No
es descabellado un choque armado de mediano plazo entre ambos bandos y que las
Fuerzas Armadas no estén en condiciones de dirimir. Por de pronto, nadie sabe
qué pasa en su interior.
No
es la primera vez que la viabilidad estatal de Bolivia se discute. Pese a los
innumerables argumentos a favor de su existencia como Estado, las élites
bolivianas se encargan -y con demasiada frecuencia- de ponerlos en duda. El
país se ha encontrado ya varias veces al borde del precipicio. Durante los
siglos XIX y XX, ostentó algunos récords tremendos. Por ejemplo, fue el país
que más golpes militares tuvo. Incardinado con eso, el promedio de duración
efectiva del período presidencial fue tan breve que no llegaba a cumplir un año
cada mandatario. Es como si al país le fuese imposible escapar del fatídico
nombre que tiene su palacio presidencial.
Este
fue quemado. Literalmente. Los responsables fueron unas turbas golpistas en la
segunda mitad del siglo XIX.
De
la incapacidad para tener autoridades efectivas habla, y con mucha fuerza, la
pérdida de sus territorios. Con todos sus vecinos ha sufrido mermas muy
importantes. Y no necesariamente debido a guerras, sino mediante verdaderos
regalos ignominiosos, realizados por sus propias autoridades. El ejemplo más
elocuente fue el Presidente Mariano Melgarejo, quien, en estado de ebriedad, y
con lápiz en mano, regaló enormes porciones de territorio a Brasil. No quería
que los delegados del país vecino le interrumpiesen sus bacanales. Ni menos con
tales minucias. Luego de Melgarejo ha pululado un sinnúmero de otras personas,
por igual carentes de toda estatura para el cargo.
Con
tal lastre histórico, Bolivia enfrenta hoy un drama existencial mayúsculo. En
el país se ha perdido el “consenso mínimo” alcanzado por el llamado Movimiento
al Socialismo (MAS) y que se consideraba una verdadera transformación
histórica. El MAS estuvo a punto de demostrar que la ingobernabilidad boliviana
se debía al racismo y a los sectores de derecha, acusados de ser incapaces de
crear un propósito nacional. La nueva élite indígena iba a poner las cosas en
su lugar. La altanería era asombrosa.
Aquel
partido-movimiento tuvo, en efecto, varios éxitos iniciales. Su gobierno
parecía contradecir -y de manera categórica- aquello que Bolivia era el
paradigma de la falta de cohesión social. Parafraseando a Alain Finkielkraut
podría decirse que, con el MAS, Bolivia se estaba encaminando a dejar de lado
la “historia hirsuta”.
Las
élites aymará y quechua parecían haber encontrado el camino hacia una
sociabilidad política madura. Con asombro y felicidad fueron recibidos en el
Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla. Las corrientes progresistas europeas y
latinoamericanas se henchían de orgullo. Miles de papers, reportajes,
docu-films, biopics sobre sus protagonistas.
Sin
embargo, todo fue un simple espejismo.
El
ex Presidente Evo Morales recorre el país por estos días promoviendo
levantamientos e insistiendo que el gobierno de su examigo y compañero de mil
batallas, Luis Arce, busca “matarlo”. Demás está recordar que ambos eran
militantes del mismo partido y que promovían la causa indígena con el mismo
entusiasmo. Arce fue el ministro más cercano a Morales. Por eso, se le motivó a
ser su sucesor. Las palabras recientes de Morales sugieren que Bolivia ha
retomado su “historia hirsuta”.
Ello
se plasma en esas infinitas guerras fratricidas y en una violencia intestina
que amenaza arrasar con todo. El problema ahora es que no se trata sólo de una
violencia ciclónica ni de desplome de la autoridad. Esta vez se observa un
matiz muy relevante para los cinco vecinos de Bolivia y, por ende, para la
estabilidad regional.
Se
trata de una inevitable furia migratoria. Este matiz abre la posibilidad
cierta, que el país no implosione, sino que se produzca una explosión de
dimensiones colosales.
El
caso boliviano destaca por dos características en esta materia. Por un lado,
siempre ha sido un país expulsor de personas y, por otro, este último tiempo se
ha transformado en uno de tránsito, especialmente para los venezolanos.
En
cuanto a la primera, las cifras varían según la época que se tome, pero siempre
la emigración boliviana ha sido bastante alta en proporción a su población. Y
convengamos que no se trata precisamente de una fuga de cerebros. Es una
migración económica, surgida de la desesperación.
Así
entonces, por ejemplo, durante el período de bonanza argentino, en la primera
mitad del siglo pasado, muchos millares de bolivianos cruzaron la frontera sur.
El flujo disminuyó en las décadas siguientes, pero nunca se ha detenido.
Incluso bajo el mandato de los K, siempre mantuvo números importantes. Y no
sólo hacia Buenos Aires. Se han esparcido por todo el territorio, donde con
posterioridad suelen quedarse. Ya no regresan.
Hacia
Chile los flujos se incrementaron de manera vertical con los signos de
prosperidad económica en nuestro país a partir de los 80, masificándose en las
décadas siguientes por todo el territorio nacional. Algo muy similar puede
decirse de la migración hacia Brasil y Perú. Sólo Paraguay, como destino,
presenta menos atractivo para los bolivianos.
La
situación actual deja al descubierto algo que tarde o temprano ocurriría.
Bolivia se está confrontando con su realidad objetiva. El país no produce lo
suficiente y sus actividades económicas suelen ser boicoteadas por las llamadas
“organizaciones sociales”, esa nebulosa de sindicatos y otros grupos de presión
afines al MAS, pero sin lealtades definibles, que se toman caminos y hacen uso
desmedido de dinamita en sus manifestaciones. Siempre al servicio de algún
dirigente de turno, siembran pánico sin el menor interés en calcular los graves
daños a una economía alicaída, cuando no directamente postrada.
Parte
de su realidad objetiva por estos meses es la acuciante falta de divisas
(especialmente aquella del detestado imperialismo). Luis Arce ha sido incapaz
de reencauzar la herencia recibida de Morales (de la que no es ajeno él mismo)
y es obvio suponer su corolario: una probable estampida migratoria.
El
drama actual de Bolivia trae a la memoria una de las frases más recordadas e
impactantes de Margaret Thatcher. Los experimentos igualitaristas se acaban
cuando se termina el dinero.
Y
en lo político no se ve salida. El MAS se encuentra en un camino sin retorno.
Atrás quedaron los insultos, los lanzamientos de sillas y las
descalificaciones. Los actores están en el acto final de estos procesos.
Amenazas con ultimátum y exigencias con plazos fatales.
¿Qué
razón impediría a las fuerzas evistas tomar por asalto el palacio de gobierno y
que, emulando al golpista Carlos Ressini, lo quemen? O bien, que Arce abandone
el país y salga al extranjero en busca de refugio. ¿Quizás a Chile? ¿O hacia
Brasil?
No
es descabellado un choque armado de mediano plazo entre ambos bandos y que las
Fuerzas Armadas no estén en condiciones de dirimir. Por de pronto, nadie sabe
qué pasa en su interior. Hace algunos años inclinaron la balanza en favor de
quienes se oponían a Morales y lo invitaron a irse del país. Sin embargo, las
cosas han cambiado y hace escasos meses fueron utilizadas para una grotesca
maniobra de no-golpe militar.
Un
enfrentamiento armado, o baño de sangre, y de mediana duración, seguramente va
a horrorizar al continente. Los círculos políticos de los países vecinos no
están preparados para tal desenlace y flota en el aire una especie de
paternalismo ambiental respecto a cuanto suceda en Bolivia. Por extensión
natural, los mayormente horrorizados serán sus simpatizantes esparcidos por la
región. Es comprensible. La desintegración del MAS comprueba que la
pulverización de la estantería ideológica post Muro de Berlín continúa.
Las
dramáticas previsiones deberían actuar como acicate para una coordinación
preventiva. El objetivo es evitar una estampida migratoria. De paso, inclinarse
ante los dioses para que la crisis fluya hacia una implosión y no en forma de
estallido, lanzando tantas esquirlas hacia los vecinos. El Líbero de Chile
(https://acortar.link/qnD8T8)
BOLIVIA:
EVO MORALES VS LUIS ARCE, EL PEOR MOMENTO PARA UNA CONFRONTACIÓN CADA VEZ AGUDA
El
distanciamiento y visibles tensiones entre Evo y el presidente Luis Arce
suceden en un momento poco conveniente para el país, ya que, es necesaria la
unidad entre dos de las principales figuras políticas para afrontar la crisis y
asegurar la continuidad de un modelo que en otro momento, llevó a Bolivia a
alcanzar niveles de bienestar nunca experimentados para el país.
ISEPC
– El Patio Trasero de Argentina (https://acortar.link/xrHb7p)
A
mitad de este año, Bolivia vivió un nuevo levantamiento militar. El 26 de junio
de 2024, un grupo de militares tomó la Plaza Murillo, la cual se encuentra en
la ciudad de La Paz, próxima al Palacio Quemado, la sede del gobierno
boliviano. Dicho levantamiento fue dirigido por Juan José Zuñiga, General y
jefe del Ejército, quien fue removido de su cargo junto con los demás miembros
de la cúpula militar por el presidente Luis Arce. Luego de los eventos del 26
de junio, fue detenido de forma preventiva por los siguientes seis meses.
Crisis
económica + estancamiento político
Para
entender mejor lo sucedido es útil analizar el contexto en el que se desarrolló
este intento de golpe de Estado, como lo denominó el presidente. Bolivia está
atravesando un momento marcado por la inestabilidad y la crisis económica. El
país que unos años atrás lideraba los índices de crecimiento en la región, hoy
enfrenta una profunda escasez de divisas causada por la caída en los precios de
las materias primas, principalmente de los hidrocarburos, donde Bolivia ha
tenido un importante rol como exportador de gas natural a Argentina y Brasil
desde la primera década de los 2000.
Desde
hace algún tiempo, este sector está atravesando serias dificultades para
mantener el nivel de producción de años anteriores. En 2015 se comenzó a
registrar la caída de producción de gas natural. Debido a que la política
gubernamental sobre hidrocarburos se enfocó principalmente en la producción y
exportación, pero no tanto en la exploración de nuevos campos que habría
permitido no sobreexplotar los yacimientos en uso.
Esta
situación, naturalmente, pone en una difícil situación a Bolivia a la hora de
cumplir con sus compromisos de exportación, que a su vez repercute en la
entrada de divisas al país. De continuar así, difícilmente puedan sostener la
venta de gas natural a sus principales compradores de la región.
Además
de esto, las consecuencias de la pandemia por COVID-19 en términos económicos
fueron muy profundas, generando una contracción de la economía del 7,9% en los
primeros siete meses del año 2020. Si bien una vez que las medidas comenzaron a
flexibilizarse a nivel internacional la economía boliviana comenzó a mostrar
signos de recuperación, la recesión también estaba atravesada por la crisis del
sector de hidrocarburos.
El
contexto económico desfavorable trae consigo el malestar y la protesta social.
Y en el caso de Bolivia, se suma la conflictividad política. La relación entre
el actual presidente, Luis Arce, y el líder del Movimiento al Socialismo (MAS)
y ex presidente Evo Morales, está en su peor momento. En otro momento de la
historia, y no muy lejano, ambos habían trabajado en consonancia en el
denominado “milagro económico boliviano”, siendo Luis Arce el Ministro de
Economía y Finanzas desde 2006 a 2017, puesto al que volvió en 2019.
La
relación ha desmejorado constantemente desde que Morales anunciara su intención
de presentarse a elecciones presidenciales en 2025 como candidato del MAS.
Arce, por su lado, busca la reelección. lo cual no solo genera una fractura
hacia dentro del partido del que ambos forman parte, sino que también emana una
tensión que tuvo uno de sus momentos más agudos luego del levantamiento
militar.
Luis
Arce se escuda en el fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional de
diciembre de 2023, en el que se anuló la posibilidad de reelección indefinida,
lo que le impide a Evo Morales volver a presentarse en las elecciones
presidenciales de 2025. Esta situación derivó en que el presidente perdiera el
respaldo del MAS en el poder legislativo, principalmente de la facción que
apoya a Morales.
Como
es esperable, cuando el poder ejecutivo y el poder legislativo están
enfrentados, lo que surge es estancamiento político. Dicho estancamiento se
hace más evidente cuando el país parece necesitar políticas tendientes a lidiar
con los problemas económicos que afronta.
El
levantamiento militar y el papel de Juan José Zuñiga
El
levantamiento militar reciente le brindó a Morales otra oportunidad para
evidenciar el distanciamiento en la relación con su ex ministro de economía. En
una entrevista dijo, que recibió información de una fuente militar que
aseguraba que el intento de golpe de Estado fue en realidad un autogolpe,
orquestado por el propio Arce, quien unos días después lo desmintió.
En
pocas palabras, Bolivia afronta varios conflictos al mismo tiempo: la crisis
económica producto de bajos precios en materias primas, descenso de la
producción y problemas arrastrados desde la pandemia, por un lado, y el
estancamiento y conflictividad del ambiente político, que dificulta el alcance
de consensos que permitan enfrentar la crisis. La protesta social es uno de los
resultados visibles que surge de la combinación de los factores mencionados
anteriormente.
El
levantamiento militar fue liderado por Juan José Zuñiga, Jefe del Ejército. En
varias oportunidades se había expresado en contra de la candidatura de Evo
Morales en 2025, el lunes, dos días antes del levantamiento, había dicho en un
programa de televisión que Morales no podía volver a ser presidente del país.
Anteriormente, Zuñiga había formado parte del área de inteligencia durante el
gobierno de Evo Morales y en 2022 fue ascendido por el presidente Arce.
El
día en cuestión, junto con un grupo de soldados, tomaron la Plaza Murillo
indicando que cambiarían a los ministros para recuperar la patria. Además,
pidieron la liberación de lo que asumen como presos políticos, entre los que se
encuentra Jeanine Añez. Dicha ex funcionaria hoy se encuentra encarcelada
debido a su participación en los eventos posteriores a las elecciones de 2019,
en las que Evo debió renunciar y exiliarse en México en medio de acusaciones de
fraude y protestas masivas.
Zuñiga
indicó algo similar a Morales, ya que, señaló que todo había sido planeado por
el presidente Arce para ganar popularidad, porque se encuentra en medio de un
contexto político que no le es favorable. Arce, volvió a negar esa acusación.
El ahora ex jefe del Ejército se encuentra detenido.
Repercusiones
Tras
conocerse lo que había sucedido en La Paz, múltiples jefes de Estado y
políticos de la región expresaron su repudio. Tanto aquellos más cercanos
ideológicamente al partido gobernante boliviano, como Gabriel Boric desde
Chile, como la Ministra de Relaciones Exteriores de Argentina, quien forma
parte de un gobierno cuyo signo político dista mucho del boliviano. La
funcionaria indicó que los gobiernos sólo pueden ser cambiados en las urnas,
independientemente de si a uno les gusta dicho gobierno o no.
Pese
a esas declaraciones iniciales de la ministra argentina, pocos días después, se
emitió un comunicado desde la Oficina del Presidente Javier Milei catalogando
la denuncia de intento de golpe de Estado del presidente Arce como falsa.
Además de señalar la alegada falsedad de lo sucedido, se indicó que la
democracia de Bolivia se encuentra en peligro desde hace tiempo, y no por un
golpe de Estado, sino por la repetición de gobiernos socialistas, que según el
presidente mismo, derivan siempre en dictaduras.
Como
producto de estas declaraciones, el gobierno boliviano llamó a consultas a su
embajador en Argentina, Ramiro Tapia. En otras palabras, el embajador boliviano
ha regresado temporalmente a su país de origen. en muestra de rechazo a lo
expresado por el presidente Milei.
En
el resto de la región,otros mandatarios han expresado su apoyo al gobierno de
Bolivia y a la continuidad de la democracia, como Lula Da Silvia en Brasil,
López Obrador en México, Nicolás Maduro en Venezuela y Lacalle Pou en Uruguay.
Además, Pedro Sanchez, presidente español, también envió su mensaje de apoyo al
país sudamericano.
Otro
más y van…
Este
evento suma un capítulo más a la larga historia de interrupciones (o intentos)
de la democracia con la que cuenta Bolivia. Como señala Jonathan Powell,
experto en inestabilidad política de la Universidad de Kentucky, Bolivia es el
país con mayor cantidad de intentos de golpes de Estado del mundo desde 1950
hasta la fecha, contando 23 casos. De esos 23, 11 han sido exitosos y 12 han
fracasado.
A
la inestabilidad política interna que ha padecido el país, y que ha jugado un
rol clave en la sucesión de gobiernos de facto, se le suma otro factor
indispensable para explicar la recurrencia de los golpes de Estado en América
Latina, principalmente de las décadas 1950, 1960 y 1970: el interés estratégico
de Estados Unidos en la región.
Dicho
país ha tenido presencia en la región por cuestiones normalmente referidas a
mantener el “patrio trasero” en orden, es decir, para mantener su esfera de
influencia en la región, promover entornos favorables a compañías
estadounidenses y asegurarse el acceso privilegiado a recursos naturales
propios de la geografía latinoamericana, entre otros.
En
relación a los acontecimientos sucedidos recientemente, es interesante el punto
que remarca Marco Consolo en su nota “Sobre el fallido golpe de Estado en
Bolivia”: dos días antes del levantamiento militar, la canciller boliviana
Celinda Sosa Lunda había citado a la encargada de negocios de Estados Unidos,
Debra Hevis, para comunicarle el malestar causado por sus declaraciones, que el
gobierno boliviano asumió como intentos de injerencia en los asuntos internos
del país. En Bolivia no hay un embajador
o embajadora de Estados Unidos desde 2008, cuando el gobierno de Evo Morales
expulsó al por entonces embajador Phillip Goldberg acusándolo de operar
activamente en la separación ideológica de la población junto con miembros de
la oposición.
En
el comunicado presentado por el Ministerio donde se dio a conocer la noticia
del llamado a la encargada de negocios de Estados Unidos, no se dieron mayores
detalles de lo sucedido, solo se indicó que el personal diplomático del país
norteamericano había hecho declaraciones que califican como injerencias en
asuntos internos de Bolivia.
Poco
antes de eso, a mediados del mes de junio, el Ministro de Economía boliviano,
Marcelo Montenegro, había señalado que el cuerpo diplomático estadounidense
estaba involucrado en un golpe blando a la economía de Bolivia, siguiendo un
plan enviado desde Estados Unidos y que contaba con el involucramiento de otras
embajadas. Rápidamente la Embajada de Estados Unidos lo desmintió, expresando
además que el gobierno boliviano carecía de fundamentos para hacer tales
afirmaciones.
El
panorama completo de Bolivia nos indica que hay múltiples aristas en múltiples
conflictos, varios procesos en simultáneo que están entrelazados y que explican
las dificultades del país para sobrellevar los desafíos actuales. Sumado a todo
esto, el fantasma del golpe de Estado que parece siempre estar latente en la
vida política boliviana. Por otro lado,
el partido progresista principal de Bolivia, el MAS, parece ser víctima de una
tendencia vista en otros partidos de similares características de la región: la
dificultad para no ser movimientos personalistas.
El
distanciamiento y visibles tensiones entre Evo y el presidente Luis Arce
suceden en un momento poco conveniente para el país, ya que es necesaria la
unidad entre dos de las principales figuras políticas para afrontar la crisis y
asegurar la continuidad de un modelo que en otro momento, llevó a Bolivia a
alcanzar niveles de bienestar nunca experimentados para el país.
BOLIVIA,
EN LA ENCRUCIJADA DE SUS FUERZAS POPULARES
El
Destape de Argentina (https://acortar.link/0Rhnf2)
La
renuncia del Ministro de Justicia, Iván Lima, uno de los ministros fuertes del
presidente Luis Arce, el anuncio de un pase a cuarto intermedio en los bloqueos planteados para el 30 de septiembre
por el evismo, y el acuerdo con los Ponchos Rojos para procurar que ninguna de
las fracciones de la Federación Departamental Única de Trabajadores Campesinos
de La Paz “Tupac Katari” se apropie de la sede hasta tanto resuelva su unidad,
ha disipado, al menos de manera momentánea, la tensión creciente de la coyuntura
política boliviana.
El
reemplazo de los miembros de la justicia fue una de las demandas de la larga
marcha emprendida por el ex presidente Evo Morales hacia La Paz. Sin embargo,
el nombramiento de César Siles como nuevo ministro de Justicia, fue calificado
por Evo Morales como un “cuoteo político” del vicepresidente David
Choquehuanca.
“El
nombramiento de Siles como ministro de Justicia responde a un cuoteo político
de David Choquehuanca, toda vez que la nueva autoridad fue funcionario de la
Cancillería y es el principal autor de mi inhabilitación como candidato a
senador”, publicó Morales en sus redes sociales.
Los
recientes acontecimientos -que incluyen movilización de bases y demostraciones
de fuerza- han traído a la superficie la interna que se dirime en el MAS,
renovando la discusión sobre el ejercicio de la democracia y el uso del poder
en el país. Todo ello en medio de un deterioro económico en las condiciones de
vida, bloqueos de carreteras, movilizaciones masivas, protestas urbanas, y un
intento de golpe militar.
El
pueblo boliviano enfrenta problemas para mantener reservas internacionales, lo
cual ha generado dificultades en la importación de bienes esenciales,
aumentando así la inflación mientras que la reducción en la exportación de gas,
crucial para la economía boliviana, ha afectado aún más la situación financiera
del país.
Evo
Morales impulsó así la llamada “Marcha
para salvar la Patria", no sólo por la disputa política de cara a las
próximas elecciones en 2025, sino en reclamo por el contexto marcado por un
empobrecimiento de los sectores populares bolivianos a partir del aumento
desproporcionado de los alimentos.
En
el marco de la disputa por el instrumento electoral el pasado 3 de septiembre,
en el Congreso Ampliado del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales
confirmó la expulsión del presidente Luis Arce y del vicepresidente David
Choquehuanca del partido, y convocó a la gran la gran movilización, que comenzó
el 17 de septiembre, que culminó el lunes 23 en la ciudad de La Paz.
Días
más tarde, sectores afines a Luis Arce convocaron a una marcha nacional “en
defensa de la democracia” para hacer frente a lo que nombraron como “intentos
de desestabilización política”, oponiéndose a las medidas promulgadas en el
congreso del MAS.
Desde
el oficialismo, con una insistente llegada a medios de comunicación, algunos
sectores campesinos y de la Central Obrera Boliviana (COB) calificaron la movilización convocada desde
el sector evista del MAS como una “marcha de la muerte”, en un intento de
instalar que Evo Morales busca desestabilizar el gobierno del Presidente Luis
Arce.
La
movilización política del MAS que partió hacia La Paz desde Caracollo,
Departamento de Oruro, con un petitorio de demandas sociales y un pedido de
levantar la inhabilitación de Evo Morales, fue sumando miles de adherentes en
cada una de las localidades en las que se detuvo, recorriendo 189 kilómetros
durante siete días en los que también se presentaron enfrentamientos contra las
fracciones arcistas y represión policial.
Es
que en enero de 2024, el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) emitió la
Sentencia 1010/2023, la cual establece que la reelección presidencial
indefinida no existe y tampoco es un derecho humano, anulando así una sentencia
previa, aprobada por este mismo tribunal en 2017, que decía lo contrario, mucho
más en línea con lo dicho en la Constitución Política del Estado Plurinacional
de Bolivia.
El
TCP señaló que “el presidente y el vicepresidente en Bolivia solo pueden
ejercer su mandato por dos períodos continuos o discontinuos”, cláusula hecha a
la medida de la inhabilitación que el gobierno pretende sobre la figura de
Morales para cualquier elección futura, ya que ha gobernado en tres periodos:
2006-2009; 2009-2014 y 2014-2019.
Frente
a esta medida, sectores como el Pacto de Unidad, y el grueso de la
Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB),
afines al ex presidente Evo Morales, anunciaron movilizaciones exigiendo en sus
consignas hasta la renuncia de los magistrados.
Desde
el mes de enero, los sectores evistas manifiestan su descontento con una
demanda legítima: la convocatoria a las elecciones judiciales y la renuncia de
magistrados que, tras postergarse las elecciones, extendieron su mandato de
forma inconstitucional.
La
marcha iniciada el 17 de septiembre hacia La Paz puede interpretarse como algo
más que un reclamo por la transparencia del poder judicial: es la demostración
de que la fractura dentro del Movimiento al Socialismo (MAS) y el gobierno de
Luis Arce está en un punto de difícil retorno.
Mientras
Morales aboga por una mayor escucha a las demandas populares, Arce mantiene en
el cargo a magistrados cuya legitimidad ha sido fuertemente cuestionada, tanto
en lo constitucional como en lo popular. El resultado es un creciente malestar
social que ha generado oportunidades para que ciertos sectores militares
-muestra fidedigna de la vitalidad de las fuerzas opositoras- intenten
subvertir el orden constitucional como lo hicieron hace pocos meses.
El
26 de junio de 2024, el General Zúñiga y sus tropas intentaron tomar la sede
del poder ejecutivo en la Plaza Murillo, exigiendo la liberación de “presos
políticos” (entre ellos la ex presidenta de facto, Jeanine Añez) y la
renovación del gabinete de Arce. Con consignas que recordaban el pasado oscuro
reciente que dejó muertos y heridos, Zúñiga justificó sus acciones bajo la
bandera de “salvar” a Bolivia de la división que, según él, provocaba el
ex-presidente Evo Morales.
Sin
embargo, la rápida respuesta popular dejó claro que la memoria de lucha en
contra del golpe de Estado de 2019 que llevó a Áñez al poder, sigue viva y
activa en la conciencia política del pueblo boliviano. Más de 30 militares y
civiles están siendo investigados en busca de esclarecer esta aventura que
desde sectores evistas fue definida como un “autogolpe” y que, de mínima,
señala una mala administración de la denominada conducción civil de la defensa,
producto del vínculo público e histórico de amistad entre el Presidente Arce y
el General Zúñiga. El ex presidente Evo Morales afirmó que, antes de su
detención, Zúñiga le dijo a sus camaradas y familiares “Lucho me ha
traicionado”, confirmando así otra hipótesis, que señala la posibilidad de que
Luis Arce intentara esta maniobra para ganar popularidad, en medio de la
interna y el difícil momento económico que atraviesa el país.
La
“Marcha para salvar la patria" fue emprendida por Evo Morales como un
llamado a defender los ideales de la Revolución Democrática y Cultural que
fundó el Estado Plurinacional de Bolivia, reivindicando la participación activa
de los movimientos sociales y denunciando el mandato de Arce como un gobierno
que defeccionó hacía algunas agendas de neoliberalización de la economía.
El
descontento de Morales, quien ha afirmado públicamente que no buscaba con esto
derrocar al presidente, se ha manifestado principalmente con críticas hacia esa
gestión económica, mostrando desacuerdo con la problemática de la escasez de
combustible, la creciente deuda externa y la vuelta al diálogo con el Fondo
Monetario Internacional.
Sin
embargo, este sector no es el único que se movilizó en contra de la gestión del
Gobierno. Los llamados Ponchos Rojos, pertenecientes a la organización Tupac
Katari, bloquearon durante siete días la ruta hacia Copacabana. Llegaron a La
Paz en una marcha desde El Alto para exigir la devolución de su sede sindical
de San Pedro, que disputan con sectores a fines al gobierno. También entregaron
un pliego petitorio al Gobierno, y
amenazaron con retornar las movilizaciones en caso de no obtener
respuestas.
Entre
los pedidos del sector está la recuperación de la sede sindical, un pedido de
solución a la subida de precios en la canasta familiar, el abastecimiento de
diésel y el dólar, la reducción del salario del 50 por ciento a funcionarios
públicos, la condonación de deudas por créditos tomados en la época de la
pandemia e incluso la renuncia del presidente y el adelantamiento de elecciones
presidenciales, entre otros.
Por
su parte Morales y sus seguidores habían otorgado un plazo de 24 horas al
Ejecutivo para realizar cambios en su gabinete ministerial, al concluir su
marcha en La Paz. Ante la falta de
respuesta, los “evistas” amenazaron con llevar adelante un bloqueo nacional de
carreteras, el 30 de septiembre si no se cumplían sus exigencias.
El
diálogo convocado por el Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, para acercar las
partes fracasó cuando la representación del evismo se levantó de la mesa,
aludiendo a la falta de garantías para dicha conversación. Esto no impidió, sin
embargo que el Gobierno realizara los desplazamientos necesarios para aliviar
la tensión. No sin antes acusar de manera pública a Evo Morales de amenazar la
democracia.
El
gobierno convocó así al cuerpo diplomático acreditado en el país e informó que
las acciones llevadas adelante podrían interrumpir el orden democrático. En la
Asamblea General de Naciones Unidas, la canciller boliviana, Celinda Sosa,
denunció intentos desestabilizadores con el fin de acortar el gobierno de Arce.
¿Puede
calificarse como un intento golpista la movilización de las bases populares en
reclamo de una situación económica apremiante y en contra de las
obstaculizaciones judiciales, para la participación política, a tan pocos años
del Golpe de Estado en 2019? ¿Es comparable esta situación con aquella? Por
supuesto, nada de eso resulta creíble.
Evidentemente
Bolivia se encuentra en una encrucijada. El futuro del Estado Plurinacional
depende de la capacidad de sus liderazgos para escuchar y dar síntesis a las
demandas populares. Evo Morales, con su marcha hacia La Paz, representa a un
sector amplio del pueblo boliviano que no quiere retroceder en los avances
democráticos, económicos y políticos logrados.
El gobierno de Luis Arce, mientras tanto, experimenta una aguda crisis
económica, política y social, sin base política para enfrentar con éxito la
coyuntura presente.
Pese
a los recientes pasos dados, el escenario continúa abierto. A esto se agrega el
reciente pronunciamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH), que observó que la reelección indefinida no puede considerarse un
Derecho Humano, pero no especificó si la reelección discontinua se atiene a las
mismas limitaciones.
Mientras
tanto, y en medio de las tensiones hacia el interior de las fuerzas populares
bolivianas, la derecha se encuentra alerta para hacer de esta crisis una
oportunidad. Los medios de comunicación no se cansan de instalar a la figura de
Evo Morales, personificación histórica ineludible del denominado “proceso de
cambio”, como un líder violento y antidemocrático.
La
crisis política de Bolivia -la principal reserva en el triángulo del litio en
la región- seduce a los grandes actores de los proyectos estratégicos mundiales
en un contexto en el que la guerra se libra en múltiples dimensiones.
Toda
ésta situación plantea la urgencia de encontrar caminos para proponer una
economía que resuelva las demandas reales y urgentes del pueblo boliviano,
además de profundizar las acciones que sean necesarias para asumir el control
de las riquezas territoriales ampliamente codiciadas.
Los
tiempos de este escenario abierto, deberán acelerarse y encontrar las síntesis
sociales y políticas necesarias antes de que las fracciones de la ultraderecha
boliviana, de evidente matriz colonial, racista, violenta y golpista, hallen la
salida del laberinto de sus propias internas económicas, políticas y
regionales.
El
movimiento popular ha dado un mensaje claro y los potenciales caminos hacia una
solución no parecen encontrarse dando respuestas conservadoras a la delicada
coyuntura política local y regional.
EL
SOL PERUANO ES EL NUEVO DÓLAR EN BOLIVIA: LA MONEDA NACIONAL INCREMENTÓ SU
VALOR DEBIDO A LA FALTA DE DÓLARES
La
escasez de dólares en Bolivia ha aumentado la demanda y el precio de la moneda
peruana. Bolivianos compran soles para cambiarlos por dólares en la frontera
Infobae
de Argentina (https://acortar.link/AyG2Mv)
La
falta de liquidez de dólares que sufre Bolivia desde principios de 2023 ha
impactado significativamente en el valor de otras monedas extranjeras como el
sol peruano. Actualmente, el tipo de cambio oficial se encuentra en torno a 1.8
bolivianos por sol, mientras que en las casas de cambio llega a 3 bolivianos,
lo que refleja la creciente demanda de soles debido a la crisis cambiaria
interna.
Un
informe difundido este domingo por el diario La Razón reseña que, para adquirir
divisas, los bolivianos han recurrido a la compra de soles, que luego cambian
por dólares en la frontera. Esta práctica es rentable, ya que el dólar se
cambia a 3.77 soles por unidad. Para comprar 100 soles peruanos, que equivalen
a aproximadamente $26.7, un boliviano debe desembolsar 180 bolivianos al tipo
de cambio oficial, mientras que en el mercado paralelo, esa misma cantidad de
dólares cuesta 320.4 bolivianos, con un tipo de cambio no oficial de 12
bolivianos por dólar.
Este
diferencial de 140 bolivianos ha incrementado la demanda de soles peruanos, lo
que ha elevado su precio en casas de cambio de La Paz. Según comerciante de la
zona, el precio del sol comenzó a subir significativamente en abril de este año
en medio de la crisis de los dólares en el país. El tipo de cambio del sol
alcanzó un pico de 3 bolivianos en agosto, su nivel más alto en 2023.
A
falta de dólares, tanto ciudadanos como empresarios recurren al sol peruano
para sus transacciones. En regiones fronterizas como Desaguadero, el sol es
ampliamente aceptado y la demanda ha presionado al alza su cotización. El
diario resalta que, aunque la economía peruana enfrenta desafíos, el Banco
Central de Reserva del Perú (BCRP) ha logrado mantener cierta estabilidad en el
sol mediante políticas monetarias restrictivas, un panorama que incrementa la
confianza en la moneda.
Los
comerciantes afirman que el sol peruano es más estable en comparación con el
dólar. “Perú mantiene una moneda más estable”, dijo un informante en La Paz.
Algunos sectores incluso han comenzado a ahorrar en moneda peruana o a
utilizarlos en transacciones comerciales, lo cual es aprovechado por los
librecambistas.
Sin
embargo, el aumento del precio del sol afecta la economía boliviana,
especialmente en regiones fronterizas donde se importa productos de Perú. Los
mismos comerciantes ahora necesitan más bolivianos para adquirir los mismos
bienes en soles, lo que incrementa los precios para los consumidores finales.
La situación ha llevado al Viceministerio de Defensa de los Derechos del
Usuario y del Consumidor a intentar controlar el alza de precios.
Según
datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Bolivia cerró agosto con una
tasa de inflación de 1.58%, con una inflación acumulada de 4.61% al octavo mes
del año, comparado con una inflación del 2.12% en 2023. A pesar de
estabilizarse en torno a los 10 bolivianos en el mercado paralelo, el dólar
sigue siendo una preocupación, ya que alcanzó hasta 15 bolivianos a mediados de
año.
Aunque
el Banco Central de Bolivia asegura mantener el tipo de cambio para estabilidad
económica, no ha explicado la causa de la escasez dela divisa estadounidense.
En contraste, el tipo de cambio del dólar en Perú se ha mantenido estable
gracias a sus reservas internacionales, con un rango de 3.73 a 3.83 soles por
unidad. Por ese motivo, además, los bolivianos han empezado a ahorrar en soles
y realizar transacciones en el país vecino.
Según
Gas Energy Latin America, la política energética estatista y nacionalista, que
genera desabastecimientos y problemas económicos, podría causar el éxodo de más
de un millón de bolivianos al Perú y una masiva fuga de dólares, similar a lo
ocurrido en Venezuela. Se calcula que La Paz se quedará sin suficiente gas
natural para atender su demanda interna en 2028.
UNA
SELVA EN LLAMAS: ASÍ ES COMO LOS INCENDIOS EN BOLIVIA ESTÁN AMENAZANDO LA VIDA
Nena
Baltazar, fundadora del primer santuario animal de Bolivia, nos comparte su
experiencia frente a la pérdida insustituible de la selva y de los animales que
habitan en ella.
National Gegraphic (https://acortar.link/RiaZFH)
Bolivia
y Brasil presentan un estado de emergencia debido a los múltiples incendios que
han arrasado con millones de hectáreas en lo que va del 2024, alcanzando
niveles de daño no vistos desde hace 14 años. Esta es la historia de
conservación de flora y fauna que se vive en el primer santuario de la selva en
Bolivia.
“La
tierra es de quien la trabaja”
La
principal problemática y por la que se han generado tantos focos incendiarios
son las regulaciones legislativas del país; las normativas de propiedad de la
tierra apelan al famoso lema “la tierra es de quien la trabaja”.
Cada
propietario tiene prisa por hacer ver cuáles son sus fronteras y que en efecto
está trabajando la tierra. Estas tierras se consideran como “trabajadas” cuando
cumplen con las Leyes de Reforma Agraria de Bolivia, que principalmente buscan
que la selva se rija a través de a una Función Económica Social (FES) la cual
prioriza a la ganadería, la agricultura, el desarrollo inmobiliario, la
extracción, la explotación y la venta de los recursos.
En
la selva de Bolivia, se amenaza la conservación
En
2010, 8 años después de haber comprado mil hectáreas, el Santuario de la Fauna
Silvestre Ambue Ari, uno de los tres parques que actualmente tiene la fundación
CIWY alrededor de Bolivia, fue amenazado por ganaderos y agricultores
interesados en ocupar estas tierras. Ellos apelaban a las regulaciones del
INRA (Instituto Nacional de Reforma
Agraria) para tomar posesión de ellas, alegando que la práctica de cuidar,
liberar y proteger la selva y a sus especies no estaba considerada dentro de
las políticas económicas.
Nena
Baltazar aprovechó esta oportunidad para intentar replantear las leyes ante las
autoridades que representaban al INRA en ese año, buscando crear una ley en la
que se consideraran las actividades ecológicas y de preservación dentro de la
FES. Eso fue suficiente para proteger el santuario, el INRA finalizó la disputa
nombrando la tierra como “otorgada”, más no como “propiedad”
Entre
2013 y 2019 Bolivia aprobó un paquete de leyes incendiarias que permite quemar 20 hectáreas de propiedad para
“limpiar el terreno” y así poder trabajarlo;
hacer una limpia impecable y controlada requiere una gran práctica de
manejo del fuego y mucho trabajo para delimitar hasta dónde puede llegar la
quema, así que la mayoría de campesinos optan por prender el fuego sin importar
hasta dónde llegue.
Una
pérdida insustituible de flora y fauna
En
lo que va del año, los incendios han arrasado más de 10 millones de
hectáreas de Bolivia, lo que representa
un aproximado del 9% del área total del país.
Bolivia
alberga entre el 45% y el 55% de la diversidad biológica del mundo. Durante el
mes de septiembre, Ambue Ari recibió al menos 26 animales de las autoridades y
de los bomberos. Entre ellos se encuentran:
un
jaguar de 9 meses
un
kinkajou
un
zorro de 1 mes
3
ñandúes
un
pollito de águila,
9
perezosos
10
tortugas
El
fuego es también una emergencia sanitaria
Desde
el satélite DSCOVR de la NASA (Observatorio del Clima del Espacio Profundo), a
1.6 millones de kilómetros de la Tierra, se puede ver un gran parche de humo
atrapado entre las cordilleras de los Andes y los vientos que vienen del este.
Las ciudades y pueblos han estado rodeados de lo que parece ser una niebla
grisácea durante semanas. La exposición a altos niveles de contaminación del
aire puede causar una variedad de efectos adversos para la salud.
El
Índice de Calidad del Aire (AQI), una métrica que incorpora diversas medidas,
se utiliza para comunicar los riesgos para la salud del aire en todo el mundo.
En las directrices de la Agencia de
Protección Ambiental de los Estados Unidos (USEPA), los niveles de AQI entre 0 y 100 se
consideran buenos y saludables. Por encima de 300, la calidad del aire se
considera extremadamente mala. Durante varios días del mes de septiembre, la
medida oficial de iqair.com ha superado los
1,700 AQI, más de cinco veces superior al valor considerado tóxico.
El
respirar constante e inevitablemente este aire aumenta el riesgo de infecciones
respiratorias, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y cáncer de
pulmón, las cuales afectan en mayor proporción a la población vulnerable, y
claro, a los animales.
¿Cómo
sobreviven los santuarios de la selva de Bolivia?
La
fundación CIWY lleva 30 años comprometida con la rehabilitación de flora y
fauna silvestre; sus actividades económicas para mantener a los miles de
animales que han pasado por aquí dependen únicamente de la aportación
voluntaria de donadores y fundaciones alrededor del mundo. El gobierno de
Bolivia no tiene un capital destinado al mantenimiento de este tipo de
proyectos.
BOLIVIANOS
USURPAN TERRITORIOS ABORÍGENES EN SALTA, PLANTAN CAÑA DE AZÚCAR Y SE LA LLEVAN
A SU PAÍS
INCREIBLE
PERO CIERTO. La ausencia total de vigilancia fronteriza permite que bandas de
bolivianos avasallen a los aborígenes salteños para apropiarse de sus tierras y
explotarlas para llevarse la producción de caña de azúcar.
Contexto
Tucumán de Argentina (https://acortar.link/YLhHAq)
Una
franja fronteriza de 86 kilómetros registra una abierta violación de soberanía
de suelos argentinos en la banda del río Grande de Tarija, donde productores
cañeros de Bolivia avanzan con usurpaciones, desmontes y atropellos a las
comunidades originarias que habitan en las serranías occidentales del municipio
de General Mosconi, en Salta.
En
una docena de catastros rurales del departamento San Martín, intrusos ya
desmontaron cerca de 2.500 hectáreas de selva pedemontana habitadas por un
centenar de familias de la etnia aba guaraní a las que aterrorizan con armas de
fuego, corren con machetes, matan animales y bloquean el acceso a recursos de
subsistencia con total impunidad.
La
avanzada sobre las riberas salteñas de El Trementinal, Churqui, San Telmo,
Volcán, Algarrobito, Media Luna, Aujoncito, Baúles, Porcelana, Polvareda y
Chuschal empezó hace 30 años, cuando llegaron a sedes federales las primeras
denuncias del retiro de mojones internacionales que abrió paso a las
usurpaciones que hoy, ante un Estado ausente en esa desolada geografía, se
traduce en el contrabando explícito de alrededor de 150.000 toneladas de caña
de azúcar.
El
producto de las plantaciones irregulares es cruzado a Bolivia, en cientos de
viajes en camiones que aprovechan el estiaje para atravesar el cauce "a
piso" por sectores de poca profundidad, con destino a la planta de
Industrias Agrícolas de Bermejo (IABSA), el principal Ingenio azucarero de
Tarija.
Así
lo describe una nueva denuncia que acaba de recaer en la Fiscalía Federal de
Orán tras ingresar el pasado 13 de septiembre a la Unidad Fiscal Salta y ser
girada inicialmente a la Fiscalía Federal de Tartagal.
La
presentación insiste contra inconcebibles atropellos territoriales y de
derechos humanos que llevan años sin ser atendidos por organismos competentes
en un descuidado y asolado espacio territorial, cultural, ambiental y
productivo de 190.000 hectáreas del departamento San Martín.
La
denuncia, de la que ya fueron informadas autoridades de la Dirección General de
Aduanas, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la cartera de
Seguridad de la Nación, es una muestra más de la ocupación irregular que
registran los permeables bordes fronterizos de Aguas Blancas, General Mosconi,
Aguaray y Salvador Mazza, donde a lo largo de 180 kilómetros de divisoria
-mitad seca y mitad fluvial- bandas del contrabando, la trata, el narcotráfico
y otros delitos transnacionales se mueven a su antojo.
En
las bandas de los ríos Bermejo y Grande de Tarija -esa cuña en V que parece una
punta de flecha hundida desde Bolivia en los departamentos Santa Victoria,
Iruya, Orán y San Martín- la presencia de la Prefectura Naval Argentina es
nula.
Muy
distinto y controvertido es el papel que en la última década ha detentado la
Policía Marítima de Bolivia, que en más de una ocasión desembarcó en las
márgenes argentinas en apoyo a usurpadores bermejeños encabezados por Horacio
Cruz.
Efectivos
de esa fuerza, comandados por un tal "Capitán Suárez, no solo invadieron
suelos salteños, sino que además amenazaron con encarcelar a referentes de
comunidades aba guaraní reconocidas con personería jurídica por el Instituto
Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) y representadas en el Instituto Provincial
de Pueblos Indígenas (IPPIS). Su impotente resistencia al avance ilegal de
productores cañeros de Bermejo en tierras de la margen oriental del río Grande
de Tarija no solo no es acompañada por el Estado argentino, sino que algunos,
al otro lado de la línea divisoria, la tratan de "delito".
¿Qué
hacen los titulares registrales de los catastros de la banda del río Grande de
Tarija frente a la abierta invasión de esas tierras? En las denuncias se
remarca que muchos de los propietarios de los inmuebles usurpados, desmontados
y ocupados por cañaverales viven en el sur del país, segun parece, totalmente
desinteresados, ya que desde hace años no se los ve en la zona.
Otros,
como la empresa Estancia Volcán SA, reiteran denuncias en sedes de la Policía
de Salta, sin que se traduzcan en intervenciones concretas. Un catastro
puntual, el 996 del departamento San Martín (Algarrobito), espera una
exhaustiva revisión a la luz de la ley 26737 de tierras, que estableció desde
2011 expresas restricciones al dominio extranjero de inmuebles de zonas
fronterizas.
Y
en lo sustancial, también se considera imperioso que la Comisión Nacional de
Límites aborde un urgente control de los hitos internacionales, junto a los
actuales propietarios de los catastros de la banda del río Grande de Tarija, a
quienes se debería intimar en cumplimiento a leyes argentinas, con presencia
también de representantes de las comunidades aba guaraní de la zona, en calidad
de controladores.
La
Cancillería argentina, en este contexto, debería avanzar seriamente con el
Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia en un esclarecimiento bilateral,
indubitable y definitivo sobre el límite internacional marcado sobre el
meandroso cauce del río Grande de Tarija que, como lo expone un informe oficial
del vecino país, se presta para que usurpadores se arroguen el dominio de una
inexistente isla en el territorio aba guaraní de El Trementinal.
MÁXIMA
TENSIÓN EN LA FRONTERA DE CHUSCHAL: PRODUCTORES CAÑEROS DE BOLIVIA USURPAN
TERRITORIO ARGENTINO
Las
denuncias de violencia y atropellos se acumulan, mientras la presencia del
Estado sigue siendo casi inexistente.
Voces
Críticas de Argentina (https://acortar.link/Ylf34n)
La
situación en Chuschal, un área cercana a la frontera argentina con Bolivia, es
alarmante. En una franja de 86 kilómetros, se evidencia una violación abierta
de la soberanía nacional en la banda del río Grande de Tarija. Productores
cañeros bolivianos están llevando a cabo usurpaciones, desmontes y atropellos
contra las comunidades originarias que habitan en las serranías del municipio
de General Mosconi.
El
impacto de estas invasiones en la frontera es devastador. En el departamento
San Martín, intrusos han desmontado aproximadamente 2.500 hectáreas de selva
pedemontana, afectando a cerca de un centenar de familias de la etnia aba
guaraní. Estas comunidades que sufren la intimidación de armados y la
obstrucción de su acceso a recursos esenciales, viven en un estado de indefensa
ante la falta de intervención estatal.
La
avanzada sobre las tierras argentinas comenzó hace tres décadas. Esto facilitó
el contrabando de alrededor de 150.000 toneladas de caña de azúcar hacia
Bolivia. Los camiones que transportan este producto cruzan el río Grande en
épocas de estiaje, aprovechando los tramos de poca profundidad.
En
medio de esta crisis en la frontera, la presencia de las fuerzas de seguridad
argentinas es prácticamente inexistente. En contraste, la Policía Marítima de
Bolivia ha intervenido en varias ocasiones en tierras argentinas, apoyando a
los usurpadores. Esta situación ha generado un clima de tensión, donde miembros
de las comunidades aba guaraní, reconocidos por el Instituto Nacional de
Asuntos Indígenas (INAI), han sido amenazados por las fuerzas bolivianas.
Mientras
algunas empresas, como Estancia Volcán SA, han elevado denuncias sin obtener
respuestas concretas, se hace urgente que la Comisión Nacional de Límites y la
Cancillería argentina colaboren con el gobierno boliviano para esclarecer la
situación fronteriza. Es vital abordar esta problemática con un enfoque que
incluya a las comunidades afectadas, garantizando así la protección de sus
derechos y territorios.
RESALTA
MARGARITA GONZÁLEZ SARAVIA LA UNIDAD DE LOS PUEBLOS DEL MUNDO
Diario
Morelos de México (https://acortar.link/ehbyLr)
La
próxima Gobernadora de Morelos, Margarita González Saravia, recalcó su
compromiso con las comunidades indígenas y afromexicanas, así como el
reconocimiento de los pueblos de América Latina, en compañía del vicepresidente
de Bolivia, David Choquehuanca Céspedes, quien impartió la conferencia
magistral “Sabiduría Ancestral Frente a las Múltiples Crisis del Siglo XXI”.
Con
la presencia de comunidades originarias, diputados locales y parte del próximo
gabinete del gobierno estatal, González Saravia recalcó el papel fundamental de
los pueblos originarios, expresó que estarán en primer lugar y que se
fortalecerán en todos los aspectos en su gobierno, creando un “instituto que va
ser de las comunidades, de los pueblos originarios y de las comunidades
afrodescendientes de Morelos”.
En
su participación, Choquehuanca Céspedes habló de los códigos que rigen a los
pueblos de Bolivia y parte de la resistencia que han empleado estas comunidades
indígenas desde hace décadas en contra del sistema capitalista.
Entre
las acciones que expresó a las comunidades de Morelos, se encontraba el respeto
a “la Pachamama” (a la naturaleza), así como todos sus componentes, pues
reiteró que el cuidado de ella es imprescindible para la vida de los seres
humanos.
También
recalcó las libertades de las comunidades, pues dijo que “nadie debe sentirse
dueño de nadie” y la riqueza se tienen que distribuir entre todos.
Choquehuanca
Céspedes concluyó explicando que la frase “Jayaya”, en los pueblos de Bolivia,
une los conceptos de esperanza, festejo y bienaventuranza, por lo que gritó,
junto con las comunidades de Morelos: “¡Jayaya, a la unidad de los pueblos del
mundo”.
EL
PRÓFUGO URUGUAYO SEBASTIÁN MARSET LAVÓ DINERO DEL NARCOTRÁFICO PARA JUGAR AL
FÚTBOL: SU PLAN PARA SER EL “NUEVO BECKHAM”
Primero
utilizó al Deportivo Capiatá como pantalla para sus negocios y satisfacer sus
deseos. Luego, repitió el esquema en Bolivia. “Todos los jugadores me rodearon
suplicando que no lo sacara”, contó un DT, confirmando que lavaba dinero para
que le permitieran actuar
Infobae
de Argentina (https://acortar.link/oaxRzo)
En
el año 2021, siete años después de una histórica victoria por 1 a 0 en La
Bombonera frente a Boca y a trece de su fundación, el humilde club paraguayo
Deportivo Capiatá recibió la visita de su nueva “estrella” en un Lamborghini
plateado: Sebastián Marset. Pero, ¿quién era ese hombre de 31 años que llegó
repentinamente y le dieron la 10? Llamaba la atención en el verde césped por la
carencia de calidad, pero el nacido en Uruguay era intocable. Nadie se atrevía
a meterse con él y los árbitros no cobraban sus infracciones.
¿Por
qué era tan temido? El narcotráficante sudamericano estaba cumpliendo su sueño
de ser futbolista profesional ante los ojos del mundo y compararse con uno de
sus ídolos: David Beckham. El Daily Mail reconstruyó su llamativa “carrera”
junto a la pelota.
“Me
preguntaba constantemente: ‘¿Quién es este tipo?’, afirmó Jorge Núñez, el
entrenador de Capiatá en aquel entonces. Un día, tras su pobre rendimiento en
el campo de juego intentó dejarlo en el banco de suplentes. “Todos los
jugadores me rodearon suplicando que no lo sacara”, expresó el DT sobre el peso
que tenía Marset el vestuario. Y no era para menos. El traficante había
comprado su lugar en el plantel y le pagaba el sueldo y miles de dólares de más
al resto de los futbolistas y empleados del equipo. En lugar de esconder entre
las sombras su imperio de cocaína que tenía redes por toda Latinoamérica y
Europa Occidental, encontró su la mejor pantalla de su negocio en el mundo del
fútbol.
“Siempre
soñó con ser futbolista”, declaró su abogado en Uruguay. Mientras satisfacía el
anhelo que tuvo desde pequeño, Sebastián gambeteaba a la ley utilizando los
miles de contratos y la burocracia sin investigar que rodea al deporte más
popular en el planeta y que mueve los hilos de la economía en Sudamérica.
Marset comenzó a invertir su poderío en Deportivo Capiatá, con la salvedad de
que tenía que jugar en el equipo profesional a como diera lugar. A pesar de
mejorar sus instalaciones con su fortuna, el cuadro paraguayo terminó
descendiendo a la tercera división de la AFP y el traficante quedó marcado por
un penal errado que “tiró cinco metros por encima del travesaño”.
El
número 10 se mostraba despreocupado y disfrutando de su vida como futbolista
profesional en los entrenamientos y en los partidos, hasta que un día se esfumó
del conjunto de Asunción y ningún compañero volvió a escuchar de él. Después de
exhaustivas búsquedas de las fuerzas de Paraguay, Uruguay, Bolivia, Brasil,
Italia y Estados Unidos, golpearon por primera vez la pirámide delictiva de
Marset, aunque no mucho.
El
narcotraficante redobló la apuesta y, sin conformarse con haber jugado en
Paraguay, apostó a asentarse en el fútbol boliviano. Con una estrategia similar
como la que aplicó con Deportivo Capiatá, el capo de la droga compró a Los
Leones El Torno FC en el año 2023, un equipo que disputaba la liga del
departamento de Santa Cruz. En esta ocasión no optó por el dorsal diez, sino
que eligió el 23 en honor a su ídolo futbolístico de la infancia: David
Beckham.
Su
travesía no duró mucho en dicho equipo, ya que “El Rey de Sur” -el sobrenombre
que le dieron como narcotraficante- volvió a desaparecer y el equipo boliviano
sufrió las consecuencias. “Se tomó la determinación de suspender a este club
por mala inclusión y legalidad de sus futbolistas. El Consejo Central es
responsable de suspender a un miembro que incumpla sus obligaciones derivadas
de los estatutos y otros reglamentos de la FIFA”, informó el presidente de la
Asociación Cruceña de Fútbol (ACF), Noel Montaño.
Las
tristes aventuras de Sebastián Marset dejaron en evidencia al fútbol
sudamericano y unieron en su vida el camino de sus grandes ídolos: Beckham y
Pablo Escobar. Se convirtió en el primer gran narcotraficante que utilizó su
estatus y su riqueza no sólo para financiar equipos profesionales, sino también
para jugar en ellos. “Este tipo va a ser un gran problema para nosotros algún
día”, declaró el primer policía que lo detuvo cuando apenas tenía 18 años.
Ahora, después de forjar un imperio de droga por América y Europa y de hacer
sido futbolista profesional en Paraguay y Bolivia, sigue en libertad a pesar de
ser uno de los hombres más buscados en todo el mundo.
HABLEMOS
DE LAS TIERRAS RARAS
Las
Tierras Raras son la base de muchas tecnologías de las que dependemos en la
vida cotidiana
Ciencia
UNAM de México (https://acortar.link/57fKGb)
A
estas alturas de las guerras más allá de las filias, las fobias y esas cosas
llamadas noticias, que suelen ser “verdades alternativas”, el fondo de todo es
el dominio económico mundial y la competencia tecnológica.
Las
reservas de Litio, por ejemplo, han ocupado las primeras planas de los diarios.
Laura Richardson, jefa del comando sur estadounidense, ha manifestado su
preocupación por el Triángulo del Litio, una zona geográfica entre Argentina,
Bolivia y Chile, que concentra más del 85 % de las reservas de este metal
blando.
Por
su parte, el gobierno de México ya ha decretado la nacionalización del
yacimiento del preciado metal en Sonora.
El
Litio es un elemento de gran importancia para la fabricación de acumuladores de
energía eléctrica.
Otra
disputa de Estados Unidos con China son los elementos de la Tabla Periódica
llamados “tierras raras”, cuyas reservas mundiales se calculan en 120 millones
de toneladas métricas, la tercera parte se localiza en China, le siguen
Vietnam, Brasil y Rusia.
Las
tierras raras son la base de muchas tecnologías de las que dependemos en la
vida cotidiana, son componentes de imanes permanentes infinitamente pequeños,
asimismo permiten el color de las pantallas de nuestros celulares o los hacen
zumbar con las llamadas, mantienen las turbinas eólicas girando, los vehículos
eléctricos haciendo zoom e infinidad de otras tecnologías de punta y, sobre
todo, armamento.
Las
tierras raras las integran 17 elementos, quince de ellos agrupados en la Tabla
Periódica como lantánidos.
China
controla el 97 % del mercado de la extracción y el refinado de estos elementos,
además del 89 % de la fabricación de sus aleaciones. Les llamaron tierras raras
por su aparente escasez.
Aunque
están dispersas por todo el planeta, su minería es todo un atentado contra el
medio ambiente por la contaminación de suelos y cuerpos de agua.
Guerras
o hegemonías económicas aparte, los elementos que integran las tierras raras
poseen cualidades asombrosas. El singular arreglo de los orbitales de los
electrones de sus átomos, al enlazarse con otros elementos los hace comportarse
en formas sorprendentes como emitir luz o potenciar cualidades magnéticas.
El
Cerio, por ejemplo, funciona como catalizador para refinar petróleo o el
Gadolinio que captura neutrones en los reactores nucleares.
Ya
mencionamos que dan color a las pantallas de los celulares, o la fluorescencia
del papel moneda al someterlo a luz ultravioleta para comprobar su
autenticidad, potencian las señales a través de los kilométricos alambres de
fibra óptica bajo los océanos.
Su
uso hace posible también construir imanes permanentes más grandes, potentes y
fiables (o infinitamente pequeños); permiten generar sonidos en los
auriculares, impulsan información digital a través del espacio o cambian las
trayectorias de los misiles balísticos buscadores de calor. La lista es
interminable.
El
Lutecio y los 14 elementos entre el Lantano y el Iterbio en una hilera de la
Tabla Periódica, más el Escandio y el Itrio, integran las tierras raras.
Como
hemos mencionado, sus superpoderes se encuentran en los electrones. Los átomos
tienen un núcleo rodeado de electrones que deambulan en zonas llamadas
orbitales. Los electrones de los orbitales más alejados del núcleo son los
electrones de valencia que facilitan el enlace con otros átomos.
Los
lantánidos poseen electrones que llaman “f”, merodean en una zona llamada
Goldilocks, vecina de los electrones valencia pero más cercana al núcleo. Los
electrones f son responsables de las propiedades magnéticas y luminiscentes de
las tierras raras.
Los
metales de tierras raras irradian luz cuando son estimulados, el truco
tecnológico es hacerles cosquillas a los electrones f con un láser o una
lámpara. Estos elementos emiten longitudes de onda muy precisas, lo que permite
ajustar cuidadosamente la radiación electromagnética de los dispositivos
electrónicos.
Estos
elementos también emiten una suerte de luz invisible, se usan en la fabricación
de cristales sintéticos para láseres de alta potencia. Los ingenieros
sintonizan las longitudes de onda de estos láseres entrelazando los cristales
“YAG” que sirven desde cortar metal hasta eliminar tatuajes, encontrar el rango
láser, o sea, donde pongo el láser pongo el misil.
ASÍ
ES LA EMBARCACIÓN ENCONTRADA EN EL TITICACA DESPUÉS DE AÑOS DE INVESTIGACIÓN:
HALLAZGO ES DEL SIGLO XIX
El
barco transportaba minerales desde Coro Coro hacia Puno, Perú, y luego a
Mollendo para su exportación internacional, revelando la importancia del lago
en el comercio regional.
La
República de Perú (https://acortar.link/RDOJTe)
En
un reciente hallazgo arqueológico, un equipo de investigadores ha desenterrado
una embarcación en el lago Titicaca, en la región de Puno, Perú. Después de
años de trabajo meticuloso, el descubrimiento de esta nave, datada del siglo
XIX, ha captado la atención de expertos en arqueología, historia marítima y
cultura precolombina.
Este
hallazgo no solo proporciona una ventana a un período histórico clave en la
región, sino que también resalta la importancia del lago Titicaca como un eje
de conexión económica y cultural en el altiplano andino.
Este
hallazgo no solo proporciona una ventana a un período histórico clave en la
región, sino que también resalta la importancia del lago Titicaca como un eje
de conexión económica y cultural en el altiplano andino.
La
embarcación se encontraba en el antiguo muelle de Guaqui, una zona donde se
detectaron anomalías en la vegetación y estructuras subacuáticas. Se cree que
fue utilizada principalmente para el transporte de mercancías pesadas.
¿Cuál
fue el proceso de investigación llevado a cabo para encontrar la embarcación?
La
investigación comenzó en 2022, luego de la formación en 2021 del Grupo de
Investigaciones Subacuáticas en Bolivia. Originalmente, se trataba de un
registro fotográfico de muelles históricos en el lago.
Sin
embargo, las arqueólogas descubrieron en el muelle de Guaqui anomalías que
sugerían la presencia de una estructura no natural. Tras realizar excavaciones
subacuáticas, identificaron una embarcación que data del siglo XIX, usada para
transportar minerales hacia Puno, lo que amplió su objetivo inicial.
¿Qué
importancia tiene el muelle de Guaqui en la investigación?
El
muelle de Guaqui fue clave en la investigación debido a que presentaba
anomalías en la vegetación y estructuras naturales, lo que indicaba la
presencia de algo artificial. Las arqueólogas descubrieron que esas anomalías
correspondían a una embarcación sumergida.
¿Qué
importancia tiene el muelle de Guaqui en la investigación?
El
muelle de Guaqui fue clave en la investigación debido a que presentaba
anomalías en la vegetación y estructuras naturales, lo que indicaba la
presencia de algo artificial. Las arqueólogas descubrieron que esas anomalías
correspondían a una embarcación sumergida.
¿Qué
importancia tiene el muelle de Guaqui en la investigación?
El
muelle de Guaqui fue clave en la investigación debido a que presentaba
anomalías en la vegetación y estructuras naturales, lo que indicaba la
presencia de algo artificial. Las arqueólogas descubrieron que esas anomalías
correspondían a una embarcación sumergida.
La
ayuda de la Unesco permitió no solo investigar la estructura de los muelles en
la superficie y bajo el agua, sino también realizar excavaciones que llevaron
al descubrimiento de la embarcación del siglo XIX.
El
conflicto del MAS nunca fue un conflicto sólo interno. Es lo que arrastra el
“movimientismo” como cultura política; y el MAS, siendo heredero de ella, nunca
supo resolver esta aporía que retrata a la izquierda nacional[1]. Nacido como
una expresión popular, pero inclinándose siempre a la reposición del Estado que
se proponía trasformar, hace inevitable su distanciamiento del horizonte
popular que le dio origen; entonces, cuando ya no hay modo de disimular aquello
y su derechización se hace evidente, sucede inevitablemente su descomposición y
la fractura. Cuando el poder se convierte en la fe sustitutiva, entonces todo
se reduce al puro cálculo político (ambos bandos ceden la poca fe que les queda
a quienes acumulan poder, que es lo único que sirve en esa apuesta, pero así
confirman su propia traición, reafirmando los credos y los dogmas de la
política que, una vez, creyeron poder transformar).
De
ese modo la izquierda testimonia, ante sí misma, una fatalidad que arrastra
como una maldición histórica. Por ello asistimos a un ensañamiento hasta
personalizado, que se expone de los modos más groseros y demuestra el
maniqueísmo inmaduro de una apuesta política que manifiesta ya no tener puntos
renovados de acercamiento con el horizonte político indígena-popular que le dio
origen. Es decir, la improbabilidad de su permanencia como referencia política
(más allá de su voto duro), despierta una lógica que, por pura sobrevivencia,
opta por lo único que le queda: la amenaza del suicidio colectivo.
Todos
los enfrascados en esta trifulca pierden de vista que los actores políticos no
valen por sí mismos sino por los proyectos que representan. La exacerbación de
los personalismos, sólo expresan apuestas corporativistas que, casi siempre,
amparan sus propósitos en algún poder carismático. En ese sentido, ambos bandos
son el continuismo de la subsunción del proyecto popular por una disputa de
élites que necesitan del Estado tradicional, o sea, el
liberal-oligárquico-colonial, para hacerse poder político continuo.
Cabe
recordar que, los ahora en disputa, nunca cuestionaron el golpe suave que se
produjo en las mesas de concertación del 2009, con la complicidad del gobierno
del MAS, cuando el orden instituido (el Estado liberal-colonial que debía
subordinarse, por lógica constitucional, al nuevo poder constituyente)
neutralizó el carácter revolucionario del nuevo Estado plurinacional y, de ese
modo, modeló a éste, a imagen y semejanza del Estado-nación oligárquico
liberal.
El
conflicto presente no retrata ni siquiera una polémica de legitimación del
liderazgo (que la miopía del Evo cree), sino del enseñoramiento político. Por
eso ningún bando, ni “evistas” ni “arcistas”, asumen algo distinto del otro,
ninguno se propone nada nuevo, sólo cumplir obedientemente las reglas liberales
del Estado señorial. Quienes antes creían tener la potestad de la inclusión,
ahora son los “incluidos” en el orden colonial que van reponiendo en todos los
sentidos. Por eso, por un lado, en su inercia política, el gobierno se somete a
la tecnocracia de las decisiones estatales que ya no perfilan ningún horizonte
estratégico y, el otro bando, cree que el boicot y el desgaste que está
desatando, puede catapultar mesiánicamente a su líder y recobrar el poder
añorado.
Ambos
bandos renuncian a la esencia de lo político, ya que su trifulca manifiesta un
puro cálculo de intereses, donde el verdadero ausente es el pueblo como poder
constituyente, es decir, como sujeto histórico-político. Sin esta referencia
trascendental, la política se reduce a la mera disputa del poder por el poder.
Entonces, cuando sólo hay lucha de élites empoderadas, sólo aparece un nuevo
ciclo estatal, del mismo Estado que se quería superar. El conflicto entonces se
resume, ahora, a la disputa inconsciente de quién termina de disolver el Estado
plurinacional remanente. ¿Qué nueva élite empoderada, asumirá la conducción de
esta conclusión?
Antes
del golpe del 2019 y, posteriormente, en el desgaste apresurado de la actual
administración gubernamental, ya fuimos advirtiendo los riesgos de una inercia
estatal que delataba no sólo su agotamiento sino la pérdida, en ambos bandos,
de toda perspectiva estratégica[2]. Esto es lo que inevitablemente va
conduciendo ya no sólo a la propia implosión del MAS sino, lo que es peor, a la
fractura del bloque popular. El maniqueísmo actual, exacerbado por ciertos
portavoces que expresan comedidamente la receta del “divide y vencerás”, sólo
allana el camino fatídico de la autoinmolación política. Pero esta
autoinmolación del MAS, como algo premeditado, sigue sospechosamente un guion
que opera la escenografía del Estado fallido, con la consecuente intervención imperial.
En ese sentido, no se trataría de quién es más revolucionario sino de quién se
atribuye la conclusión definitiva de algo que ya se había perdido, incluso
antes del golpe de 2019.
Hay
que decirlo, fue el propio aparato gubernamental masista que, en 14 años,
socavó las bases de legitimación de las organizaciones populares. Lo que los
“evistas” critican al gobierno es lo que ellos mismos hicieron, prebendalizando
a las organizaciones matrices del campo popular. Ahí se puede entender una
suerte de penetración imperial consentida que hizo muy bien su tarea,
corrompiendo los niveles decisivos de las organizaciones populares, para hacer
lo que la derecha autóctona no sabe ni puede: descomponer al pueblo para
desmantelar su propio proyecto político.
Antes
de la intentona golpista de este año, propusimos, tanto a “arcistas” como
“evistas”, un necesario y urgente abordaje de las consecuencias geopolíticas
que está arrastrando la crisis del MAS. Pero todos andan más interesados en sus
agendas que en nuestro propio país. Ahora bien, si la nueva movilización
“evista”, anunciada con una marcha hacia La Paz (que podría devenir en un paro
de varios sectores estratégicos, además del bloqueo de caminos y, obviamente,
el enfrentamiento con dirigencias y bases paralelas de las organizaciones
matrices), entorpece y complica las posibilidades de ingreso de Bolivia al
BRICS+ en octubre, entonces se sabrá qué guion se está desplegando.
Añadiendo
a este escenario, la activación, desde el Perú, del relato del desastre social
y económico de Bolivia, que produciría un éxodo masivo de bolivianos al país
vecino, provocando inevitablemente conflictos fronterizos. Todo ello constituye
la elaboración de un plan mayor, al cual se presta sospechosamente el “evismo”.
La
improvisada gestión gubernamental apenas puede leer y discernir los escenarios
y hasta sus propias apuestas; por ejemplo, en torno a la crisis económica que
se viene inflamando (también por el acoso constante del “evismo”), sin tener el
gobierno respuestas de carácter estructural y estratégico, no es más que la
constatación de que el “modelo económico social-comunitario-productivo” distaba
mucho de ser un auténtico modelo, además demasiado dependiente de una coyuntura
económica, sobre todo regional, favorable. La confianza no es una buena
táctica.
Eso
sólo demuestra que el gobierno actual sólo se dedicó a dar una continuidad
automática a lo que se había hecho anteriormente. Cuando las decisiones
estatales, que debieran ser siempre políticas y geopolíticas (sobre todo cuando
asistimos al fin de la globalización, del orden unipolar y la expansión de las
potencias emergentes reunidas en el BRICS+), no son enfrentadas y sólo se
confía en la administración burocrática de la inercia estatal, se subsume lo
político del Estado en favor de un poder burocrático jurídico-administrativo
que responde “técnicamente” a la ideología oligárquico-liberal hecha credo
estatal.
Por
eso, la desidia de desmerecer el abordaje geopolítico de esta crisis (porque
nos estamos jugando la permanencia del Estado plurinacional en el nuevo tablero
geopolítico), será de completa responsabilidad de los implicados en una
trifulca que, para deleite del morbo mediático, provocarán un asalto estatal,
incluso “democráticamente”, mucho más contundente que el golpe de 2019.
En
tal caso, el Estado boliviano habrá renunciado a ser el nuevo corazón
geopolítico del arco sudamericano, dejando sola a una Venezuela amenazada hasta
por la izquierda progre y woke de la región.
Una
digresión: El 7 de marzo del presente año, se presentó en la vicepresidencia,
el “Informe del Vivir Bien”. Se trataba de un acontecimiento inédito en nuestro
país, porque es la primera vez que se presenta lo que constituye un “Informe a
la Nación” de lo que pretendidamente se propone como una nueva doctrina
estatal, que es aquello que se constituye después en una política de Estado. Es
la primera vez que sucede un Informe de esa naturaleza en toda la historia
política de Bolivia. El “Informe del Vivir Bien” lo presentó el vicepresidente
David Choquehuanca. Pero nos resultó llamativa la ausencia de la máxima
autoridad del Estado, los ministros de gobierno y del cuerpo legislativo. Más
aun teniendo en cuenta que el autodenominado “gobierno del cambio”, en su
segunda versión, se presenta como la expresión gubernamental del Estado
plurinacional, cuyo horizonte político de referencia es precisamente el “vivir
bien”.
Eso
muestra, entre otras cosas, la miopía coyunturalista de reducir toda la
atención política a las disputas circunstanciales que, en última instancia,
acaban definiendo la concentración de poder; pero precisamente, si de poder se
trata, la generación del poder popular y el esclarecimiento de su horizonte
político, es lo decisivo, tanto en el sostén de legitimidad como en la
amplificación de hegemonía. Pero en la trifulca actual, ambos componentes de lo
político, se lo pretende concebir sólo desde el cálculo de intereses, es decir,
desde la idiosincrasia demagógica de la política usual. Así podemos describir
una pérdida de horizonte que ya era recurrente en la gestión de los 14 años del
anterior “gobierno del cambio”.
Su
versión actual muestra que, no sólo no comprendieron las razones y el modo cómo
se produjo y tuvo éxito el golpe de Estado de 2019, sino que pareciera que el
abandono de las banderas iniciales y legítimas del “proceso de cambio”, se van
reduciendo a una mera administración de las apuestas que ya se habían generado
en la gestión pasada, cuando se fueron abandonando paulatinamente el “vivir
bien”, la “descolonización” y lo “plurinacional”.
Es
decir, estamos presenciando, con el respaldo de los propios sectores
protagonistas del cambio, el abandono del horizonte que el sujeto plurinacional
había originado como revolución democrático-cultural. Por eso también se va
advirtiendo que, en la contienda entre Evo y Arce, aparece un tercero excluido
que, curiosamente, es la única voz que insiste todavía, solitaria e
infructuosamente, en las banderas originales del cambio. Ello nos lleva a
considerar que es el indio y aquello en lo que cree el indio, lo realmente
excluido en esta disputa. Ya lo decía la juventud “linerista” antes del golpe
de 2019, aupada en el poder político y legislativo: “el sujeto del cambio ahora
lo constituye la clase media”. Pues esa clase media, a la que quería
empoderarse, fue la misma que se movilizó a favor y aplaudió el golpe de
Estado.
Todas
las críticas que puedan hacerse ambos bandos (porque degeneraron en eso) del
MAS, son en parte ciertas, hasta las exageradas por la belicosidad creciente,
pero de nada sirven cuando ninguno de los polos de la confrontación manifiesta
prudencia política, cuando lo que está en juego no es su jefatura sino la
propia viabilidad del Estado plurinacional. Eso sucede cuando se pierde el
horizonte político y todo se reduce a la mantención del poder a toda costa.
Ambos juegan, sin saberlo o sin ya importarles, no sólo a su mutua anulación
política sino a la mutilación del horizonte indígena-popular.
Mientras
el gobierno se pierde otra vez, en el obrismo ocasional, como en la anterior
gestión, pecando de ingenuidad política, creyendo que las obras generan, por sí
mismas, consciencia revolucionaria o fidelidad ideológica, no se da cuenta que
cae en la ilusión progresista. El gobierno anterior, fiel al credo socialista
de cumplir las tareas pendientes de la burguesía, no reparó que eso puede
significar la reposición de las condiciones subjetivas para restituir el
sistema de creencias del capitalismo. Nunca aprendieron que, sin revolución
cultural, el ascenso social sólo produce el aburguesamiento del pueblo. En eso
fracasa también el gobierno actual: la sola objetividad, las obras (sobre todo
las que promueven los mitos del desarrollo y el progreso), no producen el
óptimo social de cambio, o sea, consciencia revolucionaria.
En
ese sentido, si por lo menos los ministerios productivos y los encargados del
financiamiento, se dieran cuenta del necesario factor descolonial en la lectura
geopolítica del contexto actual –regional y global–, ello les brindaría una
lucidez actualizada de las posibilidades nacionales y regionales que abre la
inevitable transición civilizatoria. De ese modo podríamos proponernos, en vez
de la consigna de “industrialización con sustitución de importaciones” (que
además respondía y enfrentaba a un diseño geopolítico que ha entrado en
colapso), por el más sugerente de “industrialización con sustitución de
paradigmas” (pues hasta China se plantea, en las siguientes décadas, la
transición a un paradigma post-capitalista y la Federación Rusa señala un nuevo
orden post-occidental).
Pero
lo que impulsa el gobierno es, otra vez, el paradigma desarrollista que ya no
es posible en la nueva realidad y las nuevas y más complejas condiciones y
escenarios que están replanteando todo lo referente a patrones y bases
energéticas, procesos de industrialización sostenibles en medio del paradigma
postindustrial atravesado por la IA, nuevos modos y procesos de integración en
correspondencia con los nuevos corredores geoestratégicos y la cadena de
suministros globales, etc. Nuevos modelos explicativos y cambio de paradigmas
se hacen urgentes, pero esto sólo puede provenir de un nuevo horizonte político
que proyecta un pueblo hecho poder popular; y que el Estado debe promover.
Pero,
como en la gestión anterior, el pueblo es de nuevo recluido a mero obediente o
llamado a acompañar, de modo instrumentalizado, las apuestas que se realizan en
esferas divorciadas del campo popular. Y esto sucede en ambos bandos. Porque en
ambos se nota que la idiosincrasia es la misma. Todos luchan sólo por su
sobrevivencia política.
En
este contexto es que la propia figura del Evo ya es anacrónica. Y quienes le
rodean y miman sus aspiraciones son precisamente quienes no supieron leer lo
que se les venía encima y lo que eso significaba para el pueblo. Ahora
irresponsablemente están haciendo los mejores tramites para que la derecha se
rearticule y haga del chenko (el embrollo) producido, el caldo de cultivo de la
defenestración del proyecto plurinacional, que era los más genuino que se podía
proponer como superación del concepto Estado-nación.
La
figura del Evo está tan desgastada que, la apuesta del conflicto continuo a un
gobierno que, hay que decirlo, él mismo organizó, a su conveniencia (desde
Buenos Aires), sólo genera la erosión creciente de sus posibilidades políticas.
Su sola presencia electoral servirá únicamente para que la derecha se una en
bloque. En tal caso, aun cuando hipotéticamente triunfara, será por un margen
tan exiguo que le obligará a pactar y así repetir el oprobioso fin de aquellos
que “cruzaron ríos de sangre”.
Si
la maldición de la derecha es que no actúa ni siquiera para sí misma, ahora
parece que la dirigencia del cambio ha asumido esa misma suerte. Los
movilizados en el golpe del 2019, los ingenuos “pititas”, en sus marchas y
paros, sirvieron el poder en bandeja de plata, a una insurrección oligárquica
apadrinada por los intereses imperiales. Ahora los movilizados son procedentes
del “evismo”, que no aprendieron nada del golpe. Pues en la preocupante disputa
geopolítica que estamos enfrentando regionalmente, atizar una crisis desde
adentro sólo le hace el favor a la injerencia gringa que, después de fracasar,
otra vez, en Venezuela, puede acelerar el escenario (con la complicidad de los
países vecinos) del Estado fallido.
La
finalidad siempre ha sido la misma y es lo que pretendieron con el golpe
hibrido-geopolítico de 2019: anular al sujeto para, de ese modo, anular el
proyecto. Por eso sus agencias de inteligencia trabajan para penetrar incluso
el campo popular y, desde adentro, minar toda posibilidad del sujeto hecho
horizonte político. Pero hoy asistimos a una paradoja mucho más trágica, que
anunciamos el 2018[3]: para terminar por destruir una recomposición del campo
popular, la entronización del indio sólo serviría para concluir en esta
advertencia: “con un indio quisieron soñar en cambiar todo, con el mismo indio
les enseñaremos que nada se puede cambiar”. https://acortar.link/iMds4u
¿INVERSIÓN
TECNOLÓGICA O AMOR AL LITIO?: LAS EXPECTATIVAS DE MUSK EN LA ARGENTINA
Canal
12 de Misiones, Argentina (https://acortar.link/j5lbUT)
Elon
Musk mantiene sus objetivos fijos en el litio argentino y en un posible punto
de partida para hacerse con el mercado sudamericano. Para el mandatario Javier
Milei, atraer una figura de esta magnitud representa un respaldo simbólico a su
gestión económica y una oportunidad para impulsar la llegada de inversión
extranjera.
En
un movimiento significativo para el panorama económico de la Argentina, el
empresario multimillonario Elon Musk volvió a plantear que sus empresas están
dispuestas a realizar grandes inversiones en el país. Este anuncio, realizado a
través de su propia red social X, se produce tras la reunión con el presidente
Javier Milei, donde las discusiones se centraron en posibles colaboraciones en
varios sectores, incluidos la tecnología y la energía.
Milei
es un defensor de la “desregulación” y expresó su deseo de atraer inversión
extranjera para rejuvenecer la economía de la Argentina. El apoyo de Musk se
alinea con la visión del mandatario argentino de promover un entorno más
favorable para las empresas. El Presidente elogió anteriormente las iniciativas
de Musk durante su visita a la fábrica de Tesla en la ciudad texana de Austin a
principios de este año.
Musk,
conocido por su liderazgo en empresas como X, Tesla y SpaceX (propietaria de
Starlink), expresó su entusiasmo por el potencial de Argentina como centro de
innovación e inversión. Pero no todo es por el posible futuro del país, el
multimillonario mantiene sus objetivos fijos en el litio argentino y en un
posible punto de partida para hacerse con el mercado sudamericano.
Oportunidades
de inversión de Elon Musk en la Argentina
La
presencia de Musk en Argentina generará expectativas en el sector empresarial.
Para Javier Milei, atraer una figura de esta magnitud representa un respaldo
simbólico a su gestión económica y una oportunidad para impulsar la llegada de
capital extranjero. Con la economía en el centro del debate nacional, cualquier
anuncio relacionado con inversiones significativas podría cambiar el rumbo del
país.
Mientras
tanto, sectores relacionados con la tecnología, la minería y la automatización
están expectantes de la posibilidad de poder concretar inversiones importantes.
Si el caso es favorable Argentina podría posicionarse como un jugador clave en
la transición hacia energías limpias y movilidad sostenible a nivel global.
Las
empresas de Musk:
Tesla:
podría explorar el establecimiento de una planta de fabricación en la
Argentina. Esta instalación se centraría en producir vehículos eléctricos
adaptados al mercado latinoamericano. Argentina es el segundo fabricante
sudamericano de vehículos.
Starlink:
el servicio de Internet satelital inició operaciones en la Argentina a mediados
de este año. Starlink tiene como objetivo proporcionar acceso a Internet de
alta velocidad a áreas remotas que carecen de infraestructura tradicional,
mejorando la conectividad tanto para personas como para empresas. Un país con
la extensión de la Argentina (el noveno del mundo) es campo propicio para esta
compañía.
SpaceX:
podría comenzar posibles asociaciones relacionadas con la exploración espacial
y la tecnología satelital, que posicionaría a la Argentina como un actor en la
floreciente industria espacial. Argentina es la segunda potencia aeroespacial
de Sudamérica.
El
litio, clave en la agenda
Sin
embargo, el interés de Elon Musk en Argentina no es solo una cuestión económica
general. El país posee vastas reservas de litio, un recurso clave para la
industria de las baterías, en especial aquellas que impulsan los vehículos
eléctricos. Tesla, pionera en este campo, ve en el litio argentino una
oportunidad estratégica, dado el aumento de la demanda global de este mineral.
Musk
ya ha expresado en varias ocasiones su interés por asegurar un suministro
estable de litio, y Argentina, junto a Bolivia y Chile, es parte del “triángulo
del litio”, una de las regiones más ricas en reservas de este recurso. La
posibilidad de establecer fábricas de baterías podría no sólo impulsar la
economía local, sino también generar nuevos empleos y fomentar avances
tecnológicos.
La
cercanía del litio a proyectos manufactureros y la infraestructura portuaria
disponible son factores que facilitan las inversiones. Además, Tesla tiene
acuerdos con Toyota para el suministro de baterías, lo que podría ser ventajoso
para cualquier iniciativa que se establezca en la Argentina.
¿China
se interpone en el camino del futuro de la India?
El
rápido aumento en la adopción de vehículos eléctricos está intensificando la
presión sobre la minería de litio.
Jankari
News de la India (https://acortar.link/raG30H)
Nueva
Delhi está mirando a África en busca de minerales críticos que son
fundamentales para dar forma a la transición energética de la nación, así como
para establecerla como una potencia líder en el Sur Global.
Litio,
frecuentemente denominado “oro blanco“ es fundamental para las industrias y la
tecnología modernas. Las baterías recargables de litio son esenciales para
almacenar energía solar y eólica, así como para alimentar automóviles
eléctricos. Las baterías de iones de litio, que tienen una larga vida útil y
una excelente densidad de energía, también se utilizan para producir productos
electrónicos de consumo como computadoras portátiles y teléfonos inteligentes.
A
medida que el mundo avanza hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles,
la facilidad de acceso al litio podría afectar la eficiencia y viabilidad de
varios proyectos de energía renovable en el futuro.
El
rápido aumento en la adopción de vehículos eléctricos está intensificando la
presión sobre la minería de litio. Se prevé que la demanda de litio crezca más
de cinco veces para 2030. Actualmente, Australia y tres países latinoamericanos
(Chile, Argentina y Bolivia), conocidos como el “Triángulo de litio“ poseen más
del 75% del suministro mundial de litio, que luego se envía a China para su
procesamiento.
En
medio de esta lucha mundial por minerales críticos, India, todavía un actor
menor, está trabajando para reforzar su cadena de suministro de litio
interactuando con naciones africanas, así como a través de otras estrategias.
Garantizar un suministro confiable de litio en bruto es crucial para la
producción de vehículos eléctricos (EV) y la seguridad de la cadena de
suministro, y el potencial de África podría ayudar a posicionar a la India como
líder en el mercado mundial de vehículos eléctricos.
El
viaje del litio de la India
El
litio se ha convertido en uno de los minerales más importantes de la India;
también se clasifica como “mineral estratégico”. Sin embargo, India no lo
produce internamente y depende enteramente de las importaciones. El reciente
descubrimiento en febrero de 2023 de 5,9 millones de toneladas de mineral de
litio inferido en las áreas de Salal-Haimna del distrito de Reasi, Jammu y
Cachemira, ha mejorado significativamente las perspectivas de litio de la
India.
Este
hallazgo podría posicionar a la India como el sexto mayor poseedor de recursos
de litio a nivel mundial, por delante de China. Se espera que este desarrollo
afecte las proyecciones de suministro de litio a largo y mediano plazo de la
India y le ayude a navegar las incertidumbres actuales relacionadas con la
competencia entre Estados Unidos y China por el dominio de la cadena de
suministro de vehículos eléctricos.
De
hecho, este hallazgo puede contribuir al ascenso de la India a la prominencia
como centro industrial verde. En su búsqueda por convertirse en un proveedor
confiable de baterías de iones de litio, India ha estado compitiendo con China
desde hace algún tiempo.
Esto
se hace a la luz de la posibilidad de exportar estas baterías en el futuro y de
la reciente mejora en la clasificación de la India como país mundial tercer
mercado de vehículos más grande. Si India tiene éxito, podría exportar
motocicletas, scooters y equipos agrícolas asequibles de baja cilindrada a
otras naciones en desarrollo.
Sin
embargo, persisten desafíos. Las reservas de litio detectadas se encuentran a
unos treinta kilómetros de la Línea de Control, que divide la Cachemira ocupada
por Pakistán del territorio de la unión india de Jammu y Cachemira. India tiene
que afrontar la dificultad de aprovechar un recurso valioso de su región
políticamente más volátil. Desde 1947, la región ha sido testigo de numerosos
conflictos y escaramuzas violentas entre India y Pakistán, a menudo alimentadas
por separatistas paquistaníes. Además, el distrito de Reasi es una zona
montañosa con un ecosistema frágil. Además, en comparación con las reservas de
Bolivia (21 millones de toneladas), Argentina (17 millones de toneladas) y
Australia (6,3 millones de toneladas), las reservas de litio de la India son
comparativamente modestas. Por lo tanto, aunque el descubrimiento impulsaría la
economía verde del país, es inadecuado.
No
sorprende que, dadas estas circunstancias diversas y exigentes, la India
también esté explorando el litio más allá de sus fronteras nacionales.
Búsqueda
de África
El
Secretario de Minas, VL Kantha Rao, declarado en marzo de 2024 que India está
mirando a África para satisfacer sus demandas críticas de minerales,
especialmente Zambia, Namibia, la República Democrática del Congo (RDC), Ghana
y Mozambique.
Según
se informa, varias naciones africanas se acercaron al gobierno indio a
principios de 2022. Ofrecieron darle acceso a sus recursos minerales vitales a
cambio del reembolso de una parte de sus préstamos de desarrollo. Los detalles
específicos de estos países siguen sin revelarse, pero obtener acceso al litio
africano impulsaría significativamente el crecimiento de la industria verde de
la India.
Obtener
acceso a los recursos africanos es crucial para el desarrollo de la industria
del litio de la India, pero el dominio de China en esta área presenta un
desafío importante.
A
lo largo de los años, China ha establecido un casi monopolio en varias cadenas
de suministro de minerales clave, incluidos el cobalto, el litio y muchos
metales de tierras raras. Controla la mayor parte de la cadena de suministro
mundial de litio y es el principal refinador de litio. A pesar de poseer sólo
una pequeña fracción de las reservas mundiales de litio,menos del 7%China
produce la mayoría de los vehículos de nueva energía vendidos. Es el mayor
importador, refinador y consumidor de litio, manejando el 70% de la producción
y compra mundial. 70% de compuestos de litio, principalmente para su sector
nacional de fabricación de baterías.
Desde
2018, China, que depende de las importaciones para alrededor de dos tercios de
sus materias primas, ha estado adquiriendo agresivamente grandes minas de litio
en todo el mundo. En los últimos años, China ha invertido en minas en Zimbabwe,
la República Democrática del Congo, Argentina, Australia y Canadá. Según
algunas previsiones, para 2025 se espera que las minas bajo control chino
produzcan 705.000 toneladas de litio procesado para baterías, un aumento
significativo con respecto a las 194.000 toneladas producidas en 2022.
Camino
a seguir
India
se encuentra en un punto crucial en el desarrollo de su industria del litio. Un
próspero sector del litio podría impulsar significativamente la prosperidad
económica del país. En consecuencia, India está dando prioridad al desarrollo
de su cadena de suministro de litio para respaldar el crecimiento futuro,
liderar la transición a la energía renovable y reducir las vulnerabilidades
estratégicas. No obstante, la dependencia del país de las importaciones de
China y su frágil cadena de suministro plantean riesgos para la estabilidad de
su acceso a minerales esenciales.
Aquí
radica la paradoja: para que India avance en la cadena de valor del litio, debe
gestionar su relación con China de manera más efectiva.
China
ha buscado durante mucho tiempo un suministro estable de minerales críticos
como el litio a través de estrategias como la Iniciativa de la Franja y la
Ruta. Mientras los funcionarios estadounidenses y europeos se centran en
fomentar la cooperación con África y compilar listas de minerales esenciales,
las empresas chinas están activamente en el terreno, participando en la “guerra
fría de los minerales” y capitalizando la indecisión occidental adquiriendo
minas africanas y estableciendo refinerías de procesamiento nacionales.
Por
qué la democracia más grande del mundo no está comprando la “libertad de
expresión” al estilo estadounidense
India
debería colaborar con países del Sur Global con ideas afines para desafiar el
dominio de China. La forma en que Nueva Delhi aborde su “desafío de China” para
asegurar el acceso a los recursos de litio de África podría dar forma a su
transición energética y establecer al país como líder en el Sur Global.
INDICAN
QUE EL GAS DE VACAMUERTA PODRÍA REDUCIR LOSPRECIOS EN ESTA REGIÓN
Este
complejo de cañerías, que históricamente inyectaba gas desde Bolivia hasta
Córdoba, ahora permitirá que el fluido proveniente de Vaca Muerta llegue a
nuestra región, con costos locales
El
Liberal de Argentina (https://acortar.link/IjDtyB)
La
entrada en funcionamiento de la reversión del Gasoducto Norte que permitirá la
llegada de gas desde Vaca Muerta para abastecer las necesidades de Santiago del
Estero, Tucumán, Salta y Jujuy, podría derivar en un valor más competitivo e
incluso una baja del precio mayorista de ese fluido dado que ronda casi un
tercio del gas importado de Bolivia y que ya dejó de ingresar al país.
El
experto en el sector energético y ex secretario de Energía de la Nación, Daniel
Montamat, sostuvo ante la consulta realizada por EL LIBERAL respecto del efecto
que tendrá en precios del gas cuando comience a operar la reversión del
gasoducto que trae el gas de Vaca Muerta, que "dejamos de comprar gas a
Bolivia que es un gas que viene relativamente caro tanto respecto del gas de
producción doméstica y del GNL. El millón de BTU estaba en U$S12 importado de
Bolivia y va a ser reemplazado en la zona norte por la reversión del gasoducto
del Norte que va a llevar gas de Vaca Muerta".
Detalló
que "el gas que produce la Argentina tiene como referencia precios de
alrededor de U$S 4 el millón de BTU si hay un desarrollo intensivo. Pero sí,
los precios pueden bajar. Es más U$S 4, el millón de BTU en boca de pozo no es
competitivo respecto de precio del gas por ejemplo, en boca de pozo medido
contra un precio referencia del sector como lo es el Henry Hub en EE.UU. que
cuesta menos de U$S2,50 el millón de BTU, pensando en proyectos de exportación
de GNL, pero cuanto más gas desarrollemos tanto para el mercado interno, cuanto
regional e internacional, vamos a contar con un suministro de gas de precios
competitivos. Es una buena noticia para Santiago para el norte del país para
toda la Argentina".
Para
el ex secretario de Energía, "para disponer de flujos crecientes se tiene
que habilitar este reversión del gasoducto también se tendría que hacer la
segunda parte del Gasoducto del Centro porque la segunda parte vincula
Salliquello con San Jerónimo que es un anillo distribuidor importante y eso
habilitaría también más gas para llenar un poco este gasoducto general que lo
hicieron y quedó vacío".
Destacó
que "hay gas en la Argentina en abundancia y a precios competitivos para
hogares para el GNC y la industria. Pero es más el desafío frente a todo el
desarrollo del gas que podemos hacer que nos obliga a buscar nuevas demandas.
Vaca Muerta es mucho más gas que petróleo: 75% del Vaca Muerta es gas, pero
para sacar ese 25% de barrilitos de petróleo que es importante, también vienen
con mucho gas asociado. Si no se coloca ese gas, tampoco salen los barriles de
petróleo. Hay mucho gas para desarrollar y esto debería traducirse si hacemos
bien las cosas y vienen inversiones en un gas competitivo para Argentina y la
región".
Puntualizó
no obstante que "el precio del gas mayorista que se pasa a las facturas es
un combinado, surge de un ponderado del precio que se importa de Bolivia, del
GNL cuando se trae el gas y de producción interna. Si reemplazamos ese gas de
Bolivia por el de origen nacional y también se importa menos GNL y, si se
terminan obras como el segundo tramo del Gasoducto del Centro, ese gas
promediado de las cuencas argentinas también va a derivar en una mejora
respecto al promedio que puede dar la ponderación del gas mayorista".
Efectos
Por
su parte, Pedro Llorvandi, integrante de la Comisión de GNC de CECHA, también
se refirió a esta situación: "Estamos viviendo un hito histórico en el
norte argentino, que es la reversión del Gasoducto Norte. Este complejo de
cañerías, que históricamente inyectaba gas desde Bolivia hasta Córdoba, ahora
permitirá que el fluido proveniente de Vaca Muerta llegue a nuestra región, con
costos locales", señaló.
Según
el dirigente, "se podría comenzar a inyectar antes de fin de este año.
Esto significa un ahorro, ya que el gas de Vaca Muerta es más económico que el
boliviano". Recalcó que el impacto de esta transformación no es menor para
las Estaciones de Servicio del norte.
En
ese sentido, mostró su confianza en que el entusiasmo no sea solo por el precio
más bajo del gas para GNC. "Ya hemos recibido más de seis ofertas de
comercializadoras para discutir nuevos contratos para 2025. Este es un momento
de negociación importante, y estamos listos para aprovecharlo", adelantó
Llorvandi.
ARGENTINA
GARANTIZA SUMINISTRO DE GAS NATURAL A BRASIL A LARGO PLAZO DESDE VACA MUERTA
Oil & Gas Magazine (https://acortar.link/eMaQwy)
El
secretario de Energía de Argentina, Eduardo Rodríguez Chirillo, anunció en la
conferencia Rio Oil and Gas (Rog-e) en Río de Janeiro que Argentina está lista
para garantizar el suministro de gas natural a Brasil por muchos años, gracias
a la formación de hidrocarburos no convencionales en Vaca Muerta. Según
Rodríguez, la exportación de gas argentino a Brasil será competitiva y
sostenible en el tiempo.
Las
exportaciones de gas a Brasil se realizarán inicialmente a través de Bolivia,
utilizando un gasoducto cuya inversión permitirá revertir el flujo y estará
listo para el 7 de octubre. Durante la primera fase, hasta marzo de 2025, se
espera que Vaca Muerta envíe unos 15 millones de metros cúbicos diarios a las
provincias del norte de Argentina, con un excedente de aproximadamente 4
millones de metros cúbicos para exportación a Brasil. La demanda diaria de gas
natural de Brasil se estima actualmente en unos 20 millones de metros cúbicos.
Rodríguez
explicó que existe la posibilidad de incrementar considerablemente las
exportaciones a Brasil gracias a gasoductos proyectados por empresas privadas
que conectarán el norte de Argentina con el sur de Brasil. Empresas como Total
Austral y Tecpetrol ya han recibido permisos para exportar gas a Brasil desde
Vaca Muerta, y Pan American Energy también ha solicitado autorización para
vender gas a una filial en Brasil.
El
gobierno de la provincia de Neuquén, donde se ubica Vaca Muerta, estima que hay
proyectos para exportar hasta 34 millones de metros cúbicos diarios de gas
natural, lo que convertiría a esta formación en una fuente clave de suministro
para Brasil. Vaca Muerta es reconocida como el segundo yacimiento más grande
del mundo de gas no convencional y el cuarto de petróleo no convencional.
AMÉRICA
CENTRAL BAJO AMENAZA DE CONVERTIRSE EN PRODUCTORA REGIONAL DE DROGAS
IPS
Noticias de México (https://acortar.link/TzBiAk)
Al
papel histórico jugado por América Central en torno al narcotráfico, el de ser
un corredor que conecta el flujo de droga de países sudamericanos hacia el
norte del continente, se suma ahora la creciente preocupación, y evidencia, de
que se vuelva cada vez más una región productora, sobre todo de cocaína.
En
esa reconfiguración, los carteles de la droga, centroamericanos, mexicanos y
sudamericanos, echan mano ya de su modus operandi que le ha dado tanto poder:
valerse de oscuras e ilegales alianzas con funcionarios de gobierno, jueces,
fiscales, policías y militares corruptos, el engranaje que le ha permitido
funcionar con eficiencia.
Se
estima que más de 80 % de la droga producida en América del Sur, atraviesa
América Central en su ruta hacia los carteles de México, que la terminan
llevando al principal mercado, Estados Unidos.
“Centroamérica
es un nodo estratégico para el tráfico de drogas producidas en el Cono Sur y
consumidas en los países del norte del continente americano”, señala el informe
Tráfico y Violencia en Centroamérica, publicado en marzo de 2023 por la
Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional.
Producción
local
América
Central ofrece “un terreno fértil para las plantaciones de coca y el
procesamiento de cocaína, gracias a las bien documentadas relaciones entre las
élites corruptas y los traficantes de drogas, sumadas a sistemas judiciales
notoriamente ineficaces”, explicó a IPS la investigadora mexicana Paulina Ríos.
Los
esfuerzos de erradicación y lucha contra el narcotráfico en Colombia, Perú y
Bolivia, agregó la experta, han impulsado a los grupos criminales a explorar
nuevas áreas para el cultivo de coca, y desde al menos 2017, han comenzado a
aparecer cultivos experimentales en Honduras, Guatemala, México y Costa Rica.
“Estos
países ofrecen un terreno fértil para las plantaciones de coca y el
procesamiento de cocaína, gracias a las bien documentadas relaciones entre las
élites corruptas y los traficantes de drogas, sumadas a sistemas judiciales
notoriamente ineficaces”, sostuvo Ríos en un diálogo desde Ciudad de México.
Añadió
que aunque las plantaciones de coca actuales se consideran experimentales y de
pequeña escala, las condiciones parecen propicias para la expansión de estos
cultivos.
En
efecto, un estudio publicado en este mes de septiembre de 2024 por el sitio
especializado en noticias científicas Physorg, del Reino Unido, estableció que
la superficie de América Central es apta para el cultivo de coca (Erythroxylum
spp).
“Encontramos
que 47 % del norte de América Central (Honduras, Guatemala y Belice) tiene
características biofísicas que parecen muy adecuadas para el cultivo de coca”,
se lee en el reporte.
El
estudio señaló además que desde 2017 los grupos delictivos organizados han
estado estableciendo plantaciones de coca en América Central para la producción
de cocaína.
“Esto
ha roto el largo monopolio de América del Sur sobre la producción de hoja de
coca para el comercio mundial de cocaína y ha suscitado preocupación por su
futura expansión en la región en el istmo”, afirma el informe.
Otro
informe, esta vez de un colectivo de periodistas de investigación, estableció
que en Honduras, tras el golpe militar del 2009, la producción de cocaína
creció rápidamente en los departamentos de Colón y Olancho, ambos puntos clave
en la ruta tradicional de la droga hacia el norte.
En
Guatemala, agregó el reporte, sólo dos de las 217 plantaciones de coca
encontradas entre 2018 y finales de 2022 no estaban en el noreste, una zona
conocida desde hace mucho tiempo como base de operaciones para los traficantes
locales.
“Antes
éramos solo un puente (del narcotráfico) ahora Honduras es un país productor
también”, afirmó a IPS el general en retiro Leandro Osorio, desde Tegucigalpa,
la capital del país.
Osorio,
que fungió como comisionado general de la Policía hondureña entre 2014 y 2016,
detalló que en los últimos años se han desmantelado más de 30 laboratorios para
la producción de cocaína en el país, y decomisado más de 30 millones de plantas
de coca.
“Eso
significa que estas estructuras criminales están evolucionando y mutando, y
utilizando la zona norte, la biósfera del río Plátano, en la costa atlántica,
para la producción de hojas de coca”, afirmó Osorio.
Por
su lado, la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional apuntó
en su informe que, además de producir ya cocaína, Guatemala es el tercer
productor en América Latina de adormidera o amapola (Papaver somniferum).
El
comercio de heroína, añadió, se concentra a lo largo de la frontera entre
Guatemala y México, y los carteles mexicanos se han extendido a esa zona para
cultivar la planta y exportar la heroína principalmente a Estados Unidos.
Además,
Guatemala es un país productor y de tránsito de cannabis, reza el reporte.
Probablemente
por su posición geográfica, pegado a la costa del Pacífico, El Salvador aún no
reporta producción de plantaciones de coca, solo comercio de cocaína, aunque
pequeño en comparación con otros países, dice el reporte.
Sin
embargo, en ese país las redes criminales participan activamente en el
transporte de cocaína, y algunas han colaborado con carteles mexicanos y
colombianos. Los narcotraficantes suelen utilizar embarcaciones semisumergibles
de bajo perfil para transportar cocaína entre la zona costera salvadoreña y
Guatemala, afirma el estudio.
Las
pandillas, aliadas de los carteles de drogas que operan en la región, tenían
una tajada importante en la distribución minorista en El Salvador, sobre todo
de marihuana, pero ese comercio parece haber sido golpeado por la política de
detenciones masivas del gobierno salvadoreño de personas acusadas de ser
pandilleros.
Unas
82 000 personas, la mayoría pandilleros, han sido encarceladas por la política
de mano dura del gobierno salvadoreño.
Como
ya se sabe, los carteles de la droga no podrían operar en la región sin la
cobertura y la protección de políticos y funcionarios corruptos, que amarran
pactos oscuros para beneficiarse mutuamente y convertir a algunos de esas
naciones en narcoEstados.
El
narco-Estado hondureño
Un
caso que ejemplifica a cabalidad ese tipo de pactos, es el reciente escándalo
político que ha sacudido al gobierno y a la élite política de Honduras, uno de
las naciones del istmo, junto con Guatemala, Belice, El Salvador, Nicaragua,
Costa Rica y Panamá.
El
3 de septiembre, el portal especializado en criminalidad transnacional,
Insightcrime, publicó un video, del 2013, que mostró una reunión que
sostuvieron miembros del cartel de narcotraficantes locales, Los Cachiros, con
Carlos Zelaya, hermano del expresidente del país, Manuel Zelaya (2007-2009), el
esposo de la actual presidenta, Xiomara Castro.
En
el video, grabado subrepticiamente por uno de los narcos, se ve y se oye al
jefe del cartel, Devis Rivera Maradiaga, ofrecerle 650 000 dólares a Zelaya,
para la campaña política de Castro cuando ella peleó por la presidencia en las
elecciones generales de ese 2013, las que perdió, para triunfar en los
siguientes comicios, en 2017.
El
video no muestra si el dinero ofrecido en realidad se entregó o no. Tampoco se
mencionó algún acuerdo para aportarlo posteriormente.
La
mandataria se ha desmarcado de la reunión sostenida por su cuñado con los
narcotraficantes, y ha dicho que él lo hizo a título personal y sin el
consentimiento de nadie en el partido, algo difícil de creer.
Castro
también ha dicho que todo es una zancadilla política por parte de la derecha
del país y sobre todo de Estados Unidos, quienes pretenderían darle un golpe de
Estado, como se lo dieron a su esposo, Manuel Zelaya, en 2009.
Previo
al escándalo, el 28 de agosto, la embajadora estadounidense en Tegucigalpa,
Laura Dogu, había criticado la presencia de dos funcionarios hondureños en
Caracas, quienes aparecieron en una foto con el ministro de Defensa venezolano,
Vladimir Padrino.
La
diplomática dijo que los dos centroamericanos habían “aparecido a la par de un
narcotraficante”.
Según
el oficialismo, desde los comentarios de la embajadora, hubo intentos de la
derecha de generar una sublevación en el ejército y se difundió información de
que habría extradición de oficiales a Estados Unidos.
Por
eso, la presidenta Castro dijo que Honduras anularía el tratado de extradición
con ese país, aunque eso se ha entendido también como un mecanismo para
proteger a sus allegados ligados ahora con el narcovideo.
Para
fundamentar su tesis de que todo se trata de una conspiración para darle golpe
de Estado, la presidenta Castro adujo que Estados Unidos no ha querido
extraditar a prominentes políticos de oposición del país, quienes tienen casos
abiertos en una corte de Estados Unidos, según una lista difundida por el
gobierno hondureño.
En
marzo de 2024, la corte del Distrito Sur, de Nueva York, condenó a 45 años de
prisión al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández (2014-2022), por
cargos de narcotráfico.
En
el listado están 26 personas pertenecientes al Partido Nacional y siete casos
del Partido Liberal, ambos de derecha y enemigos políticos de la presidenta
Castro.
Entre
ellos se encuentra el exjefe del Estado Mayor Conjunto, René Ponce Fonseca; el
exdiputado Reynaldo Ekónomo, el exalcalde de Tegucigalpa y exprecandidato
presidencial, Miguel Rodrigo Pastor; el exministro de Seguridad, Julián Pacheco
Tinoco, y el expresidente del Congreso y expresidente de facto, Roberto
Micheletti, quien asumió las riendas del país tras el golpe a Zelaya, en 2009.
“A
mí el video no me causa ninguna sorpresa, al contrario, creo que habrá más
sorpresas que van a dejar mal parada a la clase política del país”, aseguró el
general Osorio, quien además de comisionado general de la Policía fue jefe de
Investigaciones.
RENUNCIÓ
IVÁN LIMA, EL MINISTRO DE JUSTICIA CONSIDERADO UNA AUTORIDAD CLAVE DEL GOBIERNO
DE LUIS ARCE EN BOLIVIA
Dimitió
cuatro días después que el ex presidente Evo Morales pidiera renovar a varios
ministros en medio de una fuerte disputa interna en el partido oficialista
Infobae
de Argentina (https://acortar.link/3Y1HjE)
El
ministro de Justicia de Bolivia, considerado una de las figuras clave del
gobierno del presidente Luis Arce, renunció este jueves, cuatro días después
que el ex presidente Evo Morales pidiera renovar a varios ministros en medio de
una fuerte disputa interna en el partido oficialista.
Iván
Lima, de 50 años, acompañó a Arce desde el inicio de su gobierno en noviembre
de 2020. Antes de ser ministro, ejerció como abogado y fue magistrado del
Tribunal Supremo de Justicia.
“Ha
llegado el momento de terminar con mis labores en su gabinete ministerial por
lo que le presento mi renuncia irrevocable al cargo de ministro de Justicia”,
se lee en la carta de renuncia de Lima, que publicó en su cuenta de X.
El
ministro saliente defendió la posición del gobierno acerca de la inhabilitación
de Morales para postularse como presidente a las elecciones del próximo año.
Arce
juramentó este jueves al ex procurador del Estado César Siles como nuevo
ministro de Justicia en reemplazo de Iván Lima.
“Vamos
a respetar siempre las decisiones de nuestros compañeros (...) lamentamos mucho
el alejamiento de nuestro compañero Iván Lima”, dijo Arce en el acto de
posesión de la nueva autoridad del gabinete en la Casa de Gobierno, en La Paz.
El
Movimiento al Socialismo está dividido entre Arce y sus afines y Evo con los
suyos, sin que haya consenso sobre el candidato que deberá presentarse por el
oficialismo a los comicios de 2025. Morales ya ha adelantado su intención y,
aunque Arce no, expertos consideran que ya está en campaña.
“Ninguno
de mis colegas, de todos los 17 ministros que conforman el Gabinete, no es ni
corrupto, ni narcotraficante, ni ‘drogo’ ni nada parecido, y aquí vamos a
demostrar a los que le mienten al pueblo boliviano que no es necesario ser
ministro para tener valores”, mencionó Lima en su discurso de despedida.
Lima,
junto con Arce, impulsaron un referendo sobre si se levantaba la subvención a
los carburantes, que está asfixiando a la economía por las importaciones, y
para redefinir la reelección presidencial antes de los comicios del próximo
año. Sin embargo, hasta el momento no ha habido un avance claro.
Morales,
tras una marcha de siete días, dio un plazo de 24 horas al gobierno para que
renovase su gabinete. “Si Lucho quiere seguir gobernando, primero, en 24 horas
que cambie a ministros corruptos…”, requirió Morales el lunes al presidente
Arce. De no hacerlo, “sabrá lo que tiene que hacer”, lanzó después, advirtiendo
de más movilizaciones si no hay respuesta.
Aunque
días después matizó y explicó que se refería a que se solucione el
abastecimiento de combustible y la escasez de dólares que afecta al país.
Indígenas
afines al ex presidente boliviano levantaron este miércoles un bloqueo de
caminos en el altiplano de La Paz que mantuvieron durante nueve días, medida
que según el Gobierno de Luis Arce generó “grandes” pérdidas económicas
estimadas en unos 376.602 dólares.
Los
indígenas que pertenecen a la Federación Campesina Túpac Katari, conocidos como
‘ponchos rojos’, bloquearon el camino hacia la población de Copacabana,
fronteriza con Perú y de acogida turística, para pedir la renuncia del
presidente Arce.
Después
de nueve días se retiraron de la carretera y en la jornada de ayer caminaron
hasta el centro de La Paz con el objetivo de recuperar su sede, ocupada por el
Gobierno, y para exigir a las autoridades que los cuatro detenidos durante el
bloqueo de carreteras sean liberados.
“Pedimos
el inmediato repliegue de la Policía de nuestra sede porque no es del Gobierno,
es del pueblo, y exigimos la anulación de la sentencia contra cuatro de
nuestros hermanos”, dijo a la agencia de noticias EFE Enrique Mamani, dirigente
de los ‘ponchos rojos’.