Cada país tendrá que negociar de forma bilateral con Bolivia
CUMBRE TERMINA SIN SOLUCION
Las discrepancias sobre el futuro de Petrobrás en Bolivia también serán discutidas de forma bilateral, según informó el mandatario brasileño. En la reunión se garantizó el abastecimiento de gas a Argentina y Brasil.
El Universal de Venezuela (www.eluniversal.com)
La esperanza que mantenían los presidentes de Argentina, Néstor Kirchner y Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, de alcanzar un acuerdo específico con Bolivia acerca de la protección de sus intereses en materia de hidrocarburos en esa nación andina se diluyó en un acuerdo no específico.
Los mandatarios de Argentina, Brasil, Bolivia y Venezuela apenas acordaron en una cumbra realizada ayer que las negociaciones pendientes tras la decisión de Bolivia de nacionalizar sus hidrocarburos, una medida que generó incertidumbre sobre la provisión del combustible y su precio, serán bilaterales, dijo Reuters.
El presidente argentino, Néstor Kirchner, en conferencia de prensa, dijo que el documento acordado "es absolutamente claro, dice racionalidad, criterio, ayudar a la construcción, al crecimiento, al consumo, y es una situación bilateral que se va resolviendo entre los países que tengan que discutir el precio".
Previamente el presidente de Bolivia, Evo Morales, declaró que los gobiernos de Brasil y Argentina necesariamente tienen que entender su petición de pagar más por el gas de su país, reseñó la Agencia Boliviana de Información.
"Sí, Brasil y Argentina tienen que aumentar el precio del gas que están comprando porque, según el acuerdo, en 2004 ya se debían revisar los precios, y por tanto lamento que los gobiernos no hayan hecho eso", manifestó Morales tras su encuentro con el presidente venezolano, Hugo Chávez, en la noche del miércoles.
También como antesala a la reunión presidencial, el ministro boliviano de Hidrocarburos, Andrés Soliz, dijo a la agencia AFP que su gobierno deberá expropiar las empresas como último recurso, si tras 180 días fracasan las negociaciones con esas compañías.
En encuentro de dos
Tras el encuentro de los cuatro mandatarios ayer, el presidente brasileño, Lula da Silva, también destacó que las negociaciones deben ser entre Bolivia y los países a los que provee de gas.
Así, Kirchner, Lula, Chávez y Morales se comprometieron a profundizar los diálogos bilaterales para resolver cuestiones pendientes, profundizar el Mercosur y consolidar la integración suramericana.
"Respetamos y saludamos la decisión soberana de cada país y en este caso del pueblo boliviano", dijo Kirchner.
En este marco, Bolivia acordó con Argentina y Brasil que les asegurará el abastecimiento de gas natural.
"El abastecimiento de gas está preservado", dijo el presidente de Argentina, tras cinco horas de conversaciones con sus pares de Bolivia, Brasil y Venezuela.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, defendió la nacionalización de los hidrocarburos resuelta el lunes pasado por su par de Bolivia, al sostener que la medida "va a afectar en positivo" a los intereses de la región.
"No va a afectar para nada, al contrario, la va a afectar en positivo", dijo Chávez.
Las discrepancias sobre el futuro de Petrobrás en Bolivia _donde tiene inversiones de 1.500 millones de dólares_ así como los nuevos valores del gas, deberán ser discutidos bilateralmente, dijo Lula en rueda de prensa.
Tanto Argentina como Brasil son grandes consumidores del gas boliviano.
"Garantizamos en esta reunión el abastecimiento, y que los precios serán discutidos entre las partes", dijo Lula, un día después de que Petrobrás anunciara que no admitiría aumentos fuera de los mecanismos previstos en los contratos suscritos con Bolivia.
El mandatario brasileño reconoció la soberanía de Bolivia en el manejo de sus recursos energéticos, reportó la agencia AFP.
"Los nuevos precios (del gas) serán discutidos en la forma más democrática posible. Reconocemos la situación difícil de Bolivia y del presidente Evo Morales. Reconocemos la soberanía de Bolivia sobre sus recursos".
Al responder preguntas de la prensa Lula descartó también la existencia de una supuesta alianza entre Bolivia y Venezuela para enfrentar a Buenos Aires con Brasilia.
"Ninguno de los (cuatro) países quiere hegemonía sino asociación", indicó Lula, cuyo país fue el que recibió el mayor impacto tras el anuncio de Morales de nacionalizar los recursos energéticos, que afecta duramente a la empresa brasileña Petrobrás, con fuertes inversiones en Bolivia.
"Si no comprendemos que lo que va a dar dimensión internacional a nuestros países es la unidad, no mereceremos la confianza de nadie", dijo Lula tras la reunión.
El invitado especial en la reunión, Evo Morales, optó por expresar su "alegría" y "honor" por haber compartido una cumbre con los presidentes de "los países más desarrollados" de Suramérica, a quienes agradeció sus "muestras de solidaridad" por los problemas que sufre Bolivia.
"Estoy seguro de que se van a resolver los problemas con los países vecinos solidarios", dijo Morales.
Además de anunciar la incorporación de Bolivia al gasoducto del sur, los mandatarios también se comprometieron a sostener una nueva reunión en agosto próximo.
La cita que tendrá lugar en Caracas servirá para seguir tratando el tema de la integración energética.
La crisis regional: se reunieron Kirchner, Lula, Chávez y Morales
BOLIVIA SEGUIRÁ ENVIANDO GAS, PERO NO SE SABE A QUÉ PRECIO
La cumbre de Iguazú sirvió para descomprimir la tensión por la provisión de gas; el gobierno boliviano pretende un fuerte ajuste en los valores; negociará bilateralmente.
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
De un modo u otro, la crisis iba a descomprimirse. ¿Cómo? En síntesis, Evo Morales aceptó la invitación de Néstor Kirchner, Luiz Inacio Lula da Silva y Hugo Chávez a formar parte del proyecto del gasoducto, o megagasoducto, que partirá desde Venezuela y surcará las entrañas de la región hasta el sur argentino, y se comprometió a evitar eventuales problemas en el abastecimiento de gas boliviano a Brasil y a la Argentina. También, a negociar los futuros precios “en un marco racional y equitativo”.
No hablaron de montos ni de volúmenes, sino de fijar una base política para evitar nuevos contratiempos y de fomentar “los diálogos bilaterales para resolver las cuestiones pendientes”. De todos modos, fuentes argentinas y bolivianas en La Paz revelaron ayer a LA NACION que Bolivia pretende aplicar un aumento del 64% al gas que le vende a la Argentina.
En coincidencia con la reunión del presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, con su par norteamericano, George W. Bush, en la Casa Blanca, también “expresaron su voluntad de trabajar para la profundización del Mercosur y la consolidación de la integración sudamericana”.
La cumbre coincidió, a su vez, con la presentación argentina ante la Corte Internacional de La Haya (de lo que se informa por separado). A ello se refirió el canciller Jorge Taiana mientras los presidentes estaban reunidos, aunque Kirchner aclaró que no recibió adhesiones ni reproches de sus colegas porque se trata de “un tema bilateral”.
En la reunión privada entre los cuatro, Lula le planteó a Morales: “Por la compra de gas, Brasil le paga 1000 millones de dólares por año a Bolivia”. En ese momento, sentados frente a mesas rectangulares que formaban un cuadrado, de modo que se vieran las caras, y que tenían manteles blancos sobre los cuales sólo había carteles con los nombres de los países, Kirchner y Chávez concluyeron que el presidente brasileño estaba advirtiéndole a su par boliviano que podía buscar nuevos mercados.
En defensa del decreto de nacionalización de los hidrocarburos, motivo de la preocupación de Lula, del respaldo de Kirchner y de la presencia de Chávez, Morales exclamó: "Ni Pinochet privatizó el cobre chileno". Hablaba, según relató después el presidente venezolano a algunos periodistas, de la necesidad de devolver al Estado el papel que perdió durante la era de las privatizaciones. No se privó entonces de despotricar contra los Estados Unidos y de prometer que iba a comprar a Bolivia toda su producción de soja, así como parte de sus hojas de coca. Morales, según Lula, presentará a Brasil una "lista de demandas". En ello convinieron los cuatro, así como en un compromiso de evitar nuevas confrontaciones por falta de coordinación en las medidas internas que puedan perjudicar a alguno de ellos. De la cumbre no participaron ministros ni asistentes, señal de que no querían testigos de una discusión que Kirchner y Chávez calificaron de "una de las mejores" desde que asumieron sus respectivos mandatos.
Como anfitrión y conciliador del aprieto en el que se vio inmerso Lula por los reclamos de Petrobras y por el temor de un virtual desabastecimiento de gas a cinco meses de los comicios en los cuales buscará la reelección, Kirchner leyó una declaración conjunta en la cual "destacaron que la integración energética es un elemento esencial de la integración regional en beneficio de sus pueblos" y "coincidieron en la necesidad de preservar y garantizar el abastecimiento de gas, favoreciendo un desarrollo equilibrado de los países productores y consumidores".
Omisión A su turno, Morales expresó su agradecimiento a Lula, Kirchner y Chávez por haber brindado su ayuda en las recientes inundaciones en Bolivia y señaló que "con esta reunión se resuelve cualquier susceptibilidad o preocupación de los gobiernos". Omitió de ese modo una respuesta sobre la presunta acusación de "chantaje" que había formulado a Petrobras por su decisión de congelar las inversiones en su país.
La declaración conjunta señala que coincidieron en "preservar y garantizar el abastecimiento de gas, favoreciendo un desarrollo equilibrado de los países productores y consumidores". También pondera, sin dar cifras, que se fijarán precios "equitativos" y que el suministro está garantizado.
Con ello, Lula suspiró, aliviado. Y, como adelantó ayer LA NACION, negó que hubiera una crisis y dijo que se sentía confiado en que iban a resolverse las diferencias. Admitió, sin embargo, que había sido un "error estratégico" que Brasil dependiera de una sola fuente de abastecimiento de gas, con lo cual rubricó en forma implícita la posibilidad de plantearse nuevos horizontes si no obtenía una respuesta favorable de Morales. Se trata de 26 millones de metros cúbicos diarios de gas, algo así como la mitad de su demanda interna. Después de la cumbre, en ningún momento se mostró preocupado por un virtual desabastecimiento ni por un aumento del precio. "El problema es garantizar el gas brasileño -dijo-. Estoy tranquilo. No va a aumentar el precio. No tengo esa preocupación."
El "sufrido pueblo" boliviano, dijo, tenía derecho de reclamar el control de sus recursos naturales. En la víspera, en Brasilia, Lula había señalado que el derecho de los bolivianos significaba negarles el derecho a los brasileños. El derecho de reclamar seguridad jurídica para las inversiones de Petrobras, del orden de los 1000 millones de dólares en una década.
Morales y Chávez, reunidos desde anteayer, conformaron una suerte de alianza mientras Kirchner y Lula, reunidos una hora antes de la cumbre, procuraron unificar discursos como virtuales perjudicados de LA NACIONalización de los hidrocarburos bolivianos.
Con la consigna de ver el vaso medio lleno, no medio vacío, Chávez destacó que la decisión de Morales, beneficiosa para Petróleos de Venezuela (Pdvsa), cuyos técnicos tienen venia para trabajar en Bolivia, "no va a afectar para nada; al contrario, va a afectar en positivo".
En positivo, justamente, entregó a Morales el documento por el cual Bolivia era formalmente invitado a formar parte del gasoducto continental y reunirse con ellos en agosto, en Caracas, para ultimar los detalles de las primeras perforaciones, a cargo de la compañía venezolana y de Petrobras, la máxima inversora en los hidrocarburos bolivianos e importadora del gas que consume Brasil.
Sobre Petrobras, cuyos contratos con Bolivia indican que cualquier pleito debe ser dirimido en un tribunal de Nueva York, Lula no habló. Dijo que "es una empresa independiente" y que "invertirá donde tenga posibilidades y donde le convenga".
Desde España, vinculada con los intereses de Repsol YPF, Kirchner recibió como señal la preocupación del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Con él planea reunirse en el primer semestre de este año y, en principio, debería presentarle una estantería limpia de cuestiones pendientes, sobre todo con las compañías privatizadas en la Argentina. A diferencia de la comprensión expresada por los vecinos de Bolivia, en aquellas latitudes se llegó a hablar de "una decisión unilateral que ha hecho saltar por los aires el orden jurídico internacional".
Bolivia ganó precio justo para su gas:
CUMBRE ENERGÉTICA RESPALDA LA NACIONALIZACIÓN DE GAS EN BOLIVIA
ACUERDO TRANQUILIZADOR • Kirchner, Lula, Chávez y Morales firman documento en el que se garantiza preservar la provisión del gas y discutir bilateral y racionalmente su precio • También aceleran incorporación de Bolivia al megaproyecto Gasoducto del Sur.
La República de Perú (www.larepublica.com.pe)
Fue un encuentro que llegó en el momento que más necesitaba Evo Morales. Néstor Kirchner, Inacio Lula da Silva, Hugo Chávez y Evo Morales se esforzaron por mostrarse satisfechos ayer tras la Cumbre Energética realizada en Puerto Iguazú, al norte de Argentina. "Respetamos y saludamos la decisión soberana de cada país, y en este caso del pueblo boliviano", dijo Kirchner en la conferencia de prensa posterior a la reunión "larga y productiva".
"Reconocemos el rol de Bolivia de definir su soberanía sobre sus riquezas naturales", agregó Lula. Chávez, por su parte, negó que haya tensión en la región por la nacionalización boliviana. "Algunos quieren generarla, pero nosotros somos especialistas en aplacarla", sostuvo antes de expresar, a modo de síntesis, que la reunión fue "extraordinaria".
En cuanto a Evo Morales, no pudo más que manifestar su satisfacción. "Fue un encuentro muy amistoso y cordial, con mucha solidaridad", anotó. Luego destacó la predisposición de sus interlocutores para seguir invirtiendo en su país.
Precios y provisiones
Pero más allá de las frases ante las cámaras, el documento final de la reunión deja entrever la preocupación existente en torno a lo que pudiera suceder con los precios y el abastecimiento de combustible en la región.
Así, mientras el acuerdo invoca a discutir el precio del gas de modo bilateral y "en un marco racional y equitativo, tomando en cuenta la situación económica de los países productores o consumidores"; al llegar a Bolivia Morales reiteró que hay una clara posición de mejorar ese precio.
"Brasil y Argentina tienen que aumentar el precio del gas que están comprando porque, según el acuerdo, en el 2004 ya se debían revisar los precios y por tanto lamento que los gobierno no hayn hecho eso", precisó. Por otro lado, en el documento se exhorta a "garantizar y preservar la provisión de gas", ;pero sigue sin conocerse cómo hará Bolivia para llevar adelante el proceso de nacionalización sin que se vea afectada la provisión del mercado interno y externo.
Mejor socio que rival
En este punto debe tenerse en cuenta que Brasil recibe unos 26 millones de metros cúbicos de gas, lo que representa la mitad de la demanda interna brasileña, mientras que Argentina cinco millones de metros cúbicos, que le son de suma importancia para su consumo interno
Ahí radicaría la necesidad, por parte de Argentina y Brasil, de que la nacionalización de Morales no afecte sus economías. Por eso también se habló ayer de la incorporación de Bolivia al Gasoducto del Sur, el megaproyecto energético de la región.
Los acuerdos de Puerto Iguazú
Los cinco puntos fueron leídos por el propio Kirchner en la conferencia de prensa conjunta que se organizó ayer a la tarde en el primer piso del Iguazú Grand Hotel.
• Se garantiza el suministro de gas. Y la discusión debe darse en un marco racional y equitativo que viabilice los emprendimientos.
• Se profundizarán los diálogos bilaterales para resolver las cuestiones pendientes.
• Coincidimos en avanzar en la profundización del Mercosur y la integración latinoamericana, y en avanzar en el proyecto del gasoducto del sur. Hemos invitado formalmente al señor presidente de Bolivia.
• Se ratifica la unidad en la región en el diálogo con otros países y regiones, y valoramos el diálogo Mercosur-Unión Europea.
• Acordamos en la necesidad de inversiones conjuntas para contribuir al desarrollo de Bolivia.
Lula sintetizó así el espíritu del acuerdo: "Brasil no quiere una hegemonía, quiere ser socio. Lo mismo sucede con Argentina, Venezuela y Bolivia. Es así que construiremos una alianza continental y nos vamos a presentar al mundo en la próxima reunión del 12 en Viena", en el IV encuentro entre países latinoamericanos y de la Unión Europea.
COMPROMISO PARA QUE EL GAS TENGA UN PRECIO “EQUITATIVO”
Las negociaciones por los nuevos valores del gas exportado a Brasil y Argentina por parte de Bolivia serán bilaterales. Hay un compromiso político para lograr un consenso sobre precios. La nación mediterránea participaría en el proyecto de gasoducto propuesto por Venezuela
Diario Hoy de Argentina (www.hoy.com.ar)
Brasil acordó con Argentina y Brasil negociar los precios del gas a boca de pozo y a boca de gasoducto, de forma tal que ninguna de las partes sufra un perjuicio económico grave.
Se comprometió ante Venezuela, además, a formar parte del megaproyecto que propone transportar gas desde el país caribeño hasta los centros industriales del Mercosur. Asimismo, se logró un compromiso para agregar mayor valor a los productos fósiles extraídos del subsuelo boliviano, lo que implicaría inversiones de empresas de la región.
Todo sucedió luego de una cumbre realizada ayer en Puerto Iguazú, con la presencia de los presidentes de los cuatro países: Evo Morales (Bolivia), Hugo Chávez (Venezuela), Lula da Silva (Brasil) y Néstor Kirchner (Argentina). En medio de la crisis generada por la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos, los presidentes buscaron dar, ante todo, una señal de unidad regional, aunque la negociación siga.
Coincidieron allí en acordar precios “equitativos” para el gas, y emitieron señales de apoyo a la decisión de Evo. “Los presidentes coincidieron en la necesidad de preservar y garantizar el abastecimiento de gas, favoreciendo un desarrollo equilibrado en los países productores y consumidores, y destacaron que la discusión sobre los precio del gas debe darse en un marco racional y equitativo que viabilice los emprendimientos”, dice la declaración conjunta. Kirchner agregó que las discusiones sobre el valor del fluido se darán en el ámbito bilateral. “La garantía del volumen necesario de gas está absolutamente preservada con toda la calidad, solidaridad e integración”, señaló.
Por su parte, Da Silva avaló la decisión de Morales de nacionalizar los hidrocarburos: dijo que la medida responde a “la soberanía de Bolivia en el manejo de sus recursos mineros”. Indicó además que los nuevos precios del gas que Bolivia exporta a Brasil serán discutidos “en la forma más democrática posible”. La compañía estatal brasileña Petrobras había anunciado un día antes que no invertiría más en Bolivia, y que iniciaría una demanda en tribunales internacionales. Consultado sobre esa decisión, Lula aseguró: “Petrobras es una empresa independiente que invertirá donde tenga posibilidades y le convenga”. “La cumbre resolvió cualquier susceptibilidad y preocupación de los gobiernos”, dijo a su turno Morales. Más temprano había acusado a la brasileña Petrobras de “chantaje” por su decisión de congelar las inversiones. Cada día, Bolivia exporta 25 millones de metros cúbicos de gas hacia Brasil y otros 7 millones promedio a la Argentina, a un precio promedio de 3,18 por millón de BTU. Bolivia quiere obtener 5,30 dólares, aunque la negociación daría lugar a un valor intermedio. El combustible es un insumo insustituible para el desarrollo industrial de la región. Y contar con gas a valores moderados es decisivo para mantener la actual estructura de costos. Sin embargo, Bolivia hace valer el derecho de utilizar la renta petrolera para fomentar su propio desarrollo.
BOLIVIA APLICARÍA UN ALZA DEL 64% AL GAS QUE VENDE A LA ARGENTINA
La Nación de Argentina (www.lanacion.com.ar)
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ya tiene pensado el nivel de aumento que pretende aplicarle a la Argentina, en las próximas semanas, para el gas que le vende: un 64 por ciento, es decir, dos dólares más de lo que el país paga hoy por millón de BTU. Así lo afirmaron ayer a LA NACION fuentes de ambos gobiernos, que coincidieron en la nueva tarifa propuesta: 5,50 dólares el millón de BTU.
Todavía no se sabe, sin embargo, cuál será el desenlace de la negociación. El endurecimiento que ha mostrado Brasil en las últimas horas jugará en favor de la Argentina: si no acepta ese precio y Bolivia cambia la oferta, bajará también la tarifa argentina, porque ambos contratos están vinculados.
De ahí la pretensión del presidente Néstor Kirchner de contar con un manifiesto respaldo de su par brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva.
La magnitud del aumento del precio del gas que vende Bolivia que quiere Morales no se ha dado a conocer hasta ahora. Todos los funcionarios bolivianos piden un alza, pero le escapan a cualquier precisión. Bolivia pretende cobrar, por los casi 6 millones de metros cúbicos diarios que ingresan por el Gasoducto del Norte, 5,50 dólares el millón de BTU, un aumento significativo en relación con los 3,35 dólares actuales.
La sola posibilidad de ese incremento en el valor del gas que se importa desde Bolivia molesta a los funcionarios argentinos. En primer lugar, por la inflación: aunque se trata de apenas un 5 por ciento del gas que se consume en toda la Argentina, el nuevo valor podría generar expectativas de alzas de precios y algunos empresarios industriales nacionales verían en el nuevo escenario una razón para subir precios. Así razonan en el Gobierno.
El segundo riesgo es menos directo: una suba semejante expandiría todavía más la brecha entre el precio de gas mayorista que cobra la Argentina por la exportación, alrededor de 1,40 el millón de BTU, y el boliviano. Más regalías
Esta diferencia fue la que empujó a los gobernadores Jorge Sobisch, de Neuquén, y Julio Cobos, de Mendoza, a iniciar un reclamo que irrita tanto a los petroleros como al Gobierno: que las regalías provinciales se paguen sobre un precio mayor que el que rige actualmente.
Esos ingresos, el 12 por ciento de lo facturado, no van para la Nación, sino sólo para las provincias. El cronograma pactado indica que el lunes próximo debe venir a esta ciudad la delegación argentina -integrada por el secretario de Energía, Daniel Cameron; el subsecretario de Combustibles, Cristian Folgar, y el presidente de Enarsa, Ezequiel Espinosa, entre otros funcionarios nacionales- para seguir conversando. El mismo programa fija el 15 del mes actual como fecha límite para cerrar un precio, que se extendería por todo este año. Sin embargo, la negativa de Brasil parece haber extendido los plazos, y fuentes de ambos gobiernos ya especulaban ayer con una postergación. La posición del presidente Lula es decisiva en el desenlace: la empresa Petrobras es el mayor inversor de Bolivia, y Brasil, el mayor cliente. La firma estatal brasileña aporta, sola, casi un 20 por ciento del producto bruto interno (PBI) boliviano.
Una frase, varias veces oída en las cumbres del Mercosur, permite entrever el sigilo con que el líder del Cono Sur discutirá cada molécula de gas: cuando Brasil firma algo, la única certeza es que está dispuesto a sentarse a negociar. Hasta ahora, Brasil ni siquiera firmó.
ARGENTINA DICE QUE EL PRECIO SERA EN EL MARCO REGIONAL
BRASIL ARRANCA PROMESA DE VENEZUELA Y BOLIVIA DE MANTENER PROVISIÓN DE GAS
ABC de Paraguay (www.abc.com.py)
PUERTO IGUAZU, Argentina (De nuestra redacción regional de Ciudad del Este). Brasil arrancó ayer en esta ciudad la promesa de Bolivia y Venezuela de mantener y garantizar la provisión de gas en la región. En ningún momento mencionaron la situación de Paraguay y Uruguay, países consumidores que también están afectados por la crisis del gas.
La convocatoria estuvo a cargo del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que se opone a la nacionalización del hidrocarburo determinado por el gobierno boliviano de Evo Morales. En el acuerdo, los presidentes de Argentina, Brasil y Venezuela hicieron referencia a la negociación con Bolivia para fijar el precio para la exportación del gas, pero no hicieron mención sobre cuál sería el valor ideal. "La discusión sobre los precios del gas deben darse en un marco regional y equitativo que viabilicen los emprendimientos", afirmó el presidente de Argentina, Néstor Kirchner.
En ese contexto, los mandatarios coincidieron en la profundización de los diálogos bilaterales para resolver las cuestiones pendientes, de acuerdo a las expresiones del mandatario anfitrión.
Igualmente, los presidentes expresaron sus voluntades de trabajar por la profundización del Mercosur y la consolidación de la integración sudamericana. "En ese sentido, ratificaron la decisión de avanzar en el proyecto de Gasoducto del Sur, para el cual hemos invitado, hoy, formalmente a ser parte activa de él, al presidente de Bolivia, Evo Morales", anunció Kirchner.
Con relación a Bolivia, los mandatarios acordaron fomentar inversiones para favorecer el desarrollo integral de Bolivia.
Los presidentes de Brasil y Argentina mencionaron que "respetan y saludan la decisión soberana del gobierno boliviano de nacionalizar el hidrocarburo. Pero exigieron de Bolivia que garantice la provisión de gas en volumen necesario a los países". Mientras Evo Morales, quien había considerado como un chantaje el anuncio de la compañía brasileña Petrobras de anular inversiones en su país, dijo al término de la reunión que "se despeja cualquier susceptibilidad de los gobiernos".
Lula aseguró que la empresa estatal seguirá invirtiendo en Bolivia y en cualquier otro país extranjero, cumpliendo los acuerdos.
LULA, NERVIOSO
Durante la Cumbre en Puerto Iguazú, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se mostró sumamente nervioso, debido a la fuerte presión en su país en contra de la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos decretado por el mandatario de ese país, Evo Morales. Colegas brasileños trataron a Lula incluso de "Bobo de la Corte", porque millones de dólares de Petrobras pasaron a ser patrimonio de Bolivia.
CRISIS EN LA REGION : CUMBRE DE KIRCHNER, LULA, EVO MORALES Y CHAVEZ
BOLIVIA ACORDÓ QUE NO FALTARÁ GAS, PERO HABRÁ DISPUTA POR EL PRECIO
Kirchner, Lula, Chávez y Evo Morales se reunieron a solas en Puerto Iguazú. Se bajó la tensión y se garantiza el abastecimiento para Argentina y Brasil. Pero discutirán el precio a cambio de inversiones.
El Clarín de Argentina (www.clarin.com)
Argentina y Brasil obtuvieron ayer garantías respecto a que no les faltará el gas boliviano. Los precios no fueron definidos, pero acordaron que serán "racionales y equitativos". Bolivia, a cambio, se llevó la promesa de inversiones.
La fuerte tensión entre Brasil y Bolivia luego de que Evo Morales nacionalizara esta semana los campos petroleros, fue lo que convocó ayer, aquí, a los presidentes Néstor Kirchner, Lula, Evo Morales y al venezolano Hugo Chávez. Hubo un encuentro de más de tres horas, donde se habló con "franqueza", según dijeron los presidentes, utilizando la palabra que en círculos diplomáticos se usa para expresar "dureza". El gas fue el eje central de la reunión. Tanto que el documento que se leyó al final señala que los presidentes "destacaron que la integración energética es un elemento esencial de la integración regional en beneficio del pueblo". Dos semanas atrás, el presidente de Bolivia y el ministro de Planificación argentino, Julio De Vido, ya habían acordado una garantía boliviana de que se cumplirían los convenios que autorizan exportaciones por hasta 7 millones de metros cúbicos diarios de gas a la Argentina.
Pero quedaron en definir en una comisión, que tendría plazo hasta el 15 de este mes, el precio de compra. La nacionalización de las reservas decretada por Morales puso una impasse a esa discusión. Ayer, se le dio un marco.
"Los presidentes coincidieron en la necesidad de preservar y garantizar el abastecimiento de gas favoreciendo un desarrollo equilibrado en los países productores y consumidores", señala el documento de Puerto Iguazú. Asimismo destacaron que la discusión sobre los precios del gas debe darse en un "marco racional y equitativo que viabilice los emprendimientos".
"La preservación y garantía del volumen del gas que necesiten los países que compren a Venezuela o Bolivia, está absolutamente garantizado", dijo Kirchner tras el encuentro. Y fue más allá: "Respecto al precio, el documento es absolutamente claro, dice racionalidad, criterio, ayudar al crecimiento, al consumo y una situación bilateral que se irá resolviendo entre los países que tengan que discutir el precio".—¿Cuál será el precio del gas boliviano para la Argentina?, preguntó Clarín al ministro De Vido, luego de la reunión.
—Aquí no se discutieron valores concretos, pero serán valores justos y razonables.
—¿Cuál es el que aspira?
—Nosotros con los precios actuales estamos bien, ellos son los que piden el cambio.
—¿Hay un techo?
—Para mí, el techo es 1,40 dólares por millón de BTU (la forma en que se paga) que abona la indus tria en la Argentina.
El precio en el mercado interno argentino es muy inferior a los valores a que se importa gas de Bolivia, que promedia los US$ 3 por millón de BTU. Fuentes bolivianas mencionan US$ 5 como el precio que pretenderían en el futuro. En la ecuación energética argentina, el cambio no es de gran peso: el gas boliviano es un 4 a 5% del total del consumo.
Pero la definición es clave para la segunda etapa de la discusión, cuando se negocie el contrato por otros 20 millones de metros cúbicos diarios para construir el nuevo gasoducto entre Bolivia y la Argentina.
La garantía de abastecimiento de gas que ofreció ayer Bolivia a Argentina es, claro, igual para Brasil. A cambio, pidió inversiones que promuevan el desarrollo del país. Ayer se anunció la primera: PDVSA, la petrolera venezolana, confirmó que el 18 de mayo firmará el contrato para construir en Santa Cruz de la Sierra una planta de separación de gases de US$ 40 millones.
"El presidente Evo Morales va a presentar en el futuro próximo una lista de necesidades", dijo ayer Lula ante la prensa.
Hugo Chávez no se quiso quedar callado. Y entregó públicamente una carta a Evo Morales invitándolo a ser parte del Gasoducto del Sur, que cruzará desde Venezuela hasta la Argentina.
"Evo ya nos dijo que sí", aseguró, con el presidente boliviano sonriendo a su lado.
Argentina, Brasil y Venezuela prefieren guardar cautela ante polémica situación en Bolivia
La convocatoria estuvo a cargo del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que se opone a la nacionalización del hidrocarburo determinado por el gobierno boliviano de Evo Morales. En el acuerdo, los presidentes de Argentina, Brasil y Venezuela hicieron referencia a la negociación con Bolivia para fijar el precio para la exportación del gas, pero no hicieron mención sobre cuál sería el valor ideal. "La discusión sobre los precios del gas deben darse en un marco regional y equitativo que viabilicen los emprendimientos", afirmó el presidente de Argentina, Néstor Kirchner.
En ese contexto, los mandatarios coincidieron en la profundización de los diálogos bilaterales para resolver las cuestiones pendientes, de acuerdo a las expresiones del mandatario anfitrión.
Igualmente, los presidentes expresaron sus voluntades de trabajar por la profundización del Mercosur y la consolidación de la integración sudamericana. "En ese sentido, ratificaron la decisión de avanzar en el proyecto de Gasoducto del Sur, para el cual hemos invitado, hoy, formalmente a ser parte activa de él, al presidente de Bolivia, Evo Morales", anunció Kirchner.
Con relación a Bolivia, los mandatarios acordaron fomentar inversiones para favorecer el desarrollo integral de Bolivia.
Los presidentes de Brasil y Argentina mencionaron que "respetan y saludan la decisión soberana del gobierno boliviano de nacionalizar el hidrocarburo. Pero exigieron de Bolivia que garantice la provisión de gas en volumen necesario a los países". Mientras Evo Morales, quien había considerado como un chantaje el anuncio de la compañía brasileña Petrobras de anular inversiones en su país, dijo al término de la reunión que "se despeja cualquier susceptibilidad de los gobiernos".
Lula aseguró que la empresa estatal seguirá invirtiendo en Bolivia y en cualquier otro país extranjero, cumpliendo los acuerdos.
LULA, NERVIOSO
Durante la Cumbre en Puerto Iguazú, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se mostró sumamente nervioso, debido a la fuerte presión en su país en contra de la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos decretado por el mandatario de ese país, Evo Morales. Colegas brasileños trataron a Lula incluso de "Bobo de la Corte", porque millones de dólares de Petrobras pasaron a ser patrimonio de Bolivia.
CRISIS EN LA REGION : CUMBRE DE KIRCHNER, LULA, EVO MORALES Y CHAVEZ
BOLIVIA ACORDÓ QUE NO FALTARÁ GAS, PERO HABRÁ DISPUTA POR EL PRECIO
Kirchner, Lula, Chávez y Evo Morales se reunieron a solas en Puerto Iguazú. Se bajó la tensión y se garantiza el abastecimiento para Argentina y Brasil. Pero discutirán el precio a cambio de inversiones.
El Clarín de Argentina (www.clarin.com)
Argentina y Brasil obtuvieron ayer garantías respecto a que no les faltará el gas boliviano. Los precios no fueron definidos, pero acordaron que serán "racionales y equitativos". Bolivia, a cambio, se llevó la promesa de inversiones.
La fuerte tensión entre Brasil y Bolivia luego de que Evo Morales nacionalizara esta semana los campos petroleros, fue lo que convocó ayer, aquí, a los presidentes Néstor Kirchner, Lula, Evo Morales y al venezolano Hugo Chávez. Hubo un encuentro de más de tres horas, donde se habló con "franqueza", según dijeron los presidentes, utilizando la palabra que en círculos diplomáticos se usa para expresar "dureza". El gas fue el eje central de la reunión. Tanto que el documento que se leyó al final señala que los presidentes "destacaron que la integración energética es un elemento esencial de la integración regional en beneficio del pueblo". Dos semanas atrás, el presidente de Bolivia y el ministro de Planificación argentino, Julio De Vido, ya habían acordado una garantía boliviana de que se cumplirían los convenios que autorizan exportaciones por hasta 7 millones de metros cúbicos diarios de gas a la Argentina.
Pero quedaron en definir en una comisión, que tendría plazo hasta el 15 de este mes, el precio de compra. La nacionalización de las reservas decretada por Morales puso una impasse a esa discusión. Ayer, se le dio un marco.
"Los presidentes coincidieron en la necesidad de preservar y garantizar el abastecimiento de gas favoreciendo un desarrollo equilibrado en los países productores y consumidores", señala el documento de Puerto Iguazú. Asimismo destacaron que la discusión sobre los precios del gas debe darse en un "marco racional y equitativo que viabilice los emprendimientos".
"La preservación y garantía del volumen del gas que necesiten los países que compren a Venezuela o Bolivia, está absolutamente garantizado", dijo Kirchner tras el encuentro. Y fue más allá: "Respecto al precio, el documento es absolutamente claro, dice racionalidad, criterio, ayudar al crecimiento, al consumo y una situación bilateral que se irá resolviendo entre los países que tengan que discutir el precio".—¿Cuál será el precio del gas boliviano para la Argentina?, preguntó Clarín al ministro De Vido, luego de la reunión.
—Aquí no se discutieron valores concretos, pero serán valores justos y razonables.
—¿Cuál es el que aspira?
—Nosotros con los precios actuales estamos bien, ellos son los que piden el cambio.
—¿Hay un techo?
—Para mí, el techo es 1,40 dólares por millón de BTU (la forma en que se paga) que abona la indus tria en la Argentina.
El precio en el mercado interno argentino es muy inferior a los valores a que se importa gas de Bolivia, que promedia los US$ 3 por millón de BTU. Fuentes bolivianas mencionan US$ 5 como el precio que pretenderían en el futuro. En la ecuación energética argentina, el cambio no es de gran peso: el gas boliviano es un 4 a 5% del total del consumo.
Pero la definición es clave para la segunda etapa de la discusión, cuando se negocie el contrato por otros 20 millones de metros cúbicos diarios para construir el nuevo gasoducto entre Bolivia y la Argentina.
La garantía de abastecimiento de gas que ofreció ayer Bolivia a Argentina es, claro, igual para Brasil. A cambio, pidió inversiones que promuevan el desarrollo del país. Ayer se anunció la primera: PDVSA, la petrolera venezolana, confirmó que el 18 de mayo firmará el contrato para construir en Santa Cruz de la Sierra una planta de separación de gases de US$ 40 millones.
"El presidente Evo Morales va a presentar en el futuro próximo una lista de necesidades", dijo ayer Lula ante la prensa.
Hugo Chávez no se quiso quedar callado. Y entregó públicamente una carta a Evo Morales invitándolo a ser parte del Gasoducto del Sur, que cruzará desde Venezuela hasta la Argentina.
"Evo ya nos dijo que sí", aseguró, con el presidente boliviano sonriendo a su lado.
Argentina, Brasil y Venezuela prefieren guardar cautela ante polémica situación en Bolivia
BOLIVIA INCREMENTA UN 40% PRECIO DE SU GAS A ARGENTINA Y BRASIL
Morales y Chávez garantizan a Kirchner y Lula el abastecimiento energético de sus países.
El Expreso de Perú (www.expreso.com.pe)
PUERTO IGUAZÚ.- La cumbre celebrada en la ciudad de Puerto Iguazú, Argentina, se desarrolló en dos frentes. Por un lado, Brasil y Argentina, que dependen del suministro del país andino; y por el otro, Bolivia y Venezuela, que tras firmar un acuerdo energético podrían controlar el mercado de la región sin ningún problema. Tanto Evo Morales como Hugo Chávez se comprometieron a garantizar el abastecimiento a sus colegas Nestor Kirchner y Lula da Silva. Por el salón del Casino de Puerto Iguazú entraron todos los mandatarios, argentino, brasileño, venezolano y boliviano. Todos sonrientes aunque en situaciones dispares. Brasil y Argentina son los dos principales mercados del gas boliviano y los más perjudicados. El gobierno de Evo Morales llegó con un mensaje claro.
El suministro de gas a Argentina y Brasil está garantizado, pero será más caro. El precio actual ronda los tres dólares por millón de BTU (la unidad térmica que se utiliza para medir su comercialización), muy por debajo del precio internacional, que se encuentra en siete dólares. La intención de Bolivia es elevarlo a cinco dólares por millón de BTU, lo cual todavía estaría por debajo del precio internacional.“Sí, Brasil y Argentina tienen que aumentar el precio del gas que están comprando porque, según el acuerdo, en el 2004 ya se debían revisar los precios, y por tanto lamento que los gobiernos no hayan hecho eso”, manifestó el presidente de Bolivia, Evo Morales.
El suministro de gas boliviano representa el 5% del mercado en Argentina, pero, en Brasil, resulta vital en el estado de San Pablo, el principal polo económico del país. Bolivia suministra un 60% del gas que el país carioca consume.
Aunque en lo discursivo Lula da Silva evitó la polémica, su ministro de Hacienda, Guido Mantega, amenazó con demandar a Bolivia ante los tribunales internacionales en Nueva York si La Paz exige un precio mayor por el gas tras la nacionalización.
Acuerdo energético Chávez-Morales
Ayer, horas antes de la cumbre, Chávez realizó una visita sorpresa a Bolivia para sellar una “alianza estratégica” de sus respectivas petroleras estatales, la boliviana YPFB y la venezolana PDVSA, para desarrollar proyectos de explotación de nuevos yacimientos en Bolivia así como la industrialización de las enormes reservas bolivianas de gas natural.
El dato
Chávez se comprometió a dejar en Bolivia a 28 técnicos petroleros, para “solucionar cualquier problema que se presente durante el periodo de transición de 180 días”, tras el que las multinacionales deberán firmar nuevos contratos o abandonar el país.
Impasses diplomáticos, conflicto de intereses y crisis de los bloques comerciales tienen en ascuas a la región
SUDAMÉRICA: LA BUENA VECINDAD A LA DERIVA
Las fuertes controversias que se han suscitado en el último tiempo en el “barrio” reflejan la falta de mecanismos de resolución de conflictos, una carencia que pidió subsanar el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.
La Nación de Chile (www.lanacion.com)
Una mala hora vive Sudamérica. Y es que el inusitado incremento de las tensiones entre varios de sus países parece asentar la sensación de que la región está más dividida que nunca, lo que cual ha puesto en jaque los proyectos de integración política y económica en marcha.
Estos conflictos exhiben un preocupante denominador común: la falta de un marco regional adecuado para su solución. Una carencia que fue hecha notar el miércoles por el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el chileno José Miguel Insulza, quien propuso el estudio de mecanismos que permitan al ente multinacional ayudar en la solución de disputas bilaterales.
Un llamado oportuno, dado el nivel de tensión existente en el área producto de los frentes de conflicto abiertos. Entre ellos destaca la disputa que protagonizan los gobiernos de Montevideo y Buenos Aires en torno a la construcción por parte de Uruguay de dos empresas de celulosa en las márgenes de un río fronterizo.
Otro que brilla con luces propias es el impasse diplomático suscitado por la intromisión del Presidente venezolano Hugo Chávez en los asuntos de política interna de Perú, cuya consecuencia más directa ha sido el retiro de sus respectivos embajadores. A esto se sumó la turbulencia regional que desató esta semana la sorpresiva nacionalización de los hidrocarburos decretada en Bolivia.
A nivel multilateral, destacan las crisis que viven los dos grandes referentes comerciales del área: la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y el Mercado Común del Sur (Mercosur).
En el caso de la CAN, su trance pasa por el retiro “indeclinable” de Venezuela del bloque comercial, motivado por las tratativas que tanto Colombia como Perú llevan a cabo con Estados Unidos a fin de formalizar Tratados de Libre Comercio (TLC). El Mercosur también vive su propio calvario: las marcadas asimetrías entre sus socios llevó en los últimos días al Jefe de Estado uruguayo, Tabaré Vázquez, a extender un virtual “certificado de defunción” del grupo.
Encuentro con Presidentes sudamericanos:
BACHELET HARÁ GESTIONES PARA BAJAR LA TENSIÓN
Presidenta aprovechará Cumbre de Viena para ofrecer a sus pares de la región una agenda de convergencia integracionista.
El Mercurio de Chile (www.emol.com)
La Cancillería realiza intensas gestiones para que la próxima semana, en Viena, la Presidenta Michelle Bachelet pueda reunirse bilateralmente con todos los mandatarios sudamericanos que asistirán a la IV Cumbre de la Unión Europea, América Latina y el Caribe, incluido el Presidente de Bolivia, Evo Morales.
Hasta ahora, han confirmado su asistencia a este encuentro, además del Presidente de Bolivia, los mandatarios de Perú, Alejandro Toledo; de Uruguay, Tabaré Vázquez; de Argentina, Néstor Kirchner; de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Colombia, Álvaro Uribe, y de Venezuela, Hugo Chávez.La Presidenta Bachelet viaja el lunes a Europa en un periplo que también considera España y Bosnia-Herzegovina.En Madrid, además de reunirse con el Presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, solicitó un encuentro con el líder opositor, Mariano Rajoy, presidente del Partido Popular, según se señaló desde esa capital.
Según lo confirmó ayer el ministro de Relaciones Exteriores, Alejandro Foxley, las reuniones bilaterales tendrán agendas concretas, "con sentido de futuro -dijo- para ayudar a que el proyecto de integración sudamericana se vea factible, reciba un nuevo estímulo porque hoy día, con las disputas que hay, está en crisis". El ministro concurrió a la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, donde expuso largamente sobre la visión del gobierno chileno respecto de la situación regional.
Aunque hay inquietud por el grado de tensión política que diversos sucesos han generado en casi la mayoría de los países del hemisferio, Foxley tuvo una percepción positiva de la relación de Chile con los países vecinos y con el resto del continente.
"Chile se puede preciar hoy día de tener excelentes relaciones con los países de la región. No tenemos conflictos", declaró como resumen. Y las señales que ha recibido la Cancillería es que éstas seguirán profundizándose, afirmó.
Fue categórico en que "no estamos participando en ninguno de los conflictos, no vamos a participar en ninguno de los conflictos y, por el contrario, vamos a tratar de poner algunas ideas de futuro, que nos permitan a todos converger", explicó.
Según explicó el Canciller, Viena se convertirá en el momento oportuno de que Chile, a través de la Presidenta Bachelet, colabore en buscar los consensos necesarios para dejar atrás las diferencias y unir voluntades en torno a proyectos concretos.
El presidente de la comisión senatorial, senador Roberto Muñoz Barra (PPD), alabó la iniciativa de la Presidenta Bachelet. "Creo que Chile tiene mucho que aportar para bajar la tensión que hay en la región y esperemos que estos encuentros tengan los resultados esperados", dijo el senador.
Foxley: "No he echado pie atrás"
El Canciller Alejandro Foxley deploró las versiones de algunos medios de prensa, que afirmaron que el miércoles tuvo que retroceder en algunas declaraciones hechas el miércoles. "No he echado pie atrás, he dicho exactamente lo mismo desde el primer día: hay una crisis en la integración que hay que resolver y, segundo, hay que producir la integración energética en América Latina". Y lamentó las interpretaciones periodísticas que señalaron que, en su calidad de ministro de Relaciones Exteriores, se había referido a la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia. "Hubo una pequeña mala interpretación del tema", dijo. Pero la "pequeña mala interpretación" provocó la reacción del Cónsul General de Bolivia en Chile, Roberto Finot, quien dijo estar en desacuerdo con sus declaraciones. Foxley adelantó que en Viena se encontrará con su par boliviano, David Choquehuanca.
Medida estaría incluida en plan de nacionalización de gobierno boliviano
FCAB ANALIZA IMPACTO DE ESTATIZACIÓN DE FERROCARRIL
El Diario de Chile (www.eldiario.cl)
La nacionalización de los hidrocarburos, es el primer paso que el presidente boliviano Evo Morales tiene planeado dar para recuperar las riquezas naturales que posee el país altiplánico. Pero no sólo eso, el mandatario también parece estar analizando, la estatización de los ferrocarriles, hecho que afectaría directamente al grupo chileno Luksic, propietario del ferrocarril Antofagasta Bolivia y del 50% del Ferrocarril boliviano Andino.
Según un cable emitido por Prensa Latina -agencia de noticias cubana- Morales junto a su equipo técnico, está preparando la recuperación de los ferrocarriles, considerados estratégicos para el desarrollo exportador de ese país.
El gerente general del Ferrocarril Antofagasta Bolivia, Miguel Sepúlveda, dijo que la compañía no ha recibido ninguna información oficial de parte del gobierno boliviano. “Es un tema que ha salido en los diarios y nosotros conocemos que es una posibilidad que hay, pero más allá de eso, no sabemos de qué forma se podría concretar, si es que se concreta”, explicó el ejecutivo.
El ferrocarril Antofagasta Bolivia que conecta la II Región con la ciudad altiplánica de Oruro, es 100% de propiedad del Grupo Luksic. En tanto, en el Ferrocarril Andino, que une Oruro con las principales ciudades bolivianas, comparte la propiedad en partes iguales con los fondos de pensiones.
Considerando esta distribución de la propiedad, Sepúlveda explicó que en caso de concretarse la nacionalización de los ferrocarriles, el gobierno de Morales podría afectar el 100% de Ferrocarril Andino, y la parte boliviana de ferrocarril Antofagasta Bolivia.
Derechos de agua
Pero a través de FCAB, la compañía no solo maneja el transporte ferroviario, sino también los derechos de agua que desembocan en Chile del río Silala.
-¿Una medida como esta tendría algún impacto en estos derechos?
-“No, porque los derechos que tiene el ferrocarril de Antofagasta los tiene aquí en Chile, no los tiene en Bolivia, no usa ningún derecho de agua en Bolivia”, respondió Sepúlveda.
El ferrocarril es el encargado de encauzar los recursos del hídricos hacia Chile para posteriormente, venderlos a las compañías mineras. El agua transportada es utilizada en las operaciones mineras de Codelco Norte -en sus minas de Chuquicamata y Radomiro Tomic-, El Tesoro (propiedad de los Luksic), Lomas Bayas (Falconbridge), Spence (BHP Billiton) y también a la comuna de Sierra Gorda en la ciudad de Calama.
También a través de FCAB, los Luksic se adjudicaron a fines de 2003 en US$ 180 millones, la concesión por 30 años de la entonces Empresa Sanitaria de Antofagasta (Essan), con la cual pasaron a controlar los derechos de agua en la Segunda Región.
EL MINISTRO DE PLANIFICACIÓN AFIRMA QUE NO CAMBIARÁN
"LAS REGLAS DEL JUEGO" EN OTROS SECTORES, SÓLO EN MINERÍA
Europa Press de España (www.europapress.es)
El ministro de Planificación de Bolivia, Carlos Villegas, aseguró hoy que su Gobierno no tiene intención de aplicar nacionalizaciones ni "cambios en las reglas del juego" en otros sectores de actividad económica donde hay empresas españolas y extranjeras, a parte de las "áreas estratégicas" de hidrocarburos, donde "ya se ha tomado esa decisión" y la minería.
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, Villegas precisó que el caso del sector minero está en manos del Parlamento, que tiene que aprobar "modificaciones del código de minería".
"Para todas las otras inversiones y sectores donde están empresas nacionales y/o extranjeras se da plena seguridad jurídica, no habrá modificaciones, no habrá cambios de ninguna naturaleza. En consecuencia, a las empresas españolas que están en electricidad, en fabricación de explosivos u otras actividades, les reitero que les damos la plena garantía", manifestó el ministro.
Por otro lado, Villegas recalcó que el decreto de nacionalización de los hidrocarburos "no tiene que ser una novedad para nadie" y "nadie tiene que haberse sorprendido" porque el presidente boliviano, Evo Morales, ya se lo anunció al Gobierno español, a Repsol y a los empresarios cuando vino a España el pasado enero como presidente electo.
"Explicamos al Gobierno, a las autoridades de Repsol, a la Confederación de Empresarios Privados, que íbamos a nacionalizar y que iba a haber cambios en las reglas del juego, de tal manera que el Estado iba a tener un papel protagonista en la actividad de los hidrocarburos", prosiguió Villegas.
Además, defendió que el sector de hidrocarburos boliviano seguirá siendo rentable para las empresas extranjeras, aunque el decreto de nacionalización establece que el 82% de la producción revertirá en el Estado y el 18% en las empresas.
Villegas dejó claro para que definir este porcentaje "el Gobierno boliviano hizo un estudio técnico-económico previo, no se trata de una decisión política". "Con el 18% las empresas recuperan sus costes de inversión y obtienen una ganancia de aproximadamente el 20% que creo que es bastante aceptable si comparamos esa tasa con el mundo petrolero vigente en el planeta", recalcó.
NO ALTERAR LA RELACION CON ESPAÑA
El responsable boliviano dejó claro que el Gobierno de la Paz no tiene "la más mínima intención de alterar, fracturar o tensionar" las relaciones bilaterales con España, sino que pidió a la población española que "entienda que la nacionalización de los hidrocarburos tenía que llegar a Bolivia".
"El contexto interno, los conflictos sociales y la profunda crisis política y económica que todavía vive Bolivia son justamente por el tema de la nacionalización", argumentó.
ARGENTINA, BRASIL Y VENEZUELA RESPETAN SOBERANÍA DE BOLIVIA Y NO CUESTIONAN NACIONALIZACIÓN
Cumbre Presidencial de Iguazú invitó a Bolivia a formar parte del mega gasoducto del Sur. Presidente brasileño dijo que Petrobras seguirá invirtiendo en Bolivia. Argentina y Brasil solicitaron garantías para el abastecimiento de gas boliviano.
Observatorio Informativo (www.periodistasbolivia.com)
Por Adalid Cabrera Lemuz
Argentina, Brasil y Venezuela ratificaron hoy su respeto a la decisión soberana de Bolivia de nacionalizar sus hidrocarburos y solamente exigieron el cumplimiento de los acuerdos de compraventa de gas natural.Los presidentes Néstor Kirchner, Luiz Inácio Lula da Silva, Hugo Chávez y Evo Morales suscribieron un documento en Puerto Iguazú después de una prolongada reunión en la que analizaron, además de la nacionalización de hidrocarburos, los pasos que darán sus gobiernos para consolidar la integración energética regional.En una conferencia de prensa, los cuatro mandatarios hicieron conocer sus puntos de vista sobre esos temas.“Fue una de las mejores cumbres Presidenciales”El anfitrión del encuentro y primer mandatario de Argentina, Néstor Kirchner, manifestó que “fue una de las mejores reuniones desde que soy Presidente”.Anotó que su país reconoce que la decisión de Bolivia de nacionalizar los hidrocarburos es soberana y una responsabilidad asumida por el presidente Evo Morales.Fuera especulacionesA su vez el presidente brasileño desechó las susceptibilidades esgrimidas por algunos críticos antes de la cumbre Presidencial de Iguazú sobre una presunta alianza entre Bolivia y Venezuela para evitar presiones de Brasil y Argentina.“Lo que he percibido en este encuentro es que los mandatarios tienen el máximo propósito de contribuir a la integración y fortalecer procesos como el Mercado Común del Sur (MERCOSUR) y la Comunidad Sudamericana de Naciones (CSN)”, puntualizó.Subrayó que mal pueden los cuatro países y la comunidad latinoamericana en su conjunto mostrar a otras naciones, como Estados Unidos y la Unión Europea (UE), la existencia de divisiones que les impidan adoptar posiciones conjuntas en defensa de los intereses regionales.No hay divisiónLula anotó que el próximo 12 de mayo en Viena los países sudamericanos reunidos con representantes de la UE mostrarán que todas las especulaciones sobre fracturas internas o fricciones no son ciertas.Con relación a Bolivia, Lula enfatizó que está consciente de que está en pleno derecho de asumir decisiones sobre sus recursos naturales debido a que es un país afectado por una crisis económica que necesita de la solidaridad de todas las naciones de la región.Petrobras invertirá en BoliviaContrariamente a lo afirmado ayer por el presidente de Petróleos Brasileiros Sociedad Anónima (Petrobras), Sergio Gabrielli, sobre una probable suspensión de las inversiones en Bolivia, Lula da Silva enfatizó que Brasil seguirá invirtiendo en Bolivia y en otras naciones y lograr un retorno positivo.El mandatario salió al frente también a un presunto interés hegemónico brasileño o argentino en la región y dijo que es mejor hablar de búsqueda de alianzas que beneficien a todos los países antes que supremacías regionales.Dijo que las fricciones que a veces aparecen entre algunas naciones en la región forman parte del proceso democrático que existe en su seno para llegar a acuerdos que desemboquen en un fortalecimiento de la integración.“De los conflictos nace la fortaleza y la consolidación de la democracia y amistad entre los pueblos”, puntualizó.Puso como ejemplo el proceso seguido durante 50 años por los países europeos para coronar la Comunidad Europea.Bolivia será parte del mega gasoductoPor su parte el presidente venezolano Hugo Chávez calificó el encuentro Presidencial como uno de los “más sinceros y francos” en los que ha participado.Enfatizó que gracias a la soberana decisión de Bolivia de nacionalizar los hidrocarburos aceleró el deseo de Argentina, Brasil y Venezuela para invitar a Bolivia a formar parte del mega gasoducto del sur.Agregó que entre los acuerdos se destacó el compromiso de los cuatro países para normalizar el suministro de gas natural en el marco de la integración energética.Subrayó que una vez que ingrese en operaciones el mega gasoducto del sur, todos los países sudamericanos podrán acceder a la energía por lo menos durante un siglo.Con relación a Bolivia, señaló que en los siete años que es presidente de Venezuela ha conocido a seis presidentes de Bolivia hasta que llegó Evo Morales al poder a consecuencia del apoyo mayoritario del pueblo.“Evo cumplió el mandato de su pueblo”Dijo que, al nacionalizar los hidrocarburos, Evo Morales ha cumplido el mandato que le dio su pueblo en el referéndum celebrado en julio de 2004 para lograr que Bolivia cuente con recursos generados en sus riquezas naturales que le permitan enfrentar la pobreza y conseguir la mejora de la calidad de vida de los bolivianos.En su opinión Morales cumplió un imperativo de la historia debido a que fue la luz que impidió que en Bolivia se desate una guerra civil.Chávez anotó que las conclusiones a las que llegaron los cuatro mandatarios sudamericanos es “un golpe al mentón” a aquellos que esperan una división de la región.Bolivia honrará compromisosEl presidente de Bolivia, Evo Morales, agradeció el apoyo recibido de sus homólogos de Argentina, Brasil y Venezuela.
Señaló que Bolivia cumplirá con los acuerdos de abastecimiento de gas, pero adelantó que se realizarán negociaciones para incrementar los precios de exportación de gas natural.Bolivia exporta el gas a poco menos de la mitad de la cotización internacional del producto. Brasil le paga a Bolivia 3,23 dólares el millar de pies cúbicos y Argentina 3,19 dólares.Brasil y Argentina son los principales mercados de exportación de gas bolivianos. Brasil recibe diariamente unos 26 millones de metros cúbicos de gas natural y Argentina 5,5 millones.De acuerdo con los gobiernos de Brasil y Argentina existe interés por ampliar los volúmenes de importación de gas boliviano. Las autoridades bolivianas aceptaron esa posibilidad, pero solicitaron la fijación de mejores precios.Bolivia nacionalizó el pasado uno de mayo sus hidrocarburos que estaban en poder de varias empresas transnacionales que estaban encargadas de los procesos de exploración, explotación, refinación, transporte y comercialización.Esas empresas son principalmente la brasileña Petrobras, la hispano-argentina Repsol YPF, la franco-belga TotalFinalElf y las británicas British Gas y British Petroleum que habrían invertido los últimos diez años en este país andino unos 3.000 a 3.500 millones de dólares.El decreto de nacionalización estableció que a partir del uno de mayo las transnacionales deben entregar su producción a la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que se encargará de controlar toda la cadena productiva petrolera.Otra de las disposiciones es que el gobierno realizará exhaustivas auditorías en las empresas petroleras para verificar sus inversiones, sus niveles de retorno y si pagaron a cabalidad sus impuestos al fisco.Hasta mayo de 2005, las petroleras extranjeras que operaban en el país se beneficiaban con el 82 por ciento de las ganancias del negocio y pagaban solamente una carga tributaria del 18 por ciento.Evo Morales anunció que tras la nacionalización las empresas que produzcan un promedio de 100 millones de metros cúbicos deberán dejar al Estado el 82 por ciento de las ganancias y quedarse con el restante 18 por ciento.El ministro de Hidrocarburos, Andrés Solíz Rada, anotó que las auditorias establecerán el porcentaje de impuestos que deberán pagar al Estado si es que optan por quedarse en el país.
Señaló que Bolivia cumplirá con los acuerdos de abastecimiento de gas, pero adelantó que se realizarán negociaciones para incrementar los precios de exportación de gas natural.Bolivia exporta el gas a poco menos de la mitad de la cotización internacional del producto. Brasil le paga a Bolivia 3,23 dólares el millar de pies cúbicos y Argentina 3,19 dólares.Brasil y Argentina son los principales mercados de exportación de gas bolivianos. Brasil recibe diariamente unos 26 millones de metros cúbicos de gas natural y Argentina 5,5 millones.De acuerdo con los gobiernos de Brasil y Argentina existe interés por ampliar los volúmenes de importación de gas boliviano. Las autoridades bolivianas aceptaron esa posibilidad, pero solicitaron la fijación de mejores precios.Bolivia nacionalizó el pasado uno de mayo sus hidrocarburos que estaban en poder de varias empresas transnacionales que estaban encargadas de los procesos de exploración, explotación, refinación, transporte y comercialización.Esas empresas son principalmente la brasileña Petrobras, la hispano-argentina Repsol YPF, la franco-belga TotalFinalElf y las británicas British Gas y British Petroleum que habrían invertido los últimos diez años en este país andino unos 3.000 a 3.500 millones de dólares.El decreto de nacionalización estableció que a partir del uno de mayo las transnacionales deben entregar su producción a la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que se encargará de controlar toda la cadena productiva petrolera.Otra de las disposiciones es que el gobierno realizará exhaustivas auditorías en las empresas petroleras para verificar sus inversiones, sus niveles de retorno y si pagaron a cabalidad sus impuestos al fisco.Hasta mayo de 2005, las petroleras extranjeras que operaban en el país se beneficiaban con el 82 por ciento de las ganancias del negocio y pagaban solamente una carga tributaria del 18 por ciento.Evo Morales anunció que tras la nacionalización las empresas que produzcan un promedio de 100 millones de metros cúbicos deberán dejar al Estado el 82 por ciento de las ganancias y quedarse con el restante 18 por ciento.El ministro de Hidrocarburos, Andrés Solíz Rada, anotó que las auditorias establecerán el porcentaje de impuestos que deberán pagar al Estado si es que optan por quedarse en el país.
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