceda en el futuro, ahora hay una masacre más que conmemorar el 11 de septiembre, y el dilema planteado por el trágico ejemplo de Allende sigue siendo tan sobrecogedor como siempre.
DENUNCIAN EL ACCIONAR DE PARAMILITARES AFINES AL OFICIALISMO EN BOLIVIA
Refugiados bolivianos en Brasil denuncian el accionar de "guerrilleros" afines al gobierno. Los Ponchos Rojos son la milicia Aymara de Evo Morales.
Urgente 24 de Argentina (www.urgente24.com)
El estallido de nuevos conflictos en la prefectura boliviana de Pando, que dejó 18 muertos y más de 100 desaparecidos, generó la huída de centenares de bolivianos opositores a Evo Morales hacia Brasil. La militarizada prefectura opositora ha visto a su prefecto ser encarcelado junto a sus principales referentes y soporta el accionar de bandas armadas afines al gobierno que van por fuera de la ley.
Así como se han denunciado acciones pseudo paramilitares de la opositora Unión Juvenil Cruceña en diferentes prefecturas de Bolivia, también existe un ejército no convencional manejado por Morales: los Ponchos Rojos.
En la ciudad brasilera de Brasilea, limítrofe con Pando, hay, según el diario cruceño El Deber, 400 refugiados bolivianos que denuncian el accionar de grupos armados que actúan por fuera de los mandos militares. Entre los refugiados hay empleados de la prefectura y cívicos opuestos al régimen indigenista de Morales.
Edgar Balcázar, un ex empleado de la Prefectura de Cobija (la capital de Pando), exhibió a agencias de noticias los hematomas y marcas de la golpiza a la dice haber sido sometido poco después de la muerte de campesinos en la ciudad vecina de Porvenir, el pasado jueves.
"Querían matarme. No eran campesinos, eran guerrilleros, estaban armados y comenzaron a dispararnos. Pero no me mataron y pasé a Brasilea, donde me atendieron en un hospital y donde estoy hospedado en casa de unos amigos", dijo Balcázar a la AFP.
Paruma Escobar, también ex empleado de la Prefectura de Cobija, dijo que "hay muchas personas que cruzaron a Brasil, tanto a la ciudad de Brasilea como a municipios vecinos, y que aún están con mucho miedo. Incluso sabemos que hay gente escondida en los montes próximos a Brasilea".
Incluso los periodistas están bajo amenaza constante. Cabe recordar que durante la semana pasada se diferentes medios (La Razón, de La Paz y ATB entre otros) denunciaron que el gobierno nacional no les permitía llegar a Cobija para dar cobertura a los enfrentamientos en Pando.
Son pocos los periodistas que se atreven a dormir en Cobija. La prensa extranjera está alojada en un solo hotel, mientras que otros periodistas bolivianos se quedaron en Brasilea.
A varios les han disparado durante la jornada del martes. Carlos Lazcano, de la Red Unitel, trató de entrevistar a la delegada presidencial, Nancy Texeira, a unos 300 metros del aeropuerto cuando de pronto le dispararon desde la terminal aérea.
“Una bala le pasó a centímetros al camarógrafo. ‘Fílmeme, pariente’, le gritaba al camarógrafo, por si caíamos ahí. Después vinieron los militares, nos insultaron y nos dijeron que no se podía filmar”, relató Lazcano. Algo similar vivió Alexandre Lima, periodista de O Alto Acre, un periódico brasileño que obtuvo las imágenes de Leopoldo Fernández tomado prisionero.
Los Ponchos Rojos
La revolución indigenista que delineó Evo Morales para sus cinco años de gobierno en Bolivia tiene en los Ponchos Rojos (guerreros aymaras que tienen su centro de operaciones en Achacachi, pueblo ubicado en las riberas del lago Titicaca, unos 90 kilómetros al norte de La Paz) a sus celosos defensores.
Unos ponchos andinos de color rojo, tejidos a mano por las mujeres de Achacachi y comunidades aledañas, son su principal indumentaria.
El vestuario de esos guerreros aymaras se completa con "lluchu's" (gorro de lana con terminación cónica que cubre las orejas), chalina de color tierra, sombrero negro de piel de oveja de ala ancha para protegerse del sol y un pantalón de bayeta (tejido de lana de oveja) y abarcas (sandalias de llantas de motorizados) para los pies.
El arma más utilizada en más de cuatro siglos ha sido la "q'urawa" (una honda con piel de oveja) para lanzar piedras a velocidad y alta precisión.
Las piedras de pequeñas dimensiones, además de coca y alcohol, son llevadas en "ch'uspas" o bolsas de 20x20 centímetros que se cuelgan del hombro. "Muchos usan hondas con piel de zorro para tener más precisión en sus lanzamientos", apuntó Jorge Huasco.
Sin embargo, a pesar de esta imagen inocente y más bien tradicional, en diferentes oportunidades y desfiles se los ha visto portar fusiles y armas de fuego.
Es que los Ponchos Rojos son, en su mayoría, ex soldados del ejército boliviano que conocen de estrategia y tácticas militares. La preparación de algunos grupos se realiza en la planicie de K'ala Chaca ("puente de piedra" en aymara) y en el cerro Letanías de Viacha.
También son obligados a leer libros escritos por Fausto Reynaga, los que reivindican a los indígenas bolivianos y los instan a la toma del gobierno y del poder.
"Los fusiles Máuser fueron regalados a nuestros abuelos y padres por el presidente Víctor Paz Estenssoro para defender la Revolución Nacional de 1952", recordó Francisco Ramos de la subcentral de Warisata.
Agregó que los Ponchos Rojos son una herencia de sus antepasados, porque "defendieron la unidad y gobernabilidad de nuestros ayllus y comunidades".
Esteban Mamani, otro amauta (autoridad originaria) de Warisata, explicó que también existen ponchos de color negro, nogal, huayruru (rojo y negro) que son usados por autoridades originarias como Mallkus, Jilacatas y secretarios generales de los cantones vecinales.
Arengas desde el gobierno
La reaparición de los Ponchos Rojos se produjo a mediados de enero en un desfile con motivo de celebrar los 181 años de fundación de la provincia paceña Omasuyos.
"Ponchos Rojos para defender la patria. Si antes han descuartizado al territorio nacional, han descuartizado a Túpac Katari; ahora ningún caballero va a poder nuevamente descuartizar a Bolivia", arengó el presidente Evo Morales, acompañado de su vicepresidente, Alvaro García Linera, y del comandante general de las Fuerzas Armadas, el general Freddy Bersatti. En la marcha de Achacachi sobresalieron tres de ellos portando fusiles Máuser
El vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera, tuvo vínculos en el anterior decenio con los Ponchos Rojos y con el Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), que fue involucrado en atentados terroristas por lo que fue encarcelado junto a su hermano y al dirigente campesino, Felipe Quispe, llamado "Mallku" por sus seguidores.
García Linera a fines del año pasado pidió a los Ponchos Rojos sacar el fusil que tenían escondido bajo el poncho aymara. "Ese fusil debe ser usado para defender la unidad de Bolivia". Sus palabras sonaron como la explosión de una bomba en el oriente de Bolivia, donde se impulsa un proyecto autonómico que ganó en las urnas en cuatro de los cinco departamentos del país sudamericano.
El alcalde de Achacachi, Eugenio Rojas, negó rotundamente que los Ponchos Rojos sean un grupo paramilitar o guerrillero. "Los Ponchos Rojos no son un grupo de disfrazados, son la identidad de la nación aymara", precisó.
Recientes apariciones
La más reciente participación de fracciones de los Ponchos Rojos se remonta a octubre del 2003 en la llamada Guerra del Gas, que tuvo a El Alto, vecina ciudad a La Paz, como epicentro de una protesta social que forzó la renuncia del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada a sus cinco años de mandato constitucional.
"La Guerra del Gas comenzó el sábado 22 de setiembre del 2003 con la muerte de cuatro personas en Warisata. Un grupo de los Ponchos Rojos, lanzando piedras (porque no había armas), hizo huir al ministro (de Defensa) Carlos Sánchez Berzaín en un helicóptero militar. Luego fuimos hasta El Alto para participar en las barricadas y marchas para pedir la renuncia de Goni", relató Lino Villca.
Pero la presencia de los Ponchos Rojos no sólo se dio en las movilizaciones campesinas sino que logró proyectarse hasta el actual gobierno de Evo Morales, el primer indígena que accede por voto directo a la presidencia de Bolivia.
"Nosotros tenemos participación en el equipo de ministros de Evo Morales. Ahora está David Choquehuanca que es ministro de Relaciones Exteriores. Antes estaba nuestro hermano Félix Patzi como ministro de Educación", precisó Juan Carlos Condori, secretario ejecutivo de la federación de campesinos de la provincia Omasuyos de La Paz.
Dijo que los Ponchos Rojos están dispuestos a devolver los fusiles Máuser a cambio de ganado o tierras. "Hay varias formas de devolver. Nadie puede dar nada gratis en este mundo. En esto se basa la reciprocidad: yo te doy algo y tú también, a cambio. Vamos a practicar el ayni comunitario, el trueque, en este tema de las armas".
Las autoridades de Achacachi, Warisata y otras comunidades del altiplano de La Paz han reiterado en los últimos días que son gente de paz.
"Sólo luchamos cuando hay injusticia o sometimiento. Hoy reaparecimos porque queremos que el gobierno de nuestro hermano Evo Morales no sea atacado por los ricos y la oligarquía boliviana que no quiere esta revolución democrática", agregó el alcalde Eugenio Rojas.
RECLAMAN LA INJERENCIA DE CHÁVEZ EN SURAMÉRICA
Desde Bolivia, Ecuador y Paraguay protestan por declaraciones
El Universal de México (www.eluniversal.com)
Las Fuerzas Armadas de Bolivia, un alcalde de Ecuador y un líder opositor de Paraguay reclamaron por separado la injerencia del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la política interna de sus países.
Las Fuerzas Armadas de Bolivia manifestaron su "indignación" por las reiteradas y "desafortunadas" críticas de Chávez, y pidieron a la Cancillería boliviana transmitir por vía diplomática la queja militar, informó la prensa local, aseguró AFP.
El general Luis Trigo, comandante de las Fuerzas Armadas, cursó una nota al canciller David Choquehuanca fijando la posición de reclamo de los militares bolivianos, molestos por las declaraciones del mandatario que "mellan profundamente nuestra dignidad e integridad".
"Solicito muy respetuosamente a su digna autoridad hacer las representaciones pertinentes en el ámbito diplomático para expresar la indignación de las FFAA ante tan desafortunadas declaraciones", afirmó el general Trigo en su misiva.
"El presidente de Venezuela está haciendo reiteradas declaraciones en contra de este comando de las FFAA, atentando contra la unión y cohesión monolítica de la institución y poniendo en duda el rol constitucional que cumplimos... como baluartes de la democracia", dice la carta de Trigo, agregó Efe.
Chávez afirmó hace una semana que "si a Evo lo derrocaran, lo mataran, sepan los golpistas de Bolivia que me estarían dando luz verde para apoyar cualquier movimiento armado en Bolivia". Tras el reclamo militar boliviano por esas declaraciones, Chávez afirmó que Trigo y otros generales de Bolivia "tienen una especie de huelga de brazos caídos" para acatar las decisiones de Morales.
Trigo afirmó que la reacción de su institución fue de "rechazo enérgico y categórico contra la injerencia extranjera de cualquier tipo y venga de donde venga, en temas que son únicamente competencia de bolivianos". Respuesta guayaquileña
El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, pidió ayer públicamente a Chávez "que se meta en sus asuntos internos, de Venezuela", y lo acusó de injerencia luego que el mandatario venezolano dijera que los dirigentes guayaquileños buscan repetir el "separatismo" boliviano. "¿Qué se ha creído este señor? Que se meta en sus asuntos internos, de Venezuela", dijo el líder más visible de la oposición que defiende un modelo autonómico para su ciudad, la más populosa de Ecuador, agregó AP.
"Rechazo como alcalde de esta ciudad, como ecuatoriano y como hombre de derecho, la injerencia de Chávez en asuntos ecuatorianos y especialmente guayaquileños", aseguró Nebot.
Sobre el apoyo que el mandatario venezolano expresó al proyecto de nueva Constitución que es auspiciado por el gobierno del presidente Rafael Correa, Nebot consideró que "basta que Chávez esté con el 'Sí' para que los ecuatorianos tengamos una razón más para estar con el 'No'".
Objeción paraguaya
En Asunción, el ex jefe militar y político opositor Lino Oviedo pidió a Chávez que no trate de interferir en asuntos internos de Paraguay. "Lo que diga el presidente Chávez no tiene validez, nos tiene acostumbrados a declaraciones que ofenden a gobernantes... de América", aseguró. Chávez acusó el martes a Oviedo de conspirar contra el gobierno de Fernando Lugo. "Lino Oviedo está conspirando para dar un golpe en Paraguay, se está equivocando de pelo a pelo", dijo. En Paraguay "somos soberanos", enfatizó Oviedo.
Hugo Chávez había cuestionado la actuación de las FF.AA. bolivianas en la reciente crisis
EL ALTO MANDO PIDE AL GOBIERNO QUE TRANSMITA LA "INDIGNACIÓN" MILITAR POR INJERENCIA DE VENEZUELA
El comandante en jefe, general Luis Trigo, dijo que los desafortunados juicios del Mandatario "bolivariano" ponen en duda el rol constitucional del estamento castrense.
El Mercurio de Chile (www.diario.elmercurio.com)
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia, general Luis Trigo, solicitó ayer al canciller David Choquehuanca que transmita al Presidente venezolano, Hugo Chávez, "la indignación" castrense ante las "desafortunadas" declaraciones emitidas por el gobernante "bolivariano" contra las FF.AA. que "mellan profundamente nuestra dignidad e integridad".
Según informó el diario paceño La Prensa en su edición online, en la carta el general Trigo rechaza las reiteradas declaraciones del Jefe de Estado de Venezuela en contra de las Fuerzas Armadas porque estarían "atentando contra la unión y cohesión monolítica de la institución y poniendo en duda el rol constitucional que cumplimos desde la creación de la República, como baluartes de la democracia y la institucionalidad".
En medio de la crisis política y social que afecta al vecino país, Chávez amenazó el pasado jueves 11 con intervenir y "realizar movilizaciones de cualquier tipo" en Bolivia si se intentaba derrocar a Evo Morales, lo cual motivó el primer y enérgico rechazo de los militares contra la injerencia extranjera de cualquier tipo y "venga de donde venga".
Posteriormente, Chávez cuestionó en cinco oportunidades el accionar de las Fuerzas Armadas bolivianas y las acusó de no acompañar la gestión del Mandatario socialista Evo Morales.
Los dichos de Chávez causaron extrañeza debido a las buenas relaciones entre los militares y Morales, que los ha hecho partícipes de decisiones políticas -incluyendo las referentes a la polémica Constitución-, e inyectando el 2% de los recursos generados por el impuesto directo a los hidrocarburos a las FF.AA. Además, Morales se aseguró la lealtad del alto mando militar al pasar por encima de tres generaciones que les correspondía ascender para nombrar a los actuales generales.
Al decir de analistas independientes bolivianos y diversos sectores políticos, la carta del alto mando es una clara muestra que los militares buscan distanciarse de la figura de Chávez, pese a que Venezuela ha aportado más de US$ 30 millones para reforzar a las FF.AA. bolivianas.
Para el politólogo paceño Ludwig Valverde, el general Trigo ha manifestado una posición coherente y diplomática, y acorde con la función constitucional de las Fuerzas Armadas, que es defender al país de amenazas e intervenciones extranjeras.
"No haber dicho nada respecto a la alusión directa del Presidente Chávez al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas habría puesto a éstas en una incómoda y débil situación interna. Porque definitivamente habría sido no asumir la posición que corresponde a los militares en la institucionalidad, más aún en un tiempo de crisis", indica Valverde vía telefónica a este periódico.
Jorge "Tuto" Quiroga, ex Presidente de Bolivia y actual dirigente del opositor Poder Democrático Social (Podemos), enfatiza que la intrusión de Chávez en las Fuerzas Armadas bolivianas es sólo un eslabón de una cadena más amplia, con la cual busca controlar tanto política como económicamente a Bolivia, a fin de convertirla definitivamente en un satélite de su bloque "bolivariano".
En este contexto, Quiroga denuncia el caso de cheques girados por la embajada venezolana en La Paz que se reparten secretamente en guarniciones militares y los atentados cometidos por efectivos militares bolivianos, entrenados en Venezuela, contra canales de televisión independientes, con vehículos, explosivos y armas provistos por la legación venezolana.
"Más vale tarde que nunca, que alguien del alto mando militar haya representado la protesta de las Fuerzas Armadas como institución, porque en estos años de gobierno de Morales han sido sistemáticamente pisoteadas por Chávez", dice Quiroga a "El Mercurio".
Pese a ser asambleísta del Movimiento Al Socialismo (MAS), Roberto Aguilar también apoyó el pronunciamiento del alto mando. "Me parece correcto, porque si bien pudo haber habido buena intención de parte del Presidente Chávez, sus dichos contra el general Trigo fueron inadecuados. No corresponde que tenga un debate ni llame a la reflexión a un general boliviano", sostiene Aguilar.
"Yo sé que ese general (Trigo) y otros generales tienen allá una especie de huelga de brazos caídos, que han permitido a los fascistas masacrar al pueblo de Bolivia".
HUGO CHÁVEZ
"Quisiera haber visto desde un comienzo una actitud más firme en contra de Chávez".JORGE QUIROGA
> General "por el cambio"
Desde que asumió el cargo como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas bolivianas, en enero pasado, el general Luis Trigo Antelo ha dicho que "está con el cambio", nombre genérico que se da a las reformas políticas propuestas por Evo. Asimismo, ha declarado su irrestricto apego a la institucionalidad vigente.El general Trigo es cruceño y nació en Camiri, el 13 de agosto de 1953. Durante 2007 ocupó el cargo de comandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB).
En noviembre de ese año fue denunciado por presunto tráfico de influencias y nepotismo porque su hijo, Ricardo Trigo Cuéllar, trabajaba desde agosto de 2007 como piloto en Transportes Aéreos Bolivianos (TAB). Trigo negó las acusaciones.
> Hoy comienza diálogo en Cochabamba
El gobierno de Bolivia y sus opositores iniciarán hoy jueves en Cochabamba el proceso de diálogo para pacificar el país, ya que "problemas logísticos" impidieron comenzarlo ayer, como propuso Evo Morales.
Según un preacuerdo firmado el martes por el prefecto opositor de Tarija, Mario Cossío -en representación de sus colegas de Beni, Santa Cruz, Pando y Chuquisaca- y autoridades del Ejecutivo, se analizará una fórmula para buscar un pacto fiscal que solucione el pedido de las regiones en torno al impuesto petrolero que les quitó el gobierno para pagar una renta de vejez; se debatirán las autonomías regionales, punto crítico de la confrontación, y se buscará un medio para designar cargos acéfalos en el Poder Judicial.La apertura del diálogo se produce cuando el departamento norteño de Pando llega a su quinto día en estado de sitio y con su prefecto (gobernador), Leopoldo Fernández, detenido por las fuerzas militares luego de que el gobierno lo acusara de instigar una masacre que dejó al menos 16 muertos.
Fernández compareció anoche en La Paz para una diligencia judicial, en su primera aparición tras ser apresado. Allí afirmó que fue "engañado" en el momento de la detención y apoyó el diálogo nacional.
Candidato republicano habla sobre América Latina
JOHN MCCAIN AFIRMA QUE CHÁVEZ "PRIVA A LA GENTE DE SUS DERECHOS DEMOCRÁTICOS"
El postulante a la Casa Blanca comparó al líder venezolano con Evo Morales y concluyó que son "lo mismo".
El Mercurio de Chile (www.emol.com)
"Chávez esta moviéndose hacia una autocracia en Venezuela y está privando a la gente de sus derechos democráticos", aseguró ayer el candidato presidencial republicano, John McCain.
El postulante a la Casa Blanca prometió que hará "todo lo que esté en mi poder para respaldar la democracia y la libertad y los derechos humanos en Venezuela", en una entrevista a la cadena Unión Radio, del grupo español Prisa y que integran varias emisoras latinoamericanas.
McCain dijo que, a diferencia de su rival demócrata Barack Obama, él no se reuniría a conversar con Hugo Chávez. Y agregó que "Venezuela es un buen argumento para que logremos nuestra independencia energética".También señaló que "nuestra búsqueda de la democracia y los derechos humanos (a través de Latinoamericana) implica que deberíamos poner más atención a la región", al referirse a la situación de crisis en Bolivia.
Para el aspirante republicano, "es bastante similar la situación de Hugo Chávez y la de Evo Morales" pues, en su concepto, "ellos son muy parecidos, diría que son lo mismo".
Consultado sobre la comunidad hispana en Estados Unidos y las políticas de inmigración que tiene previsto aplicar si gana las elecciones de noviembre, McCain afirmó que "tenemos que asegurar nuestras fronteras, de manera humanitaria, comprensiva y compasiva".
Insistió en la necesidad de una reforma migratoria, para la cual aseguró que tendría el respaldo bipartidista. Ese apoyo "lo hemos tenido en el pasado. Yo trabajé con el senador Ted Kennedy y otros demócratas para poder ensamblar una coalición y fallamos porque no pudimos convencer a mucha gente que las fronteras estarían seguras", manifestó.
"Por gente como el senador Obama, que siempre hizo lo que decían los sindicatos en orden a eliminar el programa de trabajadores temporales, nosotros debemos tener un programa de trabajadores temporales", dijo. En otro ámbito, respaldó el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre su país y Colombia, y consideró que esos acuerdos comerciales son "buenos para la economía y la democracia".
Sobre Cuba, McCain criticó a Raúl Castro y afirmó que su objetivo será lograr elecciones libres en la isla, liberar a los prisioneros políticos y ayudar a las organizaciones humanitarias.
ENCUESTASGALLUP y Reuters/Zogby dieron ayer dos puntos de ventaja (47 a 45%) a Barack Obama por sobre McCain."No me sentaré nunca a hablar con Hugo Chávez, como ha dicho Obama que lo haría, sin ningún tipo de precondiciones".
LULA, UN NUEVO LIDERAZGO LATINOAMERICANO
El mandatario brasileño activa su presencia preocupado por la inestabilidad en el país que lo aprovisiona de gas.
El Universal de México (www.eluniversal.com.mx)
Luiz Inacio Lula da Silva gobierna con alta popularidad un país que no para de crecer y de exportar. Sus capitales se expanden por Sudamérica como un reguero de pólvora y, gracias a los últimos descubrimientos, va camino a convertirse en un país petrolero con libre acceso a la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP).
Pero lo que Lula no había ejecutado aún es el liderazgo regional de Brasil en el terreno político y diplomático. Ese aspecto de la nueva realidad brasileña debutó el pasado lunes en Santiago de Chile en la primera reunión de peso del Unasur, el flamante bloque que agrupa a los países sudamericanos.
La reunión, convocada de urgencia por la presidenta pro témpore, Michelle Bachelet, se extendió por más de cinco horas en las que el presidente brasileño utilizó todas las artes (incluso las sindicales) en materia de negociación para asegurar la carta de navegación del diálogo y la pacificación en Bolivia, que arrancó ayer. Ni bien la presidenta chilena efectuó la convocatoria, Lula se mostró esquivo y dubitativo. “No sé para qué vamos a reunirnos si las partes, mi amigo Evo y la oposición, no están dispuestas a acatar lo que allí se decida. Ahora si ellos lo piden y si se ratifica de todas las maneras la reunión, allí estaré”.
Y Lula estuvo. Y lo que fue más importante, se hizo notar. Se le venía reclamando desde numerosos sectores y países una mayor presencia y liderazgo en la región. Y en Santiago hizo su debut en ese rubro, acorde a la realidad brasileña, para muchos analistas una potencia regional en construcción. Aquella advertencia sirvió para atraer a Evo a su terreno y comprometerlo a respetar el acuerdo y para que la oposición le pidiera (a él y al Unasur) la intervención. Durante la reunión, según un diplomático participante en la misma, “contrarrestó los embates de (Hugo) Chávez con maestría. Incluso sus reiterados pedidos para que se incluya en el texto la crítica a Estados Unidos”. Algo que Lula ya había anticipado: “Ninguna crítica a Washington ni tampoco intervención extranjera en Bolivia”. Dos cuestiones que funcionaron como advertencias solapadas a Chávez, mientras a Estados Unidos pareció decirles: “Los problemas de la región se pueden arreglar en la región…”.
Brasil se hartó de ver jaqueada su provisión de gas boliviano y que el país con el que comparte 3 mil 100 kilómetros de frontera común, sea una fuente de desestabilización regional. Por eso Lula se movió en consecuencia, harto de los dislates diplomáticos de Chávez que suele campear por la región como jugando con un encendedor sobre el polvorín y de ciertos desplantes de La Paz.
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